Partida Rol por web

Tormenta, frustrado ante el hecho de no encontrar nada, baja y sigue su busqueda por la parte baja de la casa, poniendo especial interés en ver si hay trampillas o puertas que bajen a un sotano o algo parecido.

Mientras sus amigos están fuera, Passer suspira para sí y quita la mordaza al yuan-ti. Busca algo de paño y le tapa el dedo cortado con él mientras comienza a hablar. Su tono es desanimado. Parece incluso que se sintiera derrotado.

-Está claro, pues, que no tenemos ni una oportunidad, ¿no es cierto? Vosotros, los yuan-ti... Sois simplemente demasiado poderosos, demasiado astutos. La deidad de la posada, la camarera, todo fue parte de vuestro plan. Y ahora, nuestro último testigo está muerto. Tú no vas a hablar: tu lealtad es férrea, tu voluntad es fuerte. Ya ni siquiera hay tiempo -suspira de nuevo y se pasa una mano por la frente. -Estamos derrotados, ¿no es cierto? 

Hace una pausa en la que da vueltas nerviosas por la habitación. Para dejar al yuan-ti decir algo. Si no le interrumpe con nada, probablemente siga hablando en la misma línea e intente persuadirle apelando a su orgullo de que ya no queda nada por hacer, de que los aventureros están derrotados y decirles algo será sólo sumirles más en la desesperanza.

  Naram escucha las palabras de passer extrañado, de por si siempre le han parecido extrañas las palabras de los seres de carne. Mientras su compañero habla naram saca su daga y empieza a limpiarla pensativo, como si ya pensara hacer algo si todo lo demas no da resultado.

Si, estáis perdidos patéticos monos sin pelo. - Sisea el Yuan-ti

Mi señor volverá pronto de su retiro y cuando lo haga, completamente recuperado, nadie de esta lastimosa ciudad podrá detenerlo.

Tormenta vuelve de examinar toda la casa sin ningún éxito.

Passer menea la cabeza como si se sintiese derrotado.

-Tu señor... ¿por qué nosotros, por qué este diminuto pueblo? Su poder es inmenso -suspira- no seremos ni una mota de polvo bajo sus pies... No lo somos siquiera bajo los tuyos. -bacila un segundo.- No, no es que "seremos". Ya somos demasiado débiles para poder soñar siquiera con enfrentarnos a tu señor -se muerde el labio inferior, desesperado a la vista.

Quiere seguir viendo si es capaz de soltarle un poco la lengua a base de hacer que se sienta seguro. Si lo consigue, quizás intente ver si es capaz de sacar de dónde viene para poder descubrir su guarida.

El Yuan-ti parece percibir que tus palabras no son autenticas del todo, no se da cuenta de las inenciones del brujo pero si que a lo mejor le está tomando el pelo.

Por el momento, parece continuar mordiendo el anzuelo, pero con cierta desconfianza.

Puede que no te lo creas humano, pero estáis condenados, es irrelevante vuestro pueblo ... no es lo que le interesa, si no las ancestrales piedras que yacen bajo el.

Años ha tardado en entender por que ha cambiado el cielo, pero no desaprovechará esta oportunidad.

Cuando tu garganta se seque, de nada podrás reír ante el señor de la muerte.

Sus palabras siseantes están cargadas de odio, acompañadas de algún que otro rastro de saliva que salta sin control.

Passer juguetea entre sus dedos con una pluma blanquecina y larga (quizás de cigüeña) que ha aparecido en su mano de alguna manera. Quiere seguir con la misma táctica, e intenta concretar a qué se puede referir con la idea de que "ha cambiado el cielo"* en su cabeza. Su tono es suave cuando continúa, quizás algo triste.

-Estamos muertos, ¿no es cierto? Estamos condenados... -suspira. -Al menos, déjanos saber quién acabará con nosotros. Tu señor. ¿Es él el dios bajo la taberna? ¿Aquella poderosa criatura...? -utiliza un término de estar movido por el terror, por el miedo y el respeto.-Porque si es él... Tienes razón, ni los dioses podrán protegernos -traga saliba, cruzado de brazos e intentando aparentar estar en medio de una profunda división, casi aterrorizado.

Te ríes ... y tu muerte será larga y dolorosa por ello. - Parece que el yuan-ti ya no cree las palabras de passer por su pésima interpretación.

  Naram parece mas como si viera una interpretacion teatral, una obra, como estos seres de carne interactuan, hasta que escucha parte de las palabras del yuan-ti.

  - "El cielo ha cambiado", que sera, ¿una alineacion planetaria? ¿una nueva estrella?

  Despues de guardar la daga en su respectiva funda.

  - Dime, ¿a que te refieres con que el cielo ha cambiado?

Desconocéis a que puede referirse que el cielo ha cambiado, teniendo en cuenta que nunca lo ha hecho.

Cuando mi señor durmió las estrellas estaban en otra posición, a eso me refiero. - Escupe el Yuan-ti con rabia.

Lo que os dice os parece mas extraño aún, pues las estrellas no se mueven.

-Pero las estrellas no han cambiado en los últimos, ¿qué? ¿Cientos de años? -traga saliba.- Dinos, yuan-ti... ¿Cuán antiguo es tu maestro? ¿Y por qué le liberásteis precisamente ahora?

Tormenta, tras terminar de examinar la casa, sin exito.

Decide esperar a ver lo que consigue su compañero, ya que parece ir por buen camino.

Se queda de pié, mirando al Yuan-ti y de vez en cuando mirando a través de la persiana por si viene alguien.

Las palabras de Passer suenan ahora mas convincentes, con mas miedo ... como si la ultima revelación del hombre serpiente hubiera sido devastadora.

Este sonríe con superioridad.

Mi maestro ya era anciano cuando este mundo era joven. Su poder es incalculable. Pero no lo despertamos nosotros, lo hicieron humanos por afortunada casualidad.

Casualidad que aprovecharemos cuando mi señor haya recuperado sus fuerzas en la alcoba de los druidas.

Justo después de decir esas palabras el hombre serpiente se da cuenta de su error y palidece.

Passer alza las cejas y sonríe levísimamente. Por desgracia, su miedo tenía mucho de serio. Una criatura Antigua como el mundo... Su Señora también era de esas, y pueden ser terribles, tan terribles... Tragó saliba, imponiéndose a su miedo. Ahora tenían una brizna de información. Estaba por ver cuánto más podían extraerle. Intentó recordar si había algo llamado alcoba de los druidas por la zona, sin poder evitar, lógicamente, dedicar una pequeña mirada a Tormenta.

-Bien, bien, ya veo -comentó con suavidad.- Y dime, ¿qué tal tolera tu Señor que les digas a unos aventureros no sólo cómo despertó, sino también dónde se encuentra? -si no podía explotar el miedo a ellos, quizás podría explotar el miedo a su señor.- ¿Qué hará contigo un ser tan poderoso?

Dio unos pasos a su alrededor hasta estar a sus espaldas. Apoyó las manos en sus hombros y acercó el rostro a su oído para hablarle. La expresión de Passer era severa.

-Según yo lo veo, nos encontramos ante una curiosa dicotomía. Verás, vamos a acabar llegando a su guarida y luchar con él, que venzamos o no está por ver. Probablemente moriremos, si es tan poderoso. Pero vamos a intentarlo... Y tú tienes una elección. Te vamos a dejar atado aquí. Cuando lleguemos, podríamos decirle también quién y cómo nos trajo, y dónde encontrarle. Puede que muramos, pero al menos nos quedaremos el placer de que, cuando termine con nosotros, te encontrará y te matará de formas tan terribles que será casi una venganza. Por traidor -siseó en su oído.- Otra posibilidad... -añadió, ya despegándose, volviendo a andar con tranquilidad para colocarse frente a él.- Es que nos digas algo más, nos sintamos satisfechos y decidamos dejarte ir. Podrás huir, esconderte hasta que tu señor nos haya matado, pero nunca sabrá quién le traicionó. La decisión, por supuesto, es tuya.

Con delicadeza le hizo alzar la cabeza, mirarle a los ojos fijamente.

-¿Y bien?

El Yuan-ti mira con desprecio a Passer.

¿Que quieres saber?

Yo solo soy un informador ... ayude a los que escaparon de la bodega a salir de la ciudad sin llamar la atención. Ni tan solo se donde se encuentra el lugar de los druidas.

Solo que mataron a los que habitaban en ella para montar una base.

Es palpable que se le hace incomodo hablar de estas cosas.

Hace tiempo que mi señor fue despertado ... 2 años quizá ... desde entonces ha estado planeando, fraguando su recuperación y su ataque.

Poco a poco fue resucitando siervos y creando conversos.

Su red se extiende mas allá delo que parece. Esta ciudad está infectada con su presencia. Pero trabajamos de forma independiente y en células, no conozco a nadie mas, ni ellos me conocen a mi.

Interesante, han matado un grupo de druidas para hacerse con un lugar donde ocultarse.

Sin duda este es el sitio donde debemos acudir para eliminarlos.

¿Donde podría encontrar a mis congeneres de la zona?

Eres druida y por lo tanto conoces esa ubicación.

No hay muchos lugares similares cerca.