Partida Rol por web

El foso del diablo

Escena 8. Merodeadores del Mar

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25/04/2020, 14:31
Narrador

Universidad de Aberdeen. Aberdeen.

Jueves 27 de octubre de 1927

13:18 de la tarde

El grupo acuerda poner rumbo hacia la Universidad de Aberdeen para continuar con su investigación en el despacho del difunto Ian MacKendrick. Tras detener un taxi y solicitar su destino, son informados de que las instalaciones universitarias se encuentran esparcidas por toda la ciudad. El grupo no tiene más remedio que especificar su deseo por acudir al centro de geología para que el conductor les lleve hasta una zona de edificios de más de cuatro siglos de antigüedad, entre Gallowgate y north Streets, donde están ubicadas la mayoría de facultades de ciencias de la universidad.

En una carrera de menos de quince minutos, los investigadores se encuentren ante las puertas de un majestuoso edificio ajardinado de varias plantas. Su estilo arquitectónico les hace recordar el de algunas iglesias del gótico tardío. Los más avezados en arte no tienen dificultad en reconocer la arquitectura tudor en cada una de las piedras y arcos que presenta la imponente construcción. Sea la que sea la sensibilidad artística de los investigadores, ninguno de ellos pueden obviar que la Universidad de Aberdeen rezuma historia a raudales.

Maravillados, los investigadores empiezan a recorrer la gran extensión de césped que rodea el recinto en dirección al acceso principal. Junto a la puerta de entrada, en una placa de broce ennegrecida por los años, se puede leer: "Universidad de Aberdeen. Facultad de Biología y Geología." Al entrar, les recibe un amplio hall con las paredes repletas de fotografías enmarcadas. Algunas son retratos, otras entregas de premios y una buena cantidad de ellas expediciones a lugares exóticos En el fondo, tras un mostrador de madera, un hombre con bata gris, al percibir la presencia de visitante, levanta con desgana la mirada del periódico que está leyendo. A su espalda, dos pasillos se pierden en el interior del edificio y una escalera de piedra bellamente decorada asciende a los pisos superiores.

El grupo se sitúa ante el mostrador y el que parece ser el conserje del centro les mira. Indolente, dobla el periódico que está leyendo y atiende a la petición de los recién llegados. Se trata de un hombre bajo de pronunciadas ojeras y mirada hundida. Unas grandes entradas, que posiblemente le confieran más edad de la que realmente tiene, amplían su frente en extremo.

— Lo siento, pero el señor MacKendrick falleció y sin la autorización del decano no puedo permitirles entrar a su despacho — el hombre se dispone a abrir el periódico—. Y, lamentablemente, el señor Abercrombie se encuentra fuera de la ciudad.

 

Notas de juego

Necesito que hagáis una tirada de Psicología con un bonus de -15.

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26/04/2020, 13:54
Alfred Lean

Como era habitual últimamente, nos habíamos encontrado con problemas para seguir el rumbo de nuestras investigaciones. Un empleado nos barraba el paso al despacho de MacKendrik y si teníamos que esperar a que el decano regresara, se enfriaría el rastro que habíamos descubierto.

No podemos esperar a que regrese el decano. Es de suma importancia que entremos en el despacho del profesor. Tiene una documentación importante que necesitamos.

No era muy convincente, pero esperaba que el empleado no se pusiera muy duro con respecto a dejarnos entrar.

 

- Tiradas (1)

Motivo: Psicologia

Tirada: 1d100

Dificultad: 50-

Resultado: 6(-15)=-9 (Exito) [6]

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26/04/2020, 13:59
Catherine Baker

Durante el viaje en taxi Catherine piensa en lo que han encontrado en casa de MacKendrick preguntándose también en qué le habrá dicho Juliette a la joven para que ésta se mostrase tan taciturna aunque las palabras de la artista la sacan de sus dudas y añaden un nuevo misterio a todo aquel caso tan espeluznante

La universidad de Aberdeen proporciona un momento de luz a la oscuridad que rodea aquella investigación al mostrarles la maravilla arquitectónica de sus muros que la anticuaria observa con avidez deseando perderse en algunos de sus libros y estudiar la historia de aquel lugar.No puede hacerlo en aquel instante pero se lo anota mentalmente para cuando regresen a casa ya que no esperaba encontrar en Aberdeen aquel reducto de historia

- Tiradas (1)

Motivo: Psicología

Tirada: 1d100

Dificultad: 5-

Resultado: 52(-15)=37 (Fracaso) [52]

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27/04/2020, 13:46
Eleanor Harris

Siempre le habían gustado los edificios antiguos porque a través de sus paredes podía ver la historia de cientos, miles de años adosados. Historias palaciegas, de burócratas, de regios compromisos que terminaban con guerras políticas… su imaginación seguía volando entre diversos escenarios mientras miraba por la ventanilla del taxi la edificación que correspondía a la universidad. Se le ocurrían varias historias que contar, en realidad toda esta aventura le daría para varios bestseller, pero sentía que no podía escribir en papel lo que realmente pasaba por su cabeza como si fuera una ofensa a la propia investigación. Tal vez, cuando todo acabara, podría homenajear esa experiencia a su manera.

Mientras tanto seguía a sus compañeros a la entrada, oteando el interior con leve curiosidad hasta llegar al mostrador, sonriendo de manera cordial al encargado.

¿Dónde podemos encontrar al decano? – De nuevo más trámites burocráticos que posiblemente sólo les frenarían.- ¿Hay alguna forma de llamarle? Necesitamos una documentación que, según su mujer, guarda en su despacho.

- Tiradas (1)

Motivo: Psicología

Tirada: 1d100

Dificultad: 20-

Resultado: 21(-15)=6 (Exito) [21]

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28/04/2020, 19:05
Juliette Moreau

La visita nos ha dejado a todos un poco taciturnos así que el viaje en taxi no es muy animado. A pesar de ello la llegada a la gran universidad nos levanta un poco los ánimos.

- ¡Es preciosa! ¿No sería maravilloso celebrar una boda en un lugar como este?  Seríamos princesas en un castillo - Sonrío a ambas chicas y las cojo con mis brazos en jarras alrededor de los suyos. Pero las buenas sensaciones no duran y un repelente conserje nos quiere impedir acceder al despacho.

Vera caballero, venimos de parte de la viuda del señor MacKendrick ya que ella no se encuentra con fuerzas de venir... solo necesitamos recoger unos enseres personales, seremos rápidos y nadie sabrá que hemos estado allí,  se lo prometo.

- Tiradas (1)

Motivo: psicología

Tirada: 1d100

Dificultad: 75-

Resultado: 87(-15)=72 (Exito) [87]

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28/04/2020, 21:02
Joseph Acker

El conserje sonríe mordaz sin dejar de mirar el periódico que acaba de abrir.

— Pueden encontrar al señor Abercrombie en Plymouth, al sur de Inglaterra. Está en una conferencia y no regresará a Aberdeen hasta dentro de cinco días. Siento decirles que no estoy autorizado a facilitar el teléfono del hotel en el que se encuentra, con lo cual — el hombre levanta la mirada y mira a los visitantes con una mezcla de sorna y picardía — me temo que van a tener que esperar a la semana que viene para echar un vistazo en el despacho del señor MacKendrick.

Notas de juego

Necesito que hagáis una tirada de Charlatanería o Persuasión, dependiendo del tono que queráis darle a la conversación, para convencer a Joseph de que os deje echar un vistazo en el despacho. Si queréis engatusarlo, hacerle la pelota o cosas así tirad por Charlatanería. Si por lo contrario, queréis hacerle ver la urgencia de la situación, usad Persuasión. Está receptivo a escucharos, así que contáis con un bonus de -10 a la tirada.

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28/04/2020, 21:04
Narrador

Notas de juego

Notáis que, aunque Joseph no se haya tomado demasiadas molestias en miraros a la cara, Alfred le ha llamado ligeramente más la atención. ¿Sabréis aprovechar este dato para ganaros su confianza?

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28/04/2020, 21:05
Narrador

Notas de juego

No percibes nada especial en el comportamiento del conserje, salvo que tiene pinta de ser bastante holgazán.

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29/04/2020, 09:13
Catherine Baker

Vaya un vago piensa Catherine con cierto conato de enfado ¿Cómo puede haber gente así trabajando?Debería irse a su casa y dejar el puesto a alguien que realmente quiera trabajar y ganarse la vida honradamente

Tratando de tragarse el malestar que aquel hombre que le recordaba a la maleducada secretaria de comisaría le producía Catherine trató de ganarse su confianza apelando a sus sentimientos (si es que aquel espécimen los tenía)

-"Por favor,caballero,la señora MacKendrick ya ha sufrido bastante y tan sólo queremos aliviar su dolor llevándole lo perteneciente a su esposo.Sabemos que el profesor era alguien querido y estoy segura de que alguien eficiente,bueno y comprensivo como usted no querrá añadir más dolor a esa pobre mujer,a una viuda desolada por la terrible muerte del amor de su vida,dejándola sola con una niña a la que criar..."-dejó que su voz apenada adquiriera la tonalidad adecuada para llegar a la conciencia de aquel hombre

- Tiradas (1)

Motivo: Persuasión(vaya moral tengo con un 15)

Tirada: 1d100

Dificultad: 15-

Resultado: 35(-10)=25 (Fracaso) [35]

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29/04/2020, 10:47
Alfred Lean

Me acerqué al mostrador para hablar con el conserje que no parecía muy dispuesto a dejarnos entrar. Tendríamos que utilizar nuestras mejores palabras para lograr entrar en el despacho o, como mal menor, conseguir el número de teléfono del decano.

El señor MacKendrik posee en su despacho información vital para su viuda. No quisiéramos que usted faltara a su deber de proteger la entrada de la Universidad, pero si pudiéramos llevar esos papeles a su viuda, seguramente estaríamos todos nosotros muy agradecidos.

Me acerqué un poco más para susurrarle al oído.

Se podría decir que le deberíamos un favor. Y de los gordos. - asentí con la cabeza. - Estaría usted colaborando en una investigación muy importante.

- Tiradas (1)

Motivo: Persuasion

Tirada: 1d100

Dificultad: 65-

Resultado: 24(-10)=14 (Exito) [24]

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01/05/2020, 22:20
Eleanor Harris

Por supuesto.

Hubiera sido demasiada “buena suerte” el hecho de que el hombre fuera permisivo en cuanto la oportunidad de entrar, pero hasta ahora sólo habían tenido problemas y problemas para acceder a la siguiente casilla. Suspiró largo y tendido, oteando la decoración para pensar rápido aunque tardó en percatarse que la respuesta estaba delante de sus ojos, o más bien a su lado.

No pasó desapercibido la mirada que le lanzó a Alfred imaginándose todo tipo de motivos. En realidad le daba igual cuales fueran si eso les permitía avanzar.

Sus compañeros, o la mayoría, parecían que también se habían percatado, haciendo un segundo intento para convencerle. A pesar de que creía saber qué era exactamente las palabras que quería escuchar, la escritora optó por guardar silencio temiendo empeorar la situación, manteniéndose apartada con una cordial y cansada sonrisa.

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02/05/2020, 14:44
Juliette Moreau

Aquel hombre no nos había echado a patadas y eso era buena señal, además parecía que le hacía ojitos a Alfred y eso despertó mi imaginación y una ligera sonrisa perversa se dibujó en mi rostro la cual oculté a toda prisa "Vaya, vaya con el señor conserje".

- Como bien dice mi compañero, la pobre viuda está sufriendo y nosotros lo consideraríamos como un favor personal, ¿verdad Alfred? - Agarré de los hombros al chico del grupo - Alfred  se compromete a  "ayudarle" con lo que sea si nos deja entrar en el despacho, solo serán 10 minutos, 15 a lo sumo y usted podría aprovecharse de las fuertes manos de Alfred o quizá sus dotes interpretativas le puedan ser de ayuda.

Tras mostrarle un sonrisa resplandeciente y guiñarle un ojo de forma pícara esperé su respuesta con impaciencia.

- Tiradas (1)

Motivo: Persuasión

Tirada: 1d100

Dificultad: 75-

Resultado: 28(-10)=18 (Exito) [28]

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02/05/2020, 21:28
Joseph Acker

El conserje mira a los recién llegados y sonríe forzando una cómica expresión de hartazgo. Se nota que le gusta hacerse de rogar, cosa que ha hecho que las múltiples súplicas de los presentes hayan conseguido lo que pretendían.

— Está bien. Les llevaré al despacho del señor MacKendrick — el hombre busca en un cajón de la mesa y saca de él un pesado llavero repleto de tintineantes llaves —. Síganme, es por aquí.

El grupo sigue al bedel por las bellas escaleras de madera hasta el descansillo del primer piso. Un suelo enmoquetado y unos amplios ventanales les dan la bienvenida. Una vez allí, tuercen por un pasillo y lo recorren casi hasta el final. El hombre no tarda en detenerse ante la puerta de, posiblemente, una sala de material y, tras excusarse, la empuja y entra. Unos segundos más tarde, regresa al pasillo en compañía de una mujer de baja estatura que, por su indumentaria, también parece formar parte del equipo de mantenimiento de la universidad. Con un gesto, el hombre indica a la mujer que les siga y, entregándole una de las llaves que lleva en el bolsillo, se dirige a los investigadores.

— Señoras, esta es Edna. Ella les mostrará al despacho del señor MacKendrick. Mientras — el hombre sonríe a Alfred con complicidad— debo cobrarme con urgencia ese favor que, tan solícito, me ha ofrecido. Con lo cual, le agradecería que me acompañara.

Dicho esto, sin esperar respuesta, todos caminan un poco más hasta llegar a un cruce en el pasillo, donde los dos grupos se separan.

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02/05/2020, 21:28
Edna Johnson

Al fin, las mujeres alcanzan el dichoso despacho. Edna les abre la puerta y permanece en el quicio de la puerta sin perder detalle de lo que las investigadoras hacen.

— Señoras, no tengo todo el día, así que, por favor, busquen rápido lo que sea que estén buscando.

Antes las mujeres, se presenta el "otro" despacho del señor MacKendrick. Este, a diferencia del de la casa de Sunnybank Road, destaca principalmente por el desorden. Aunque el mobiliario de madera noble y las grandes ventanas le den a la habitación un aire acogedor, el caos de libros, trabajos de estudiantes y revistas científicas que hay sobre el escritorio resulta abrumador. El aspecto de la estantería que hay junto a la puerta presenta la misma anarquía.

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02/05/2020, 21:29
Joseph Acker

Los dos hombres regresan a la escalera principal y la recorren hasta el final de la misma. En el ático, el bedel conduce a Alfred a un ala de la universidad apartada del resto, donde se echa  de menos la presencia de profesores y estudiantes. Sillas cojas y pupitres carcomidos se acumulan en los rincones de un pasillo cada vez más polvoriento y lúgubre. Finalmente, el conserje se detiene ante una puerta y la abre, esbozando una sonrisa diferente a la de hace unos minutos. Parece bastante emocionado.

— Es aquí. Por favor, entre.

Tras encender la bombilla que pende del techo, una estrecha habitación llena de trastos se descubre ante Alfred. Hay varias estanterías llenas de cajas de cartón y botellas junto a un par de sillas de madera y un colchón mugriento. Reclinada en una esquina y envuelta en sombras, una caja alargada semejante a un ataúd acaba de darle a la escena un aspecto inquietante.

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04/05/2020, 19:14
Eleanor Harris

Si les hubieran dicho que un ladrón entró para robar algo, removiendo todo a su alrededor, posiblemente se lo hubiera creído. Como amante del orden y maniática según su marido, ver tanto ajetreo en su alrededor encendía una vena que creía tener dormida hace tiempo, moviéndose por el lugar para recoger algunos libros del suelo y ponerlos sobre la mesa.

Veo que era un hombre… ocupado.- Prefirió decir “ocupado” antes que la verdadera palabra que se le cruzó por la mente.- Buscamos datos sobre su última investigación.- Investigar aquello les llevarían horas, puede que días, con tal de buscar un único documento.- Usted le conoció mejor que nosotras, ¿sabe donde guardaba sus archivos más importantes? A veces los más eruditos esconden sus últimos estudios en lugares específicos para encontrarlos entre tanto… desorden.

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05/05/2020, 18:48
Juliette Moreau

El conserje se llevo a Alfred y no pude evitar que una sonrisa pícara se dibujara en mi rostro, así que me despedí de ellos diciendo:

- ¡Aseguraos de pasarlo bien chicos! - Mientras les guiñaba un ojo.

Tras todo esto llegamos al despacho, el cual estaba hecho un completo desastre - Uf, vaya pocilga - Empecé a rebuscar en los cajones del escritorio para intentar encontrar alguna información útil sobre la expedición. 

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05/05/2020, 20:31
Edna Johnson

La mirada de profunda desgana de Edna es suficiente respuesta para que Eleanor comprenda que ella y sus compañeras están solas ante la tarea de encontrar algo de interés entre la presente algarabía de papelotes.

— Hagan el favor de no desordenar demasiado, señoras. Y no se atrevan a coger nada. Que después la que se lleva las broncas es una servidora — suelta la mujer mientras, apoyada pesadamente en el marco de la puerta, saca una lima de uñas de su bata.

De forma espontánea, las investigadoras se miran entre ellas con picardía y se ponen manos a la obra.

Notas de juego

Necesito que hagáis una tirada de Descubrir con un malus de +10, ya que todo está muy desordenado.

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06/05/2020, 17:11
Alfred Lean
Sólo para el director

La habitación era inquietante y bastante extraña.

¿Qué estamos haciendo aquí? No sé qué se habrá imaginado que quería decir con el favor, pero creo que esto es inadecuado.

No ayudaba a tranquilizarme el ver un ataúd o algo parecido que estaba en medio de la sala. No sabía que se había imaginado el bedel que le entregaría a cambio de la información, pero mi gusto por los hombres se detenía en la simple amistad y camaradería.

¿Podemos volver con las señoritas?

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06/05/2020, 19:27
Eleanor Harris

No se preocupe.- Con cuidado de no pisar nada, fue recogiendo todo lo que podía o guardando algunos libros en la librería sin saber exactamente a donde correspondían, guiándose por títulos o autores sobre todo. Puede que ordenar le consumiera más atención que buscar, dándose cuenta que se preocupaba sobre todo por no tropezar con alguna cubierta del suelo.

- Tiradas (1)

Motivo: Descubrir

Tirada: 1d100

Dificultad: 65-

Resultado: 57(+10)=67 (Fracaso) [57]

Notas de juego

Vaya, por dos puntos.