Partida Rol por web

Vaya... Estamos dentro... En el corazon del castillo

Briana se queda inmovil y pegada a la puerta...

Estos lujos, estas armas, solo hablan de vanidad y opulencia... He visto este lujo en lugares nobles sera menester aprestar mi hacha...

La mirada de Briana se fija en la humana llamada Myshella sin perder detalles a sus movimientos y acciones, mientras el hacha arrojadiza sale silenciosamente de entre sus raidas ropas...

Veamos...

El castillo nos ha encerrado en una sala enorme, cuya opulencia y exquisitez nada tiene que ver con lo que hemos visto hasta ahora. Hay un hombre arrodillado en el centro, de espaldas a nosotros y cubriendo su cabeza con una capucha. Juraría que está rezando, o peor aún, haciendo una de esas extrañas invocaciones.

Dejo a la muchacha en el suelo con la mayor delicadeza posible, y vuelvo a colocarla detrás de mi. Tengo un mal presentimiento.

Desenfundo mi espada, y permanezco lo más pegado posible a la pared, sin perder de vista al encapuchado y a la joven.

Después de todo horror viene una gran calma, pero dicen las lenguas que después de la calma viene tormenta peor, no se si soy yo o que, pero mis sentidos me indican que nada bueno puede venir ahora, me preparo con mi espada y el escudo, miro para uno y otro lado nervioso, pues no se lo que va a suceder ahora....

Este lugar cada ves me intriga mas primero una sala de tortura y ahora esto que diablos es este lugar, además quien será este hombre??... sostengo mi espada con fuerza y veo a todos mis acompañantes, me derijo hacia uno de los guerreros llamado Tarsem – parece que el único camino que nos queda es seguir adelante hacia aquel extraño ser ¿no te parece?-

Al ver que Tarsem deja a la joven, Briana se encamina hacia el...

Guerrero, deja a mi cargo a la mujer. No sirvo mucho para la pelea pero si lo suficiente como para protegerla.

Dicho esto Briana se inclina sobre la humana, y rasgando un bajo de su pollera la empapa en agua de su cantimplora y comienza a refrescarle la cara.

Hola. No temas, mi nombre es Briana...

el rostro de la mujer es mas sereno que antes,aunque sus ojos permanecen perdidos en la nada aun asi esta vez parece asimilar las palabras de su interlocutor

-gracias mujer,muchas gracias

Se derrumba y empieza a llorar,entre sollozos su voz al principio apagada y despues mas aguda -esta sala es la muerte,debemos huir que ahora estamos a tiempo,si ese ser se da cuenta de nuestra presencia no saldremos vivos de aqui,nuestra alma perecera en cada plano de existencia al igual que perece el castillo

La mujer que antes se ofreció a ayudarme vuelve a hacerlo. Parece dispuesta de soportar la carga que supone cuidar de la muchacha. Acepto su ayuda con un simple gracias, pero intento que note como mi voz agradece realmente su esfuerzo.

Acto seguido, uno de los guerreros del grupo que se unió a nosotros mientras combatíamos al demonio felino se acerca hasta mi. Parece algo nervioso cuando habla, y no le culpo. Creo que a todos nos cuesta mantener la calma tras todo lo que nos ha pasado. Le miro a los ojos unos instantes y asiento mientras hablo.

- Eso parece, pero no me fiaría demasiado. Juraría que es un brujo, y parece estar haciendo una invocación. - En ese momento señalo hacia la puerta por la que acabamos de entrar con mi espada - No olvidemos lo que hemos visto antes. Tal vez algo peor acuda a su llamada...

Tengo ganas de salir corriendo y separar su cabeza encapuchada del resto del cuerpo de un solo tajo, pero no tengo las agallas suficientes. No es el primer brujo contra el que lucho, y sé que es mejor tener algo de miedo.

Finalmente, examino de nuevo la sala, especialmente el anfiteatro superior. Tal vez haya alguna forma de subir hasta él. Si la muchacha está en lo cierto, nos atraparán en esta ratonera.

se pone en pie,ante el un ser se dibuja en el octogono e luz formado por velas

El hombre se gira y se os queda mirando

-os reconozco,sobre a todo a vos caballero su mirada alcanza a Marduck -tuvisteis mucha suerte en nuestro ultimo encuentro,que pena que vuestros amigos acudieran tan pronto en vuestra ayuda,cosa que no hace mas que demostrarme lo patetico que eres en la batalla

En su mano se dibuja un daga,la cual comienza a arder ,una sonora risa adorna el fuego de esta

Unas palabras salen de su boca y el demonio se coloca en frente de el

preparo mi arco para poder reaccionar ante el ataque del demonio

Algork esta situado el ultimo en el grupo,junto a la puerta.

Su voz se alza por encima de la nada
-mi señor,le traigo lo que me dispuso,una guerrera de Pan Tang servidora de Xiombarg,un campeon de la ley abandonado por sus señores,la chica del tatuaje ,el guerrero,el marino,el cazador,el ladron.....todos ellos servidores de señores distintos y procedencia distinta y todos elegidos por vos

Los ojos de Algork no miran ridick,estan perdidos en la nada,pero su voz resona alta y fuerte produciendo eco en la sala.

-señor,mi señor,espero haber cumplido con vos,libereme del pacto y dejeme seguir mi camino,ya no le soy de utilidad,devuelvame lo que es mio

Las palabras de Algork se tornan casi en una suplica

Algork no deja de sostener su espada en posicion de batalla,sus ojos ahora os miran a todos vosotros

-es el fin,siempre lo fue,dejar las armas y quizas el señor sea misericordioso

bien se que no es asi,pero es su fin,por ello fueron reclutados y por ello moriran,asi yo recuperare lo mio por derecho y podre volver a ser quien antes era

DE la sala otra voz resuena,no es la del brujo y tampoco la de Algork

-algork es cierto que me has servido bien y por ello seras recompensado,solo dejame sentenciar mi plan y seras liberado de tu condena.

Inesperadamente los acontecimientos dan un vuelco, estoy tan aturdido por lo sucedido que no se que hacer, entonces decido guardar la espada y sacar la lanza, corro hacia un lateral para coger angulo para poder disprar al brujo, cojo todo el angulo posible, y le lanzo el arma en pos de alcanzar al brujo, para despues sacar la espada y esperar a los ataques provinientes.....

Ante las palabras del brujo sonrío... ¿Patético? Patético es un hechicero que no puede hacer frente a un puñado de gente armada solo de acero y carne. Ni siquiera pudistes tú solo conmigo. ESO, es patético, brujillo de pacotilla. En Pang Tang ya serías una estatua aullante por tu ineptitud... Pero déjame ahorrarte ciertos trámites destripándote...
Me abro más, esperando que cuando el demonio ataque, supongo que a mi, el resto tenga via libre para ir a por el hechicero y, en caso de que ataque al grupo, seré yo quien me lanze a por el hechicero.
Luego habla Algork y me quedo estupefacto al oir lo que oigo. Algork, maldito cerdo traidor. Le llevaré tu corazón al Teócrata por ésto...
Lanzo una flecha al demonio, para azuzarle. ¡¡¡Vamos demonio!!! Tengo a un traidor y a un charlatán a los que destripar, asi que acabemos con ésto rápidamente.

Maldición al parecer estuvo todo arreglado por este maldito traidor, pero me intriga como es que sabia que nosotros vendríamos aquí y nos encontraría, no importa en este momento debo ocuparme de este maldito demonio…
Veo que Marduck que le arroja una flecha al demonio entonces me doy cuenta que la acción esta por comenzar, me doy vuelta y miro al grupo y les digo mientras sostengo con fuerza mi espada y mi escudo. – primero debemos matar a este maldito traidor y luego concentrarnos en el demonio y el hechicero, pero no olviden que alguien mas esta aquí esa vos que nos hablo al principio estén atentos..-
Sin mas palabras sostengo mi espada y miro a Terman para que me siga, me pongo enfrente de Algora y le doy una estocada con mi espada…

ante las palabras de algork un escalofrio recorre mi cuerpo, somos un simple sacrificio, de forma automatica disparo el arco hacia el demonio intentando de esta manera sobrevivir.

Tras el disparo preparo la cimitarra para el combate cuerpo a cuerpo

Calmate mujer, son guerrero valerosos... pero....

Todo bulle alrededor de Briana, los acontecimientos salen disparados, los guerreros se precipitan al ataque mientras ella, alli junto a las joven tensa sus musculos...

La mujer tiene razon, aqui podriamos encontrar la muerte, ese Demon... es...

Briana oculta el cuerpo de la joven caida con su menudo cuerpo, sabe que no es buena en la lucha pero ahora existe un motivo... quiza esa joven... quiza ella daria sentido a todo...

Briana comienza a mirar minusiosamente la sala donde se encuentran, tratando de abstenerse del combate...

En medio de la confusion y la batalla, Briana recuerda algo... tal vez podria ser importante... tal vez solo una esperanza... El recuerdo le trae a Layos y lo que el dijo de ella:

y en cuanto a ti pequeña muchacha debes saber que solo aquel o aquella que no tenga intervencion ni en la ley ni en el caos es avido de portar las armas que en ese manuscrito se citan,quizas tu puedas portarlas pero primero debereis de conseguirlas

Esta sala... esta llena de armaduras y armas... ¿y si todo eso que dijo Layos es cierto?

Briana comienza a mirar las armaduras y armas en busca de alguna que le llame la atencion...

Has nombrado a todos Algork... a todos menos a mi...

Tuve un mal presentimiento, y se hace realidad. De hecho, es mucho peor de lo que pensaba.

Algork, el hombre que aparecía en mis sueños, muestra su verdadero rostro por fin. Nos ha traicionado, y se ha limitado a guiarnos hasta nuestra muerte. En realidad la culpa no es del todo suya. Fuimos demasiado impulsivos, y nadie nos obligó a aceptar su propuesta. Le miro a la cara, mientras mis compañeros lanzan sus ataques contra él. Niego con la cabeza, resignado y decepcionado.

Finalmente vuelvo a colocarme junto a las dos mujeres, espada en mano. Es probable que muramos en este sitio, pero al menos defenderé a la muchacha.