Partida Rol por web

-Te pido disculpas, padre -agacho levemente la cabeza-, no era mi intención crear rencillas sino dar mi opinión, y lamento que mi actitud no haya sido la correcta -consigo decir sin demostrar demasiado cuánto me cuenta pedir perdón-. Pero, si me permites hablar, creo que Robert tiene razón: la Reina Daenerys es... era una mujer inteligente. Después de tantos años de reinado debió de prever que moriría sin hijos en los que heredar, así que seguro que pensó una solución. Sin duda dejó un testamento, y es probable que en él nombrara a alguien como heredero.

Observas el baile de las llamas fijamente, absorto en sus movimientos. Los ojos te lloran por la intensa luz del fuego y tu garganta se encoge y se seca por el efecto del humo. Sin embargo no cejas en tu empeño y comienzas a ver algo en la pira.

Ves la imagen distorsionada de una gran ciudad amurallada, en cuyo interior distingues tres colinas. La visión se centra en un gran edificio bellamente adornado, el Gran Sept de Baelor. Miles de personas se congregan a su alrededor pero la visión se acelera y no eres capaz de distinguir ningún rostro.

La imagen se detiene en una reciente tumba de marmol blanco adornada con la estatua de tres dragones.

La visión vuelve a retomar una alta velocidad y gira varias veces hasta enfocar el cielo. Puedes ver en él a tres grandes dragones que se dispersan cada uno en una dirección distinta.

Ha terminado- el hombre finalmente fue lanzado al fuego y murió maldiciendo a sus captores y rezando ante sus dioses. No había sido algo digno de ver, mas era necesario si quería ser parte de esa comunidad. Aunque desde luego, ese tipo de ritos no eran sus favoritos.

Mira ligeramente a su alrededor, esperando la señal para salir de allí. 

Tres dragones, tres colinas, tres traiciones...

Solo necesito un cuerno y  dragón, así como necesito solo un dios.

Descansa en paz, madre de dragones.

Tras finalizar el ritual y el sacrificio te diriges a tu habitación a dormir.

Después que el septon no es más que una pila de huesos quemados, Den procede a ejercer los servicios mortuorios del condenado, diciendo plegarias de redención y agradeciendo haber sido la fuente espiritual para que R'hllor llegase al fuego.

Incluso cuando los débiles mortales no lo desean, el verdadero inmortal habla a través de ellos...

La estancia con los hombres de la Casa de la Luz no estaba siendo muy agradable... y útil. Su estancia se había limitado a conocer un poco mas los designios de la deidad del Señor de la Luz y algún que otro rito propio de su iglesia. Si bien es cierto que Lucyen consideraba toda la información como herramienta (y en algunos casos, arma) útil, ya estaba algo cansado de tanta teología y tanta "monserga" sin sentido. 

Por si eso fuera poco, aún no había logrado contactar con ningún maestre que le cogiese como pupilo y eso era un problema. Sin recomendación de un maestre no tendría casa a la que servir, y por ende, no tendría hogar. Aún podía mantener su situación, pero sabía que debía cuanto antes poner orden a este problema.

Si ha he terminado aquí mis servicios, quizás sea conveniente viajar un poco mas- piensa, ya tumbado en su cama después del día de hoy- creo que ya va siendo hora de que me ponga en serio con mi búsqueda de tutor. Decidido, si puedo mañana me pondré a ello- quizás tenga que investigar sobre posibles candidatos de otras casas, y enviar algunos cuervos para presentarse. Pero eso tendría que organizarlo mañana. Ahora lo importante era descansar, dado que posiblemente, tendría un largo día por delante.

Arya escucha al soldado como lee los folios.

Intenta escuchar atentamente  por la sencilla razon de que ella es las mas rapida de todos los presentes y ya ha estado en todos los estados de los siete reinos.

Mientras oye lo que lee el soldado no sabe muy bien que elegir y donde quedarse, Los Gemelos no le hace mucha ilusiion mas que nada por el antecedente de dicho castillo, pero bueno la casa es una de las mas antiguas de los siete.

La Casa Arryn lo mismo pero estar metida en medio de un rio, tampoco le entra mucha gana.

Asi que despues de meditar medio segundo lo decide y le dice al soldado.

Me quedo con Altojardin si puede ser, si luego se tiene que cambiar no importaria pero esa es mi primera opcion, si no le parece mal, digo mirando al soldado.

Espero su respuesta.

Si, ambos teneis razón, partiremos pues mañana a Desembarco del Rey para asistir a la ceremonia del funeral de la reina, aunque sea bajo el emblema de dioses falsos -todos los presentes en la sala notais la expresión fría y desagradable que ocupa la cara de Lord Gendry cuando se refiere a otras religiones. Él, aunque no suele participar en los ritos, es un fiel seguidor de R´hollor y en contadas ocasiones deja ver la gran fe que oculta en lo más profundo de su ser. Seguramente leerán el testamento de la difunta reina tras la ceremonia y tendremos nuevos datos para saber como actuar.

La mujer vestida de rojo, la alta sacerdotisa de la Casa de la Luz, hace una reverencia y se dirige a todos los presentes -la muerte de la reina es toda una catástrofe para el reino. Sin embargo no podemos olvidar nuestro deber con R´hollor. Creo que nuestra honorable casa debería observar lo que ocurrirá en los próximos días en Desembarco del Rey y apoyar al sucesor del Trono sin reparos. Aunque con una obvia condición -la mujer, sucesora de Melisandre como alta sacerdotisa del culto, comparte algunos dones que esta tenía, como su capacidad oratoria y su elevada fé -debemos sustituir la falsa religión del reino por la fé verdadera, por la luz de R´hollor.

Desembarco del Rey... bien, ya hace tiempo que no salimos de viaje, y esta fortaleza está empezando a echárseme encima. Va a ser muy interesante estar en la capital en estos días...

Escucho las palabras de la sacerdotisa y muchas cosas me vienen a la cabeza, pero después de lo sucedido prefiero callar. He crecido bajo la fe de R'hollor, y por tanto no tengo nada contra ella, pero me parece inocente pretender que quien vaya a sentarse en el Trono de Hierro adopte una fe minoritaria que le enemistaría con casi todas las grandes Casas. Por favor, es tan inocente que es casi infantil...

Bueno, supongo que decir algo así es su deber como alta sacerdotisa.

Me muerdo la lengua y consigo mantenerme en silencio.

Gendry observa el emblema de su casa durante unos instantes antes de hablar -Melara tiene razón, no aspiro a ver a la Casa de la Luz gobernando los siete reinos durante mi liderazgo de la casa pero creo que si podemos conseguir que nuestra fé tenga más fuerza en esta tierra de falsos dioses.

Padre, permiteme ir a Desembarco del Rey para asistir al entierro y al posterior consejo -ruega Robert a su padre -soy el hijo primogénito, debo ir para representar a nuestra casa. Tu hermano se yergue, su rostro serio te hace recordar a tu padre y tiene el porte de un verdadero Lord.

El guerrero te mira con el ceño fruncido, manoseando el manuscrito de tu misión. Finalmente habla -partirás esta misma tarde. Como sabrás nadie debe descubrir que trabajas para nosotro, no pueden saber que la Casa de la Luz tiene espias en todas las partes del reino -el hombre mira a otro hombre y comienza a preguntarle a él su destino.

Abres la puerta para salir cuando la voz del guerrero te detiene -y ten cuidado, las calles de la ciudad están tensas desde la ocupación de los Greyjoy. Los habitantes autóctonos de la ciudad miran con recelo a los viajeros mientras que los ocupantes abusan de su poder sin dudar. No es el mejor sitio para una mujer.

Despiertas un día más en tu pequeña habitación que compartes con otro aprendiz de maestre. Mientras desayunas escuchas rumores que te desconciertan. Algunos dicen que la reina está gravemente enferma, otros dicen que un cuervo llegó a RocaDragón anunciando su muerte, escuchas también a alguien decir que fue asesinada vilmente, a tus oidos llegan rumores de que ha surgido una rebelión contra la reina Dragón y que Desembarco del rey se encuentra en sitio.

Mientras tratas de digerir tanta información uno de tus compañeros te indica que se requiere tu presencia en la sala de los maestres.

Absorto en el tu labor apenas te percatas de que el resto de tus compañeros van saliendo de la sala progresivamente.

Finalizas cuando la gran pira está prácticamente consumida. Te encuentras completamente solo, rodeado de multitud de sombras que emergen de los fuegos moribundos. La noche está ya muy adentrada por lo que te diriges a la salida cuando una voz te detiene.

Aguarda, hijo de R´hollor.

Los rumores que había escuchado a primera hora del día no sabía como tomárselos. Demasiada información contradictoria como para creer que todo lo que había oído fuese verdad. Aún así y todo no podia desdeñar la cuestión importante: algo estaba pasando en Desembarco del Rey. Eso era lo mas obvio. Ahora bien, que estuviera sitiado, que la reina hubiera sido asesinada... dilucidar que era verdad o no ya no podía hacerlo. 

Sin embargo, su cabeza no estaba ahora mismo para pensar en esos rumores, al fin y al cabo había sido llamado en la sala de los maestres. Aunque desconocía el porque de ello, Lucyen consideraba que la reunión iba a ser principalmente de su situación actual: sin un tutor, sus posibilidades de convertirse en maestre descendían considerablemente, por lo que era seguro que hablarían de ello. Quizás le diesen un posible tutor, o bien alguna recomendación... no podía saberlo.

Tras prepararse, y dejando recogido su habitación, el joven Atreides no pierde mas tiempo y se dirige directamente hacia la sala.