Partida Rol por web

Faraday miró el mapa y sugirió la derecha. Bien por mí, pensó Koko, quedándose a la cola del grupo, mientras observaba a su alrededor todo lo que se movía y había. No pensaba bajo ningún concepto servir de conejillo de indias. Ya lo había hecho durante su excursión a la pirámide y si algo había aprendido era a no dejarse llevar por otros.

Lentamente, siguió al resto del grupo.

Steve caminaba frotándose las manos, en una de las posiciones intermedias del grupo. Sentía una gran carga negativa y no dudaba que aquellas energías confrontaran al grupo en breve. 

No me traen nada de buenas vibraciones...

Para colmo, todo aquello afectaba en medida al grupo. La cordura, después de todo, no era un aliado en un sitio como aquel, en el que parecían más sirenas cuyas voces lo imploraran, que meros cadáveres de almas en pena.

Tal vez si rezo tres padres nuestros, pudiéramos salir con vida.

Lo primero es que al elegir aquel camino, la nublina era demasiado densa y os impedía ver con claridad qué cosas se ocultaban bajo esa capa de manto grisáceo. Por lo que , aunque estuvierais cerca, los unos de los otros, parecía que os habían separado. 

Lo segundo, es que observaste que, al tropezar con una especie de cuerda en el suelo -tensa-, un grito desgarrador se oyó al final. Tras ello, observaste unas serie de luces rojas que procedían por parte del tronco de algunos árboles. Así que, con tu percepción, contemplaste que:

1. Habían trampas por el suelo y por los árboles.

2. Habías desactivado una trampa y ,por ende, matado a uno de tus compañeros... ¿Cuál?

3.Las trampas estaban colocadas de forma impar.

A la vista de las trampas que habías detectado y de la niebla, que no permitía seguir a los demás, Koko se detuvo un instante. Si alguien había muerto por su culpa... mala suerte, pero ante todo crear una mínima distancia con el siguiente le pareció vital para no caer en una de ellas debido a los torpes pies de otro.

Así que se detuvo unos segundos, contó hasta diez, y entonces continuó, mirando con cuidado cada paso que daba, y conteniendo la respiración.

Sigo al grupo como un corderito, parece que Faraday ha estado en el terreno mas veces que yo así que lo mas inteligente es hacerle caso. Observo el musgo al pie de los arboles para ubicar el este y a su vez busco signos de animales, en especial los insectos; esos seres son el instinto personificado, si algo va mal ellos serán los primeros en no anidar en aquel lugar.

De momento no hago la observación pero en caso de ver algún patrón lo informaría

Podías oír el sonido de la Cigarra, aunque también, zumbando, algún más que otro Suzumebachi . Y como no, la querida araña -esta de gran tamaño gigantesco-, además de serpientes. 

En resumen, una fauna la mar de peligrosa...

La niebla era densa, demasiado más bien, hasta tal punto que apenas podíais observar del todo bien. De pronto, oísteis un grito de alguno de ustedes. Se os dificultaba el poder ver. Estabais cerca, los unos de los otros, pero ,a su misma vez, separados por aquel fenómeno.

El caso es que había una baja y hasta que no pudierais salir y escapar de aquella niebla ... no ibais a saber de quién se trataba. La cosa no se quedaba sólo ahí: el doctor Tatopoulos había captado la fauna y Koko ... algo la mar de sabroso para sus ojos.

Para más inri los extraños ruidos no cesaban y no iban a parar, después de todo aquel era un lugar místico. Cada vez que avanzabais la niebla era más densa, hasta que, el primero que encabezaba la fila india, en este caso Faraday, visualizó una nueva bifurcación: izquierda o derecha.

La neblina, niebla o cortina cegadora habia caido practicamente de la nada. Al principio podia seguir las siluetas de mi compañeros pero tuve la osadia de girarme hacia atras para poder grabar la imagen de nuestro camino de regreso, al volver hacia el frente estaba sola envuelta en la niebla....

- Hola??????

Aquello era sumamente inquietante sobre todo porque se escucho un grito, o fueron varios? Habia alguien herido? Porque carajo no habia traido un arma. Hice un esfuerzo en serenarme y mi unica opcion era continuar hasta conseguir a alguien aunque trate de caminar hacia donde habia oido el grito.

Como me voy a perder tan rapido.

Saque el cuchillo y lo lleve en la mano solo por si acaso mientras sentia mis manos sudar y el frio en la nuca.

- Alguien me escucha? Dije en voz alta.

Faraday avanzaba dando pasos cortos, medidos, al tiempo que intentaba manejarse de forma racional. Su pulso estaba acelerado, podía sentirlo, toda esta situación lo tenia al borde del ataque de nervios. Su dedo no estaba en el gatillo, o quizás hubiera disparado el arma de forma precipitada. Cerro los ojos y recordó el mapa mentalmente. Su instinto lo guio por la izquierda, sin embargo, sonrio. Estaban en un laberinto, lo supieran o no, y sabia que hacer en laberintos.

Coloco el rifle en posición de descanso, apuntando al costado y al suelo, y organizo al grupo, pues sabia que hacer, estaba preparado para esto. De su costado saco una bengala, y quitando la tapa la encendio, el fosforo brillo, azulado y bien notorio en la niebla, organizando al grupo.

Conmigo.! – dijo con voz decidida. Iremos por la derecha

Koko avanzó con cuidado siguiendo al resto del grupo, hacia la derecha, como siempre a una distancia prudencial. El grupo se movía lentamente, y el misterio y la niebla que les rodeaban, fomentaban la inseguridad y la desconfianza. Pero a Koko eso le daba igual. Lo único que quería era llegar hasta el final y cumplir su misión.

El camino de la derecha estaba más despejado, así que, cuando os volvisteis a ver, comprobásteis que faltaba el médium. ¿Ahora quién os iba a decir qué decían aquellas pobres almas?

Sin más, fuisteis avanzando. De pronto, un agudo ruido se escuchó y tras él, afiladas y pequeñas lanzas salieron disparadas en dirección a vuestros cuerpos. ¿Acaso había trampas por el bosque? Efectivamente y era un dato que a alguien no dijo al resto del grupo...

Koko vio el rastro de sangre, que sin duda debía ser de alguno de ellos, pero siguió andando con mucho cuidado y esquivando todo aquello que pudiera parecer peligroso.

Sin duda alguna, todo el viaje iba a ser una dura prueba, pero a ella solo le importaba una cosa: llegar viva.

¿Y los demás? Eso no le importaba en lo más mínimo. Para Koko, no eran más que carne de cañón, de usar y tirar. Así era como los veía... y así seguiría. Por eso cuando vio la sangre, sonrió en una mueca que a cualquiera le habría parecido sádica, pero que en realidad mostraba solo la superioridad que sentía.

Al menos entre la niebla habia logrado ubicarme. La voz de Faraday era un faro en la penumbra que se me hacia salvador y continue hacia la derecha hasta que pude ver como unas lanzas salian disparadas hacia nosotros.

Que demonios!!!!

Trampas en un bosque maldito?? Parecia el titulo de una pelicula de bajo presupuesto pero para poder contarlo primero tendria que esquivarlas y por ello salte hacia un costado.

Había seguido al grupo y me centraba en no perder a nadie y observar que nada nos sorprenda pese a la niebla baja del lugar. Unas lanzas nos atacaron por la activación de una trampa o unos locales así que trato de evitarlas sin per4der al grupo.

Contemplaste que:

1. Habían trampas por el suelo y por los árboles.

2. Alguien desactivó una trampa, pues el cadáver del médium tenía signos de haber muerto por una de las lanzas.

3.Las trampas estaban colocadas de forma impar.

Siguió al equipo temeroso, aunque mientras caminaba detrás, casi cerrando la fila, observó claramente el cadáver de uno de ellos. Obviamente aquello le impactó, pero también vio que se activaron algunas trampas y, con ellas, lanzas que esquivó con sutileza, no la suficiente como algunos de sus compañeros. 

Debéis tener cuidado con ciertos bichos... una picadura de esa araña y nos morimos.

Tras ello, siguió como cual corderito el camino de la derecha...