Partida Rol por web

Has llegado al Salón buscando la manera de redimirte y volver a tu existencia como Deva pero ahora que estás aquí dudas que la adivina estuviera en sus cabales. Esto parece un gran puesto comercial bajo la ley de los mágicos de Saruun; es cierto que hay razas de todo tipo pero no había ni una sola pista de qué hacer una vez hubieras llegado aquí.

Nitis suspiró al llegar al lugar, ya había supuesto que no seria llegar y triunfar pero ese lugar - con todas esas lucecitas - parecía mas bien un circo.

La mujer Vistani la había advertido que su antiguo cuerpo aún colgaba cual trofeo en algún lugar perdido de ese lugar. Si quería tener una remota posibilidad de reencarnarse en Deva, tenia que destruirlo antes.

Observó el centenar de agujeros que decoraban las paredes con parpadeantes luces que le daban el aspecto de una grotesca catedral. Las casillas, donde habitaban los desafortunados que esperaban mejorar en algún momento de su vida.

Esperaba no terminar allí.

Sus orejas tintinearon bajo su pelo, escuchaba el sonido de la fiesta y el baile que provenía de un edificio en concreto, la posada de la media luna. Por esa noche, ese seria su destino ... quizá encontraría a alguien dispuesto a explorar la infraoscuridad.

Suspiró de nuevo y se dirigió a la posada.

La posada es una enorme construcción apostada en un lateral del salón que sirve como puesto de venta, salón de baile y posada. Los medianos de la familia Media luna llevan el lugar y alma­cenan una gran variedad de alimentos y otros productos, obtenidos de los puestos de la Media luna en tierras vecinas.

Al entrar ves que el lugar rebosa actividad, parece que el hecho de ser la única posada del Salón está siendo aprovechado por los medianos en un negocio muy lucrativo.

Un mediano joven se acerca

- Buenas noches bella tieflin, me llamo Rendil Medialuna ¿en qué puedo ayudarla? ¿comida? ¿habitación?

-¿Compañía?- Añade con una sonrisa picara.

-En realidad busco hombres fuertes y recios, que se dediquen a eso de explorar estas cuevas en busca de tesoros, grandeza, heroicidades y estas memeces.-

La cola de la tiflin se pasea por la barra de la posada.

-Y un poco de vino-

- Pues entonces estáis de suerte porque puedo serviros el mejor vino de muchísimos kilómetros a la redonda y bajo tierra, jajaj - ríe con su propio chiste - y aquellos de allí  - señala a un grupo formado por dos elfas, un gnomo y un semielfo que se han sentado a hablar con un humano que lleva la cara oculta por la capucha de una capa con runas y un tieflin también de aires mágicos - son los héroes del Salón de las Siete Columnas: han derrotado a los Asaltantes sangrientos y a los duergar del Fuerte del Cuerno.

-Ya tardas en servirme ese vino.- Dice con sonrisa complaciente mientras su cola acaricia la mano del mediano.

Luego observa al grupo intentando sospesar sus conductas y leer alguna que otra palabra de sus labios.
¿Serán buenos héroes? ¿Servirían para redimirse?

Los cuatro que iniciales parecen bastante compenetrados: la elfa de ropas elegantes y el semielfo tienen algo entre ellos, el gnomo parece ansioso y la otra elfa, de armadura de cota de mallas, parece una planificadora nata.

Rendil te lleva a una mesa cercana que tú sutilmente le has insinuado y te trae el vino, que ciertamente es bueno teniendo en cuenta que lo tienen que traer de la superficie.

Nitis se sienta en la mesa y le agradece el vino con una sonrisa.

Su cola se encarga de acercar la jarra a los labios y tomar un sorbo mientras se dedica a escuchar sin muchos reparos a la mesa de aventureros.