Partida Rol por web

El pesado y lento simio albino va quedando rezagado y la distancia entre vosotros se amplía.
Seguís avanzando sin descanso y lo más rápido que pueden vuestras piernas por el túnel.
Las paredes siguen mostrando imágenes extrañas e insanas pero no os detenéis a contemplarlas. En algún momento muy de tanto en tanto encontráis alguna salida lateral, pero bloqueada por escombros e inmundicia, impidiendo el acceso. Además vuestro sentido de la orientación os recomienda que debéis seguir hacia delante para atravesar la montaña.

 Por lo menos parecía que íbamos dejando al demonio atrás, pero no había que confiarse, así que seguía corriendo, esperando salir pronto de esta maldita montaña...

Distraido hablando con su compañeros, Kellen dio un tropiezo, haciéndole perder unos metros valiosísimos...

-Seguid sin mí!- les dijo a los otros 2

Al pasar junto a Kellen, Knut le mira preocupado.

-¡¡Vamos, vamos!!

Aquel traspiès fue mas grave de lo que pensó, ya que el tobillo le dolia horrores. Cuando sintió el aliento de la bestia en el cogote,apretó los diented para seguir corriendo, con una leve cojera

El terreno abrupto dificultó el paso a Knut, que perdió algo de la ventaja inicial.

-¡¡Maldición!!

 Sigo corriendo, mientras veo como mis compañeros van cayendo por el suelo:

 - ¡Venga, levantaros! - Les animo.

- ¡Por las barbas de Ymir!

Notaba el fétido aliento de la criatura a mi espalda, conforme una serie de traspiés y tropiezos me hicieron perder el ritmo de la carrera.

Conor se adelantó tanto que salió del radio de luz de la antorcha de Knut, internándose en la oscuridad más absoluta.

El tobillo de Kellen pareció insensibilizarse y pudo aumentar la distancia con aquella bestia infernal

-Knut, aprieta los dientes y corre, por crom!-
 

 Frustrado, tengo que coger una de mis propias antorchas, en la oscuridad, y encenderla ya que no puedo seguir sin ver por donde voy. Con suerte, mientras busco, uno de los que posta la luz se acerque los suficiente para iluminarme y ayudarme.

Kellen notó de nuevo el pinchazo en el tobillo, pero mantuvo la compostura suficiente para continuar la carrera, entonces, perdió contacto con la luz de la antocha de Knut, y sabía que conor estaba más adelante, así que intentó concentrarse para no chocar con el, o con algo...

El terreno vuelve a ser más recto y sin tanto obstáculo. Por lo que Knut vuelve a conseguir algo de ventaja respecto al terrorífico simio.

Knut alcanzó a sus compañeros que ahora volvían a estar iluminados por su antorcha. Conor ya había encontrado antorcha, yesca y pedernal y se disponía a encender el fuego.

Entonces a vuestras espaldas se oye un fuerte gruñido que retumba por todo el pasillo y dejáis de oír sus pasos. Parece como si la vieja criatura se hubiera cansado de la persecución y ahora se limitara a marcar su territorio.

Por precaución y desconfianza seguís avanzando rápido, aunque sin correr como antes. Conor termina de encender la tea. Ahora os parece escuchar como los pasos del simio se alejan como si regresara a su cubil. Tal vez se conforme con comer vanir asado o puede que espere a que otro de los diablos menores le traiga otro cadáver.

 Miré desconfiado a la criatura, que, aparentemente, se alejaba. Finalmente opté porque continuáramos nuestro camino, esperando haber dejado la peor parte:

 - Vamos, sigamos antes de que eso cambie de opinión y quiera continuar la persecución. - Susurré, mientras iluminaba el camino con mi antorcha.

-¡Por los dioses! eso ha estado cerca,- digo aminorando el paso hasta comenzar a andar. Aprovecho el momento para echar un vistazo a la galería en la que nos encontramos. ¿Cuánto habremos avanzado?

- ¿Visteis esos extraños símbolos o sellos? - digo señalando hacia atrás, - espero no haber ofendido a más dioses hoy, que menuda racha llevamos...

Poco después pasáis por otro sello roto. Aquí el túnel acaba y conecta con una gruta natural más estrecha por la que sólo podés pasar de uno en uno. Ya habéis avanzado bastante en línea recta atravesando la montaña desde que entrásteis, no podéis saber exactamente cuanto, pero intuís que al menos 2 Kilómetros. Entonces la grieta desemboca en una pequeña caverna que acaba en una pila de rocas. Parece que el techo colapsó hace siglos bloqueando el paso.

¡Entonces una brisa de aire fresco os golpea la cara y os dáis cuenta de que es la salida!. Todo lo que necesitáis es quitar algunas rocas hasta dejar un hueco para abriros paso.

Una vez abierto el hueco os asomáis a la luz. Debajo vuestra podéis contemplar donde acaban las Montañas Azules y se extienden las llanuras heladas de Asgard...

 Miré alegremente el paisaje que tenemos ante nosotros y luego miré a mis compañeros:

 - Sigamos, pero continuemos alerta, no sabemos lo que nos puede aguardar por el camino todavía...

 Lo último que quiero es morir por culpa de un exceso de confianza, después de todo lo que hemos pasado. Lo que espero es no tener que volver en un corto periodo de tiempo.

Cuando el aire helado me da en la cara y la luz me permite ver las vastas llanuras de Asgar, no puedo reprimir un grito de alegría.

-¡Ha! ¡Amigos! Aquí comienza el fin de nuestros problemas, ¡estamos en casa!

Kellen no se sentía diferente por haber escapado de aquella cumbre infernal, infestada de criaturas simiescas, su objetivo era otro, y de momento estaba igual que al principio.

Demasiado lejos.

Algo hosco, comentó

-Venga, marchemonos, ese cuerno tiene que darnos bastante dinero-