Partida Rol por web

La competición iba a ser mucho más complicada de lo que había pensado en un primer momento, pero parecía que no iba a haber ninguna otra manera de cumplir su misión. Creo que esto va a ser un suicidio… Comento preocupada, pero el grupo había salido de situaciones peores.

¿Se sobe que otras congregaciones participan este año? ¿Cuál es el tamaño medio de las congregaciones? Alice no paraba de realizar preguntas con la esperanza de que en alguna de las preguntas encontrara una pista que les diera ventaja en la prueba. ¿Cómo era el grupo que gano el año pasado?

No se sabe aún qué congregaciones participarán. El tamaño medio... no llevamos un registro con el que sacar una estadística, pero podemos ordenar a nuestros sacerdotes que hagan una adivinación para conseguir el dato si crees que será algo determinante. La mayoría de grupos están formados por seis o siete personas al comienzo de la competición, luego quedan menos...

El año pasado creo recordar que hubo tres vencedores. La Secta de Thoon, formada por azotamentes psiónicos; la Orden del Tuétano Verde, del que solo quedaron tres humanos, dos de ellos sacerdotes; y los nigromantes del Saber de Ébano, que se presentaron con varios mercenarios imbéciles a los que fueron alzando en las distintas pruebas a medida que su equipo sufría bajas.

Y si te gustaría una manera en la que solo murieses una vez, Aire, hay otra forma de entrar en la Puerta de Orcus: escondiéndose de los dragones rojos que patrullan los alrededores, y enfrentándose a los dos que custodian la entrada principal.

Ya sabían que la misión era difícil. ¿Acaso alguno de los integrantes del harén pensaba que romper la Rosa de Laón iba a ser una tarea fácil? ¿Acaso algo de lo que habían vivido desde que cayeran a ese plano o se liberaran del Cárceri había sido fácil? A pesar de estar apesadumbrado por la snuevas pérdidas de integrantes de su grupo, Onfale trató de pensar con claridad y no dejarse abatir por el desánimo.

- ¡Niña!- Se dirigió a Aire con una sonrisa.  Estaba contento por verla, no sólo por que resultaba ser un arma poderosa y eso les vendría bien para las diferentes pruebas.- Se ve que el descanso te ha sentado bien, estás radiante.- Al menos comparado con el negruzco color con el que la había visto por última vez, fría y muerta. El perfumista no estaba precisamente en su mejor momento. Se palpó bajo los ojos donde una profundas ojeras y abultadas bolsas deformaban su bello óvalo facial.- ¿Cómo está Aristóteles?- Intentó darle coba. Alice seguía preguntando al semidrow para sacarle información y Onfale se acercó a los dos para expones sus dudas también.

- No entiendo una cosa. Si las tres pruebas se realizan a la vez y sólo podemos pasar a la siguiente cuando pasemos la de la Sangre, ¿por qué no participar sólo en dicha carrera todos juntos? ¿Es que es obligatorio al menos participar en una de las otras?- El mago  se acarició el cuello mientras reflexionaba.- Conociendo a mi grupo como ya lo conozco, está claro que donde más oportunidades tenemos en en la Prueba del Corazón. Flame y Leitah solas podrían aguantar mucho tiempo expuestas a la energía negativa de este plano.- De paso se quitaban a dos de los elementos más lentos del grupo si es que tenían que participar en una carrera.- Yo preferiría no separarnos, pero si alguno tuviera que hacerlo esa sería mi propuesta. Flame y Leiath, quizá con alguno otro, a la Prueba del Corazón. Eso por un lado. Por el otro está la Ceremonia de Apertura. Como dice Alice cuanta más información obtengamos de nuestros enemigos mejor.  Está claro que esa prueba está hecha para acabar con los rivales más fuertes, una vez el no-muerto elegido esté bastante debilitado. Quizá pudiéramos utilizar algunas artimañas, quizá trucos con los que Kiaransalee se sintiera complacida, para debilitar a algunos de ellos. ¿Tenéis venenos aquí?- Preguntó como si estuviera pidiendo agua. Estaba claro que con tanta araña y viendo lo que le había pasado a Aire no iban faltos de venenos.- Sin Evea y sin Tybalt nuestro grupo cojea en el cuerpo a cuerpo.- Dijo con cara de preocupación.-¿No podría acompañarnos Tybalt como otra muestra de la generosidad de Kiaransalee y de su compromiso con esta misión tan importante?- A pesar del resentimiento que sentía ahora hacia el semi-infernal, no podía dejar de pensar que, si les acompañaba, podría convencerlo de rectificar en su decisión.

Tybalt aguardaba en su puesto todavía afectado por el repentino giro del destino. Escuchaba todo lo que Ralph les contaba sobre cómo llegar hasta la Rosa del Laón pero sin prestar especial atención pues su mente divagaba sobre el incierto futuro que le esperaba. Sus años de servidumbre con el Horror Diletante no llegaron a ser realmente malos hasta que no saboreó la libertad. Después de todo, su señor se limitaba a encargarle sus recados y tampoco se trataba de tareas inhumanas. Nunca recibió castigo físico pues no necesitaba más advertencia que ser testigo de lo que ocurría con sus víctimas para ser consciente de lo que le ocurriría si alguna vez se atrevía a desobedecer. Y al ser algo con lo que convivió muchos años, aprendió a lidiar con tales actos sin que ello le destrozase la mente. 

Aquellas reflexiones se intercalaban con los datos que sus excompañeros obtenían y no fue hasta que Onfale pronunció su nombre que Tybalt centró toda su atención a lo que se debatía en aquella sala. No le importó el enfoque puramente funcional del perfumista a la hora de hacer su proposición pero, sin abandonar su pose de escolta, sintió el calor de la esperanza en su interior. Había consagrado su vida a una nueva señora y aun así cabía la posibilidad de continuar sirviendo a los propósitos de Hala, de combatir por Leiath. La expectación aumentaba con cada segundo que tardaba en llegar la respuesta a la pregunta del eunuco. Todavía podría luchar, todavía podría ser dueño su muerte...

Aristóteles está bien contestó haciendo que el oso de peluche saludara con la mano a Onfale. A veces el hombre mostraba gestos de ser simpático, y Aire era feliz.

Es decir continuó a la frase de Ralph o nos enfrentamos a pruebas en las que las opciones de morir son muy altas, o nos enfrentamos a unos dragones que nos comerán rápidamente, ¿no? Se acercó a Aristóteles al oído, que estaba pidiendo susurrarla algo. Escuchó con detenmiento lo que decía y se lo transmitió a los demás Me dice que qué sabemos de esos dragones

Leaith, que no le quitaba ojo al semiinfernal pues éste le había decepcionado profundamente, notó en su desfugurado rostro algo que no se acercaba en nada a lo que se debía esperar de alguien había elegido su destino. La bruja dudó.

- Estó... cuando saldríamos? Hoy estamos muy cansados. Si tuvisemos un par de días de descanso podríamos preparar unos pergaminos...

La seguidora de Hala tenía la intención de orar a su diosa y pedirla un hechizo para discernir las mentiras. Entonces hablaría con Tybalt y Evea para aclarar sus propias dudas sobre su traición.

- Respecto a la competición; un Aquelarre se mantiene unido. Cada uno de nosotros es una pieza clave y nos compenetramso dentro de nuestras habilidades. No deberíamos separarnos.

La maga estaba de acuerdo con descansar y preparar pergaminos, a ella también le hacía falta algo de descanso y preparar un par de pergaminos. Si esperamos un par de días necesitaremos un nuevo medio de transporte. El barco-cisne de la maga rubia solo duraba un día y estaría a punto de desaparecer. Si no es mucho pedir… ¿Nos podríais dar descanso y un medio de transporte hasta la ciudad? Luego titubeo un poco al hacer la siguiente pregunta, estaban abusando demasiado de la hospitalidad de sus anfitriones, pero también era verdad que les iban a mandar a una misión suicidad. Si podemos quedarnos y tener transporte ¿Podrían también prestarnos algunos componentes para escribir unos pergaminos?

Otra pregunta, ¿entre prueba y prueba hay descanso?

Los dragones rojos son inmunes al fuego, y vulnerables al frío, y las armas mágicas pueden hundirse en sus duras escamas sin problemas. Además de eso, vuelan, escupen llamas, lanzan sortilegios...

El torneo se celebra a lo largo de tres días, ocupando las tres pruebas de Mente, Sangre y Corazón el día medio. Las congregaciones deben distribuír sus efectivos entre esas pruebas, con un mínimo de un participante en cada prueba.

Tenemos el método de transporte: viajaréis en el interior de varios capullos de hebras de gólem de telaraña, que os aislará de la energía negativa. Os proporcionaremos agua, comida y una cuña para vuestras necesidades. En las condiciones en las que váis a viajar, no es conveniente ir encerrados con un veneno, pero si esa es vuestra estrategia podréis comprar las dosis y los venenos que creáis oportunos en la ciudad de Lash Embrar. Allí también podréis conseguir los materiales necesarios para pergaminos y demás. No insultéis la generosidad de Kiaransalee con regateos y usuras. Tybalt se quedará aquí, en Narantyr...

NO TAN DEPRISA, RALPH...

La voz de Kiaransalee retumbó desde la oscuridad que se perdía en lo alto, pero continuó sin mostrarse.

ENTIENDO QUE LA APORTACIÓN A ESTA SOCIEDAD OS PUEDA PARECER DESIGUAL.
YO TAMBIÉN DESEO QUE TENGÁIS ÉXITO A LA HORA DE ROMPER LA ROSA DE LAÓN
Y DEBILITAR A ORCUS, EL USURPADOR DE MI REINO. POR ESO OS CONCEDO UNA
ÚLTIMA AYUDA: TYBALT IRÁ CON VOSOTROS, PARA DEFENDER MIS INTERESES.
PODÉIS VENDER SUS POSESIONES, QUE SON LAS MÍAS AHORA QUE ME PERTENECE,
SI LO ESTIMÁIS CONVENIENTE PARA HACER FRENTE A LAS COMPRAS DE ÚLTIMA
HORA EN LASH EMBRAR: VENENOS, COMPONENTES... LO QUE NECESITÉIS PODRÉIS
COSTEARLO CON LO QUE MI ESCLAVO TYBALT DISPONGA PARA HACER FRENTE AL PAGO.

Congratularos por la grandeza de Kiaransalee, y por tenerla como aliada-añadió Ralph-Disponemos de unos aposentos para vosotros, y podréis pasar la noche seguros. Partiréis dentro de diez horas.

Tybalt tragó saliva al escuchar lo que Ralph revelaba acerca de su futuro inmediato, pero la voz de Kiaransalee retumbó en la sala sorprendiendo a todos por igual. La diosa habló para rebelar una última noticia que afectaría directamente al tiflin. Finalmente tendría la posibilidad de seguir con el grupo en su misión. -No os decepcionaré, mi señora.- Respondió Tybalt en una reacción casi refleja de su pasado reciente. Aunque no podía evitar sentir una sincera gratitud por la oportunidad que se le brindaba. 

A pesar de la emoción, el espadachín no dejó que aquello perturbase su expresión; que se mantenía seria. Tenía que aceptar lo que sería su nueva vida y el papel que desempeñaría. Su nueva ama había dejado claro que ya no era más que un objeto a su servicio. No tenía más valor que los obsequios que la diosa les había dado. Pero eso no importaba mientras todavía pudiera ayudar a Leiath en su cruzada.

Ah bendita Hala! Eso era! Aquellas alimañas habían tomado rehenes!

Después de las rotundas palabras del desagradable insecto-dios, la bruja echó una mirada a Onfale llamandole la atención sobre el semiinfernal. Habría que idear una forma de llevarselo con ellos cuando la misión terminase.

Ejem, ejem- se aclaró la garganta la bruja- pues no perdamos más el tiempo de nuestra generosa anfitriona y vayamos a reposar para salir lo antes posible.

Estaría Evea en la misma situación que Tylbat? Bueno si el rubiales no había dicho nada, y era él quien mejor la conocía, sería porque lo había visto normal. Mejor concentrarse en las curaciones que tenía por delante.

El descabellado plan comenzaba a tomar forma en la mente del perfumista acostumbrado a hacer encaje de bolillos. Tres días, tres eventos a cada cual más peligroso. Su número hacía que tuvieran que presentarse a las tres pruebas del segundo día . Sus grandes ojos negros escrutaban a sus compañeros ya imaginándoles como meras fichas de un juego que pudiera disponer a su antojo para colocarlas en un tablero. Algunos peones, otros caballeros o alfiles y, como no, la Reina, Leiath. 

Pero para su sorpresa la semi-diosa drow al final claudicaba a sus súplicas dejando que Tybalt les acompañase. Una media sonrisa se dibujó en su cara al ver como el lacayo Ralph era rectificado en público, delante de ellos. 

¡Qué se joda!- Pasó junto a Tybalt empujando a propósito con el enorme semi-infernal.-  Espero que acompañarnos te sea un verdadero suplicio.- Dijo con desprecio en un susurro en un tono exclusivamente audible para él. Estaba resentido, despechado quizás. Su lengua era puro veneno, como  del que Kiaransalee no les ofrecía ni una gota, quizá sabiendo que el mago tenía ya bastante en su interior. Sólo quería lanzar el dardo verbal para dañar al impertérrito espadachín y desahogarse así del daño que había generado con su traición. A pesar de ello estaba contento por que hubieran conseguido su inestimable ayuda en el campo de batalla. Ya disfrutaría después vendiendo sus pertenencias para comprarse más equipo y venenos en Lash Embrar. Le daba igual lo que pensara la buena de Leiath al respecto. Ambos habían compartido ya tantas penurias y tiempo de aventuras que podían entenderse con una sola mirada. Le parecía escuchar su dulce voz apiadándose tanto de Tybalt como de Evea, esforzándose pro salvar sus almas como había hecho tantas otras veces con tantos otros. Pero para eso estaba Onfale ahí. Adoraba ya a Hala como la Bruja, pero también pensaba que la Diosa le había puesto al lado de su enviada para contrarrestar su exagerada bondad. El equilibrio es donde Onfale buscaba la virtud y actuaría en consecuencia. Poco más podían hacer allí sin delatarse. Elevó la mirada hacia donde venía la voz de Kiaransalee y habló para despedirse.

- Muchas gracias de nuevo, Gran Kiaransalee. Haremos todo lo posible por completar nuestra misión con éxito y honrar la confianza puesta en nosotros.- Se acercó a los demás y se dirigió a Leiath.- ¿Podrás curarnos a todos esta incómoda infección parasitaría? Empiezo a estar harto de ella.- Dio una vuelta sobre sí mismo para mirar a los ojos de cada uno de los integrantes del aquelarre. Una vez alejado de oídos ajenos, por si acaso hubiera algún espía que diera información a los otros participantes, continuó.-  Habrá que planear una estrategia. Si llegamos a Lash Embrar el día previo al torneo podríamos usar ese día para tratar de informarnos de los distintos participantes. Toda información puede sernos provechosa. También para hacer compras de última hora, si es necesario.- La fría mirada de Onfale se topó con el imponente Tybalt. Si no fuera porque necesitaban de él vendería todas sus pertenencias hasta dejarlo con un mísero taparrabos. Se hizo el silencio mientras se regodeaba con esa idea.- Ejem...el primer asalto puede servirnos también para eso mismo. Saber a quién podremos enfrentarnos al tercer día. En la lucha con el no-muerto de la Ceremonia de Apertura no deberemos gastar todas nuestras fuerzas inmediatamente. Eso podría dejarnos indefensos ante terceros que quisieran acabar con nosotros. Si vemos la oportunidad tendremos que acabar sin piedad con los otros grupos. Como ya he dicho en la Prueba del Corazón Flame y Leiath solas podrían aguantar mucho tiempo. Habrá que determinar quién se presenta a la Prueba de la Mente y a la de la Sangre, la carrera. ¿Estáis de acuerdo?- Decía más mirando a Leiath y Flame a las que ya adjudicaba una posición.-¿Alguna propuesta? Yo pienso que podría hacer una buena carrera, quizá con Tybalt.¿Aire, Alice,?¿Jadewo? ¿Cómo lo veis?

Preparo lista de conjuros pensando en que llegamos antes de participar en el torneo.  Que no sería esta si luego vamos a luchar en la Ceremonia de Apertura.

- Nivel 0 (CD 14):4; 1 leer magia, 1 detectar magia, 1 cuchichear mensaje, 1 mano de mago

- Nivel 1 (CD 15):5; 1 grasa, 1 armadura de mago, 1 proyectil mágico, 1 proyectil mágico, 1 disfrazarse

- Nivel 2 (CD 16):3; 1 invisibilidad, 1 partículas rutilantes, 1 imagen silenciosa (silenciada)

Tus reservas, tras crear el pergamino de armadura de mago y disfraz, quedan así:

-Materiales mágicos para crear pergaminos (75 po)

-8 pergaminos en blanco (1.6 po)

Preparo pergamino de imagen silenciosa y otro de agrandar persona.(50po) Si puedo hoy y si no en los días venideros.

Alice a diferencia del perfumista, cada vez veía más negro su futuro. Una prueba suicidad, para devotos fanáticos. Creo que sería bastante buena en la prueba de la mente, pero si es necesario puedo participar en la carrera. La prueba de la sangre la descarto totalmente.

Sí, podré, con ayuda de Hala, quitaros esos feos bichos del cuerpo- respondió la bruja a su amigo Onfale, contenta de poder hablar tranquilamente por un día sin tener que salir corriendo.

Pero cuando éste comenzó a hablar sobre los planes para la competición demoiníaca, Leiath se escusó aquejada de horrible y repentino dolor de cabeza (es que eso de pensar en estrategias de combate no era lo suyo) y se retiró a descansar.