Partida Rol por web

Me percaté del cambio de actitud de Ion al nombrar lo de su cuerpo, algo a lo cual no le había dado importancia alguna, lo había sospechado cuando la vi llegar, tenía buen ojo para esas cosas; igualmente, tenía muchas preguntas acerca de su cuerpo, y , en particular, sobre ella.

-Relájate, ya habrá tiempo de charlar, una mala actitud puede traer problemas. Las cámaras están muy bien escondidas, esta tía sabe lo que hace.- Comenté por la intranet, sobre todo para Ion.

El hecho de que Soma se alejase me preocupaba en demasía, los suburbios no eran lugar para un neotemplario; aunque pudiera defenderse, llamaba demasiado la atención con esa espada.

-Ten cuidado, y avisa si necesitas algo.

Suspiré, más mental que físicamente y, sin más preámbulo, giré sobre mi misma, volteándome hacia la dependienta, mientras desenfundaba un par de gafas de ver retro; observé los tacones acoplables que nos mostraba detalladamente, me acerqué con cuidado y los repasé de arriba a abajo, mientras, señalaba segura el tamaño pequeño de los anillos con la diestra, para, al final echarle una ojeada también.

-Con permiso.- Dije mientras lo cogía con la mano y lo ponía a trasluz, lo giré y comprobé el peso del mismo.

" Unos 200 el anillo...". Reflexioné. "Sería lo óptimo".

-Calculo que unos 500cr, a ojo de buen cubero.- Despejé las dudas de Javier.

Sonreí mientras las volvía a guardar con la misma agilidad y posaba el anillo.

-¡Perfecto! Según el precio, igual me los llevo, sé de alguien a quien le encantarían.- Dije mientras levantaba una ceja.- De todas formas .- Di un repaso con la mirada al mostrador y al escaparate y me puse seria.- Estamos buscando una pieza, un tanto... Difícil, un Klystron, de dos cavidades, pero lo necesito de aleación de Vitalio o no resistiría.- Se iluminó mi mirada, esperanzada.- Es el único lugar donde nos queda buscar, nos habló del lugar mi hermana y, me lo esperaba diferente y con menos variedad; me alegra equivocarme.- Sonreí amablemente.

Había visto alguna en Elysium y tener más de uno en la misma habitación era todo un milagro, si lo tenían, iba a saltar de alegría.

A partir de ahí, empezarían las preguntas de verdad.

-Ten cuidado, y avisa si necesitas algo.

La mujer alzó las cejas ante los últimos pedidos, no eran propios de un usuario común, asi que era fácil deducir que Chell era "del gremio".

-Si, tengo uno y de pura casualidad, no son piezas demandadas por los clientes en general aunque siempre puede pasar que algun taller necesite ese recambio en concreto asi que tambien compré uno en mi último pedido.

Fue a otra caja de suministros de la cual sacó otra mas pequeña y la desembaló para que Chell viera el producto de primera mano. No hacían falta grandes conocimiento en ingeniería para saber que aquella pieza era, en efecto, nueva.

-Lo pedí mayormente por si lo necesitaba yó, pero tambien está a la venta por supuesto, la estructura es de acero inoxidable recubierto de vitalio en las zonas que normalmente se recalientan o expuestas a corrosión, si lo quieres para microturbinas este aguanta perfectamente, te lo garantizo. El anillo son 100cr, los tacones 600cr y el Klystron 300. Aunque si compras los tres artículos te descuento 100cr asi que te saldrían en total por 900cr.

Era un precio razonable, mas tratandose de artículos que eran realmente dificiles de encontrar en los suburbios.

Mientras caminaba por la estancia para llegar ahora a la misma habitación, me percate de que algo claramente iba mal, me encontré nuevamente en la misma sala enfrentando el mismo umbral y el mismo gato que había pasado con anterioridad, arqueé la ceja y observe a mi alrededor, todo era igual...

Una molesta sensación de deja vu vino a mi, no sabía explicar aquello mas que continuar andando al siguiente umbral, no parecía tener mas alternativas...¿O si?.

Me quede un instante en la sala, contemplando el umbral, mantener la calma era primordial, no podía dejarme llevar por la incertidumbre de la situación.

- Así que a esto quieres jugar - espete a la nada de aquella habitación, pues no comprender aquello no significaba no racionalizarlo, a lo que con la diestra, saque mi revolver y de su tambor saque una bala y la pose en el suelo, tal vez fuera una paranoia o tal vez el juego de un ser con la capacidad de crear semejante locura.

Inspire profundamente antes de comenzar a andar nuevamente atravez del umbral por el que se había ido el gato...de nuevo, me vi andando por el salón de la habitación hasta el umbral, sin un rumbo fijo mas que resolver aquel misterio.

Daba igual cuantas veces avanzara a la siguiente estancia o retrocediera a la anterior, Soma siempre acababa en la misma, la bala o cualquier objeto que cambiara o dejara, estaría ahí cada vez que avanzara o retrocediera.

Era como una carcel repentina en la que por mucho que trataras de salir o moverte, nunca lograbas salir de aquel bucle. Soma había caído de lleno en lo que parecía una trampa sutil y potencialmente... eterna.

En cada cambio de estancia, aquel gato desaparecía por el pasillo y algo en la cabeza del neotemplario empezaba a perder la razón. La frustración y la sencasión de encierro eran cada vez mas fuertes y de seguir asi, la solución mas clara para el templario sería arrojarse por al ventana.
 

Camine durante varios minutos y varias estancias ya habían pasado, era siempre el mismo lugar, la misma y molesta repetición, pronto empezaba a molestarme y comenzaba a desvariar, romper el suelo de un puñetazo o saltar de la ventana para precipitarme hacía el vacío parecía cada vez mas alentador.

Me pare nuevamente en el centro de la sala justo frente a la bala que había dejado, pronto me dí cuenta, la desesperación y la locura se empezaban a adueñar de mi, inspire profundamente y me senté frente a la bala que había dejado, de nada servía resistirse a aquella prisión hecha un bucle eterno.

No, tenía que superar aquello con pura fuerza de voluntad y determinación, pose la espada envainada frente a mi junto a la bala y me puse a meditar, aquello no era una trampa ordinaria...eso estaba claro, pero quien era capaz de algo así, quien tenía la capacidad de alterar así el espacio a mi alrededor como para hacer aquella elaborada prisión y...con que motivo.

- No se quien eres ni que pretendes...pero esto es algo innecesario - espete hacía la nada mientras mantenía mi meditación, no tenía prisa ahora que estaba aprisionado - No busco dañar a nadie, solo vine a saber la verdad, a buscar la esperanza perdida en las entrañas de la desesperación - añadí mientras mantenía la respiración y la controlaba para no acelerarme.

- No cederé ante la presión...así que por que no sales - concluí mientras ahora habría los ojos lentamente y denotaba los detalles de la habitación, la cual ahora parecía no dejarme salir, engullido por el bucle en el que estaba solo me quedaba dar con una solución o que la solución diera conmigo.

Me estaba impacientando, no habiamos venido de compras y esto se esta alargando eternamente, ademas, me descoloca un poco la manera en la que Soma se ha ido, se que es esporádico, pero me preocupa poco que pueda ser alguna artimañana o cualquier tontería, es como poner un laser a un gato, se distrae con facilidad.

-Me interesan para retroingenieria, su capacidad de cambio de color podría aplicarse en la ropa como ayuda al camuflaje, me gusta el término, ''ropa adaptable al entorno'', si andas corta de dinero, yo pago una parte de esos zapatos.- Le dije telepaticamente a Chell.- No te entretengas mas Chell, tenemos cosas que hacer.-

Me dirigí a la entrada para mirar a los alrededores buscando a Soma ¿ Donde abrá ido ?.

No era educado quedarse en medio así que me hice a un lado para dejar libre la entrada y esperar a que las señoritas terminasen.

Espero que sea pronto....

-Hey, ¿ Cómo vas ?, esto se me esta haciendo eterno, ¿ Vamos a ver los alrededores a ver que nos encontramos ?.-

Le dije a Soma a través del comunicador.

Sabía que estaría bien, sabe defenderse y no podía estar muy lejos, no hace tanto tiempo que se ha ido.

¿ Tal vez una emboscada ?, no, se habría puesto en contacto con nosotros.

Nos estan vigilando muchos ojos....

Una voz familiar fue la que sacó a Soma de aquella ilusoria trampa, almenos por el momento.

-No hace falta tanto drama, solo necesitaba un poco de tiempo para atarte y ... curiosear.

Soma estaba ahora atado a una silla con cuerda de acero trenzado que se usaba en la construcción, brazos y piernas dolían por la fuerza con la que había sido atado y el hormigeo por la falta de circulación era molesto.

Carolina Feles, el avatar de la curiosidad estaba subida a una mesa a su lado, solo llevaba puesta ropa interior y su aspecto había cambiado ligeramente con respecto a la última vez, de alguna forma parecía tener luz propia, un aura sobrenatural que la acercaba, de manera ilusoria o no, a la divinidad.

Tambien era mas grande, no solo su estatura había aumentado, proporcionalmente todo su cuerpo era mas grande medía mas de dos metros pero todo su cuerpo mantenía las proporciones originales, la diferencia era obvia con la Carolina Feles original. Sus músculos ahora se marcaban dandola un aspecto fibrado y atlético. Su presencia era mucho mas "abrumadora" que antes.

Encima de la mesa estaban todas las pertenencias de Soma, la terminal de Elysium, el comunicador de Chell, su espada, los guantes pantera, el puñal, el revolver, la insignia templaria e incluso su cartera con los chips de crédito. Como era de esperar, la secuestradora no mostraba interés alguno por los créditos, la terminal de Elysium y el comunicador de Chell parecían tener toda su atención.

Ambos estaban en la misma istancia en la que Soma se vio atrapado, pero esta vez era la de verdad, el gato blanco de la ventana seguía en el alfeizar, solo que ahora miraba hacia dentro del edificio y no hacia afuera.

-Parece que los firewalls de vuestra diosa se complementan, es infinitamente mas facil superarlos cuando os separais unos de los otros.

Nyahahahaha... y yo preocupada por cómo iba a lograr cazaros uno a uno, te agradezco el detalle.

Cogió el comunicador analógico de Chell y comenzó a desmontarlo.

-Nyahh... ingenioso, está bien saberlo...mmmm...

Susurró para sí, continuaría husmeando entre las cosas de Soma.

Soma no contestó, Alicia se encargaría de reportar una anomalía.

-Soma ha sido desconectado de la red, no ha reportado el paso a modo autista, asi que deduzco que puede haber sido una desconexión forzada. Esta es su última localización conocida.

No estaba lejos, era un viejo edificio en ruinas a unos cincuenta metros de la tienda, se podía ver perfectamente desde la misma.

Cuando por fin pude, lo que al parecer fue, despertar de un molesto sueño inducido, observe y escuche con atención a el avatar de la curiosidad, lo que fue con anterioridad Carolina Feles, por su parte, vi que no demoro demasiado en atarme con lo que encontró, algo que me molesto, pues no entendía porque lo había hecho ni el significado de sus palabras contra nosotros.

Arqueé la ceja mientras la miraba, pues mi situación era propia de su propio elemento.

- ¿El detalle? - pregunte de forma casi irónica - Fue simple curiosidad, pensé que al menos tu lo entenderías - objete mientras la miraba desconcertado y algo indiferente.

- O al menos eso es lo que creía que entenderías...Curiosidad...Carolina...como debería llamarte ahora - pregunte - Ya no eres lo que eras cuando vinistes, ni lo que es la joven con la que te fusionastes...así que, como debería llamarte - expuse mientras observaba mis ataduras, eran ciertamente molestas.

- Ademas, por que deberías de cazarnos, no somos tus enemigos, tampoco puedo afirmar que tus aliados dada tu naturaleza...pero, al menos se que puedes saciar tu ansía de saber con nosotros si cooperaras - expuse mientras buscaba la forma de desatar los nudos, algo que parecía imposible de momento.

Alce los brazos hacía el avatar mientras exponía las ataduras - Esto tampoco es necesario - espete con conformidad pero cierta incapacidad de comprender el motivo de las mismas ataduras - Ni siquiera eres a quien íbamos a buscar - musite mientras continuaba contemplando a la que una vez fue carolina.

Un leve suspiro se escapo de mi ser mientras ahora le dirigía la mirada al gato en el alfeizar, sentía cierta empatía por los animales...un cebo perfecto para mi, por suerte mis compañeros no correrían la misma suerte, aunque mi suerte fuera aún incierta.

- ...Como si no fuera ya lo suficientemente malo que Odio y Ambición hagan de las suyas... - dije mas para mí mismo que para el ser frente a mi - Como si no tuviera ya bastante con mis propios problemas...- continué mientras divagaba entre ideas que se escapaban de mi ser.

-Como bien he dicho, no podemos interrogarla directamente, de todas formas, si se os ocurre algo que preguntar, decidlo. Y ya arreglaremos cuentas.-

Se me abrieron los ojos como platos la ver el Klystron, una sonrisa de oreja a oreja se dibujó en mi rostro.

-¡Eres la mejor! Nos llevamos las tres cosas.- Pagué sin pensarlo los tres objetos y suspiré mientras intercambiaba una mirada con Ion.- Y pensar que mi hermana no apostaba porque encontrásemos nada aquí, lo había descrito de otra manera, con menos materiales, y menor calidad, aunque vino hace mucho.- Me dirigí a la dependienta con tono amable sin perder la sonrisa.- Es peculiar encontrar semejantes artículos por aquí, y de tan buena calidad; sinceramente, estoy impresionada.- Me aproximé un poco más a la dependienta y bajé el volumen de mi voz.- Y la seguridad muy buena.- Señalé con un movimiento de cabeza a los dos gorilas de la puerta mientras guiñaba un ojo.- ¿Te tocó la lotería o conseguiste un buen inversor? Porque al taller Donovan le vendría bien colaborar con una tienda de recambios así por la zona; así que, entre nosotras, si me puedes comentar cómo una tiendita de los suburbios ha prosperando tanto, igual podemos hacer negocio.- Comenté con picardía.- Ademas, creo que no es el único comercio por aquí que ha tenido un crecimiento rápido últimamente, ¿no?, ¿qué ha pasado? ¿Hay una fuga de suerte en el barrio? ¿Tengo que mudarme más cerca? - Bromeé para quitar hierro al asunto.

Acto seguido me dirigí a Andronio.

-¿Hay algún movimiento fuera de lo común? Muéstrame, si no es así, busca la posición de Soma, pero camúflate por si acaso y sé sigiloso.

Me había alterado el mensaje de Alicia, ya sabía yo que no era buena idea separarse... Tenía que acabar rápido aquí para poder ir en su búsqueda más allá que con un dron.

La anciana sonrió ampliamente y embaló los articulos con cuidado para su venta.

-Perfecto, os ofrecería montar alguna de esas piezas para lo que sea que estes fabricando pero veo que sabes apañarte.

Una vez hecha la transacción, le entregó la bolsa con todo embalado.

-Pues tal vez sí que deberías mudarte mas cerca, por lo visto hay una santa perturbada que va dejando chips de crédito a reventar de dinero donde le viene en gana. Como bien has dicho, no solo ha pasado por aqui, tambien por otros negocios de la zona y ojalá vuelva a hacerlo. Gracias a ella muchos están saliendo de la calle, como esos dos pasmarotes

Dijo refiriendose a sus dos gorilas.

-Hace una semana estaban esnifando pegamento en una esquina, hoy vigilan mi negocio porque puedo pagarles. No podría vender esta mercancía sin vigilancia en este barrio.

Era una mujer encapuchada, pasó caminando, sin detenerse y ni siquiera mirar hacia mi, posó el chip de crédito en el mostrador y siguió su camino, no dijo nada y me ignoró por completo. Por lo que he oido ha hecho lo mismo en los otros sitios.

Alzó las manos con indiferencia.

-Y por mi lo puede segir haciendo el tiempo que quiera, es como un maldito milagro.

Desde su punto de vista aquella misteriosa mujer era algo asi como un mesías.

-Alicia- Si obtenemos imagenes, aunque no muestre el rostro, puedo hacer comparativas con otras cámaras de vigilancia o imágenes archivadas. Puede que haya suerte y encontremos coincidencias.

Afortunadamente, gracias a la capacidad de procesamiento de Alicia, podía encontrar similitudes mas allá del rostro.

Andronio activó su camuflaje óptico y voló en sigilo hacia el edificio en cuestión, solo Chell podía ver en su campo de visión un identificador que le mostraba donde estaba o conectar directamente su camara a bordo y ver a través de él.

Puse cara de asombro mientras recogía la bolsa con las piezas.

-¡Madre mía! Eso si que es suerte, jajaja. ¿Podría describirnos a la mujer o ver las grabaciones de seguridad? Más por curiosidad que otra cosa.- Me encogí de hombros.- Quién sabe si se nos presenta en el taller, no vayamos a no dejarla pasar.- Bromeé.- Igualmente, muchas gracias por todo.- Sonreí amablemente.

Una parte de mi se estaba impacientando.

"¿Y si a Soma le había pasado algo? ¿Y si perdía a Andronio en el proceso?" Pensé.

Intercambié una mirada entre mis compañeros y la puerta.

-Podéis ir saliendo si queréis, ya nos vamos por Soma.- Comenté por la intranet.

-¿Curiosidad? nyahahahaha...

Se mofó del templario.

-Irte por tu cuenta lejos de tus compañeros a un edificio abandonado, siguiendo a un gato blanco en medio de un barrio de los suburbios y sabiendo que Ambición sabe quienes sois y os quiere muertos, no es curiosidad, es estupidez, o tal vez temeridad. Pero desde luego no lo compares con la curiosidad, es insultante.

Continuó urgando en las pertenencias de Soma, el comunicador analógico quedó totalmente desmontado, pero la terminal de Elysium tan solo la miró por encima, no se conectó a ella.

-Abandonaste tu verdadera curiosidad el dia en que empezaste a creer que tus dioses ficticios son los responsables de... bueno, de lo que creas que son responsables. Y reniegas de las deidades que tienes delante de tus narices.

Dime... ¿que sucedió el 1 de Diciembre del 2130? ¿lo sabes? ¿te has preguntado o informado de ello? no... solo eres un patán que hace lo que le mandan y nisiquiera sabe para quien trabaja realmente... o lo que hizo. Yo tampoco lo sé, asi que trato de averiguarlo, de eso se trata la curiosidad, no de perseguir gatos.

Pero está bien, no te culpo por ello, tampoco eres mi enemigo, tal vez me expresé mal, si fueras mi enemigo estarías muerto, pero hay ciertas cosas que quiero aberiguar de tu "benefactora" y te voy a usar para ello.

"Colaborar" me parece un precio muy alto, no tengo intención de volverme vuestra mascota o lo que quiera que le hayais hecho a la pobre compasión. Aprendereis a respetarnos y a temernos o eventualmente, sí serás mi enemigo.

Comenzó a preparar una conexión directa con ayuda de un cable que iba desde su conexión cervical a la de Soma.

-No temas por tu vida, ahora me eres infinitamente mas útil vivo ya que me has concedido esta valiosa oportunidad.

Puedes llamarme Shiro, por cierto. Me gusta como suena.

Sonrió inocente mientras que se preapraba para conectarse directamente a Soma.

Se notó en la expresión de la anciana que trataba de hacer memoria.

-Tan solo fueron como tres segundos lo que tardó en pasar por delante, cuando miré ya había dejado el chip en el mostrador y se estaba alejando. Recuerdo que era una mujer de complexión atletica y ... olía como los indigentes de por ahí.

Las personas que vivían en las calles no solían tener acceso a la ducha normalmente, tampoco a ningun tipo de condición higienica. El caso es que aun teniendo tanto dinero, el objetivo al parecer no se lo estaba gastando ni en lo mas básico.

-Llevaba una capucha e iba con una manta sucia y andrajosa por encima, aunque creo que debajo tampoco llevaba mucha ropa, no me dió tiempo a ver mas.

Se encojió de hombros. Desde luego si lo poco que había dicho era cierto, era normal que nadie sopechase de su "importancia".
 

Mientras que Shiro hablaba, me concentre en mis ataduras y trate de liberarme de ellas, un intento fútil, pues apenas podía siquiera doblar mis ataduras, era molesto no poder hacer nada mas que escuchar y observar, por otro lado, no fue sino hasta que se nombro a compasión que mi ser se vio estremecido y claramente enfadado.

- ¡Que sabrás tu de Daya, si ni siquiera te molestastes en ayudar! - mi ceño se frunció y mis dientes se apretaron con mas fuerza que la que intente usar en liberarme, después de un momento, tome de nuevo la compostura mientras meditaba mantras para calmarme.

- Compasión no es nuestra mascota ni mucho menos algo parecido, no puedo admitir que esta en una situación favorable pero nada parecido a lo que crees, aunque preferiría que tuviera un cuerpo con el que poder moverse con mas libertad - replique, aquello último casi para mi mismo.

- Tampoco creo que haya abandonado mi curiosidad solo por tener fe, no creo que no puedas ver la redundancia de tus palabras cuando tu misma eres una deidad, lo único que os diferencia a ustedes de las mías es que al menos nosotros tenemos la opción de elegir, de equivocarnos y de aprender, he visto las atrocidades que ha hecho odio y ambición, tampoco es que haya renegado de vosotros, solo no puedo aceptar como hacéis las cosas...- replique nuevamente.

- tampoco se que sucedió el  1 de Diciembre del 2130, primero quiero saber que es lo que de verdad soy, luego buscaré las respuestas que vengan en adelante y para tu información mi curiosidad no se trataba de perseguir gatos, tenía el presentimiento de que me encontraría contigo, no es la primera vez que usas este método, mi curiosidad es saber que buscas y por que nos sigues - añadí mientras mantenía la mirada hacía el avatar.

- ademas, no se si te habrás dado cuenta pero, el respeto se gana y a lo referente al miedo...no soy muy fanático de ello - dije con cierta indeferéncia - de momento, solo ciento respeto por compasión, quien me ha mostrado su visión de la realidad...una que quiero reparar encontrando a esperanza, algo que no me ponéis nada fácil -

Dicho aquello, me preparé para lo que parecía ser una conexión directa, algo que detestaba, realmente odiaba tener aquello en mi cuello, aquella maldita conexión.

-...realmente...detesto estos implantes...- espete mientras Shiro se aproximaba, sin poder hacer nada mas que observar, cerré los ojos y me puse a meditar nuevamente, mantener la mente clara para lo que era claramente, una violación de mi integridad, algo que no olvidaría.

-Esta bien.-Respondí a Chell por la intranet.

-A dónde irá ahora Soma… menos mal que dijimos de ir juntos…-

Después de intentar encontrar las cámaras sin resultado, me fije que Chell se estaba entreteniendo mucho con la dependienta, cosa que al parecer era para comprar.

-¿No habíamos venido a investigar?¿Que hace comprando? Será para ganarse a la mujer, pero... en fin.-

Mientras, no paraba de darle vueltas a lo que vio Soma para ir tras ello, al menos podría haber especificado algo más de que le llamó la atención, pero ahora esta desconectado, un tanto extraño tenemos que averiguar qué está pasando.

Una vez terminaron las compras ya que a Javier le gustaron las botas por su tecnología, mostré un gesto de desaprobación ya que no habíamos venido a comprar sino a investigar, les mire con cara seria y les dije por la intranet.

-Vámonos a por soma, esa desconexión forzada no me gusta nada.-

Tras mirar a mis compañeros mire a la dependienta.

-Gracias por todo, quizás nos volvamos a ver, hasta luego.-

Me di la vuelta y me dirigi a la puerta junto a Javier a la espera de Chell para ir juntos a por Soma.

La anciana se despidió de ambas con una sonrisa y claramente satisfecha con la venta. Almenos por esa parte, todo había salido mucho mejor de lo que cabía esperar dadas las circustancias. El tratamiento de un cliente normal y corriente había sido un acercamiento acertado.

Con tan solo cruzar la calle y caminar un poco, los tres estaban ante el edificio en cuestión, era una construcción del siglo pasado practicamente en ruinas y sin mantenimiento alguno, su mal estado podía ser hasta peligroso por los potenciales derrumbes.

Un gato blanco les observaba tranquilo desde el alfeiar de la cuarta planta y no sería el único con el que se toparían, aquel lugar era madriguera de todo tipo de alimañas y gatos.

La puerta de la entrada estaba apenas junta y medio caída por la falta de algunas visagras, bastaría con levantarla un poco y empujar para abrirla. La primera vista del interior era exactamente lo cabía esperar: un lugar sucio, maloliente y completamente en ruinas.

Tenía pinta de que hace mucho tiempo aquello había sido un hotel, lo escasisimo que quedaba del moviliario tenía cierto toque clásico.

Andronio llegó tambien a la fachada y comenzó a ascender en busca de una ventana abierta o hueco derruido por el que colarse sin ser detectado, puede que le llevara mas tiempo del esperado pero tenía la ventaja de no tener que usar las escaleras.

En el interior había mas gatos, ninguno amistoso, todos huían por los recobecos al ver acercercarse humanos.

Cuando empezamos a caminar, sentí el hormigueo previo a la acción, estaba frío.

Intente aprovechar mis pasos para calentar los musculos haciendo un poco mas de presión en las piernas al caminar.

Cuando llegamos, una de mis peores pesadillas nos estaba esperando.

-Gatos....-

Y a mi mente me vino otra imagen.

-Felles....-

Sin dudar ni un instante, saque el visor del interior de mi abrigo y lo ajusté adecuadamente a mi cabeza.

Esa desgraciada.... podía ser cualquiera de ellos y todos a la vez, ya sabes, '' la curiosidad mato al gato '', se podria decir que estos pequeños demonios son como sus centinelas, tal vez alguno fuese mas... especial.

Miré con atencion a ver si alguno presentaba un comportamiento extraño no sin antes detenerme en el de la ventana, puestos a empezar por algun sitio.....

-Tened cuidado, ya sabes que no me gustan los gatos- le dije especificamente a Chell - Pero en este caso, algo me crispa especialmente los nervios, siempre dije que nos estaban observando pero nunca me habia esperado a pensar, ¿ la mente colmena funcionará con ellos ? -dije mientras señalaba un gato- esta muchacha esta viendo la vida y los movimientos de todo el mundo en todo momento...-

Saqué el comunicador de mi bolsillo, este aparato no utilizaba nuestra red natural, tal vez podría llegarle la señal a Soma.

-Si saturamos el comunicador de Soma, ¿ podrías seguir la señal del dispositivo ?, normalmente se necesita saber la señal que se esta buscando para seguirla, en nuestro caso, tenemos que seguir a donde va la nuestra, esta gatita nos la va a liar.

Si lanzamos comunicaciones desde dos disositivos un poco separados, podriamos triangular su posicion.-