Aún un poco tocado por los extraños encantos de las sirenas me acerco la jaula, atento por si el león decide acercarse.
- Venga chicos, aquí vamos.
y con un par de movimientos, abro la puerta.
a ver si los demás aparecen por aquí, que me estoy marcando un bonito monologo en solitario.
Miro al león ligeramente intimidado, aunque después de haber visto a esa tortuga ya no sé qué pensar.
-¿Qué come? - pregunto, refiriéndome al león, a la vez que sigo a Alcander por la puerta, manteniendo la atención en todo momento sobre el león dormido.
El Leon sale escopetado y antes de que podais ver que pasa, este salta hacia el cuello de una de las jirafas mas cercanas, cercenandole la cabeza de un mordisco aterrador. Inmediatamente el inmenso felino se dedica a devorar con ansia el cuerpo de la Jirafa.
-Rehpesta encuntrada.-Dice el ranchero con una sonrisa.- Nemea eh mi mas bonica bestia. Nunca a perdiu un combate... Y falando de cumbatir. Vamos a echar una spicha que se' ma abierto el estomago.
Al pasar al lado de los jovenes les da una palmada en la espalda.
Buen trabajo mochachos, ma veis sido de ayuda- Al llegar el turno de Eneas el ranchero rie-. ¿Mu delicao pal trabajo de campo mozo? ¿Tendrás cuerpo pa lo d'esta noche? A comer tos.
Se dirije a buen ritmo a la casa.
La mujer se levanta y empieza a despejar la mesa del centro.
-Vamos querida, despierta a tu amiguito que ya se acerca la hora de comer, y mi marido es muy puntual al respecto.- Rie.
Comer... en cuanto dijo esa palabra el estomago le gruñó, apenas si habían desayunado al levantarse y ahora se daba cuenta de que estaba realmente hambriento.
- Espero que Holden sea un buen pinche, no termino de fiarme de Jackie.
Si, me meto mucho con ella, pero es porque me la imagino mas o menos así
Jackie asiente y se acerca a Holden, dispuesta a despertarla.
-Eeeh...eeeh... Hooolden... Despieeerta...-dice mientras le zarandea suavemente. Nunca se le había dado bien despertar a la gente... Su estilo era echarles un jarro de agua helada encima, no así. Pero era cierto que le daba pena despertar al pobre Holden así.
-¡Despierta!-exclama acelerando sus sacudidas. Eso... o el cubo de agua.
Realmente me debato en sueños, intentando permanecer el máximo tiempo posible en el reino de mi padre, pero las continuas palabras de Jasu hace que abra un ojo de forma parezosa.
-¿Ya es por la mañana? No me sonó el despertador...
Mira con una sonrisa al pequeño y le revuelve el pelo.
-Ni siquiera ha anochecido, Holden.-le responde riendo-Te dormiste pelando patatas, perezoso. Tranquilo, ya nos encargamos nosotras... ahora vamos a tomar algún refresco, ¿vale?
Le revuelve el pelo una vez más y mira a su anfitriona con una sonrisa triunfal, pensaba que le iba a costar mucho más despertar al chico.
La mujer sonrie y señala la nevera.
-Ahí teneis la nevera chicos. Hay limonada fresquita y cerveza con y sin alcohol. Pero no toqueis los potes verdes ni el tarro naranja. Uno tiene fuego griego y el otro una sustancia aun más mortífera... Mostaza casera ultra picante de mi marido.- La muchacha ríe mientras desdobla una mesa apta para al menos 12 comensales.
Mi gesto adapta una pose sorprendida y confusa.
-¿Pelando patatas? ¿Cuando he pelado yo patatas? - Entonces caigo en la cuenta y sonrío mientras me llevo una mano la nuca - Ah, sí, es verdad. - Y echo a reír.
Cuando oigo sobre esa limonada, miro a Jasu con ojos de súplica, como si la pidiese permiso a ella.
Jackie pone los ojos en blanco ante el despiste de Holden.
-Si no llevases la cabeza sobre los hombros la perderías.-le dice revolviéndole el pelo una vez más.
Ante su mirada suplicante, Jackie sonríe de medio lado y pone los brazos en jarra, mientras cambia el peso de una pierna a la otra. Mira por la ventana, preguntándose dónde estarían los chicos, y después ve como Ipophema pone la mesa... No quedaría demasiado para la cena.
-Está bien... Pero sólo un poco, que pronto cenaremos y tienes que comer.-accede. Se da cuenta de lo maternal que ha sonado esa frase y se estremece mientras siente como se le pone la carne de gallina...
Se acerca a la nevera y saca la limonada para Holden, dándosela al chico. Después, duda entre coger una cerveza con alcohol y otra sin éste... Pero piensa en lo enfadado que estaría Eneas si ve que ha bebido alcohol estando en cinta. Suspira agobiada y coge la bebida sin alcohol. Tras abrírsela, le da un trago largo.
Con una sonrisa de oreja a oreja cojo la limonada tan fría y le doy un trago.
-Mmmm Está riquísima.
-La verdad... es que yo tampoco me fío demasiado de ella, ahora mismo toda comida le debe saber a gloria... así que...- Respondo, aunque yo no estuviera embarazado también me sabría a gloria la comida, porque tengo un hambre de lobo...
-A saber lo que prepararon entre los dos... - digo - solo espero que sea mínimamente comestible, ahora mismo me comería hasta un trozo de cartón.
Las tripas me han sonado a lo largo de la mañana un par de veces y, aunque estoy interesado por saber más de lo que se supone que haremos por la noche creo que necesito comer urgentemente.
El enorme ranchero rie ante vuestros comentarios.
-Amos, mozos que estan con la mi señora que d'otra cosa no peru de cocina ntiende pero bien.- El hombretón ríe y os lleva a la casa donde os conduce a una bien surtida cocina donde una sonriente señora (Su mujer, Ipophema) le recibe feliz.
Podeis ver al resto de vuestros compañeros que están sentados cerca de la mesa ya preparada con platos bien grandes con cubiertos y manteles, Holden saboreando una limonada bien fría y a Jaqueline con lo que parece ser cerveza. Ambos parecen estar bien pues sonrien aunque Jaqueline tiene los ojos hinchados.
Ya estais todos juntos en la cocina.
Perdon por tardar en contestar, pero con examenes estoy un pelin liado.
-¡Hola! - Los saludo a todos con entusiasmo agitando nua mano a modo de saludo, pero después cierro los ojos y con suma tranquilidad, doy un trago a la limonada haciendo que el sabor recorra mi boca y deleitándome con él.
-¿Qué tal os ha ido?
Lo primero que hago al ver a Jackie con lo que parece una cerveza es acercárme y retirársela de golpe -¡¿Qué haces bebiendo en tu estado?! ¿Es que no piensas en lo que puede causar esto?- Digo más enfadado con ella que nunca.
-De verdad pensaba que serías más responsable, si no quieres tenerlo y no puedes acatar esa responsabilidad podrías haberlo dicho...- Termino con un bufido.
-¿En su estado? - Digo mirando a Jasu sorprendido - ¿Qué te pasa? ¿Tienes sueño? Te recomiendo una siestecita en un sitio alto, son de lo más agradables.
Un poscito de más ;)
- hol... - el súbito cabreo de Eneas no me deja ni terminar la frase, lo último que esperaba ver en mi vida era a Jackie recibiendo una reprimenda de Eneas... y para mi que no iba a durar mucho.
macho, apuesto a que has metido la pata hasta el corvejón