Partida Rol por web

Después de una dura tarde de  trabajo llega la hora de ver a Janice y te reunes con ella en el sitio en el que habéis quedado para cenar y hablar sobre la empresa de su padre y demás asuntos.

Después de una dura tarde de compras llega la hora de ver a Chandler y te reunes con él en el sitio en el que habéis quedado para cenar y hablar sobre la empresa de tu padre y demás asuntos.

El taxi me deja en la puerta del restaurante,y voy saturada de bolsas. Entro, y no veo a Chandler..¡No voy a quedarme ahí plantada esperándole!Me acerco al guardarropa para dejar mi superabrigo de leopardo y mi montón de compra.

- Guarde todo con cuidado.Ha sido una suerte salir de compras y encontrarme esa tienda con las botas que necesitaba a mitad de precio..¿Quiere veeerlas?Noooo,deje...Seguro que si las saco de la caja alguna arpía envidiosa querrá quedarse con ellas.¿Conoce a Chandler Biiiing?¿Le ha visto por aquiiii?He quedado con él,¿sabeee?

La mujer del guardarropa me mira con cara de malas pulgas y se lleva mis cosas,entregándome una ficha sin decir una palabra.

- Tranquila, ya me ocupo yo... -dije a la guardaropa con cara de solidaridad, acercándome a Janice desde un lado y dirigiéndome a ella con mi mejor falsa sonrisa de interés- ¡Janice! Que entrada tan... sonora... En fin, tengo mesa reservada, -hice un gesto de invitación con la mano para cederle el paso- ¿Quieres tomar asiento ya o prefieres antes tomar una copa en la barra...? -lo cierto es que quería cenar y acabar con aquella engorrosa cita cuanto antes, pero la posibilidad de afrontarla sin cierto grado de alcohol en sangre me parecía totalmente inaceptable...

- ¡Chaaaaandleeer! ¡Qué picarón! jajaja.. - me dirijo al camarero de la barra- Para mí será un cosmo... - a Chandler- Mejor no me dejes beber mucho, ya sabes lo que dicen.. - y le susurro- ¡es afrodisíaco! jajajaja

- Tranquila. No dejaré que eso pase... -recé por ello y la garganta se me secó con la imagen de Janice despendolada- Un Manhattan, por favor... y no se corte con el Bourbon... -el camarero fue a cumplir con su cometido y me centré en el objetivo de la cit...¡cena de negocios! ¡Cita no! ¡Negocios!- Bien Janice..., ¿como puede nuestra empresa satisfacer sus intereses...? -traté de sonar sereno y profesional. Me costaba horrores con esos ojillos clavados en mi, pero yo era un profesional ocultando mis sentimientos. A fin de cuentas lo llevaba haciendo desde la infancia...

- mmm..- saboreo el cóctel, y lo remuevo lentamente con el pinchito.. Me acerco más a él, y me yergo de manera que mis pechos sean lo único que vea más allá de su manhattan - Pues verás. No te voy a mentir. Me pareciste superatractivo en la foto del periódico, y lo que Valerie me contó... mmm.. digamos que despertó mi curiosidad..

Mis ojos se abrieron como platos al no poder evitar la contemplación de su canalillo y lo que no era el canalillo también- ¡Quien demonios es Valerie y que le ha contado de mi para ponerla de esta forma! -pensé alucinando y tratando de hacer memoria. Agarré mi Manhattan, lo bebí de un trago y levanté la mano para reclamar la atención del barman, mientras me ponía de costado a Janice- Otro Manhatannn... Por favor... -supliqué y volví a girarme mientras me erguía un poco para mirarle mejor cara a cara- Estooo... Janice... -sonreí apurado- Verás creo que..., que... ¡Mira nuestra mesa está lista! ¡Y el hambre que debes tener...! Que desconsiderado por mi parte... ¿Nos sentamos a cenar? -mi última aseveración fue más un ruego solapado que otra cosa. Si había una mesa de por medio, la situación pasaría a estar más controlada.

- ¡OOHH,DIOOOSSS MIIIIO!.. - no me puedo creer lo que ven mis ojos.Las últimas palabras de Chandler se diluyen en un blablabla sin sentido. - ¡Fíjate en quien acaba de entrar! - Entra una chica de melena rubia y aspecto pijo-¡Jessie Spano!¡La odio!...¡Y lleva las mismas botas que me compré yo hoy!Creo que voy a deprimirme..Espero que no nos vea,no quiero ni saludarla..¡Vayamos a la mesa!

Me levanto y sigo al camarero, Chandler viene detrás.

Sé que es difícil seguirme el ritmo, pero espero que no sea igual de parado en OTRAS cosas..

La pobre chica con nombre de personaje de serie de finales de los 80 había sido el objeto de la atención de Janice durante los ultimos instantes. Era ruin, pero me alegré, porque me dio la excusa perfecta para seguirla hasta la mesa, obviando lo que había pasado unos segundos antes.
Tomé asiento justo enfrente de ella, para lo que esperé a que se sentara, usando la técnica Hauss-Kirkegaard de moverle la silla y asegurarme donde se sentaba. Tomé la carta y el camarero me trajo el segundo Manhatann. Lo apuré de un trago pues aun no tenía suficiente nivel en sangre para considerar que fuera a ser una velada adecuada, y pedí un tercero al camarero...
- Bien, Janice -balbucee- Esto... Llevo un rato tratando de rememorar quien es esa tal Valerie que te habló de mi... ¿Podrías iluminarme, por favor? Es que quiero agradecerle el favor de habernos presentado... -me costó, pero reprimí el rechinar de mis dientes en la ultima frase.

-Vaaaalerieee, ¡ya sabes! Me dijo que habías ido detrás de ella durante mucho tiempo en el instituto.. - pone cara de haber recordado quién es ÉSA Valerie- Debías de ser patético,jajajaja.. Que parecías cambiado con corbata, y no con aquel peinado extraño que decía que llevabas,a lo Boy George,jajajaja.. Así que decidí darte una oportunidad, y aquí estamos... Pero no hablemos más de Valerie.. Cuéntame cosas de tí..

Ojeo la carta, dispuesta a pedir.

Como siga bebiendo así, esta noche será muuuuuy corta..

- ¡No lo llevaba a lo Boy George! -protesté con indignación, pero el gesto me duró poco y lo mudé a otro de resignación- Vale... Si que tenía cierta inspiración a lo Boy... Pero en mi defensa diré que era un artista con mucho éxito y querido por todos... Hasta era amigo de Mr.T del Equipo A...

Pedís la cena y la noche avanza mientras váis hablando de temas variados y de vuestros planes de futuro. Una vez termináis de cenar el camarero os lleva la cuenta: 60 dólares todo. Véis como el local comienza a quedarse vacío.

Ni miro la cuenta, es cosa suya..

- Chandler, déjale propina... Me ha caído bien el camarero. ¿Qué tal si nos vamos a tomar un café?¿Comoces algún sitio bueno que esté cerca?

- ¡Si! -exclamó mi cerebro- ¡Amigos, caballería! Ellos me ayudarán... -saco la cartera sin pensar y pido la cuenta con un gesto- Pues si, conozco un sitio aqui cerca donde hacen un buen café... -el camarero se acerca con la cuenta y se aleja a la espera que pague. Me voy levantando junto a Janice y saco 70$ que dejo sobre la mesa junto a la cuenta- Está aquí cerca, en Grenwich Village, y seguro que te encanta... -Cuando nos hemos alejado unos metros y estamos casi en la puerta recuerdo lo que acabo de hacer y exclamo- ¡Anda Janice, si me he dejado el abrigo! ¡Ahora mismo vuelvo! -dejo a Janice en la puerta y vuelvo corriendo a la mesa, donde el camarero está recogiendo la cuenta, a la cual echo mano y saco 10$ mientras exclamo- Lo siento, pero el alcohol en las copas han sido escaso... ¡y esto me lo llevo! -y vuelvo corriendo junto a Janice con una rosa del centro de la mesa antes de que le de tiempo a replicar- ¡Anda, pero si llevaba el abrigo puesto! Mentira, quería traerte esto... ¡¿Que gracia no?! ¿Nos vamos ya...? -logré balbucear del tirón sin saber ni como mientras Janice y yo andabamos en dirección al Central Perk...

Joey corrió por las calles de Nueva York con la intención de alcanzar a su amigo, sin embargo, una impenetrable barrera se interponía entre él y su objetivo. Una impenetrable barrera compuesta por una hermosa chica que parecía estar peleándose con el parkímetro por causa de unas monedas.

Joey no pudo evitar socorrerla introduciendo una nueva moneda en la máquina mientras decía:

- Cuidado, no debería estar permitido fruncir un rostro tan bonito.

Te marchas del piso para acudir a tu cita con los estudios de grabación. Te embelesas mirando a las mujeres que te encuentras por tu paso, incluso las pancartas publicitarias en las que salen mujeres en bikini te llaman la atención. Con todas esas distracciones no sabes si sabrás llegar a los estudios y si lo harás a tiempo.

Joey se saturaba por momentos observando a las mujeres que se cruzaba.

¿Qué ocurre hoy? ¿Es el día internacional de la tía buena? ¡Madre mía! pensaba.

Sin darse cuenta, Joey caminaba por las calles sin prestar atención al camino que seguía, hasta que descubrió que no sabía dónde estaba.

Se sobresaltó alarmado, y acudió a la primera persona que encontró.

- Disculpe -dijo con total educación -¿me podría indicar hacia dónde quedan los "Estudios de Grabación S.A." o la "Avenida de los Estudios 52"?