Partida Rol por web

Mierda, este barco se va a romper en 2 como no hagamos algo! Todo el mundo a cubierta!, a no ser que os queráis quedar en este infierno de barriles y cajas rodando- digo mientras abandono la bodega lo más rápido posible, sorteando todo tipo de objetos, cajas, barriles y demás barullo que arremete contra mi en mi camino hacia las escaleras.

Cuando salo afuera me agarro al primer poste, palo o lo más resistente que me parece encontrar para observar el panorama desolador que hay ante mis ojos.

De repente el viaje se estaba complicando. Al parecer una tormenta nos azotaba y el oleaje movía el barco como si fuera de juguete. Las cajas de la bodega empezaban a caer y a desparramar toda la comida podrida. Al ver esto procuro pegarme a una pared para evitar que me caiga algo encima. En ese momento nuestra compañera elfa propone subir a cubierta

- Salir fuera con el temporal que hace? Estás locas o que? Yo no me muevo de aquí ni de broma - digo aferrándome a lo primero que vea para mantenerme sujeto y no caer con las bandadas que da el barco. 

Apenas asomas tu cabeza hacia el exterior te das cuenta que la situación en cubierta es mucho peor, las fuertes olas impactan contra la madera de la cubierta del barco llevándose al mar todo lo que encuentran a su paso, por delante tuyo se desliza a toda velocidad un marinero gritando e intentando sujetarse de donde pueda pero no encuentra ningún sitio del cual aferrarse, el agua lo arrastra tan rápido que no puedes hacer nada para salvarlo y ves como cae al mar perdiéndose para siempre.

En cuanto Yllanys abre la puerta que da a cubierta pueden escuchar el atronador bullicio ocacionado por la tormenta, el viento sacude la puerta violentamente y logran oír un fuerte grito que se va perdiendo en la nada.

Una vez Vaky y yo (los únicos que parece que tenemos una clara misión) hemos expuesto lo que anhelamos en este viaje, esperamos a que los demás comenten algo, lo cual no sucede - ¿OCULTARAN ALGO LOS DEMAS AL NO SOLTAR PRENDA DE LO QUE SE LES HA ENCOMENDADO? ME PARECE EXTRAÑO....-
De repente, el barco se tambalea peligrosamente - ESPEREMOS QUE EL CAPITAN ESTE GOBERNANDO BIEN LA NAVE Y NO SEAN LAS CERVEZAS LAS QUE LO GOBIERNAN A EL, SINO EL FOLLON VA A SER MONUMENTAL - en escasos momentos, toda la mercancía, barriles, cajas.... somos zarandeados de un sitio para otro de la bodega y como buenamente podemos esquivamos todo lo que se nos viene encima, que no es poco. A mi la cerveza no me ha caído mal del todo y gon algún que otro apuro mas de la cuenta, logro esquivar todo lo que se aproxima hacia mi.
De repente a Illanis, se le ocurre la "brillante" idea de salir a cubierta - ¡insensata! ¿a donde vas preciosidad? es preferible quedarse aquí esquivando barriles que caer por la borda, estoy de acuerdo con la opción que Alatar ha tomado ¡agarremonos a cualquier cosa fuerte y esperemos que pase pronto esto - dicho esto, hago lo mismo que Alatar y me agarró lo mas fuerte posible a la primera viga que pillo, saltando, esquivando moviendome alrededor del mástil para esquivar toda la mercancía que rueda.

Lo que veo cuando salgo de cubierta es mucho peor de lo que me imaginaba. Gente siendo arrastrada por la marea, y todo lo que el agua toca se lo lleva de vuelta hacia el mar. Madre del amor hermoso...Esto es un infierno. Miro al pobre desgraciado siendo arrastrado hacia el mar sin ninguna esperanza de salvación. Una vez he tenido suficiente de mi visión, me vuelvo para adentro. Lo que hay ahí fuera es mucho peor que lo de aquí. La razón por la cual he salido es porque temo que el oleaje rompa alguna parte de la bodega y empiece a entrar agua. O que las escaleras queden bloqueadas por algún objeto que arrastre el viento. Entonces sí que estaríamos en un buen aprieto. Una vez expresados mis temores me agarro a lo más resistene y firme que encuentro y que esté cerca de las escaleras.

El muchacho con aspecto de enfermo se encuetra al borde de la inconsciencia y comienza a arrastrarse por el piso de la bodega al igual que lo hacen los demás objetos, su estado le impide sostenerse por sus propios medios. Su cabeza se golpea contra el borde de una caja, no es un golpe fuerte pero da la impresión de que le dolerá al día siguiente.

Cojo dos barriles de los que se han caído y los sostengo cada uno por encima de mi cabeza a modo de techo para evitar que mi cabeza recibiera algún golpe, encogí también mis piernas pareciendo que estaba en una postura meditativa. Que no llegó a ser así por los dos barriles que sostenía, quizás en otro ambiente me hubieran aplaudido como si fuera una criatura de circo.

Notan como la tormenta va menguando de a poco, aunque las fuertes sacudidas siguen arrastrando y arrojando objetos por toda la bodega. Si la furia del viento continúa cesando tal vez la tormenta se vaya tan súbitamente como llegó. Puede que algun dios esté de guardia y les esté dando otra oportunidad de mantenerse a flote, y sobre todo, de seguir con vida. De todas formas el infierno aún no termina.

Estábamos en la bodega esquivando bártulos y cosas, cuando de repente Vaki, como cual malavarista, agarra dos barriles y se los coloca en la cabeza para evitar golpes en su piel desnuda sin un dichoso pelo - ¡Vaki! si pudiera te aplaudiría, pero estoy bastante ocupado esquivando trastos HE HE HE - echo un par de risotadas al ver las ideas del Goliat.

De repente, la preciosa Yllanys llega de la zona de cubierta viendo su error y totalmente impresionada por lo que ha visto - Yllanys, no seas pesimista que en estos momentos en el que los dioses no están felices, no haría falta darles ideas para hacer nuestro viaje más entretenido - Dicho esto, veo como el cuerpo de una persona rubia danza esturreado de un sitio a otro de la bodega. Sin pensar en mi propia seguridad, me lanzo a por él haciendo un tremendo placaje a ese rubio y lo arrastro hacia uno de los mástiles para agarrarme a él y sostener su cuerpo para que no se haga más daño del que ya se ha hecho. - Espero que los dioses estén con nosotros...... -

De repente, el estruendo del exterior va menguando, aunque el barco sigue meneandose de lo lindo, por lo menos el temporar parece que va a menos - Ánimo chicos, ¡aguantad! que parece que el temporal está amainando, si necesitais fuerzas, intentad tomad un trago de cerveza, vereis como os pone de tan mala uva que tendréis fuerzas para todo HE HE HE - Me río fuertemente, pues las situaciones límite me encantan.

Algunos minutos más tarde el barco va volviendo a su estado normal, un bamboleo rítmico pero que al menos permite mantenerse en pie. Aparentemente la fiera tormenta no logró llevarse al fondo del mar a este pequeño y decrépito barco que parece estar al límite del hundimiento. La bodega queda hecha un desastre, con frutas podridas y herramientas tiradas por todo el piso, como si se tratase de un milagro, el preciado barril de cerveza del capitán sólo se deslizó unos metros y quedó apuntalado contra una pared sin volcar mucho de su contenido.

Le respondí a Zannan: No me gusta que me toquen la cara la ira se apodera de mí cuando pasa , ni a éstas cajas se lo permito. La verdad es que ya era demasiado feo para encima tener cicatrices, debía de soportar la cara de desagrado de la gente, pero cicatrices en la cara sería tener que aguantar repugnancia por parte de muchos más, no mi cara no .

 Hasta para un goliat la suciedad y el mal olor tenía un límite, y el límite se había  intensificado con las frutas podridas a la intemperie debido a las cajas rotas . Dejé los dos barriles en el suelo , esto es una pocilga voy fuera. - y así lo hice subí a cubierta esperando tomar algo de aire no viciado.

Una vez fuera de la bodega puedes sentir finas gotas de agua cayendo sobre ti, no puedes asegurar si las gotas son de lluvia o si es el picado mar el que te está salpicando, el aire está un poco frío pero es revitalizante, por fin puedes llenar tus pulmones con aire saludable. Puedes ver el mar subiendo y bajando a tu alrededor, a pesar de que es una noche cerrada, sin estrellas y la luna es un leve resplandor detrás de las nubes.
 

Esperé firme en esa posición con mis 7 ' 6 '' de altura , era la imagen de una especie de gigante en miniatura, no me importaba que el agua viniera de dónde viniese salpicando mi cuerpo, pues estaba acostumbrado a la humedad que se respiraba en las cimas de las montañas. Esperé como figura inmóvil a desembarcar, mientras miraba las estrellas como hacía en mi hogar pasándome horas mirándolas viendo su luz y brillo. 

Puedes ver una figura que se acerca tambaleándose tanto como el barco, se trata del capitán quien viene con una radiante sonrisa en el rostro, te hace una leve reverencia al pasar junto a ti y a continuación abre la puerta de la bodega.

El desprolijo capitán vuelve a aparecer detrás de la puerta de la boda, esta vez no ingresa sino que habla fuerte desde allí para que el goliat también pueda oírlo desde la cubierta.

- ¡Menuda fiesta tuvimos!, si alguno creyó que les llegaba el fin se equivocó mucho y no conoce en nada al capitán Walven Seahorn, su servidor. El mejor capitan de barco sobre todo el mar de este mundo, el día que a mi se me vaya a pique un barco creanme que ese mismo día me convierto en alimento para los peces con todo gusto - la puerta de la bodega comienza a cerrarse sola y el capitán la patea para volver a abrirla sin dejar de hablar - perdimos un hombre, ¡pero que suerte tuvo ese pobre infeliz! ¡que honra, morir tragado por el mar! seguramente murió feliz y con una gran sonrisa en su rostro. Bueno, ya estamos a punto de tocar tierra - mira sus rostros pálidos y sonríe - lárguense de mi barco.

Se voltea para retirarse pero vuelve rápidamente sobre sus pasos.

- Por cierto, los esperan en una casa inmensa, de esas que te hacen caer sentado al verlas. La reconocerán fácilmente, resalta mucho dentro de la arquitectura local.

Después del ajetreado viaje, por fin tocaba tierra. El capitán no le dio importancia a la tempestad desatada, pero el creía que seria el fin de sus días.
- Gracias por su hospitalidad y traernos a salvo hasta nuestro destino, que los vientos le sea favorable en sus viajes.
Lo primero que haría a tocar tierra seria comer algo decente
- Os parece que si antes de ir a la gran casa, vamos a comer algo caliente y que no se mueva primero?

Me sorprenden sobremanera las palabras del capitán con respecto al tripulante desaparecido. - ¿Que murió son una sonrisa? Este viejo esta completamente loco - pienso mientras trato de ponerme en la situación de caer al agua durante una tormenta y morir lentamente ahogado. Me resultaba un final demasiado espantoso como para verle cualquier atisbo de gloria.

- Yo con tal de salir de aquí me doy por contento - respondo a la propuesta del enmascarado compañero. Seguidamente subo por las escaleras para salir a cubierta

Je, lo que pensaba, el capitán está como una regadera

Me sumo a tu propuesta, Galinndan. Los elfos no están hechos para viajes en el mar, o al menos yo. Ughh...-digo mientras intento no recordar la pesadilla que vivimos con ese temporal que casi nos hunde. Estaba deseosa de poner un pie en tierra firme.

Mientras planean ir a comer gustosamente a algún sitio apropiado tal vez alguno de ustedes pueda recordar que no tienen ni una misera pieza de cobre en los bolsillos y no conocen nada de la ciudad.