El golpe había sido bueno... ¡Tenía que serlo! Directo a la aparición fantasmal del cuervo. Pero de algún modo inexplicable la Espada Solar simplemente lo atravesó sin más, como si fuese una imagen ilusoria que realmente no estuviese allí.
Después, los dos fantasmas se avalanzaron sobre mí y sentí cómo me marchitaba y consumía a ritmo acelerado, cayendo en la negrura de la inconsciencia o tal vez de la muerte.
Motivo: Estabilizarse
Tirada: 1d10
Dificultad: 10+
Resultado: 10 (Exito)
- Estabilizarse: Un 10 natural en 1d10.
Creo que no se ha tenido en cuenta que Parriwimple acierta y hace daño. Y que con su toque sagrado consigue golpear también a los incorporeos (creo)
Nuevamente, al ver caer al caballero del cuervo, Parriwimple intentó golpear a ese seres semietéreos. En esta ocasión sí tuvo éxito, y su garrote mordió la esencia fantasmal de la criatura.
- Ja. Parriwimple acierta esta vez- dijo con tono triunfalista, para disimular su preocupacion por el aliado caído.
Motivo: ataque cuervo fantasma
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 8(+8)=16 (Exito)
Motivo: ¿pero acierta de verdad?
Tirada: 1d100
Dificultad: 51+
Resultado: 53 (Exito)
Motivo: daño
Tirada: 1d6
Resultado: 2(+11)=13
¡Merquo! ¡Necesitamos tus expulsiones aquí delante! ¡Ven!
El elfo se hizo invisible en la retaguardia del grupo, en el salón de la chimenea.
...justo hace un segundo.
Maldición...
Malik conjuró un efecto de arma mágica sobre la espada que le regaló Ivalic. No podía esperar más, le necesitaban. Era su deber. Bauer avanzó hasta ocupar el lugar del caído Urik, cuyo cuerpo había sido tan marchitado que no podría volver a ponerse en pie con mera magia de curar heridas. Los dos espectros se cebaron entonces en el Guardián de la Pluma Negra, haciéndole tembar.
¡No podéis derrotar a un Cuervoooo...!
La frase parecía premonitoria, porque era a un cuervo a lo que se enfrentaban. Un fantasma cuervo, corrompido y conducido a la senda del Mal. La Dama Vey Rallen hundió su espada de toque fantasmal en el cuerpo del espíritu, pero justo en ese momento la magia del arma empezó a fallar... El filo parpadeó y se apagó. La habían pifiado para bien: para un arma que puede afectar siempre a los fantasmas, va y se queda sin energía.
Aún así, Parriwimple y Pitufín siguieron luchando con todas sus fuerzas. El incorpóreo empezó a difuminarse debido a las heridas, pero aún podía hacer mucho daño mientras siguiese allí.
Motivo: Ataque de Vey Rallen a Incorpóreo
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 1(+9)=10 (Fracaso)
Motivo: Daño Pitufín a Cuervo
Tirada: 2d8
Resultado: 9
Motivo: Reflejos Cuervo
Tirada: 1d20
Dificultad: 12+
Resultado: 17(+4)=21 (Exito)
Motivo: Toques a Malik
Tirada: 2d20
Dificultad: 9+
Resultado: 12(+4)=16, 11(+4)=15 (Suma: 31)
Exitos: 2
Motivo: Daño a Malik
Tirada: 2d4
Resultado: 1, 1 (Suma: 2)
Motivo: Daño de constitución
Tirada: 2d6
Resultado: 4
Cuervo fantasma CA 15 (Toque 15). +5 pgs adicionales. Incorporal (50% de probabilidad de fallar un ataque).
Incorpóreo -20 pgs. CA 15 (Toque 15). +5 pgs adicionales. Incorporal (50% de probabilidad de fallar un ataque).
Dama Vey Rallen, estremecida (-2 a las tiradas).
Helene 16/16 (37/37 -21pgs por constitución 2/8). Expulsar 0/5. Hechizos ya lanzados: 0-1; 1-1; 2-2, 2-4, 2-D; 3-2; 4-D. Gana libro de Strahd. Gasta 3 pergaminos de curar heridas leves, 1 virote flamígero.
Herr Urik -3/-1 (55/57 -10 por 2 niveles negativos -48 por 11 puntos de consunción de constitución). -detectar muertos vivientes, -soportar los elementos. Imposición 8/8. Castigar el mal 1/1. Castigar muertos vivientes 2/2. Expulsar 5/5. Conjuros gastados: -.
Urik ha sufrido tantos puntos de daño por consunción de característica y niveles negativos que no puede estar por encima de -1 pgs, con lo cual ningún conjuro de curar heridas puede devolver la salud suficiente como para que siga luchando o pueda andar por su propio pie. Seguirá consciente por el bien del roleo.
Parriwimple nuevamente intentó atacar pero...desgraciadamente su ataque no era demasiado bueno aunque, si por el aumento de moral que suponía la música de Ivalic impactaba, iba a hacer no poco daño a su inmaterial adversario.
Motivo: Nuevo ataque
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 5(+8)=13 (Fracaso)
Motivo: inmaterial
Tirada: 1d100
Resultado: 53(+51)=104
Motivo: daño
Tirada: 1d6
Resultado: 3(+11)=14
Ivalic hubiera felicitado a su valiente mascota si eso no hubiera supuesto tener que dejar de cantar. El grupo no lo estaba pasando bien contra esos inesperados enemigos y esperaba que sus cánticos de ánimo ayudaran a mejorar la situación. Herr Urik no parecía recuperarse de sus heridas y fue Herr Malik quien tomó su lugar.
Siguió cantando muy atento a lo que pasaba a su alrededor.
Su magia no surtió efecto sobre Urik y sus opciones se iban reduciendo. Fallos magistrales, más y más heridos... La sensación de fracaso iba creciendo y era hora de poner todas las castañas en el fuego. No había otra opción. Helene continuó agachada musitando un nuevo conjuro y una nueva arma espiritual tomó forma ante todos atacando al incorpóreo.
-Dama Vey Rallen, ¡ataca! -insistió.
Motivo: Arma espiritual
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 18(+9)=27 (Exito)
Motivo: Daños
Tirada: 1d8
Resultado: 5(+2)=7
Arma espiritual (2-3).
Ataque exitoso para 7 puntos de daño.
Al perder su magia, la empuñadura de la espada sólida atravesó la mano incorporal de la Dama Vey Rallen. El filo giró en el aire hasta apuntar al suelo, solo que entre los cascotes y la Inmortal estaba Malik Bauer. El tiempo se hizo eterno, mientras la espada descendía en dirección al Guardián de la Pluma Negra.
Con el incorpóreo aturdido por el garrotazo de Parriwimple, Pitufín lanzó una poderosa descarga. El filo de la espada de toque fantasmal hizo de pararrayos, y el chispazo saltó entre el espíritu y el arma. El metal absorvió el ectoplasma del incorpóreo hasta hacerlo desaparecer, recargando la magia de toque fantasmal. En el último segundo, la mano de la Dama del Cuervo agarró la espada, y evitó que siguiese cayendo. Las miradas de Malik y la Inmortal se cruzaron. Ambos atacaron a la vez.
¡Yo te absuelvo, Cuervo Caído!
La espada corta que portaba Malik y la espada bastarda que portaba Vey chocaron en el interior del pájaro incorpóreo. El cuervo espiritual graznó, pero a pesar de todo se repuso, volviendo a arremeter contra Malik, cada vez más débil y enjuto. No duraría mucho más.
Mientras, Helene trataba de canalizar la magia para formar un rodillo etéreo, pero fue incapaz de lograrlo debido a la extenuación y a la energía drenada por los asaltantes del pasillo segundos atrás. En un segundo intento lo logró, y el rodillo golpeó al ya de por sí maltrecho cuervo.
Motivo: Daño descarga de Pitufin
Tirada: 2d8
Resultado: 8
Motivo: Reflejos para mitad de daño
Tirada: 1d20
Dificultad: 12+
Resultado: 1(+4)=5 (Fracaso)
Motivo: Ataque de Vey Rallen a Cuervo
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 17(+9)=26 (Exito)
Motivo: Daño a Cuervo
Tirada: 1d10
Resultado: 8(+9)=17
Motivo: Urik % de fallo
Tirada: 1d100
Dificultad: 51+
Resultado: 58 (Exito)
Motivo: Ataque
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 1(+17)=18 (Exito)
Motivo: Daño (pierde el daño adicional de castigar por pifia)
Tirada: 1d6
Resultado: 1(+5)=6
Motivo: Toque a Malik
Tirada: 1d20
Dificultad: 9+
Resultado: 18(+4)=22 (Exito)
Motivo: Daño a Malik
Tirada: 1d4
Resultado: 1
Motivo: Daño de constitución a Malik
Tirada: 1d6
Resultado: 4
Cuervo fantasma -25 pgs CA 15 (Toque 15). +5 pgs adicionales. Incorporal (50% de probabilidad de fallar un ataque).
Dama Vey Rallen, estremecida (-2 a las tiradas).
Helene 16/16 (37/37 -21pgs por constitución 2/8). Expulsar 0/5. Hechizos ya lanzados: 0-1; 1-1; 2-2, 2-3, 2-4, 2-D; 3-2; 4-D. Gana libro de Strahd. Gasta 3 pergaminos de curar heridas leves, 1 virote flamígero.
Herr Urik -3/-1 (55/57 -10 por 2 niveles negativos -48 por 11 puntos de consunción de constitución). -detectar muertos vivientes, -soportar los elementos. Imposición 8/8. Castigar el mal 1/1. Castigar muertos vivientes 2/2. Expulsar 5/5. Conjuros gastados: -.
Urik ha sufrido tantos puntos de daño por consunción de característica y niveles negativos que no puede estar por encima de -1 pgs, con lo cual ningún conjuro de curar heridas puede devolver la salud suficiente como para que siga luchando o pueda andar por su propio pie. Seguirá consciente por el bien del roleo.
Parriwimple estaba torpón, quizás debido a la preocupación que sentía. Era un ataque muy inferior a los que podía causar y que, con toda probabilidad, marraría el blanco. Y era una pena, porque si diera lograría afectar al cuerpo inmaterial del cuervo y aunque casi de refilón, la poderosa corpulencia del gigante bonachón quizás fuera suficiente para destruirlo.
Motivo: Y ahora al cuervo
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 3(+8)=11 (Fracaso)
Motivo: pero si diera...
Tirada: 1d100
Dificultad: 51+
Resultado: 76 (Exito)
Motivo: daño
Tirada: 1d6
Resultado: 1(+11)=12
- El modificador de +8 no tiene en cuenta el infundir valor de Ivalic. De todas formas con una diferencia de cuatro, creo que esta vez sí que fallo.
Me encontraba paralizado en un duermevela, marchito hasta convertirme en apenas un cascarón de mí mismo, aplastado bajo el peso de mi propia armadura, y apenas consciente de lo que pasaba alrededor.
Tan sólo esperaba que mis compañeros pudieran triunfar donde yo había fracasado, aunque sentía una enorme vergüenza por haberme mostrado tan indigno ante los fantasmales ojos de mi difunta maestra.
Helene, una vez que el rodillo hizo acto de presencia y empezó a repartir estopa, se alzó del suelo enarbolando su lanza que centelleó en el aire para dirigir su filo contra el cuervo.
Motivo: Arma espiritual
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 13(+9)=22 (Exito)
Motivo: Daño arma espiritual
Tirada: 1d8
Resultado: 5(+2)=7
Motivo: Ataque lanza
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 20(+6)=26 (Exito)
Motivo: Daño lanza
Tirada: 1d8
Resultado: 1(-1)=0
Paradojas del destino: saco un crítico y hago daño 0, que multiplicado por 3, sigue dando cero.
El combate iba y venía, a veces parecía que se inclinaba a favor y después no parecía tan claro, pero el grupo luchaba contra aquellos espíritus malignos como podía. Ivalic, orgulloso de Pitufín, seguía cantando esperando que eso animara a sus compañeros y que el combate pudiera decidirse a su favor de una vez por todas.
Debilitado en extremo por la comitiva de vivos que se habían adentrado en el castillo de Strahd, el cuervo fantasmagórico lanzó un último graznido antes de volver a arremeter contra Malik. La espada fantasmal de la Dama Vey Rallen le cortó el paso, hundiéndose en el ectoplasma del incorpóreo. El cuervo se difuminó hasta desaparecer, y empezaron a caer pequeños copos de nieve desde el último lugar en el que el espíritu había existido antes de desaparecer.
También hubo una reaparición. Merquo Iluminador apareció flotando sobre sus cabezas. Dos grandes alas de murciélago salieron de su espalda, sosteniéndolo en el aire, antes de que aquel ser desvelase su verdadera forma: Khyristrix.
Cuando el elfo vino a notificarme vuestra negativa a destruír inmediatamente el Corazón del Día, lo capturé y me disfracé de él para guiaros por la senda más conveniente para mis intereses.
Un escalofrío recorrió la espalda de Firan cuando se dió cuenta de que si no llega a ser por la intervención de Helene, el pequeño mago se habría quedado a solas con la diablesa, que probablemente le había matado y se habría quedado el libro de Strahd.
Por el pasillo de la izquierda podréis bajar a las catacumbas, para rescatar al hijo del Burgomaestre. Por el pasillo de la derecha podréis subir por las escaleras del torreón hasta el Corazón del Día. Tomad el pasillo de la derecha, destruíd de una vez por todas la jodida reliquia y os devolveré a Merquo para que pueda curar vuestras corrupciones y toda la energía vital que los incorpóreos os han drenado.
Khyristrix abrió un portal dimensional y se introdujo en él cerrándolo tras de sí. La diablesa se había ido, y ahora tenían un Urik casi comatoso que no tenía fuerzas ni para andar.
Motivo: Ataque de Vey Rallen
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 20(+9)=29 (Exito)
Otra opción sería volver a la sala de la chimenea.
- "Uggghhh... No os preocupéis... por mí... Herr Parriwimple, tomad el corredor de la izquierda. Rescatad el alma de vuestro hijo primero..." - Digo, tirado en el suelo, hecho un guiñapo.
-Gracias, Dama Vey Rallen. Sin duda, sois una gran guerrera -dijo Helene al espectro, inclinando levemente la cabeza en señal de reconocimiento una vez que Khyristrix hubo desaparecido. Había colocado una mano sobre el hombro de Firan al sentir su estremecimiento, consciente de que su cerebro había llegado a las conclusiones lógicas tras aquel esperpéntico acto teatral. Se inclinó sobre su cabeza y depositó un suave beso-. Los caminos del amor son inexcrutables -le murmuró con una leve sonrisa.
Entonces miró al resto. Estaban hechos un guiñapo, tal y como había dicho un inesperadamente débil y maltrecho Urik en relación a sí mismo. Quizá debiera prescindir de su fortaleza y habilidades para descubrir su verdadero ser, un hombre amable que priorizaba la destrucción de la reliquia a su inmediata recuperación de la mano del secuestrado Melquor.
-Mi magia no puede sanarle. Y hemos recorrido un largo camino y pagado un notable precio por llegar hasta aquí. Sigamos y cumplamos con nuestro primer objetivo sin dejar a nadie atrás. Pero antes, todo aquel que deba ser sanado, sin excepción, se adelante para que pueda hacer algo. Si no estamos en el máximo de nuestras posibilidades, pereceremos y fracasaremos.
Finalmente vencieron e Ivalic dió un salto de alegría mientras lo celebraba buscando un abrazo de Tasia.
-¡Bien hecho Pitufín!
Entonces apareció Merquo, pero antes que pudieran saludarlo se descubrió su verdadero ser, en realidad era Khyristrix disfrazada y según decía tenía secuestrado al verdadero Merquo. Ivalic no se podía creer la manera en la que los había engañado y utilizado, deberían andarse con mucho cuidado a partir de entonces, parecía que su posible aliada era también muy peligrosa, no podían fiarse.
Ivalic se acercó donde se encontraba Herr Urik con tristeza, si la magia sanadora de la Señora Helene no podía curarlo la suya tampoco serviría, la mujer era mucho más poderosa que él. El muchacho se agachó y cogió una mano del paladín.
-No se preocupe Herr Urik, no lo abandonaremos. Le ayudaré a caminar si lo necesita. -Estaba de acuerdo con la Señora Helene, no dejarían a nadie atrás.- Yo también curaré a todo el que le haga falta, después rescataremos el alma del hijo de Parriwimple e Hida y luego arreglaremos cuentas con nuestros enemigos, sus acciones no quedarán sin castigo.
Bueno, quizás quedaran sin castigo, pero eso quedaba muy feo decirlo y necesitaba que todo el grupo se mantuviera positivo a pesar de las circunstancias.
- "No... no puedo moverme, mi buen Ivalic... No... ni siquiera siento las piernas, me temo. Dejadme aquí." -