Partida Rol por web

La muchacha te guía con prisas sin explicarte nada, cogiéndote de la mano. Acabáis llegando a un pequeño cuarto muy escondido, con cerrojo interior.
En el hay varias mantas, un colchón viejo, revistas y comida en conserva.

LA muchacha parece muy nerviosa y azorada, como si se debatiera entre hablar o no. No es capaz de mirarte sin sonrojarse vivamente. Finalmente se decide a hablar:

-No puedo permitir que te pase nada. No quiero. Desde que te vi siento algo...raro...aquí- se lleva la mano al corazón - y no sé por que....eres un vampiro, me han enseñado a odiaros y temeros, sin embargo a ti no puedo. Es...extraño.-

Por fin te mira a los ojos, su mirada es anhelante al tiempo que llorosa y suplicante. Realmente parece una niña, perdida, sin saber que hacer.

Le aparto el pelo de la cara y sonrio -  no te preocupes vale, no entiendo porque teneis que odiarnos, tal vez otros de mi especie os trataron mal, pero no todos somos iguales, igual que no todos vosotros sois iguales- le cojo el menton haciendo que me mire -  y tranquila es bueno que no me temas o me odie, eso significa que eres libre de decidir...

Te coge la mano, acariciándola, y sonríe. De pronto parece haber decidido algo. Sin previo aviso acerca su cara a la de Elisabeth, pillándola desprevenida, y la besa en los labios cerrando sus ojos.
Es un beso tierno y lleno de duda, a la par que inexperto.

Abro los ojos de golpe " eh.... esto cada vez se pone... mejor... seria una buena candidata..." Bastantes cosas pasan por mi cabeza y ninguna de ella esta unida a apartarme de la niña, puede servirme de mucha ayuda y no solo ientras este aqui, ademas mi conciencia se limpiaria si consiguiera sacarla de aqui tambien...

La abrazo y acerco mis labios a su oido y le susurro- Primera leccion pequeña, antes de besar a alguien dile al menos tu nombre... - le acaricio la njuca intentando relajarla.

Parece algo aturdida, quizá esperaba que la rechazases.

-¿Mi,mi nombre? Si, claro...Soy Alice.- dice de forma distraída, más centrada en el discurrir de su mente -¿Te quedarás conmigo? Puedes...alimentarte...de mi cuando lo necesites, no me resistiré. Además yo..-en este punto se interrumpe y no dice nada más.

Ahora parece bastante temerosa y, abrazándote fuertemente, te susurra al oido :

-No me abandones con ellos-

Le cojo el menton con dos dedos y la miro directamente a los ojos - Alice... Bonito nombre - Tras lo de alimentarme miro su cuello y la palpitacion en suss venas - Eres muy amable mi pequeña pero nunca me alimentaria de ti, eso seria como decir que te veo como comida...

La abrazo fuerte - cuantos años tienes Alice? - le digo intentando que avada sus pensamientos y asi de paso consiguiendo mas informacion de ella

Ante tu última pregunta se tensa ligeramente. Separándose de ti, cruza los brazos y parece algo enfurruñada.

-Soy lo bastante mayor para saber lo que quiero. Tengo casi 16 años.

¿Y tú?- Al preguntarte eso último la curiosidad parece vencer al enfado infantil anterior, te mira con ojos como platos.

La abrazo por detras y me siento con ella encima - Mmm...quieres mi edad mortal o inmortal? -se me escapa un risa, mientras hablo con ela no puedo evitar peinarle el pelo " dieciseis... perfecto"

Pasáis el resto de la noche entre conversaciones insustanciales.

Anochece de nuevo, cuando despiertas ella no está.

Examino la habitaion haciendo tiempo .

"Habitación" es un término demasiado grandilocuente para el lugar en el que te encuentras. Poco más que un proyecto de armario sin acabar. Apenas hay espacio para una pequeña caja en uno de los lados, el resto se encuentra ocupado por el desvencijado colchón y la manta, sin sábanas. Las revistas que hay dentro de la caja parecen ser recientes, sin embargo hablan de una moda muy antigua para ti, acostumbrada como estás a la época actual. En el fondo de la caja hay latas de conservas diversas, suficientes para, al menos, dos semanas. También hay una foto, medio escondida entre las revistas, en ella se ve a Alice y, al parecer, su hermana gemela, mucho más jóvenes. No hay nada eléctrico, la luz proviene de varias velas en una especie de estante superior.

Tras un tiempo,una media hora, Alice entra en la habitación con la respiración algo agitada y bastante nerviosa, pero al verte aún allí, al ver que no te habías marchado, su cara y sus ojos se iluminan con una sonrisa.

-¿Cómo has pasado el día?¿Estabas cómoda? Lo siento si te molesté al irme...-

Suelta en la cama varias armas así como una bolsa de ropa.

Al verla entrar sonrio " esta sola perfecto.." nunca se sabe y puede que el dia de hoy cambiara de opinion y me guste o no mi novida esta en sus manos.

-Buenas noches Alice! Eh...tanquila he dormido bien- Me ecerco a ella y le doy un abrazo cogiendole la cara hago que me mire - Pequeña tengo que pedirte algo, cada noche necesitare alimentarme, puede que aguante unos dias sin comer, peor si pasa demasiado tiempo...- la miro sin quitar la vision de su cuello - ...bueno no quisiera hacerte daño, por eso queria pedirte que me trajeras o me llevaras donde haya algun animal.

-¿Animales? En esta ciudad no hay animales. He visto vídeos de ellos pero aquí solo encontrarás ratas. Pero..- su expresión se torna algo abatida y baja la mirada -¿No te sirvo yo?-

Lo siento pequeña pero...no, no es solo que no quiera alimentarme de ti, si no que no puedo, los que son como yo hay algo de lo que no s epueden alimentar, y yo no me puedo alimentar de mujeres...- la cojo de la mano y le doy un beso para reconfortarla.

En ese momento ve la fotografía medio oculta.

-¡Oh!- se apresura a cogerla y guardarla -Pensé que la había perdido- susurra.

-Sé donde hay muchas ratas, pero nos verán ir, seguro, y eso será un problema.-

- Donde creen ellos que estoy? - La mio un tanto preocupada - Alice yo no soy una vampiro de combate si te quisieran hacer algo no podria defenderte como harian otros... - Me crujo el cuello - Y tu podrias traerme una cada dos dias? con eso sera suficiente.

-Puedo traer más. No creo que sospechen de mi. Para algo apagué la cámara.-

Se sienta en el colchón y comienza a revolver la ropa.

-Te he traído ropa para que no llames tanto la atención cuándo nos vayamos, cuándo se calme el asunto.-

Va sacando y poniendo sobre la cama, todo arrugado, varios tipos de pantalones anchos de hombre y camisas de cuadro de tela basta, como de leñador. Y una gorra con orejeras para el frío.

Eres muy buena Alice - Me acerco a ella y la abrazo - Sabes algo de mis compañeros? Me siento un poco mal por haberlos dejado... - Le aparto el pelo de la cara acariciadole el rostro - Cuando nos iremos?