Partida Rol por web

El mensajero mira vuestras armas con desconfianza y luego con rencor a la rubia. Pero a pesar de que era difícil que el vanir se tragara esa historia viniendo de un grupo de cimmerios y aesires, la capacidad de persuasión de Conor sumada a las atenciones proporcionadas por Holgsen dieron su fruto. El vanir se relaja un poco y asiente:

-¿Y ahora que me habéis encontrado casualmente que pretendéis hacer conmigo? Como veis estoy solo y me he perdido en vuestra tierra. ¿Me dejaréis regresar a Vanaheim?

 Hice como si meditara unos segundos y le respondí:

 - Mira, no queremos problemas, por nosotros puedes irte, siempre que prometas no volver por aquí...

 Con suerte volvería a su campamento y le seguiríamos. No creo que informase de que una mujer le habría derrotado a su superior, así que no contaría nada de esto.

Miro a Conor pensando: Qué gran idea ha tenido...

Holgsen intentó darle un punto más de credibilidad a la idea de Connor generando una pequeña discusión interna, si se lo ponían demasiado fácil el Vanhir podía sospechar. 

- Habla por ti Cymerio, este Vanhir está en nuestro territorio y encima le hemos tenido que salvar de una mujer!!!  (cosa lógica por otra parte ya que luchan peor que nuestras mujeres). Y además le he curado. Exijo un peaje si quiere continuar viaje. 

Entendiendo el plan, y comprendiendo que mi peculiar apariencia no depararía nada bueno, me aparto un poco del grupo para evitar captar la atención del Vanir. 

Me siento en una roca cubriendo mi pelo con la capucha y mirando alrededor por si viera algo sospechoso o por si detectara alguna señal o augurio...

El vanir no se fía del pobre argumento de Conor, pero luego escucha las palabras de Holgsen con atención.

-¿Pagar un peaje? Creo que ya empiezo a entenderlo. Además de cazadores parecéis un grupo de bandidos.- Mira al encapuchado Knut, preguntándose porque intenta ocultar su rostro. Tal vez no quiera que lo reconozcan y esté buscado por la justicia.

Entonces sonríe y continúa:

-Parece que no habéis perdido el tiempo y ya habéis registrado mis cosas, y que la muchacha, a pesar de no ir con vosotros ya se ha quedado con mi espada como su parte del botín. Como habéis podido comprobar, no poseo nada de valor. Podéis quedaros con todo, incluso con el caballo si me dejáis marchar con vida.

Mira con desprecio al mensajero:

-¿Botín? Si estos malnacidos no me lo hubieran impedido te habría rajado las tripas hijo de puta. Tu vida si que hubiera sido un buen botín para mi.

 Tras fingir pensarlo unos segundos, le respondo:

 - Creo que podemos dejarle el caballo, cuanto antes se marche del territorio, sin que le detecten las autoridades, mejor para todos. Además, creo que ya es bastante humillación que una mujer le haya dado una paliza sin que además tenga que seguir su viaje a pie, ¿no os parece?.

 Esperaba que los argumentos fueran suficiente para convencerle, ya que el tiempo corría en nuestra contra y necesitábamos que se moviera rápido al campamento para localizarlo y poder rescatar a la mujer.

Ya me estoy cansando de tanta cháchara - Digo a la vez que tenso el arco y apuntó al vanir.
Tienes dos opciones, salir trotando de aquí dando gracias a los dioses por haberte cruzado con nosotros, o servir de alimento para las alimañas del bosque...
VENGA, LARGO!!!

A Holgsen le pareció disparatado que se creyera que le iban a dejar irse con el caballo, aunque era la mejor opción para que llegase cuanto antes a su campamento y poder hacer su misión. Así que intentó empacar un poco la historia con un poco más de discusión.

- Su caballo!!! le vas a dejar que se lleve su caballo!!! Joder!!! No!!! Mierda. Dijo aparentando frustración como si Connor fuera el que mandaba. - Entonces me quedo sus... sus... miró de arriba abajo al mensajero mientras se mordía el labio... - Sus botas, si le das su caballo exijo quedarme sus botas!!! 

-A ver- les digo en voz baja

-Si vuelve al campamento, y le cuenta esto a rorik, nos identificará seguro, no veo una buena opción dejarlo ir, saquémosle toda la información, y cortémosle la cabeza-

 - ¿Crees que va a decir que una mujer le derroto?. - Le respondí en voz baja. - Le devolvemos su caballo y, con suerte, evitara mencionar todo esto. Además, dudo que imaginen lo que vamos a hacer...

-No, no dirá eso, dirá que escapó de un grupo de aesires y cimmerios, para jactarse de su logro-

-Después Rorik le preguntará por los cimmerios y aesires, y cuando tenga nuestra descripción, el campamento será un nido de avispas-

-Sigo diciendo que le saquemos la información, y luego dejadme que le corte la cabeza-

 - Dudo que Rorik tenga una descripción nuestra, ya que los únicos hombres que nos vieron están muertos... Además, aunque imaginase que somos nosotros, lo que haría sería buscarnos en el último lugar donde hemos sido vistos, sacando hombres del perímetro, no se les ocurrirá que vamos a hacer algo tan disparatado como tratar un rescate en un campamento militar, así que puede que hasta nos beneficie que hable.- Le recordé, molesto porque no use su cabeza nada más que para golpear con ella.

-Haced lo que querais, pero como ocurra lo que digo, no me conteis historias después-

 Cuando Kellen y yo terminamos de discutir en voz baja, me acerco al resto del grupo, que está enfrascado en otra discusión absurda. Cuando Holgsen menciona lo de las botas, le recrimino:

 - No me jodas, ¿que somos, usureros?. Si sigues así, los Vanires van a ser os que tengan buena fama, gracias a ti... Dejemos que se marche y no hagas más el ridículo, que me das vergüenza ajena, que ya tenemos bastante con lo que le hemos sacado y con la diversión que nos a dado el verle ser derrotado por la chica. Los suyos no me caen nada bien, pero hasta yo tengo un límite...

El vanir empezaba a dudar si saldría vivo de allí, así que sube de un salto al caballo lo más rápido que puede, teniendo en cuenta que no quiere que se le abran las heridas:

-No hace falta que insistáis. Me voy.

Luego señalando Svala:

-Vigiladme un rato a la fiera, no vaya a ser que le de por seguirme.