Partida Rol por web

-¿De verdad crees que voy a hacer lo que tú me digas?- dice enarcando una ceja y cruzándose de brazos. Aunque le temblaban las piernas no parecía dispuesta a dejarse intimidar por un hombre así. Pero un rápido vistazo a su amigo en el suelo hace que recapacite sobre sus palabras y cierre por un momento los ojos con fuerza -esta bien...- lo último que quería era que pasaran más cosas o que se descargase más con Ryuma -¿qué es lo que quieres que haga?- lo mira seria, intentando imitar su cara de pocos amigos. 

Vomitó todo lo que había en su estómago, un liquido amarillento y con un fuerte olor ácido salió de su boca, y fue a dar a la bolsa que el médico le ponía para que no manchara. Asqueada aún y cansada, volvió a recostarse en la cama, con los ojos cerrados y una angustia creciente en el pecho, mientras el médico intentaba calmarla, Shizuka dejó sus ojos entreabiertos y en un silencio que estaba sumido por una sensación de lejanía y frialdad, estudió su rostro...

- ¿nos... nos conocemos? - al fin abrió su boca para poder hablar, el sabor amargo de su propio vómito estaba en su boca, y le daban ganas de nuevamente vomitar, pero esta vez, en su estómago se quedó lo que había ingerido - siento.. que sí... ah... quiero.. a mi mamá...- hizo un puchero, y cerró sus ojos, hasta ponerse de costado  y sollozar, realmente deseaba con todas sus fuerzas a su mamá,se sentía pésimo, mareada, todo le daba vueltas.

Aun en esa situación, Sara le sigue llamando idiota, podía  ser  que no pensara las cosas, si fuera una chica normal estaría pidiendo ayuda en vez de quedarse ahí provocando al tipo, pero claro ella no era una chica normal,
era Sara la sin cabeza.

-¡Idiota tú!, que no entiendes! - Ahora se encontraba inseguro sobre que debía hacer, si mostraba algún movimiento hacia el tipo frente a Sara,   podía sospechar de él y seguramente preguntaría muchas cosas sobre su vida, pero si no hacia algo la situación se podría salirse de control.

-AAAGH!.-  Entre lo que pensaba recibe un fuerte golpe en la boca del estomago, cae al suelo de rodillas algo resentido, el combo lo había pillado nuevamente por sorpresa y no tubo tiempo de amortiguarlo. Por suerte no era tan débil para que acabaran tan rápido, podía decir por ese momento que gracias los muchos golpes y a los  entrenamiento que le hacia pasar su odiado padre pudo resistir sin salir demasiado dañado.

-"Maldito, te estas sobrepasando!".- Mira hacia donde estaba su compañera viendo como se le acercaba el sujeto ese.- "Idiota!.. no te le acerques!"  Sara podía la chica mas   bruta, antipática, idiota y borde del mundo con el...pero seguía siendo una niña…

-“No te le acerques, no te le acerques!”.- Si alguien debía meterse con un tipo así, debía ser él si algo salía mal,  podría simplemente cambiarse de ciudad, pues no tenía nada que perder, no así Sara  que seguramente tenia una familia, y una vida, si el tipo se atrevía a decirle algo o a tocarla esta vez  no dudaría en enfrentarlo, apoya una de sus piernas para ponerse de pie.

No terminábamos de salir que nos gritan ordenando volver a la sala. Sin tiempo de replica y a regañadientes vuelvo y espero mientras vuelvo ahhh... esto se fue de las manos, ¿que tenia esa bebida? sentado tomándose la cabeza, aun estaba algo mareado y ahora con algo de migraña oye, dai.. sus palabras son interrumpidas por la abrupta entrada del dueño del lugar ahora con mas enfado y a los gritos un momento, usted nos pidio que saliéramos al pasillo y a los demás que se recompongan, supongo estarán en el baño toma aire profundamente, intentando parar el mareo ¿me gustaría saber que tenia ese zumo de naranja y como es que vendieron este tipo de bebidas a menores de edad? ya estaba molesto, no solo le estaban gritando y culpando de cosas sin sentido, sino también el mareo y dolor de cabeza comenzaban a surtir efecto sabia que no debí venir piensa mientras mira fijamente al dueño esperando una respuesta dijo que quería hablar con nosotros ¿que quiere preguntar? 

Tras ver que porfin comprendes la situacion amplia mas su sonrisa.
-Bien guapa, porfin me entiendes.
¿Sabes cantar bien? Tengo que cantar ahora en un duelo de parejas, pero estoy solo y si pierdo tengo que desnudarme e ir corriendo por toda la calle "las verduras son importantes niños comed pepino que da vitaminas"
Me ayudaras ¿verdad?.
Tras unos segundos esperando tu reacción escuchas de fondo a otro hombre también con síntomas de estar bastante borracho.
-Eh Onizuka, ¿pero que haces tío?, ¡mira la que has liado!
Te dije que nada de gente de fuera, tras mirar a Sara unos segundos lo entiende un poco mejor.
Otra vez con las lolis tío, que mal royo das enserio.
Entonces se gira hacia Sara pidiéndole disculpas sin darse cuenta de que esta pisando la mano de Ryuma.
-Perdona, lo siento muchísimo... cuando mi amigo bebe se le va un poco pero en realidad es buena persona...¿que es esto blandito?.
UAAAAAH, ¡¡¡Onizuka te has pasado!!! ¿Oye estas bien?
Ven, aquí fuera hay una ambulancia que la hemos oído antes, lo siento muchísimo enserio. Por favor toma mi tarjeta, todos los gastos corren a nuestra cuenta, tanto de lo que hayáis consumido aquí tu y tus amigos como de lo que sea para que puedas recuperarte, y si necesitas alguna cosa...no se protección, quitar a alguien de en medio...alguna amenaza o sustillo, ya sabes...no dudes en llamar y te haremos una oferta especial.
El hombre hablaba bastante rápido y atropelladamente, no paraba de disculparse cada dos por tres. Se le notaba muy nervioso y preocupado por los dos mientras que en algunos momentos insultaba a Onizuka o le daba patadas. Al final lográis llegar a un pasillo donde podéis oír la voz de Satoru y la del manager que visteis al principio.

-Vereis, conozco a Shizuka desde niña y me gustaria saber todo lo posible. Ahora mismo ella esta en la ambulancia tras haber sufrido un ataque epileptico, no se que relacion teneis con ella o desde cuando la conoceis, pero sea cual sea vuestra relacion con ella espero que colaboreis para solucionar cuanto antes esto y encontrar al causante.
Aunque intentaba ser amable era bastante evidente que estaba cabreado y preocupado por la chica. Parecia que decía la verdad.
Estuve hablando antes con los enfermeros y me dijeron de hacerles ciertas preguntas a todos ustedes:
¿Como os llamáis?
¿Que relación tenéis con Kinomoto?
¿A que hora vinisteis?
¿Que tomasteis?
¿Quienes vinisteis?
¿Quien os trajo la consumición?
¿Sobre que hora visteis mal a Kinomoto?
¿En algún momento hubo algunas luces o sonidos capaces de provocar este ataque?
Habla muy serio y frió, como si fuera algo realmente grabe.
Escucháis tras esto 4 voces cerca de la zona donde estabais, dos eran las de Sara y Ryuma y las otras dos no las reconocíais.

F-Fasuto - se quejó Kaori mientras era guiada por el policía a una sala, caminó dejándose llevar por la mano que le apretaba el centro de la espalda pero con la cabeza vuelta hacía su amigo intentando comunicarse con él con la mirada.

No les contaré nada. - le prometió antes de perderle de vista al entrar en la sala.

Al entrar en la sala Kaori buscó rápidamente un punto de apoyo para disimular su estado de embriaguez. 

Se recostó en un mueble y cruzó los brazos desaprobando esa reunión.

-¿Qué? - preguntó sin mucha educación, aunque inmediatamente después su cerebro le sugirió que esa no había sido la mejor estrategia.

El policía joven había visto muchas veces este tipo de situaciones y sabia el como tratarlas, por suerte para ti parecía simpático aunque le molesto un poco tu actitud aunque en cierta manera lo entendía dada tu edad.
-Veras, hemos venido por un aviso sobre una chica que ha sufrido un ataque epiléptico. Se que no es muy normal que la policía venga a investigar pero...tras unos momentos pensando en sus palabras continua...en este tipo de lugares nunca viene mal el investigar un poco, no se si me entiendes.
El caso es que tras hablar con los enfermeros que están tratando a tu amiga me pidieron el que hiciera ciertas preguntas a cada uno de vosotros por separado, por favor se sincera, es por el bien de tu amiga.
Tras esto se toma un momento para sacar una libreta y lápiz, te sonríe mirándote a los ojos y comienzan las preguntas:
¿Como te llamas?
¿Que relación tenéis con Kinomoto?
¿A que hora vinisteis?
¿Que tomasteis?
¿Quienes vinisteis?
¿Quien os trajo la consumición?
¿Sobre que hora visteis mal a Kinomoto?
¿En algún momento hubo algunas luces o sonidos capaces de provocar este ataque?
El hombre te mira paciente esperando todas las respuestas.

Kaori escuchó la explicación del Policía, a decir verdad no le apetecía aclarar todo lo sucedido y tampoco creía que fuera útil para Shizuka, si había tenido un ataque epiléptico los médicos sabrían que hacer, no tenía ningún sentido que vinieran a peguntarles a ellos y menos que los separaran.

Miró a su alrededor, al mover la cabeza pudo sentir como todavía la habitación se movía con ella y se angustió, estaba sola con un hombre que la doblaba en edad, o casi, en una habitación probablemente insonorizada y completamente nula de reflejos. Había visto muchas películas, las suficientes como para saber que si un grupo de amigos se lo pasaban bien, uno de ellos moría o acababa en el hospital y se presentaba la policía, alguien acabaría con el resto, uno a uno, por tal de vengar a la persona caída*.

Sin embargo, ese hombre no se le acercó, sino que sacó una liberta y le disparó una retahíla de preguntas que ella tomó como una acusación.

Soy menor. - declaró en primer lugar - No puede retenerme aquí. - se autoabrazó nerviosa sin contestar siquiera cual era su nombre.

-¿Eh? ¿eh?¿¿¿eeeeehhhh???- mira al hombre pervertido borracho y a su compañero llevárselo. Cuando había salido estaba segura de que era el fin, de que se la iban con ellos ... Pero todo había sido demasiado extraño. 

Apenas era consciente de lo que había pasado, estaban de nuevo solos en el pasillo, con la ambulancia sonando a lo lejos. Las piernas le fallaron y calló al suelo de rodillas, con la mirada todavía puesta donde había estado el yakuza momentos antes. Parecía estar en shock. 

La respuesta pareció desencajar toda la situación por la que estábamos pasando, todos los golpes que había recibido, había sido por un simple capricho, comenzó a enfurecerse sea cual alla sido la respuesta, se iba a poner de pie para enfrentarle y golpear a ese idiota sin medir consecuencias, pero una voz  pronto interrumpe la escena, llega otro sujeto de la banda  insultando a Onizuka y a pedir disculpas a Sara, y sobre todo a pisar a Ryuma.

-Aaaag!. Cuidado!.-  como si fuera poco, el hombre comenzó también a disculparse con el, Ryuma lo miraba momento serio y muy a la defensiva, le dio una tarjeta para pagar los gastos y se marcho, el chico se queda en silencio sin responderle nada, cuando se va del lugar, mira la tarjeta  y la rompe. La identificación de Ryuma era falsa así que no podía dejarse ver por los médicos pues seguramente tendría problemas con una ID de alguien que no existe. Los golpes aun no le dolían, y aunque en su boca sentía el extraño sabor ferroso de la sangre no comprobó  si estaba sangrando.

-¡Sara!. ¿Estás bien?.-  Se acerca corriendo muy preocupado y se arrodilla adelante de ella, tomándola por los hombros trata de levantar su vista, se sentía culpable, tal vez debió detener al hombre desde un comienzo.

Casi como si fuera un robot mira a Amato por inercia y sacude un poco la cabeza -todos... japoneses... estar locos- es lo único que dice y aparta las manos del chico con un manotazo cuando es consciente de lo que está haciendo, mirándolo con el ceño fruncido. Se podía ver algo de miedo brillando en sus ojos. 

Sin decir nada más se pone en pie y comienza a caminar hacia donde se oye la ambulancia, creyendo que los demás también se encontrarían allí, aunque el cuerpo le seguía temblando ligeramente, como cuando el frío se recala en los huesos. 

¿Encontrar al causante? ¿esta diciendo que nosotros causamos el ataque? Sus palabras le sonaban bastante extraño, basicamente estaba hechandonos la culpa sobre lo que esta pasando, aunque decide mantener la calma por el momento no estaba muy contento con esa acusacion.

Mi nombre es Satoru Arai y soy compañero de clase de Kinomoto, comienza a responder las preguntas vinimos aquí cerca de las 19 horas casi todos los compañeros del curso, era una forma de conocernos mejor y afianzar amistad. Tomamos un zumo de naraja, o al menos eso dijeron que era, creo recordar a Fausto-san trayendo los zumos ¿no?. pregunta esto ultimo a daisuke, en realidad no lo recordaba bien, y hace una pequeña pausa para resistir un poco el mareo.

Las voces del pasillo indicaban que estaba en lo correcto, aunque no logro determinar quienes son los otros 2 ¿Los estarán interrogando allí fuera?

Sobre kinomoto creo que luego de beber 1 vaso y cantar una cancion comenzo a sentirse mal, pero nunca crei que podria ser esto nuevamente hace silencio luces o sonidos no recuerdo mas que las canciones y nuestras voces concluye mirando nuevamente al manager ¿realmente cree que nosotros le hicimos eso a proposito? No pudo evitar que se le escapara esa ultima pregunta, pero realmente lo habia cabreado que pensara eso de ellos, o al menos lo diera a entender.

"todos... japoneses... estar locos".-  Fueron las palabras que le dirigió Sara cuando le pregunto cómo se encontraba, de un manotazo aparta sus manos, y sale caminando por el pasillo en muy mal estado, el chico se queda arrodillado en el suelo más afectado por la reacción de su compañera y no saber qué hacer,  tal vez todo era su culpa por sacarla del Vip, y no hacer nada cuando pudo.

La situación le había recordado muchas cosas de su vida pasada, con las diferencias de que el ya no tenía 6 años y que no  habían cobrado la vidas.

La chica realmente se veía impactada, quería ayudarla pero no sabía cómo,  se pone lentamente de pie y comienza a  caminar detrás de Sara muy abatido, apenas era consciente del dolor o del sangramiento de su boca. Si se acercaba nuevamente a ella respondería como  la vez anterior. Se saca la chaqueta y apresura sus pasos para alcanzarla, cuando ya está a su lado la cubre con ella y se separa, por no saber cuál sería su reacción. Algunos pasos más adelante se adelanta a ella cruzándose al frente

-¡Sara!... Si golpearme te hacer sentir mejor... ¡GOLPEAME!.- Cierra sus ojos y baja la mirada dejando de ver.

En vez de atacarse encoge por un momento sobre sí misma al sentir de pronto un contacto, sin ser consciente de que había sido Amato. Al mirarlo frunce el ceño, bastante cabreada. "Y encima me pide que le pegue... ¡será masoca! ¿Acaso no ha tenido suficiente con ese tipo de antes?".

Coge la chaqueta y la deja caer sobre la cabeza del muchacho, como si se tratase de un perchero -si te dejas pegar no es tan divertido- y tras decir esto sigue su camino hacia adelante, sin mirarlo a la cara por el momento. 

"si te dejas pegar"  "si te dejas pegar"  "si te dejas pegar"  "si te dejas pegar" 

Una pequeña frase  se queda  dando vueltas en su mente, quizás revelándole   algo que había en su interior, al escucharla se queda inmóvil en el sitio sin moverse, quizás había mucha verdad, ella avanza hacia y le cuelga su chaleco en la cabeza como si él fuera una especie de perchero viviente, sin reaccionar comienza a pensar  y a sentir rabia por dentro, no por las palabras de la chica, más bien por  el Yakusa y con sigo mismo, dejo que se nublara su mente impidiéndole que actuara,pasando riesgos innecesarios Sara y el, de que habían servido su promesa y todos esos años de duro trabajo si en el momento clave se olvido de ellos, ¿su promesa había sido en vano?. Muchas cosas fueron pasando por su mente, sabia como se podía sentir Sara, aunque claramente él no era la persona indicada para animarla.

-"Ese Yakusa no lo volverá hacer nuevamente"-

Se sacó el chaleco de la cabeza y camino rápidamente para alcanzarla, le toca el hombro para llamar su atención y cuando se voltea y antes que reaccionara le da un fugaz abrazo, tomando su cabeza y acercándola  para que descansara un en su pecho, después de un corto momento deja de abrazarla, por su expresión se veía que no era el mismo que hace algunos minutos atrás ¿Rabia, sed de venganza, humillación?, después de soltarla se gira inmediatamente mirando hacia donde se había ido el sujeto...

-Sara ve con los demás!... Yo luego los alcanzare!... Cuida a Shizuka!.- Ordena sin mirarle  la cara y avanza  rápidamente cambiando de rumbo  hacia el lugar por donde se habían perdido los tipos, en especial Onizuka.

Algo con lo que Sara no contaba era con las reacciones del chaval, entre ellas el abrazo. 

No le dio tiempo a reaccionar, a decir nada, simplemente se dejó abrazar por un corto período de tiempo dejando de lado su fortaleza normal... Levanta la mirada para verlo, pero lo único que alcanza a ver es su espalda, después de haber visto su rostro que dejaba ver que no tenía miedo a nada, lo que podía ser una completa locura. 

-W...Wait!- estira el brazo para intentar alcanzarlo, pero el chico se alejaba con velocidad, por lo que, lejos de irse ella por su cuenta, sale corriendo detrás de él para abrazarle también como había hecho con ella, llevándoselo por delante, haciendo que aterrizase sobre sus rodillas (así por lo menos ya no avanzaría), siendo un abrazo algo... accidentado -tú...¿querer morir?- dejaba ver algo de temor en sus palabras -déjalos, todo OK. Ahora ir con los demás y ver cómo está Shizuka, ¿sí?