Partida Rol por web

Fantasy World (Híbrido de HLdC)

Prólogos I

Cargando editor
14/10/2013, 23:38
Director

PRÓLOGO

Reino de Meridial - Ciudad de Fuego - Castillo del Rey Cail

El Rey Cail estaba cansado de que Talashia actuase siempre por su cuenta pero era consciente de que ella no era una niña normal por lo que no podía pedirle que se comportase como tal, por lo que un día decidió reunirla en el salón del trono.

-Talashia - dijo con voz grave - El Mal Supremo se acerca. Todos los sabemos. Un hechicero pretende traerlo de vuelta, no son habladurías, es cierto, pero no sabemos más. Necesito que salgas ahí afuera y reúnas información.

Los murmullos se adueñaron de el salón. Los consejeros parecían asombrados, incluso hasta los soldados. ¿El Rey iba a enviar a una simple niña a tamaña misión? ¿Como se defendería? Pero claro, ellos no sabían que Talashia no era una simple niña...

-Te dirigirás a la ciudad de la Tierra, dicen que allí están sucediendo cosas muy extrañas: Los animales están mas violentos, las plantas se han marchitado de repente, el agua ya no parece tan cristalina como de costumbre... Es posible que tenga algo que ver con nuestra causa. Investigalo. Te acompañará Thenidiel, es mi mejor guerrera - Tras ponerse la guerrera al lado de la niña, Cail añadió - Me han creado un orbe especial, realizado por los mejores hechiceros del reino. Si te pones delante de una hoguera y te concentras, podrás enviarme un mensaje al orbe. Es la forma mas segura de comunicarnos - Después las miro a ambas - ¿Alguna pregunta antes de partir?

 

Cargando editor
15/10/2013, 00:37
Talashia

-Su majestad, sus órdenes serán cumplidas, pues el Bien Supremo habla a través de su palabra y su voluntad. -Talashia nunca se refería a su padre si no era por el título, ya que estaban en corte.-Le informaré tan pronto como tenga noticias de lo que esté ocurriendo, y confiaré mi vida a su espada como si fuera usted la que la empuña. Tomaremos el orbe tan pronto salgamos de aquí. He de preguntar ¿Hay alguien con quien podamos entrar en contacto al llegar a la ciudad de la tierra o algún sabio que debiéramos consultar?

Cargando editor
15/10/2013, 13:06
Director

Buscad a Manfrost, es uno de los soldados de la ciudad y un hombre de confianza. El podrá ayudaros. Y tu no necesitas el orbe, Talashia. El orbe es para mi, tu tan solo necesitas una hoguera y concentrarte para enviarme un mensaje. ¿Alguna pregunta más? - finalizó el Rey.

Cargando editor
15/10/2013, 13:11
Director

PRÓLOGO

Un nuevo peligro se estaba gestando en el mundo de Umbría y, como no, tu deberías ayudar a solucionarlo. Contaste todo lo que sabías al Rey Cail, el cual tenía también información adicional.

Las gentes no quieren creerlo, y de momento es mejor así, pero el Mal Supremo es real - te dijo el Rey con voz seria en sus aposentos - Un temerario hechicero quiere traerle de vuelta y temo que sea capaz de hacerlo. Debes encontrarle y detenerle. Desgraciadamente no tenemos mucha información acerca de su paradero pero en ciertos lugares están pasando cosas extrañas: Los animales se vuelven mas violentos, los ríos se secan... Es la marca del mal.

Necesito que vayas a la Ciudad del Agua, Rendam. Allí viven los mas sabios sacerdotes, quizás sus palabras puedan ayudarte. He enviado a la joven Talashia* a buscar información. Si te cruzas con ella, ayúdala en todo lo que puedas, esa niña tiene un gran potencial. Los miembros de la Orden de la Luz pueden ser también de utilidad pero, ya sabes, no te fíes al cien por cien de nadie. El Mal puede corromper a cualquiera...

¿Alguna pregunta?

Notas de juego

*Poco sabes de Talashia, no tienes muy claro su origen pero fue adoptada por el mismísimo Rey. No es una niña común y corriente y parece dominar el poder del fuego, como si fuese parte de ella. Es muy extraño a su edad, aunque fuese una aprendiz de hechicera, que no es el caso. Muchos dicen que es una reencarnación de un ave fénix... Tu ya no sabes que pensar pero, aunque no sea legítima, es la hija del rey Cail y merece tu respeto.

Cargando editor
15/10/2013, 13:23
Director

PRÓLOGO

Te encontrabas en las Tierras Sombrías buscando información acerca de aquel hechicero, un mero trámite para llegar hacia el Mal Supremo y conseguir el poder que siempre habías deseado, cuando gracias a unos mercenarios con pocos escrúpulos te enteraste de que por aquellas tierras moraba un siervo del hechicero, pues al parecer necesitaba algún tipo de ingrediente que solo podía encontrarse allí.

No te fue muy difícil sorprenderle, no era muy hábil, o quizás tu eras demasiado bueno. La cuestión es que conseguiste inmovilizarle y ahora lo tienes a tu merced, dispuesto a responder a todas tus preguntas.

Cargando editor
15/10/2013, 13:29
Director

PRÓLOGO

Pasaron los días tras tu encuentro con Lilith y llegaste a un poblado de las Tierras Sombrías. Era un lugar tremendamente pobre, incluso para la zona, y allí no había realmente nadie peligroso, pero si útil. Aquellos idiotas veneraban al Mal, pero no sabían nada acerca de el, no sentían su llamada como tu. Sin embargo, es posible que supiesen algo, por mínimo que fuera, alguna pista que te acercase mas a el.

Había poca gente en la calle y entre todas las chabolas, una destacaba, debía ser la del alcalde, jefe o como demonios lo llamasen allí. Esperabas que aquello acabase pronto, aquel pueblo era repugnante.

Tenía que conseguir información, no importaba el precio...

Cargando editor
15/10/2013, 14:35
Rendam Weispell

Por las palabras del Rey Cail sus sospechas se veían de alguna manera confirmadas, su preocupación se acrecentó ya que al principio se había pensado que aquel asunto podía estar ocurriendo a pequeña escala. Sin embargo, las cosas parecían haber ido a mayores y suyo era el deber de solucionarlo.

- Por algo se empieza, majestad. Me dirigiré a la Ciudad del Agua y buscaré toda la ayuda que sea posible. Quizás descubriendo el origen del mal en cada uno de los sitios donde se vea reflejado nos ayude a encontrar la fuente de el peligro que está azotando el reino. - dijo el luchador haciendo una reverencia al Rey - Si encuentro a su hija la ayudaré y protegeré como le protegería a usted, no se preocupe. -

Se dirigió a sus aposentos, los cuales apenas había usado por sus continuos viajes por el mundo, y cogió todo lo que necesitaba para el nuevo camino que tenía por recorrer. En poco más de media hora se encontraba cruzando las puertas de la ciudad con su caballo*.

A galope comenzó a ir hacia la Ciudad del Agua, siempre alerta y buscando cualquier cosa extraña que llamase su atención y, quién sabía, quizás a la propia Talashia.

Notas de juego

*suponiendo que pueda tenerlo, aunque sea para el prólogo de forma narrativa, luego me lo matáis si eso xDDDDD
 

El Rey envia a su hija adoptiva, la reencarnación de un ave de fuego... a la ciudad del agua. GENIUS

Cargando editor
15/10/2013, 15:59
Director

Notas de juego

Capítulo 1: Le cae un rayo a tu caballo XD

Y el Rey no te ha dicho donde está Talashia. A la Ciudad del Agua vas tu, ella puede estar en otra parte :P

Cargando editor
15/10/2013, 16:03
Director

PRÓLOGO

Todo parecía muy tranquilo en tu clan, no se habían producido batallas destacables en los últimos días, tan solo alguna pelea aislada, pero te temías lo peor. Esos rumores del regreso del Mal Supremo asustaban a los tuyos y tu comenzabas a creértelo. Y entonces, llegó el día, el día en el que apareció la extraña. Tus hombres la escoltaron hasta tus aposentos.

Cargando editor
15/10/2013, 16:08
Varania, la hechicera

Braka Bagim - dijo la mujer con voz suave - Eres muy poderoso, muchos hablan de ti, pero ¿quieres que las generaciones futuras hablen también de ti? Para eso necesitas ser aún mas poderoso, y eso solo puedes conseguirlo de una manera.

La mujer se aclaró la garganta.

Una gran guerra va a comenzar, Braka, y tu y los que te siguen podéis ser de gran utilidad. El Mal Supremo, mi señor, se alzará nuevamente en la tierra y esta vez se hará con el control de todo. ¿Por qué no cabalgar juntos, Bagim? Únete a nosotros, entra en las filas del Señor del Mal como uno de sus mas importantes lugartenientes y saborea el autentico poder, que te hará ser recordado eternamente.

Y tras añadir estas palabras observó, sonriente, al orco, a la espera de una respuesta.

Cargando editor
15/10/2013, 16:15
Director

PRÓLOGO

Llevas ya varios días viajando sin rumbo fijo, en busca de algo que capte tu atención, y parece que por fin los has encontrado.

Te encuentras en el reino de Meridial y has llegado hace poco a la Ciudad de la Tierra. Aquí todos parecen algo asustados y las cosas se ven muy raras. Los animales salvajes, a los que no se suele ver sino te adentras mucho en el bosque, aparecen cada vez con mas frecuencia en la ciudad y atacan a los aldeanos, los ríos están poco a poco secándose, las cosechas no son muy buenas... Y todo ha comenzado a suceder de repente. Muchos lo llaman la marca del Mal. Dicen que es todo por culpa de un hechicero que quiere traer de vuelta al Mal Supremo. Es un rumor en boca de todos.

De pronto, mientras caminabas por la ciudad, envuelto en tus pensamientos, una niña se acercó a ti a toda prisa.

¡Señor, señor! Mis papis... Un oso... ¡Ayúdeles! - fue lo único que pudo decir, entre sollozos.

Cargando editor
15/10/2013, 19:40
Adaeric Evert, el Ungido
Sólo para el director

Adaeric caminaba por el oscuro y ominoso poblado como si fuera un lobo que se adentra en territorio de una manada rival. Cauteloso, con mil ojos y la mano descansando sobre la empuñadura de la espada, reocrrió lo que debía ser la calle principal de la ladea, la única que parecía mínimamente adecentada, con los guijarros del suelo apartados a un lado para evitar que los caballos se rompieran las pezuñas.

Aquel lugar daba más pena que miedo, pero el paladín ya había estado en lugares similares y sabía que no debía fiarse de la apariencia externa. Nadie sobrevivía en las Tierras Sombrías por casualidad o suerte. Aquello no existía.

El joven se acercó a uno de los tipos que se hallaban sentados en el suelo, no sabía si borracho o medio desmayado, y le propinó un ligerísimo puntapié para ver si se movía.

¡Eh tú! ¿Quién manda aquí?

Cargando editor
15/10/2013, 22:16
Director

Antes de que aquel tipo pudiese responderte, un hombre de altura y tamaño considerable surgió de la chabola grande y con voz hosca te gritó:

¡Soy yo! ¿Tienes algún problema? - exclamó mientras paseaba la mano por la empuñadura de su espada oxidada.

Cargando editor
16/10/2013, 20:50
Director

PRÓLOGO

Mano Larga había tenido suerte esta vez, por alguna razón inexplicable del destino un señor relativamente importante había creído sus cuentos y, temeroso de ser atacado por el Mal Supremo, decidió contratar un guardaespaldas "de fiar" para acompañarle desde la Ciudad del Aire hasta la Ciudad del Agua. Parecía una tarea fácil y el hombre había prometido una buena suma a cambio, así que aceptaste sin dudarlo.

Os dirigíais por un estrecho camino en un carruaje tirado por caballos, tan solo ocupado por el señor, el conductor y tu.

De repente, en la oscuridad de la noche, alguien exclamó en el camino:

¡Quietos! Habéis llegado a nuestro territorio y debéis pagar una cuota.

Y un hombre, de aspecto peligroso, se plantó delante del carruaje, haciendo que el conductor frenase en seco.

El hombre adinerado te miraba, presa del terror, esperando que hicieses algo.

Cargando editor
16/10/2013, 21:23
Talashia

-No mi señor, tu sabiduría y tu honra te precede, todos sus vasallos sabrán que por su decisión al escoger a tan leales agentes el Mal Superior no se ha extendido. ¡Que la llama no perezca jamás!.- Termino entonando el lema de la casa del rey Cail.

Cargando editor
16/10/2013, 21:42
Abaliv, el Elegido

Esgrimiendo una espada en la mano izquierda y una sonrisa en el rostro miro al hechicero, cuyo cuello está pegado a la hoja de mi arma -Bueno, veo que estás dispuesto a hablar. Soy todo oídos. Y dime, ¿donde se encuentra tu señor? ¿que planes tiene? ¿que necesita para lograrlos? Sabes, la oscuridad es un don que pocos aprecian, algo que a unos pocos nos hace poderosos si aprendemos a controlarlo adecuadamente -mi mano derecha se inunda por el poder de la oscuridad mientras hablo, dando más fuerza si cabe a mis palabras.

Cargando editor
16/10/2013, 21:30
Dacen, el corrompido

Observa con bastante atension lo que pasaba en el reino que podria ser uno en los cuales se quedaria un tiempo. Presto mas atension a sus problemas que mientras se trataban de bestias salvajes se podria encargar por un algunas monedas. Pero las supociones de estos lo pusieron en mayor alerta, escuchar la vuelta del Mal Supremo no era algo que estuviera esperando. Era un tema importante del cual no sabia si queria meterse, confiaba en sus habilidades pero sus años con el grupo nomada le habia enseñado sobre la precausion.

Sus pensamientos fueron rotos cuando escucho a una niña pedirle ayuda, rapidamente la tome del brazo y subi al caballo. Señalame donde. le ordeno a la pequeña mientras comenzaba apurar a su compañero equino.

Cargando editor
17/10/2013, 11:41
Adaeric Evert, el Ungido
Sólo para el director

Será mejor que sepas usar esa hoja herrumbrosa si tienes intención de sacarla  amenazó nada veladamente el joven al hombre que acababa de salir. No se hablaba así aun paladín, fueran o no las Tierras Sombrías.

Busco información añadió sin darle tiempo al otro hombre a reaccionar. Normalmente eso podía evitar un altercado, no dejar pensar al otro. No obstante, si tenía que manchar su acero con la sangre de aquel despojo lo haría. Y creo que tú puedes dármela. Es lo único que te mantiene con vida en estos momentos, así que piensa bien tu respuesta.

Cargando editor
17/10/2013, 19:43
Braka Bagim

Braka se hallaba sentado en su trono con la porte que le es propia, la de un poderoso señor de la guerra. Cuando la mujer se le presentó éste enarcó una ceja con incertidumbre, ¿qué puede traer a una humana sola hasta aquí? Sería toda una insensatez...si fuese tan insensata como para presentarse sin ninguna clase de protección...y me temo que, aunque no es visible, algo debe tener pues no aparenta ser una insensata. pensó. Cuando la mujer hubo dicho sus palabras, Braka permaneció un instante en silencio, observando pensativo...antes de soltar una leve carcajada. -No has dicho tu nombre, porque aunque lo tengas éste carece de importancia al ser tú, humana, una simple sierva. Sin embargo mi nombre llena tu boca, y resuena con fuerza en mis dominios...ésa es la principal diferencia que quiero mantener. -Braka mantuvo su característica sonrisa ladina, desafiante. Tras sus palabras se alzó de su trono de huesos y acero oxidado y ensangrentado, y su poderío quedó acentuado por su tamaño. Bajó los dos escalones de su trono, acercándose a la mujer, hasta estar a la intimidante distancia de unos pocos pies. -No me pareces una insensata mujer, pero ignoras un hecho irrefutable: Las generaciones futuras sabrán de mí, y lo que soy hoy será una nimiedad con lo que seré el día de mañana...y no he llegado hasta aquí siendo el lugarteniente de nadie. -dejó un instante de silencio en el que su orgullo llenó el salón, y añadió: -No debería ser necesario comentar las obviedades...Si tu señor fuese capaz de lograr su fin sin ninguna ayuda no estarías aquí, eso significa que, obviamente, se le puede vencer. Además muy pocas cosas son eternas en este mundo... -entonces se dio la vuelta, dándole la espalda a la mujer sin ningún reparo, y agarró con su diestra su pesada hacha, que descansaba apoyada en el lateral de su trono. -Y ahora...¿porqué no me muestras de lo que sois capaces? -dijo, volviéndose hacia ella, mirándola por encima del hombro con su sonrisa más pronunciada y mayores aires de desafío.

Cargando editor
17/10/2013, 22:33
Varania, la hechicera

La mujer esbozó una desafiante sonrisa.

Vaya, Braka, veo que lo se cuenta de ti es verdad. Eres todo bravura... y poco cerebro.

¿Quieres que te muestre de que somos capaces? De acuerdo.

La mujer se quedó unos instantes en silencio, sin pestañear ni moverse, para después añadir:

Mi nombre es Varania, soy una simple sierva. Sin embargo, mi nombre llena tu boca, pues tengo mas poder que un centenar de orcos juntos y puedo destruiros con un simple pestañeo... Esa es la principal diferencia que quiero mantener.

Antes de que Braka pudiese responder, escuchó un ruido, después un terrible olor y, antes de que pudiese hacer nada para evitarlo, sus gentes corrían y gritaban.

Su clan estaba ardiendo, mientras la sonrisa de Varania se hacía cada vez mas pronunciada.