Partida Rol por web

Un largo paseo desde el Garden District te lleva hasta el corazón del centro comercial, a carondelet street, frente al impresionante edificio del banco Hibernia.

Una vez mas accedes a la oficina de tu buen amigo Franju. Pierre Garrance te hace pasar hasta una salita y avisa a tu buen amigo Marcel Franju. Escasos minutos después te hace pasar a su despacho donde se encuentra histérico con una conversación telefónica mientras mira a través de la ventana dándote la espalda. Cuando percibe tu presencia te señala un butacón de cuero mientras sigue discutiendo en un alterado y rápido cajún del cual no logras sino discernir dos o tres palabras sueltas.

Por fin cuelga el teléfono de un violento golpe.
Ah, mi buen amigo Monsieur Hartwell-Burke, ¿Cómo va todo? ¿Qué tal van las investigaciones? ¿Podemos ya enchironar a ese filsdepute? siéntate, por favor. ¿Un habano? dice mientras extrae un par de enormes puros del cajón de su escritorio

Hartwell toma asiento y acepta el habano con gesto de cordialidad y una leve sonrisa. Lo enciende en compañía de Franju, y después de darle una larga calada se centra en la conversación:

- Ahí... Mi buen amigo, la investigación va en buen camino, sabemos donde vive y tenemos testigos que dan de que hablar sobre su coartada, pero nada consistente. Aun, es por eso por lo que vengo -

Da otra larga calada y retoma la conversación:

- Según lo que han comentado hoy tu hermana Beatrice celebra una fiesta en Mardi Grass. .. Me gustaría que me invitaras a esa fiesta, según lo que nos ha dicho Anne , la sirvienta de Beatrice mañana esta llevara el collar de su difunto esposo a Stardust. –

Vuelve a concentrarse en el abano, esta vez lo saborea más detenimiento y deja que sus palabras entren mejor en la conciencia de su buen amigo antes de retomar.

- Vi a ese negro ayer, tengo cita para mañana pero puede que ya sea demasiado tarde -

¿Beatrice da una fiesta? te mira sorprendido y boquiabierto. Pensativo, da una larga calada a su habano.
Mucho habrá de haberla comido la cabeza ese hijodeputa para hacerla olvidarse de su riguroso luto tan fácilmente. En su casa hay cortinas y crespones negros, pero dar una fiesta... Merde! ¡Será un escándalo!. por cierto, ella no sospecha de ustedes, ¿verdad?

suena el télefono.

Franju
..................
Estoy reunido. Si, es importante, Te llamaré en 10 minutos. Mira su Habano calculando el tiempo que tardará en consumirse.
15 ó 20 minutos mas bien.

Y cuelga. seguidamente deja el teléfono descolgado para que no os vuelva a interrumpir.

No puedo invitarte. Yo no estoy invitado, y estoy demasiado ocupado como para celebrarlo en mi propia krewe (1). dice señalando un gigantesco montón de papeles.

Hartwell vuelve a su habano, dedicándose un largo rato a pensar de las posibilidades. Finalmente contesta

-Entiendo… al menos es bueno que los sepas…. En todo caso es vital que entre en esa fiesta, no sea que ese Stardust tenga planeado algo para esta noche. Si pudieras darme la dirección de tu hermana pasaría a darle el pesame. Al fin y al cabo ella no me conoce, y me puedo presentar como tu amigo… que acaba de llegar de viaje. –

Da una profunda calada al habano y retoma la conversación.

- Puede que este sea el momento de pillar a ese fantoche -

Vive en el 82 de Dauphine Street. Pero la muerte de Louis fue hace ya 3 meses. dice fumando y pensativo. Probablemente no acaba de asimilar que su hermana celebre una fiesta en el Mardi Gras cuando aún debería estar de luto.
¡Inaudito! ¡celebra una fiesta con un krewe en su casa, e invita a un negro! ¡Válgame Dios! Ese desgraciado debe de haber robado el juicio por completo a mi pobre hermana

- No te preocupes, buscare el medio de entrar en la fiesta. – da la ultima calada al habano y luego apaga lo que queda en un cenicero – Gracias por tu ayuda, te avisare mañana de cómo ha ido todo. –

Se levanta y dándole un apretón de manos se despide y se va hacia 82 de Dauphine Street.