Partida Rol por web

- No quiero entrometerme en vuestros magníficos planes, pero por qué no usamos los tabardos de los orcos? Eran exactamente igual que los que lleváis, sólo que un poco más sucios - se encoge de hombros sin dejar de mirar el anillo de uno de sus dedos - Eso solucionaría lo de tener que dividirse y simular que somos prisioneros

Tiene razón, esos tabardos tendrían que ser lo mas parecidos a estos, todos esos desafortunados que se encontraron con nosotros no estarían sueltos si no eran guardias. -  A Hadrael nunca le ha gustado la idea de dividirse, cree que cuanta mas fuerza, mas oportunidades de ganar (y de huir) - Además, si lo conseguimos, no tendremos que dar explicaciones a nadie de porque llevamos a los prisioneros a cualquier sitio y será mas fácil conseguir la contrseña para entrar.

Primero Gustarion que el plan no fue mío fue de Alexei, segundo que esperaré a que vengan porque si están en peligro volverán aquí . Así que me quedo . En cuanto a ir juntos no hay patrullas de ocho soldados . Ni tampoco hay en la patrulla Ogros ni enanos.

Dais la vuelta completa al edificio simulando estar de patrulla y buscando alguna ventana o alguna otra etrada pero la unica ventana es una a unos 5 o 6 metros de alto. Mientras mirais para ella veis de refilón como uno de los guardias de una de las torres de guardia os hace una señal de saludo.

Le devuelvo el saludo al guardia imitando el mismo gesto que este nos hace para así pasar por uno de los guardias lo mejor posible y en voz baja les comento a los compañeros...

volvamos,aquí me siento expuesto y vulnerable,no conocemos a nadie y no vimos nada que sea reseñable,a ver si los demás han tenido mas suerte....

- Pues no se me habia ocurrido lo de los tabardos de los orcos. Un poco asqueroso pero pero mejor eso que morir -

Bien entonces vayamos por esos tabardos orcos, me dirijo hacia donde liquidamos a esas viles criaturas para acto seguido quitarle uno de los tabardos para ponérmelo uff que asco si el elfo se quejo por los tabardos de los soldados con estos vomitaría , cojo los demás tabardos y los reparto primero a alexei , después a Gustarion , sigue Borak y si sobra para el ogro.

- Mi querer tambien ropa bonita como vosotros. Yo poner tambien -

El elfo gira la torre tratando de permanecer oculto a ojos "curiosos". Busca una zona muerta ante posible miradas para buscar en las paredes. Entonces el guardia hace un gesto de saludo. Tras devolverlo, regresa sin prisa junto a sus compañeros.
- No podría estar más de acuerdo Unger.

Después de repartir los tabardos de los orcos vuelvo a mi antigüa posición esperando con arma y escudo en mano, cerca de la puerta que da a la torre de la magia , por si escuchaba algún silbido que  me alertara que mis compañeros estaban en peligro, y esperando por si venían para escuchar sus buenas nuevas, o estar preparado para el combate por si volvían con visita.

Los tres expedicionarios vuelven junto a vosotros tras dar la vuelta a la torre con cara de circustancias y os ven a todos, excepto al ogro, vestidos con los colores de la guardia del Fuerte.

Nada,no hay otra entrada....podrías ir a ver si le sacas la información a uno de los guardias reales....con una excusa,por ejemplo,que estabas ocupado en algo que no deberías estar haciendo cuando dijeron la nueva contraseña,beber,jugar una partida de dados,holgazaneando....no se algo así....

Se dirige a Lennox por ser de las características de los guardias y pasaría una prueba si estos lo miran mas fijamente que a los demás,por muy disfrazados que vayamos

Luce su peto con desgana, asqueado por la peste que emite. Se ha arrepentido de su propia idea desde el mismo instante en que vio el estado de las prendas que llevaban los orcos. Además, con la túnica debajo le daba un aspecto especialmente ridículo.

- Palisander, siento que no haya tabardos de tu talla, pero no hay nadie tan grande como tú en este lugar - le da una palmadita en el brazo, sonriente - Pero todavía eres muy útil, mi buen amigo. Seguro que sabes donde se esconde el teniente Galleret para que nos de la maldita contraseña

Habla en voz baja cerca del ogro, como si le interesase que sólo él escuchase sus palabras.

- Se puede intentar pero deberíamos pensar en un plan B por si falla - el tabardo empezaba a enturbiar su olfato - mi opinión es que abordemos al teniente con el ogro y le sonsaquemos la contraseña y después maniatarlo, no creo que vayan a decir la contraseña por las buenas.

Si el ver al mago con el tabardo era curioso, el ver al enano era casi ridículo. El tabardo le quedaba largo y estrecho, y tenía que estar casi constantemente subiéndoselo... y eso que le habían escogido el más pequeño que encontraron.

Hagamos lo que hagamos, deberíamos hacerlo ya. De todos modos, interrogar a los guardias podría dar buen resultado... si pilláramos a alguno que no estuviera tras una puerta.

Los barracones están al sureste , al sur de ésta posición hay tres puertas, todas ellas desconocemos lo que hay. Si podemos entrar en alguna de éstas y estuviéran vacías, desde allí se puede ver la puerta de la torre podíamos vigilarla para ver quiénes acceden.

- ¿Teniente? - pregunta el ogro - Ese ser pequeño jefecillo que reir gracias de gran jefe Baron. Yo pensar que el vivir en casa grande con otros soldados. Yo tener ganas de encontrar a el y "hablar" un poco - responde Palisander un poco mas tranquilo despues de las palabras de Gustarion. - Deberiamos de buscarlo -

Ya que nuestro gran amigo quiere hablar con él, que os parece que se lo traigamos aquí. Le podemos decir que hemos tenido problemas con Palisander, no creo que mantener a un tipo de su tamaño maniatado sea fácil, y una vez que esté aquí, dejamos que nos diga la contraseña a cambio de dejarle unicamente inconsciente por las caricias de Palisander.- Se acerca al ogro y mirandole de frente, a una cierta distancia ( aun no se fia mucho), le dice - ¿Qué te parece amigo?