Dos sacerdotes encapuchados salieron por la puerta y se fueron hacía el otro ala del edificio.
Vosotros estáis en el ala este, la de los dormitorios y ellos van hacia el ala oeste.
Motivo: Percepcion
Tirada: 3d6
Resultado: 2, 1, 2 (Suma: 5)
No se si ya es tarde, pero por si acaso tiro y .... fallo (vaya racha!!)
2+2 = 4
Al ver a los sacerdotes, le doy un codazo de aviso a Kellen, al tiempo que señalo con un movimiento de la cabeza en dirección a la entrada del templo.
- ¿Serán estos?- le pregunto.
- Rodeemos el templo por el otro lado para pillarlos de frente.
Y tras decir esto me levanto y comienzo a andar tranquilamente al principio, y a toda prisa cuando perdamos de vista a la multitud.
Cuando llegáis a la parte de atrás corréis para alcanzar a los sacerdotes. Las dos figuras encapuchadas se aproximan prudentemente hacia dónde estáis.
No hiciste la tirada tarde. Estaba esperando a que Ariakan tirara.
Con paso prudente llegáis a la parte trasera del templo.
Ponme en situación, por favor. ¿Es la habitación donde nos cambiamos?.
No, váis por el ala oeste del edificio. Acabáis de pasar por la puerta de la cocina y estáis llegando a la parte de atrás. Me dijíste que volviais por donde habíais venido para ir a la empalizada, así que entendí que era por donde entrásteis.
Aminoro la marcha, para ver si son nuestros compañeros o unos sacerdotes del templo que se dirigen a sus aposentos. Mientras simulo cualquier otra tarea como abrocharme la bota o parar en una esquina a mear, voy echando la mano disimuladamente al pomo de la espada.
Siguiendo el mismo ritmo, tratando de no llamar la atención y de ser lo menos visibles posibles, seguimos en dirección a la empalizada...
Vale, vale, era por estar seguro por donde íbamos...
Pasais el edificio y continuais hacia la empalizada.
Tirada de percepción (2d6+ Mente)
Motivo: Percepción
Tirada: 2d6
Resultado: 1, 4 (Suma: 5)
Tengo la ventaja Alerta, te lo recuerdo por si sirve de algo...
Los dos sacerdotes siguieron hacia la empalizada sin darse cuenta de que eran vigilados.
Os dais cuenta de que la manga izquierda del hábito de uno de ellos cuelga flácida como si estuviera vacía.
Sonrío y con un leve toque señalo a Kellen, al sacerdote que parece no tener brazo, - ¿te imaginas quién puede ser?
Me acerco sigilosamente, y cuando esté lo suficientemente cerca como para que me oigan sin necesidad de gritar, les pregunto con una sonrisa en el rostro
- ¡eh! ¿ya abandonáis la fiesta? pero si apenas hemos empezado...
Motivo: Acercarse Sigiloso
Tirada: 2d6
Dificultad: 9+
Resultado: 5(+4)=9 (Exito)
Tirada de sigilo Agi+Explorador
Los dos sacerdotes se giran hacia Knut, que a pesar de la oscuridad y el color negro de los hábitos, es capaz de distinguir a tan escasa distancia las manchas de sangre en ellos.
El más corpulento, mientras se daba la vuelta agarra la empuñadura de su cuchillo dispuesto responder. Entonces reconoce con sopresa al aesir de pelo blanco.
-¡Atali me lleve con ella! Ya os daba por muertos- Y tras mirarlos de arriba a abajo. - Pues por vuestro penoso aspecto cualquiera diría que vosotros ya habéis disfrutado demasiado de la fiesta por hoy.
Y empieza a reirse bajo la capucha con esa risa característica e indistinguible de Olaf.
- Me alegro mucho de estar equivocado y volver a veros en pie- y se levanta la túnica mostrando un saco atado a su cintura- Y aquí tenemos lo que vinimos a buscar. Así que no perdamos más tiempo. Hay que irse de aquí antes de que den la alarma. Ya habrá tiempo para intercambiar "batallitas"
Kellen esperó en la esquina, a ver que hacía Knut, si este se equivocaba, el cargaría sorpresivamente contra los enemigos...
Per al parecer eran finalmente Connor y Olaf, así que espero desde su esquina a ser avisado por los demás, algo decepcionado, pues hubiese preferido seguir masacrando Vanires
Menudo alivio al ver que el resto de nuestro grupo estaba sano y salvo. Como Olaf había señalado, pensaba que había llegado su hora:
- Vayámonos cuanto antes, es mejor estar lejos cuando descubran los cadáveres... -Susurré.
A continuación me dispuse a continuar con nuestra ruta de escape.
Seguís hacia la empalizada, dejando atrás la oculta pila de cuerpos de los guardias.
Olaf miró a Kellen mientras señalaba la escalera de la torre de vigilancia:
- Esta vez no tendrás que soportar mi peso sobre tus hombros, prefiero subir por esa escalera y saltar al otro lado.
Miro hacia la torre, - pero habrá guardias allí ¿no?, - susurro, - ¿cómo piensas subir sin que den la voz de alarma?,- hago una pausa mientras a mi mente siguen viniendo pegas a la idea, - y una vez arriba ¿qué?, bajar desde la torre al suelo es más complicado que desde la empalizada
Y poniendo una mano sobre la madera de la empalizada, digo, - creo que hasta ahora los dioses nos sonríen, no tentemos la suerte...
Sobre todo porque la mía es malísima :)
Olaf echó un vistazo para asegurarse de que no había guardias cerca y subió por la escalera, luego se agarró con su única mano al otro lado de la empalizada y se dejó caer hacia la cornisa, que por suerte aquí era lo suficientemente ancha para evitar una caída al vacío.
Te recuerdo que los guardias estaban mas pendientes de la fiesta y de las puertas de la empalizada y el templo. A las torres suben de vez en cuando a echar un vistazo como el guardia que os encontrásteis al subir. Además la torre no es mucho más alta que la empalizada, es mas o menos como la de la foto que puse. Ahora mismo está despejado.
Luego podéis bajar por el mismo camino de cabras (tal vez si atáis una cuerda podéis bajar más facilmente el último tramo), o intentar probar suerte con el otro camino de cabras. La senda principal está vigilada y no es muy recomendable.
Me apresuro a seguir a Olaf y salto detrás de él, para que podamos salir de este lugar cuanto antes y poder escapar con nuestro botín a un lugar seguro...