Partida Rol por web

Green Arrow

Cuarto día de resignación

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24/02/2017, 00:50
Director

Algunos aún se sorprendían de cómo podían dormir en aquella casa cuando se despertaron tras la cuarta noche.

Ese cuatro de enero de 1899 ya solo quedaban catorce invitados en Green Arrow. 

De toda la familia Knight solo quedaba Charles y sus dos hijas, Eleanor y Elizabeth y Piers, su mujer Jeanne y su hijo Harold, dos núcleos como dos islas supervivientes entre la desbandada Alistair a los que seguían viendo como intrusos extraños pero a los que ya no podían ver como el enemigo. 

Al igual que los criados... guardaban secretos y cerraban puertas pero parecían obedecer a un orden natural distinto al que cada noche los elegía para irlos ¿matando uno a uno? Ebenezer y Johan habían desaparecido sin dejar rastro pero ya nadie pensaba que fueran a estar vivos. 

Durante el desayuno, el ama de casa apareció: 

- Cuando terminen, como prometí, guiaré a quien quiera por los pasadizos de esta casa... Entenderán por qué no me gusta que merodeen por esos túneles.

 

Notas de juego

Último día en que el juego se despliega por escenas. A partir del siguiente día será un juego de rol lineal como es habitual... 

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24/02/2017, 01:26
Meghan Alistair

Habían investigado el día anterior. Meghan creía que habían hecho progresos. Al parecer la casa no pensaba así. Habían más desapariciones al despertar. Cualquiera podría decir de ella que era fríbola por alegrarse de algo en una situación así. No le importó, no pudo evitar una leve sonrisa al ver a Arthur. intacto. Al parecer lo débil que podía resultar a la vista lo compensaba con su valentía o su suerte. Estaba allí con ella.

-Lo que hicimos ayer no ha bastado. La casa está furiosa, hoy han desaparecido más personas. Tenemos que parar a los fantasmas que hacen ésto, o encontrar el arma. Y debemos hacerlo hoy, o al menos intentarlo cuanto podamos.

Sabía que eran duras palabras hablar de esa manera. pero ella no era de descendencia noble. Era directa. Quería pararlo todo y estaba dispuesta a oír sugerencias. Quizá Arthur había heredado la constancia y valentía de su madre. No iba a estar quieta hasta cumplir su objetivo.

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24/02/2017, 09:20
Dougal Alistair

Dos desapariciones más. Y para más inri ambas en el lado Knight de la mesa. Dougal miró las caras de la gente, tristes, asustadas. De repente apareció el ama de llaves ofreciéndoles más ideas ridículas. Entró en colera al escuchar a su cuñada hablar de La Casa en tercera persona. 

- Meghan, por favor. No alimentes esta locura. ¡Que esta tu hijo presente!. La casa no ha hecho nada. Es el servicio el que está haciendo desaparecer cada noche a uno de nosotros ¿Es que no lo veis? Esta gente tiene un plan que habrán tejido desde hace quién sabe cuanto para hacernos desaparecer a todos y cada uno de los herededos.

Ríe mirando al ama de llaves. 

Nos llevan sugestionando desde que se pusieron en contacto con nosotros, después con esa pantomima de testamento.... ¡seguro que ni siquiera era de Padre!. Ahora, están centrando todas las desapariciones inicialmente en el lado Knight para crear enfrentamiento entre nosotros.

Tiene que ser eso. 

 

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24/02/2017, 09:42
Murron Alistair

A pesar de la inevitable tristeza, las muertes y desapariciones se habían convertido en algo tan habitual, que esa mañana ya no hubo gritos ni espanto. De alguna forma, todos parecían dar por hecho que cada noche sería la condena de alguien allí en la casa. Eran como corderos encerrados en un corral esperando el momento de ser degollados.

Para Murron en particular, a esta terrible costumbre se sumó el hecho de que los dos fenecidos eran de la familia Knight, algo que, aunque no lo admitiría abiertamente, hacía que le afectara menos. Más aún teniendo en cuenta que uno de ellos se trataba del viejo Ebenezer, un sujeto que había despreciado a su familia desde el primer día.

Escuchó a Meghan y se sorprendió. No la había visto tan decidida antes, o al menos no lo recordaba. Pero en cualquier caso le alegró. Esa valentía les sería necesaria para sobrevivir. Por otro lado, Dougal seguía mostrándose escéptico, y eso enervó a su hermano.

- ¡Maldita sea! ¿Pero, cómo puede ser que todavía dudes de la maldición, Dougal? No se trata de cuentos de viejas. Estamos viviendo en nuestras propias carnes muertes y desapariciones, difíciles de explicar incluso para hombres de ciencia como los doctores que han examinado los pocos restos que han quedado. Es algo, además, que lleva sucediendo desde hace siglos, y de lo que, poco a poco, estamos obteniendo pistas que cada vez más confirman esta hipótesis. No niego que pudiesen haber manos humanas implicadas también. Admito que yo también pensé en esa posibilidad, por la actitud del señor Edwards y la señora Huxson. Pero después de lo que descubrimos el día de ayer, confío en que nos estén diciendo la verdad. 

Murron dijo esto último mirando a la señora Huxson.

- Yo iré con usted a los pasadizos. Y espero que no se deje detalle alguno que contarnos. Si todos somos víctimas de la maldición aquí, no hay razón para seguir guardando secretos.

Notas de juego

Iré a los pasadizos.

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24/02/2017, 10:17
Dougal Alistair

- ¿Pero qué habéis visto Murron? Con vuestros propios ojos, ¿qué?. Gente que desaparece, algunas pesadillas y el cuerpo del desgraciado de Molv quemado quien sabe en qué rincón de la casa y colocado de vuelta en su cama para espantarnos. ¡Todo puede ser una pantomima gestada por unos locos sin escrúpulos!
Por Dios, lo más inexplicable que he visto yo ha sido a tu sobrina Mary Jane empeñarse en coger una pulmonía en ese lago ¡sin que Rhona intente hacerle entrar en razón!

Dougal intenta calmarse. No quiere enemistarse con su hermano ni violentarle pero la facilidad con la que están comprando la historia del servicio le enerva.

- Muy bien. No dejaré que mi familia vaya sóla con usted -señala a Huxson - Te acompañaré Murron. 

Notas de juego

A los pasadizos. 

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24/02/2017, 14:37
Eleanor Knight

Eleanor se levantó como las últimas mañanas, con la seguridad de que en la noche había sucedido alguna desgracia. Su esperanza era que lo que hubiese sucedido, no se hubiera llevado a nadie de su familia. Cuando, un poco más tarde, se enteró de aquellos a los que habían perdido lamentó la desaparición del tío-abuelo Ebenizer pero no tanto la de Johan. Al fin y al cabo, su primo no era realmente un Knight. A Eleanor siempre le había producido algo de aprensión esa manera tan extraña que Johan tenía de ser.

Pero la vida seguía en la casa y su obligación era descubrir qué demonios estaba pasando allí. Bajó a desayunar al comedor y saludo a todo el mundo. Y con la tranquilidad necesaria, desayuno mientras escuchaba las conversaciones que tenían lugar a su alrededor

Tal y como había quedado el día anterior Eleanor, se acerco a Ms. Huxson y le confirmo que la acompañaría durante todo el día, no solo a los túneles como comentaban los hermanos Alistair que harían. No, ella pensaba estar con el ama de llaves todo el tiempo; mientras hiciera las comidas, mientras revisara el inventario, cuando supervisara la realización de las habitaciones... Todo, absolutamente todo el día entero, iba a estar con ella. No la perdería de vista. Si esa mujer, de alguna manera que no acertaba a comprender, tenía algún tipo de plan para acabar con los Knight, Eleanor tenía previsto enterarse.

Pero no sólo eso. Eleanor también pensaba aprovechar la ocasión para conocer al resto del servicio o, al menos, empezar a hacer una idea sobre quienes eran y cómo se relacionaban entre ellos. Estaba descubriendo que la falta de conocimiento profundo del mismo podía, de alguna manera, ser un inconveniente grave. Necesitaba identificarlos correctamente, mejor que hasta ahora, saber quiénes eran, qué aspiraciones tenían y qué relaciones mantenían unos con otros. Su intención era que, antes o después, ese mapa quedaría dibujado de alguna manera. Como primer paso, antes de bajar a desayunar, en una hoja de papel de las que tanto amaba Johan y que ahora no iba a necesitar, Eleanor comenzó a escribir y a dibujar con cuadrados las distintas personas del servicio de las que si tenía conocimiento. Igual que podía pintar su árbol genealógico haría esto. Sí, llegaría a entender quién era la gente que cuidaba a sus espaldas. Cuando hubo puesto por escrito todos aquellos a los que conocía había dejado la hoja guardada en los cajones del escritorio de su habitación, con intención de completarla por la noche con la información que hubiese adquirido. 

Notas de juego

A los pasadizos

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24/02/2017, 15:43
Elizabeth Knight

Cuando empezaron a aparecer los primeros rayos de sol y Elizabeth tomó conciencia de la llegada del nuevo día y de que seguía con vida, suspiró. Le había costado conciliar el sueño, más bien había luchado contra el cansancio para que sus párpados no se cerrasen aquella noche por miedo a que algo malo le pasara a ella o a alguno de sus seres queridos. Sabiéndose a salvo un día más, y aún en camisón, salió de su habitación apresurada a comprobar que su padre y su hermana también se encontraban a salvo en sus habitaciones. Ya más tranquila se vistió y antes de bajar a desayunar acudió a la habitación de su primo Johan con el fin de pedirle un trozo de aquellos papiros que se había ofrecido a prestar el día anterior.

A Elizabeth le rondaba desde ayer una idea. Había algo que quería hacer… No sabía qué futuro les esperaba allí… No pretendía morir en aquella mansión, pero parecía que entre esas paredes nadie era ya dueño de su vida ni de su destino… Las palabras de la vieja Tata se le habían quedado grabadas: “Él no sabe que esta partida la estamos jugando entre todos durante muchos siglos. Morimos pero transmitimos lo que aprendemos y así lograrnos volver a matarle… y esta vez para siempre” “El tiempo apremia y no solo tenéis que descubrir el misterio sino aseguraros que otros puedan resolverlo cuando ya no estéis en este plano de la existencia...”

Tenemos que pensar en los que vendrán después, se dijo- Quizá nosotros no podamos matarle solos, pero podemos ponerles las cosas más fáciles a los que vengan detrás.

Aunque sólo fuera por la promesa que se hizo tras la muerte de Robert, trataría de salir con vida de Green Arrow, pero si no lo lograba, haría todo lo que estuviese en su mano porque alguien lograse vengar la muerte de su marido y de todos los desaparecidos.

Su primo Johan no estaba en su cuarto. Elizabeth pensó que ya habría bajado al gran comedor y se tomó el permiso de cogerle un trozo de papiro. No fue hasta llegar al desayuno cuando se enteró de las dos nuevas desapariciones: Si primo y su tio-abuelo… ambos Knight… ¿Por qué Harry se estaba cebando con su familia de esa manera tan cruel e injusta? – Apretó los dientes presa de la rabia, mientras miraba su taza de té.

-Hoy iré a la biblioteca, dijo sin despegar su mirada pensativa de su taza de té- Hay algo que debo hacer- Elizabeth hablaba para su padre y su hermana, quienes se sentaban a su lado.

Notas de juego

A la biblioteca

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24/02/2017, 22:57
Meghan Alistair

Miró a Dougal. mencionó a su hijo. Sabía que no lo hacía con mala intención pero si ella decía aquello era precisamente por Arthur.

-Yo decido lo que mi hijo puede oír o no. No sé qué es lo que ocurrió pero si estoy segura que él dice la verdad al decir lo que vio aquella noche. Negar la realidad no es buena para mi hijo ni para nadie. Además, ¿acaso cree que decir que el servicio es quien está detrás de los secuestros tranquiliza a mi hijo o a nadie? Creo a mi hijo y he visto ese extraño altar. Nunca he creído en las cosas sobrenaturales, pero eso es porque no las había visto antes. Cerrar los ojos no servirá de nada.- dijo antes de que éste se fuera, aunque luego miró al resto.

Sonaba a cabreada. y lo estaba. Pero, aunque pareciera lo contrario, no lo estaba con Dougal. Estaba cabreada con la casa. Cabreada por no saber qué iba a hacer para salvar a su hijo. 

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25/02/2017, 03:30
Rhona Alistair

Lo sucedido esos días y, en especial, la desaparición de su padre, habían sumido a Rhona en un estado muy alejado de la fortaleza que la caracterizaba. Pero esa noche, que al igual que las anteriores apenas pudo dormir, se dio cuenta que no podía abandonarse al dolor, no podía rendirse en esos momentos en los que su mente y su fuerza de voluntad eran más necesarias que nunca, sobre todo tenía que hacerlo por su hermana. A partir de ese momento, y si su padre no aparecía, ella iba a ser la encargada de cuidar de Mary Jane.

Con el reflejo del cansancio en la cara y unas grandes ojeras, Rhona bajó al comedor esperando, como si de un ritual matutitno se tratara, el informe sobre la muerte o la desaparición de alguien de la familia, ya fuera de una rama o de otra, y no se equivocó. Estaba vez la casa había devorado a dos miembros del clan Knight.

Se sentó a la mesa en el mismo lugar que llevaba ocupando desde que había llegado a la casa, buscando como todos los días la presencia de su hermana y desesperándose, como empezaba a ser habitual, al no verla en el comedor.

Esperaría, y si no hacía acto de presencia entonces iría a buscarla.

A pesar de su mutismo, la expresión de la cara de Rhona había mutado de la melancolía habitual a una resolución casi salvaje. Le había estado dando vueltas durante las horas nocturnas y había algo que quería buscar en la biblioteca. Empezaba a creer que no había sido mera casualidad que el abuelo hubiera ido en busca de otra familia precisamente a Escocia y que, algún clan o lo que fuera escocés, había tenido mucho que ver en la historia de la casa y de la edificación que se levantaba con anterioridad a la mansión.

No se molestó en abrir la boca cuando Dougal habló de Mary Jane, recriminándola a ella por la actitud de la niña. Simplemente le dedicó una mirada fría e, incluso, despectiva. ¿Quién era él para recriminarle algo? No tenía ni idea de lo que habían pasado con la muerte de su madre y de su abuela, ni la forma en que esa desgracia había golpeado a Mary Jane sumiéndola en un mundo al que nadie parecía ser capaz de llegar.

Dio un sorbo a su té que ya empezaba a enfriarse, antes de escuchar a Elizabeth comentar su intención de ir al mismo sitio al que tenía pensado ir ella.

-Si no es molestia Elizabeth, me gustaría poder acompañarte a la biblioteca. Me gustaría saber si hay algún libro que hable sobre algún clan escocés asentado por esas tierras.

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A la biblioteca

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25/02/2017, 04:15
Jesse Alistair

Jesse bajo al comedor después de asearse durante el tiempo que estimo necesario, realmente mas de lo necesario pues no deseaba bajar y saber que alguien mas había desaparecido en la noche. Como sucedió al conocer la desaparición de los dos Knight, el hombre con quien apenas había mantenido una palabras y su tío, a quien le hubiera gustado conocerlo mas de cerca, sobretodo por saber su relación con su esquivo padre.

El corpulento hombre, se mantenía de pie apoyado en su bastón con una taza en la otra mano, escuchando como su familia empezaba a perderse entre la desesperación y la impotencia, él conocía muy bien ese sentimiento, desesperación por no poder ayudar a su hermano e impotencia por ser incapaz de encontrar a su asesino y aun así, decidió acercarse y poner orden entre ellos.
-Tranquilizaros y detener la lengua, perder los nervios entre nosotros es una autentica perdida de tiempo, ya sea el servicio, un loco caza-tesoros o fantasmas, la cruda realidad es que estamos siendo diezmados y luchar entre nosotros, nos mermara mas todavia. -Jesse tenia experiencia en detener disputas, después de todo entre muchachos de corta edad, era común verlos pelear. Claro que normalmente si no conseguía pronto una solución, un par de buenas bofetadas era remedio de santo, solo esperaba que no tuviera que llegar a ese extremo y menos delante de los Knight, quienes ya les tenían bastante ojeriza.

-Empecemos por Huxson, comprobemos que demonios tiene que enseñarnos y tal vez, podamos sonsacarle algo mas, aun si ella no lo desea. -Busco la mirada de aquella ama de llaves, en un claro intento de intimidarla para que evitara cualquier acto estúpido que pusiera en peligro su propia integridad. -Y después vayamos paso a paso. -No era algo que le gustara, ir despacio no iba con él, pero lo que le había enseñado ese maldito Green Arrow, es que en Inglaterra todo iba endemoniadamente despacio.

Dicho esto volvió la mirada hacia su sobrina, observo sus movimientos y al saber de su intencion de dirigirse a la biblioteca se acerco a ella.
-Sobrina, hazme, no. Haznos un favor ya que vas a esa famosa biblioteca. -Famosa para alguien que aun no había estado ni un solo segundo en ella. -Busca el posible significado del nombre de la casa, porque Arrow, porque verde y sobretodo quien fue quien la bautizo de este nombre, ¿Lo harás por mi? -Apoyo su mano en el hombro de ella, sin intencion de hacerla daño o sobreponer su peso, solo a modo de buscar su cooperación y hacerla saber de su presencia.

Poco después dio un par de pasos hasta el chico Knight.
-Harold, si no te molesta, ¿Podrías acompañar a mi sobrina? No creo que convenga dejarla sola todavia. -Le guiño un ojo cómplice al muchacho y no espero por su respuesta para volver al grueso de las personas que pretendían seguir al servicio, atrás en su memoria dejo a su otra sobrina, a quien apenas la había vuelto a ver desde la muerte de su hermano, pero a quien daba por perdida, sin su padre para mantenerla en el mundo real.

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25/02/2017, 04:41
Jesse Alistair
Sólo para el director

Notas de juego

Yo tengo intencion de seguir al Mayordomo Edward.

Pero si no lo encontrara, iría a los pasadizos con el resto que va a seguir a Huwson.

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25/02/2017, 09:48
Piers Knight

Piers se presento en el comedor entre los últimos, con los ojos legañosos surcados de una fina maraña de venas rojas y algo hundidos en sus cuencas. Quien le hubiera observado con atención vería que de vez en cuando, sus dedos parecían tener un ligero espasmo, como si buscase algo que asir, algo que tuviera en las manos. Tendió la vista alrededor y no reaccionó de ninguna maner en particular al ver los dos espacios vacíos que otros dos Knight ya no volverían a ocupar. Se preguntó si su reacción en el sueño tuvo algo que ver. Si era un mensaje, una premonición o... algo más, quien sabe. Una reacción de su mente a ese conocimiento, ya fuera de rabia o...

No, mejor no pensar en eso. Se limitó a asentir, como diciendo "bien, es lo que hay. Realmente, no había gran cosa más que hacer o decir.

Sus ojos se posaron en la señora Huxson cuando esta entró, volviéndose apenas una rendija. Sus fosas nasales se ensancharon, y parecía que hacía algún esfuerzo titánico por lo echarsele encima. Finalmente suspiró y se limitó a contar someramente entre bocados su relato.

He tenido un sueño. He visto a la misma persona que vió Arthur, un caballero de armadura negra al que otros llamaban el Conde Sangriento. Fue en un batalla. En este mismo lugar, antes de que fuese Green Arrow. Aún se llamaba Mothcry, y ese... se paró un instante, pensando. No encontraba palabras para definir la figura de armadura negra que había visto junto a él al terminar el sueño. Cada vez que intentaba enfocarla en su mente, ésta se fundía en en negro y volvía de nuevo a l principio del sueño.bueno, quien fuese, presidía las defensas. Un ejército escocés atacó el lugar, y perdió. Los defensores les hicieron comerse a sus propios hijos.

Piers relata esto sin emoción. Las matanzas y la crueldad, por desgracia, no es algo que le sea nuevo. Hubo abundante de ambas en la guerra contra los zulúes y más tarde en Egipto, por ambas partes. Ha aprendido a aceptarlas, a pasar un fundido a negro en su mente como ocurre con el misterioso caballero negro. No es que no sienta nada- de hecho, teme ver llegar el día en que pueda ver una atrocidad sin sentir. Simplemente, lo ahoga antes de que llegue a más.

Carácter. Todo se reduce al carácter.

Lo curioso es que no creo que hubiese sido una simple acción de guerra. Una disputa por tierras, favor o poder. Los escoceses que vi atacar habían llegado aquí con una misión. No tenía nada que ver con Mothcry, o con el lugar. Era a su señor a quien perseguían. Ya le conocían de antes, o habrían oído algo. Cuando su cuerno anunció que entraba en batalla, su pánico fue demasiado... hmmmm... genuino, para haber sido sólo algo que oyeron por terceros. Era algo personal. Algo que habían vivido.
Creo... creo que simplemente habían venido aquí a acabar con él. Ignoro por qué, y por qué alguien traería a un ejército desde tan lejos para matar a un hombre. Quizás es algo que estaría bien averiguar. Si alguno, o varios de los señores de Mothcry, habían tenido alguna relación con Escocia. Quizás explique por qué el abuelo decidió irse precisamente a ese lugar, y buscar precisamente a... bueno, a ustedes
comenta, dirigiéndose a los Alistair.

Sea como sea, no hay gran cosa que contar. El ataque falló. El Conde Sangriento, como le llamaban, siguió aquí. Yo sobreviví a la batalla, y tal vez ese sea el motivo de que haya sobrevivido también a la noche. O tal vez no. Tal vez sólo haya sido un sueño, aunque fuese uno tan vívido que nadie lo distinguiría de la realidad. Mi propio cuerpo parece no haberlo olvidado. Todavía busca luchar, aunque no sepa ni contra qué.

Tras eso, cae en el mutismo y se limita a comer. Sus movimientos son lentos y su boca parece moverse, rumiando algo. No la comida, o no solo. Parecería que son sus propios pensamientos los que está masticando, o digiriendo. A veces se lleva los dedos a los ojos y presiona, como buscando borrar una imagen.

¿Hay alguien que vaya a bajar a los túneles? Cuando varias personas asienten, Piers también lo hace. Sea. Pensaba hacerlo yo, pero ya hay demasiada gente. No es bueno moverse por sitios así en números grandes, la gente se entorpece una a otra. Mantengan vigilado al servicio, pero no empiecen una pelea con ellos. Es inútil. No creo que ellos sean el enemigo, o al menos no que sean ellos quienes nos matan. Yo iré ala biblioteca. Quiero investigar esa batalla que vi. Quizás sólo haya sido un sueño, pero últimamente parece que los sueños revelan muchas coincidencias de la vida real

Notas de juego

A la biblioteca

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25/02/2017, 10:27
Arthur Octavius Alistair

Harry seguía allí, cualquiera podía sentirlo, y por si alguien era tan insensible a su presencia atroz, que erizaba la piel del pequeño Arthur al recordarlo, las nuevas ausencias de Ebenezer y Johan fueron una gran losa para todos aquella mañana.

Incluso madre parecía realmente enojada. Y Arthur supo que tenía miedo, y eso no le gustó, porque él se sintió inseguro al ver a madre así. Madre, que siempre era un refugio para sus temores y dudas. Ahora afrontaban todos una mañana más, y el salón comenzaba a resultar vacío y triste, con los criados bajo sospecha y todos encerrados en la casa... Por la casa.

Arthur miró con el ceño fruncido a la señora Huxson, sin saber bien a qué atenerse. había sido amable con ella, y a pesar de su rostro severo no la creía capaz de ayudar en modo alguno a Harry. Pero temía acompañarla a los pasadizos. Él mismo no quería volver a bajar allí. Querría quedarse en la biblioteca, con Rhona y Elizabeth. Con ellas estaría bien, e imaginó los montones de libros apilados, cubriendo las paredes. Todavía no la había visitado.

- Madre, prefiero no volver ahí abajo - agachó la cabeza, sin valor de reconocer su miedo. - Puedo quedarme con ellas? - señaló a las dos jovenes y de inmediato se dio cuenta de su gesto maleducado. Recogió el brazo y se dirigió a ellas con cierta tristeza. Demasiadas aventuras acumuladas en aquellos días. Necesitaba un respiro para volver a recuperar la curiosidad y olvidar el miedo. Al menos el relato de Piers le confirmaba su terrible sueño, aunque le llenó la cabeza de imágenes de fuego y angustia, y tuvo que cerrar los ojos y respirar con fuerza y contar lentamente hasta que volvió en sí. - Si a lady Elizabeth y a lady Rhona no les importuna mi presencia, claro.

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Biblioteca

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25/02/2017, 10:42
Jeanne Knight

Le despertó un grito.

Le hizo pasar del sueño a estar plenamente despierta en un segundo. Se incorporó en la cama, buscando algo, alguien, no sabía qué exactamente. Hasta que su vista se clavó en su marido. Nunca lo había visto así y supo que cada palabra que salió de sus labios, contándole lo que acababa de vivir, no podía ser un mero sueño. Piers no era de los que se asusta por una mera pesadilla o un mal recuerdo. No, no su marido, curtido en ciento y una guerras. Se fundió con él en un abrazo y lo besó hasta que notó como sus músculos se destensaban poco a poco, aunque no del todo. Eso costaría más.

Pero si su marido había sobrevido a esa noche, eso podía tener muchas lecturas. ¿Había alguien que no lo había hecho?

Cuando bajaron al salón lo descubrieron. Johan, su querido Johan. Y Ebenezer, con quien había compartido el descubrimiento de la identidad del primigenio señor de la casa, con quien había rebuscado en libros y más libros en la biblioteca. No podía ser. No era justo. El hombre era cascarrabias, pero nada fuera de lo normal en un hombre mayor como él. Y Johan... vió como no muchos le echaban de menos. Nadie lo había entendido al final ni lo habían considerado como un Knight al fin y al cabo. Le sonaba a algo, pero desechó esa idea de la cabeza.

Dos Knight había caido esa noche. Y creyendo a su marido, podían haber sido tres.

Echó la mirada alrededor, buscando todos los que en el gran salón se reunían a desayunar. La venganza, de fuera lo que fuera aquello que reinaba en la casa, se estaba inclinando del lado de su familia. Y no iba a consentirlo. Lucharía. Pero nada ni nadie le pondría la mano a su hijo encima. Fuera quien fuera ese tipo de negro, había intentado atacar ya directamente a su familia más cercana, a su marido. Y no se iba a quedar quieta esperando a que la noche llegara.

-Por supuesto que Harold cuidará de Rhona, Jesse, delo por hecho-le contestó al Alistair mientras que con una mirada y una sonrisa se dirigía a la muchacha-Os acompañaremos mi marido y yo también, y si no aparece la pequeña Mary Jane en un rato, iremos a buscarla igualmente. Estoy de acuerdo en que mucha gente en un mismo sitio no es de utilidad, pero creo que no deberíamos andar solos aunque el abuelo comentó en su carta que de día no nos pasará nada. Piers, cariño, antes de buscar algo de esa batalla, necesito que también me ayudes con algo en la biblioteca. ¿Vamos? Os enseñaré también el libro donde Ebenezer y yo descubrimos que había una pintura con el retrato de Harry, quizás entre unos y otros vayamos atando cabos.

Se agarró del brazo de Rhona, por un lado, y por otro del brazo de su hijo Harold. Lanzó una mirada cómplice a Piers y comenzó a andar hacia la biblioteca.

Se volvió al escuchar las palabras del pequeño Arthur y sonrió-Venga, Arthur, vente con nosotros. Meghan, cuidaremos de él, descuida.

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A la biblioteca.

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25/02/2017, 11:10
Mary Jane Alistair

Mary Jane tardó nuevamente en bajar pero cuando lo hizo iba vestida como una princesa y con una cara radiante. Parecía una muñequita de otra época. 

Se sentó al lado de su hermana Rhona. De cerca vieron que el vestido estaba medio roto y algunos entendieron de dónde lo había sacado: 

Había debido arrancárselo a alguno de los maniquíes que estaban en el Salón de Baile. 

Cuando le preguntaron si quería volver allí, dijo: 

- No. Aún somos muchos, gracias. Iré a dar un paseo en calesa, gracias

Sorprendía que hablara con más soltura. Cuanto más se apoderaba la locura de la casa, más parecía Mary Jane una niña normal. 

O casi. 

 

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Iré a las cocheras. 

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25/02/2017, 12:15
Meghan Alistair

Su hijo le preguntó con miedo si podía ir a la biblioteca, un sitio mucho más seguro que las catacumbas. Le costó no decir que sí al instante, sin darle tiempo a que cambiara de opinión.

-Por supuesto, Arthur, cariño mío ¿qué clase de madre sería yo si te llevara por ahí por sitios que te dan miedo?- el día anterior le dejó ir por los pasadizos, pero solo porque sabía que no podía decirle que no si tenía una idea fija en la cabeza. Por ella se podía haber quedado en otro sitio- La biblioteca es un buen lugar. Además, podría ser una buena idea para investigar más sobre el Conde o los acontecimientos que han podido dar lugar a ésto.

Se sorprendió al darse cuenta que a pesar de lo bien que habían hablado de la biblioteca y lo importante que era recabar información, ella aún no había estado allí. El día anterior casi lo hizo, pero también sentía curiosidad por las catacumbas. Pero ahora creía que ya había visto lo más importante de esos pasillos y sentía curiosidad por esa biblioteca que debía ser descomunal.

Miró a Jeanne. Le caía bien, de entre los presentes era quien mejores vibraciones le transmitía.

-Muchas gracias, pero creo que iré a la biblioteca también. No me puedo creer que aún no haya estado allí.

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A la biblioteca

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25/02/2017, 13:19
Rhona Alistair

Cuando su tío Jesse se acercó a ella, por extraño que le resultara, en esta ocasión no hizo amago de apartarse o de rechazo, al contrario, agradeció el ánimo y el consuelo que le estaba dando con ese apretón en el hombro. Asintió en silencio a su petición y, por primera vez, le dedicó una tímida sonrisa a su tío. Estaba claro que en esos momentos tan difíciles que vivían, la familia era lo más importante y Rhona se daba cuenta que si ella había perdido a su padre, el resto había perdido a un hermano o un tío también querido. Aunque no pudo evitar sonrojarse cuando Jesse se dirigió a Harold para que ella no estuviera sola.

Escuchó asombrada y asqueada la historia de Piers, revolviéndole la tripas cuando habló del hecho de que los perdedores habían tenido que comerse a sus hijos. Eso era atroz, inhumano, horroroso, no había palabras que pudieran describir lo que Rhona sintió al escuchar esa parte del sueño.

Apartando la comida que tenía enfrente, tardó unos instantes en recobrar la compostura mientras el resto hacían planes para pasar ese día. Le pareció buena idea mantenerse lo más juntos posibles, aunque se había demostrado que durante el día no parecían correr peligro. O por lo menos la mayoría no lo había corrido a excepción de su hermana. Mary Jane...

Respiró aliviada cuando la vio aparecer, pero eso alivio se trastocó en angustia al ver el vestido que llevaba puesto y que sabía no le pertenecía, iba a preguntarle de dónde lo había sacado cuando fue su hermana, con una cordura que hacía mucho tiempo no le había visto a pesar de sus intenciones, la que habló primero.

-Mary Jane cielo, no se puede salir en calesa con el día que hace. Está todo nevado y hace mucho frío, ¿no prefieres venir conmigo a la biblioteca?

Sabía que si a su hermana se le metía algo en la cabeza era muy difícil hacerle cambiar de opinión. Con preocupación, pensó que lo mejor sería cambiar de planes y acompañar a Mary Jane, tenía miedo dejarla sola y que ocurriera alguna tragedia como la que había estado a punto de pasar en el lago. Pero, cuando se quiso dar cuenta, se vio arrastrada por la madre de Harold sintiendo como su cara se encendía de nuevo.

-Creo que sería mejor que vigilara a mi hermana, no puedo permitir que deambule sola por la casa y mucho menos que salga al exterior. -Musitó mientras se dejaba arrastrar-. En la biblioteca ya va a haber muchos ojos para investigar, no creo que mi presencia sea tan necesaria, en cambio debo permanecer junto a mi hermana. No quisiera que cometiera otra tontería como la del lago.

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25/02/2017, 13:25
Eleanor Knight

-¡Dios mío!- murmuro Eleanor, tapándose la boca con la mano, mientras su primo Piers relataba su sueño. No podía creer que acabara de decir lo de comerse a sus hijos allí, en el momento del desayuno, con un niño delante. Definitivamente esta situación hacia que estuvieran perdiendo todas sus normas de urbanidad. De casi todos los Alistair era esperable pero ¡Piers era un Knight!

Cuando la pequeña Mary Jane se presentó por fin a desayunar ataviada con un vestido viejo y roto y expresó su intención de ir en calesa, Eleanor lo tuvo claro. -Tendremos que contratar una institutriz ¿no creen? No podemos dejar que los niños se asalvajen en la situación que estamos porque da la sensación de que es indefinida- El niño, Arthur, hacía gala de unos modales exquisitos, casi siempre. Pero no podía estar sin educación. Mary Jane, por otra parte necesitaba aprender todo, no solo adquirir conocimientos, si no normas mínimas de educación. Frunciendo los labios en una linea recta, Eleanor se propuso comentar con Rhona y la Sra. Alistair el tema de la contratación de la institutriz de manera seria, en cuanto fuera posible.

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25/02/2017, 13:40
Charles Knight

Charles se había quedado escribiendo en el diario hasta tarde, había mucho que contar desde que llegaran, y además había agregado algunos comentarios personales, teorías, sospechas, todo. Si él resultaba uno de los que desaparecían, al menos su voz quedaría en esas lineas. Era un magro consuelo, pero aún si le pasara algo, debía transmitir fuerza a sus hijas.

La mañana, como todas las de aquel fatídico año, había traído consigo mas desapariciones. Charles sabía que debía sentir tristeza por Johan, pero nunca lo había considerado realmente parte de su familia, y sus excentricidades no ayudaban a integrarlo. Sin embargo, no le resultaba indiferente. Hasta ayer habían recorrido los pasadizos juntos, habían encontrado aquel altar, y compartido mucho. Al que realmente extrañaría es al viejo cascarrabias de su tío Ebenezer. No podía creer que se fuera sin avisar, no era propio de él. A Charles no le cabía duda de que alguien lo había secuestrado. Y eran otros dos Knight. Si no hubiese habido un Alistair, no hubiese dudado un segundo en sacar a su nueva familia a congelarse a la intemperie, aunque la enorme diferencia entre los dos reflotaban las sospechas. Como juez estaba entrenado para resolver casos dudosos e imprecisos, pero aquello escapaba a toda lógica, y se hacía mas difícil sin ayuda exterior.

En cualquier caso, había que continuar. Evidentemente durante el día nunca había sucedido nada, y por eso había que aprovechar a encontrar las claves para identificar a los culpables. Era durante la noche que aprovechaban para actuar quienes estuvieran detrás de todo esto.

Escuchar a Meghan Alistair decir que "la casa" estaba furiosa lo hizo lanzarle una mirada de furia, aunque intentó disimularla después, era comprensible verse sugestionado ante la abrumadora cantidad de desaparecidos en tan poco tiempo. Dougal intentó poner un poco de sensatez en la discusión, y Murron se sumó a la paranoia. También estaba convencido de la "maldición". Charles no se molestó en confrontar, no llevaba a ningún lado.

No se sorprendió demasiado cuando su sobrino Piers relató su sueño. No era difícil comenzar a trazar posibilidades fuera de toda lógica cuando no se podía llegar a conclusiones firmes con los pocos elementos que tenían. Las historias de maldiciones, duques sangrientos y demás eran lo suficientemente atractivas para que cualquier persona deje volar su imaginación, aún una con un razonamiento tan parecido suyo como el de su sobrino. No le parecía extraño a Charles que después de haber encontrado un altar escoces antiguo, un militar como Piers soñara en una batalla con aquellas características.

Lo que había que encontrar era de dónde habían salido los elementos "nuevos". El nombre del duque, su seudónimo, por ejemplo. Esos datos habían surgido de sueños, y si era así, seguramente los habrían visto en algún lugar de la casa, y los habían incorporado a sus ensoñaciones. 

Esta vez no se incorporó a la charla general, y desayunó en silencio. Sólo saludó a sus hijas y les pidió que se cuiden cuando se retiraron del salón.

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25/02/2017, 13:41
Charles Knight
Sólo para el director

Notas de juego

A la habitación de servicio