Jadewo reprime las ansias que le corroen por dentro y se echa a un lado para no obstaculizar el abrir de la puerta en el momento de ser abierta, cosa que ante la situación apurada, parece que no termine de llegar.
A un lado del portal, le llega el contacto delicado del hombre de pelo negro entregándole una sencilla honda.
-Aguardad, una de vuestras compañeras está a punto de abrir la puerta, la están atacando.- Dice manteniendo un tono de voz bajo para no alertar a quien pueda haber más allá junto a la muchacha. Atento a la puerta para poder actuar en cuando la puerta sea abierta.
Tirada oculta
Motivo: Rayo de debilitamiento
Tirada: 1d20
Resultado: 15(+6)=21
Tirada oculta
Motivo: Daño a fuerza
Tirada: 1d6
Resultado: 2(+2)=4
En cuando la puerta se abra (acción preparada), Jadewo lanzará un Rayo de Debilitamiento contra el agresor. Si hay hay algún penalizador por situación de combate ya lo aplicarás.
Mientras Jadewo miraba por la cerradura, Tybalt pudo escuchar el pequeño escándalo que se estaba formando al otro lado de la puerta. Por otra parte, Onfale parecía volver de las alcantarillas con algún que otro obsequio. Cucaracha se lo entregó y el tiflin pudo ver que se trataba de una palanca. -Me esperaba algo más interesante, pero nos vendrá bien.- Comentó casi para si mismo.
Volviendo a centrar su atención en lo que acontecía tras la puerta, el paladín les comunicaba que se trataba de Becky. -¡Eh, estamos aquí!- Avisó a la maga rubia para que se diese prisa en abrir la puerta y así ayudarlas a librarse del centinela que las perseguía.
¡Ese fue un disparo de advertencia! ¡No lo volveré a repetir!
Becky se quedó quieta ante la amenaza, de espaldas al guadia. Había sido un buen intento, pero no había conseguido llegar hasta Onfale y Tybalt, y el odioso novio de la odiosa Evea... Ese mequetrefe alto, de melena rubia, con músculos de acero y culito respingón.
¡Está bien! ¡Me rindo, pero no dispare!
Venga, todo sea por el culito respingón...
Becky probó una llave en la cerradura, pero no giraba. El soldado, al ver que su blanco se movía, presionó el gatillo y clavó un virote en el gemelo de la peligrosa criminal...
¡AAAAAAAAAAAH! ¡HIJO DE PUTAAAAAA!
Becky se mordió el labio para contener el dolor, y probó la segunda llave. Casi. Por un segundo parecía que giraba. Pero al final no. Quedaban ocho llaves por probar, y solo le quedaba una pierna.
Motivo: ¿Es ésta la llave?
Tirada: 1d100
Dificultad: 91+
Resultado: 61 (Fracaso)
Motivo: Otro ballestazo a Becky
Tirada: 1d20
Dificultad: 13+
Resultado: 14(+5)=19 (Exito)
Motivo: Daño a Becky
Tirada: 1d8
Resultado: 6
Motivo: ¿Y ésta? ¿Es ésta la llave?
Tirada: 1d100
Dificultad: 91+
Resultado: 72(+10)=82 (Fracaso)
La puerta era un verdadero obstáculo, podría intentar abrirla como hiciera antes con el ácido, pero corría el peligro de dañar el cerrojo y que la llave fuera inservible... y mientras tanto, la muchacha estaba allí a mercer del agresor de la ballesta...
¿Y las otras chicas?
Haciendo un ejercicio de memoria, el joven se concentró en la distribución al otro lado de la puerta por la que llegaron, reforzada por lo poco que veía en el momento que la rubia muchacha cambiaba de llave.
En unos de estos momentos, el joven pronunció quedamente.
- ¡Creo Imageno!
De repente, al otro lado de la puerta en un recodo del pasillo se alzó el sonido de unas pisadas apresuradas al llegar, acompañadas de voces femeninas.
Sonido Fantasma, para distraer al guardia, CD 12. Un uso menos para hoy de Armonía Arcana.
Si sus oídos no le engañaban...¡Era Becky! Se hubiera mordido las uñas y mesado los cabellos pero se contuvo y quedó a la espera de ver a las dos rubias solucionar el problema de la puerta. Jadewo , con sus hechizos, parecía un mago tan poderoso como el mismo Onfale. Entre él y Becky seguro que lo solucionaban.
- ¡Eh, el de afuera!- Trató de poner la voz más masculina que un eunuco pudiera poner.- Cuando salgamos de aquí vamos a despellejarte vivo. Más te vale dejar a la señorita en paz.
Motivo: Intimidar
Tirada: 1d20
Resultado: 10(+2)=12
¡Detente, puta!
Becky probó la tercera llave, y ya se sabe... a la tercera va la vencida.
Click-click...
La cerradura giraba, pero el guardia no se iba a quedar de brazos cruzados. Las futiles amenazas y distracciones no servirían de nada contra el valeroso soldado, que dejando caer su ballesta, cargó contra la puerta, para cerrarla con su cuerpo. En ese momento, Becky se giró y le dió un puntapié en la entrepierna, con lo que aquel pobre hombre quedó tumbado en el suelo, agarrándose sus partes doloridas.
¿A quién llamabas puta? ¿Eh?
Ahora sí, la puerta se abrió del todo, mostrando a Becky y al soldado. También habían conseguido una ballesta ligera, ocho virotes y una espada larga. El soldado eunuco ahora estaba bien manso. Se le podría encerrar sin problemas en la celda de al lado, la que no tiene agujero a las alcantarillas.
Motivo: ¿Es esta la llave?
Tirada: 1d100
Dificultad: 91+
Resultado: 79(+20)=99 (Exito)
Motivo: Voluntad
Tirada: 1d20
Dificultad: 12+
Resultado: 14(+1)=15 (Exito)
Motivo: Valor
Tirada: 1d20
Dificultad: 12+
Resultado: 13(+1)=14 (Exito)
Motivo: Arroyar en carga
Tirada: 1d20
Resultado: 7(+4)=11
Motivo: Contra-arroyar de Becky
Tirada: 1d20
Dificultad: 11+
Resultado: 14(+3)=17 (Exito)
Motivo: Becky trata de derribarlo
Tirada: 1d20
Resultado: 20
Motivo: Contraderribo
Tirada: 1d20
Dificultad: 20+
Resultado: 6(+2)=8 (Fracaso)
Al ver que Becky no acertaba a abrir la puerta, Tybalt se preparaba para usar la palanca para intentar forzar la puerta. Pero ni siquiera había llegado a encajar la herramienta cuando un chasquido les indicaba que por fin se había desbloqueado la cerradura. Un forcejeo, un par de comentarios cruzados y un quejido sordo fue lo que pudo oír antes de que la puerta se abriese de par en par para ver a la maga rubia junto a un guardia tirado en el suelo. -Buen trabajo.- Le dijo a la mujer mientras se adelantaba para desarmarlo. Se apresuró para coger primero la espada. La sopesó brevemente. La hoja era algo más grande y pesada a lo que estaba acostumbrado pero sin duda era mejor que una palanca. Después cogió la ballesta con sus virotes y se la pasó a Onfale. -No es por menospreciar tus regalos, pero esto seguro que nos va un poco mejor.- Le dijo con media sonrisa.
Después de armarse, miró de nuevo al guardia. -Deberíamos ocuparnos del guardia y de paso ver si lleva algo más que pueda sernos de utilidad.- Dijo a la vez que se preparaba para arrastrar al humano haciendo una pausa tan solo para dedicarle una mirada a Jadewo esperando algo de ayuda por su parte.
Tirada oculta
Motivo: Buscar
Tirada: 1d20
Resultado: 5(+3)=8
Finalmente la muchacha mostró de lo que era capaz, deshaciéndose del guardia sin matarlo y abriendo la puerta. Antes de que tuviera tiempo de hacer nada más el ser de ascendencia demoníaca se adelanto para saquear al debilitado guardia. Mientras lo hacía, él preguntó a la muchacha.
-¿Está Evea con vosotras? ¿Cómo es que salisteis de la celda?
Una vez saqueado el guardia, entonces sí que reparó el semi-infernal en él. Tras una mirada elocuente. Tomó al guardia por la pechera con una mano y lo arrastró sin más, y sin especial esfuerzo, hacia la celda más cercana. Mientras le preguntaba al hombre.
-¿Dónde están nuestras cosas?
- Sí, genial Becky.- Nunca pensó que pudiera decir esas palabras.- Os presento. Este es Cucaracha, esta es Becky. - Se divirtió pensando en quitarse de encima al pelma de anciano y se lo lanzó a Becky como un hueso a un perro. Enarcó una ceja y entrecerró los ojos ante el comentario jocoso de Tybalt. Más le valía no meter mucho el dedo en la llaga. Finalmente sonrió pues Tybalt era su debilidad.
- ¿Has visto más soldados, Becky?- Interrogó a su compañera forzada de infortunios. Una vez estuvo el guardia en la celda, Jadewo le hizo una pregunta crucial pues, después del robo de la bolsa, sus cosas eran de gran valor para sobrevivir en aquel maldito plano.- Pregúntale también por el niño.- Lo que Onfale quería eran pistas sobre el paradero de su bolsa de contención, pero dio un rodeo para interesar al rubiales.- Quizá aún podamos salvarle la vida.-Se adelantó un paso y preguntó el mismo.- ¿Dónde habéis metido al niño que nos robó?
Ugh... Yo montaba guardia en la puerta. No sé qué fue del niño
que vino con vosotros una vez entrasteis dentro del edificio.
Cucaracha reunió saliva. Estaba muy desentrenado en estos temas, y no tenía muy buena memoria de las técnicas que empleó de joven, cuales funcionaban y cuales no.
Ñam, ñam, ñam, ñam... Eeeehm... Seguro que si el guardia te confundió con una puta es porque tienes un aspecto que invita al deseo. Uh... ¿bailas? No digo ahora, que no hay música... digo en general. ¿Alguna vez vas de guateque?
Cuando Tybalt y Flame fueron a la intersección para recoger la ballesta, sus frentes chocaron al agacharse. Y claro, Tybalt tiene cuernos, así que Flame fue la que se llevó lo peor del golpe.
Al fondo del pasillo, una puerta de hierro abierta mostraba al resto del equipo: Onfale y Becky. Jadewo, ese estirado que iba con Evea, ayudó a levantarse al guardia (que tenía las manos en sus genitales y emitía grititos agudos, pero por lo demás no ofrecía más resistencia) y cruzar el umbral alejándose de Flame. También había un viejo humano al que Flame no había conocido todavía...
Becky, con un virote clavado en la pierna, ignoró con cara de asco al anciano y trató de llamar la atención de Jadewo.
Oh... fue tan horrible todo... Muchísimas gracias por rescatarme Jadewo. Estoy en eterna gratitud contigo. Si quieres algo de mí... lo que sea... pídelo, no seas tímido. Lo de la celda...-puso gesto compungido, sobreactuadamente compungido-Nosotras escapamos cuando los guardias abrieron la celda para intentar violarme a mí. ¿Soy una mala mujer por ello? Es que a veces siento que mi belleza perturba la mente de los hombres. Es como una maldición.
Flame se quedó mirando a Becky mientras se llevaba las manos a la frente. Se había llevado un buen porrazo, pero aún así tomó la ballesta que había caído al suelo. No comprendía nada de lo que estaba pasando, y mucho menos que ayudaran al guardia a levantarse. Pero una vez más, la chamán no reaccionó como lo hubiera hecho en otra ocasión. ¿De qué hablas? Dijo a Becky. No inventes. Le dijo tratando de evitar que creyeran la versión de la alocada rubia. ¿Y qué es lo que ha hecho Jadewo para ayudarte? Porque yo creo que si estamos aquí es gracias a nuestras compañeras. No quería admitir que parte era gracias a Evea, pero desde luego que Jadewo no había tenido nada que ver, sobre todo porque no había estado ahí, a menos que a Flame se le hubiese escapado algún tipo de detalle.
De todas maneras deberíamos dejarnos de tonterías, dijo contemplando al anciano que estaba con el grupo, las chicas están en peligro. ¡Vamos! Le dijo a todos para que la siguieran. Dame las llaves, Becky, las necesito para abrir el almacén y poder armarnos de nuevo. Ya está bien que las lleves siempre contigo.
Jadewo quedó un instante aturdido ante la reacción de la muchacha a la que llamaban Becky. En proporción, la mayor parte de su vida la había pasado con Espadarcana, y la mayor parte de ese tiempo había sido ejercitando el cuerpo, las técnicas de combate, el estudio en distintas ciencias y el del Arte, poco tiempo quedaba para otras cosas... como el contacto con otras gentes, y en esa materia aún se veía abrumado en ocasiones.
Si bien era cierto que con Evea, había aprendido a pasos agigantados el discernir los sarcasmos y otro humor singular de la chica.
Tirada oculta
Motivo: Averiguar Intenciones de Rigor
Tirada: 1d20
Resultado: 20(+9)=29
Tras un instante, y gracias en parte a la rauda reacción de la muchacha guerrera de la extraña gema en la frente, Jadewo reaccionó ante las palabras de Becky a medida que salía de la celda en la que había depositado al guardia. Tomando un talante relajado, contestó.
-Eres una mujer capaz, ingeniosa y hermosa, no necesitas adornar la realidad para que repare en ti.- Dijo con una media sonrisa.-Además, como bien apunta tu compañera, soy yo, junto a los demás, quienes deberíamos agradecerte que vinieras a por nosotros, especialmente dado el peligro que corrías. Gracias.
Mirando la herida sangrante del muslo, el hombre añadió.
-Permíteme que atienda esta herida.
-¡Flame!-Tampoco es que se sorprendiera mucho el perfumista de ver a la mujerona. Una vez vista Becky sólo había que sumar dos más dos para saber que las otras estarían cerca. Fue más una exclamación de rabia porque la lagartona cogía la ballesta que Tybalt le había prometido.- ¿En peligro?- La mujer era parca en palabras pero podría haber especificado un poco más la urgencia de su situación. Una violación, como decía Becky, no era para tanto, por lo que podrían buscar sus cosas en lo que los guardias estaban entretenidos con las mujeres.- Busquemos nuestras cosas. Con ellas podremos defendernos mejor. Desde nuestra celda hay un pasadizo que lleva a las alcantarillas. Sigo pensando que es la mejor salida.
Oiiis... ¡Qué cosas tienes, Jad!-dijo Becky, dándole un golpecito en la pechera metálica de la armadura-De-na-da. Jijijijiji...
Era evidente que Becky buscaba un acercamiento, pues parecía que había otros muchos artes además de "el Arte". Las mujeres que hacían esto, siempre lo hacían con un fin. Reproductivo, edonista, por rivalidad con otra mujer, por despecho con otro hombre, o porque simplemente buscaba acercarse a alguien fuerte que la protegiese. Jadewo diría que es esto último, pues Onfale parece un macho muy macho capaz de satisfacerla en los aspectos sexuales, y no ha hablado mal de Evea pudiendo hacerlo para quedar bien. Por descarte, Becky solo buscaba protección.
La doncella en peligro remangó su vestido hasta el muslo, a pesar de que el virote se le había clavado en los gemelos, pero a Jadewo se le iba la vista como si la herida estuviese más arriba. Parecía que esos dos tenían para rato... Cucaracha se ocupó de tomar el racimo de llaves e ir probando para abrir la celda y encerrar al rehén, ya que la llave del corazón de Becky no la tenía. Había aprendido de sus errores. Pareció demasiado desesperado. Con la nueva chica, Flame, probaría a estar distante, hasta que irremediablemente ella se interesase en él.
La herida de Becky son 7 daños. ¿Jadewo la cura?
-Toma aire...
Respetuosamente, el caballero sacó el cuadrillo clavado en la pierna de la muchacha y lo sacó, tapando rápidamente la herida a la vez que pronunciaba.
-Muto corporem.- Haciendo que de la mano que tapaba la herida emanara por unos instantes un haz de luz blanco azulado, aliviando el dolor de la mujer al instante.
El joven se incorporó y miró en direcció al camino por el que habían venido las muchachas. En su mano aún estaba el pivote de la ballesta a modo de punzón o puñal.
-Vayamos en busca de Evea y el resto de vuestras compañeras.
Motivo: Curar Heridas Leves a Becky
Tirada: 1d8
Resultado: 6(+5)=11
Guardemos un poco de misterio para los compañeros. Jadewo usa un Curar heridas leves, me borro un espacio de conjuro de nivel 1.