Partida Rol por web

Los rayos impactan en la criatura de agua, que ahora pega unos gritos acuosos. Ya la mitad de su cuerpo sale del suelo pero, al contacto con las líneas de electricidad que salen de los dedos de la hechicera. El ser comienza a hundirse nuevamente, como si el zócalo fuera parte de un océano sólo visible para su persona. Sin embargo, el impacto de la magia eléctrica lo hace volverse más torpe. Empieza a dar brazadas. Es cómico verlo como tratando de nadar en donde se supone que hay solidez. El ser intenta, volver al fondo nuevamente, su boca abierta en una O horrorosa.

Al ver a la bruja concentrada, me hago a un lado para no entorpecer su concentración y de paso para librarme de las descargas eléctricas -¿Ten cuidado vale?-. No digo nada más, solo fijo la mirada en la puerta que me señala, y a la carrera voy allí para ver si se encuentra la pequeña.

Al dirigirme hacia allí, vuelvo a concentrarme en mis pequeños, que están en el exterior vigilando como guardianes. -Decidme como va todo ahí afuera. No se si lo conseguiremos quedan escasos minutos.. ¿cómo váis?- Entro en la habitación buscando a la niña.

-Soy yo, Alan...- Susurro.

Eva asiente a Alan cuando pasa junto a ella, pero no dedica demasiado tiempo si quiera a mirarle dado que no quiere quitar la vista del ser aquoso que permanece a escasos metros de sus pies.

Sigue con el ceño fruncido y llega a sentirse incluso algo mal al verlo sufrir y dar brazadas de esa forma, pero ya le había visto intentar atacar a Alan y de no ser porque su poder le permitía cierta ventaja frente al agua, de bien seguro que también la hubiera atacado a ella.

Así pues, vuelve a concentrarse y extiende las manos hacia el ser para efectuar otra fuerte descarga. Es poco probable que consiga sobrevivir a ella esta vez...

La niña pega un gritito al escuchar a Alan, quien la distingue con facilidad. Al acercarse a ella, el muchacho le cuenta que Eva le mandó a protegerla y la pequeña, después de dudar un momento, sale corriendo y lo abraza.

Mientras tanto, Alan le pide a sus insectos que le comuniquen cualquier novedad en el perímetro. Falta muy poco para la hora señalada y eso da tanto alivio como tensión. Las voces que llegan a su cabeza se asemejan a una sola voz, la de la colectividad: "la niebla rodea todas las instalaciones, no nos permite ver que hay allí, los que han entrado han muerto. Parece que el aire está lleno de maldad, como si lo que sea que está atacando sabe que su tiempo se agota..."

Eva, después de arremeter una segunda vez con su magia, logra derrotar al hombre líquido o lo que sea que eso fuera. Entonces al darse vuelta ve a un zombie. El no la ataca, sólo está mirándola como evaluándola o algo así, pero nunca se puede saber con uno de estos muertos, sus miradas distan mucho de encontrar alguna emoción reflejada. Está a unos diez pasos de ella, quieto, la mira pero no avanza ni retrocede, es imposible saber así como así que está pasando por su cabeza...

Al girarse, Eva ahoga una exclamación de sorpresa, pero se queda tan quieta como el propio zombie por unos segundos, hasta que empieza a parpadear y reaccionar preguntándose si seria prudente atacarle... no ha hecho nada, al menos todavía, así que intentar detsruirle sin motivo sería rebajarse al mismo nivel que ellos.

Así pues, se mueve lateralmente hasta la puerta que le indicó a Alan, despacio y sin prisas, sin quitar el ojo de encima al zombie. A fin de cuentas son criaturas lentas, debería ser capaz de controlar sus movimientos con facilidad.
-¿Alan...?, ¿está todo en orden?- pregunta al interior de la oficina mirándola sólo de reojo antes de volver a centrar su tensa atención en su posible contrincante.

Al principio escucho un grito ahogado de la pequeña, pero al sentir su abrazo, no dudo en frotar su cabeza con mi mano y echar una mirada atrás a ver como lo tiene Eva. -Tranquila pequeña, pronto acabará todo..-

De pronto, siento un punzante dolor en el interior de mi cabeza; son mis insectos que tratan de comunicarme algo que han notado y que han visto. Cuando vuelvo a sentir la realidad, compruebo que la pequeña aún está conmigo, entre mis brazos. -Hey, tranquila de ¿acuerdo?. ¿Confías en mí verdad?, pronto terminará..- Sujeto su mano bien fuerte y salgo de la oficina, justo en el momento que Eva aparece para ver si está todo en su sitio.

-Esa niebla ha sobrepasado las instalaciones y parece que ya no les importa el ritual, digo con la pequeña en mis brazos y la dejo caer hasta que toque el suelo, saben que ya lo tienen perdido todo y ahora están arrasando con la niebla para matar todo a su paso. Tenemos que buscar una zona alta Eva.. Mis ojos no pierden el tiempo y ya están buscando unas escaleras por las que subir, momento en el que, veo un no muerto como intenta abalanzarse sobre nosotros con pasos torpes y lentos.

Dejemoslé y marchémonos..-Susurro buscando la mano de Eva para que olvide a ese zombie y empiece a moverse.

- La Organización. ¿Son de los nuestros? Identif... identifíquense o no respondo de mí.

Eva sonríe aliviada al comprobar que tanto la niña como Alan está perfectamente, demostrándose así que quizá haya empezado a sentirse demasiado paranoica... pero más vale ser previsor, apenas quedan unos minutos para que el peligro pase.

-¿Han renunciado al ritual? Eso es bueno...- aunque evidentemente que optaran por destruir todo a su paso ya no lo era tanto -¿Cómo detenemos a una niebla...?- pregunta entonces arrugando la frente, dudando un poco que su compañero tenga la respuesta dado que ni siquiera e sun fenómeno meteorológico natural.

Es entonces cuando repentinamente el zombie habla, y Eva da un respingo girándose hacia él con los ojos abiertos de par en par.
-¿¿Está loco?? He estado a apunto de matarle dos veces... Yo soy Eva Lesnie, pero dudo que conozca todos los nombres de los mimebros... aunque como puede comprobar estamos intentando detener todo esto. ¿Queda alguien más vivo por aquí?- pregunta mirándole inquisitivamente, atenta a cualquier reacción extraña.

-No lo tengo muy claro, digo como respuesta a las dos preguntas de Eva, creo que el enigma a todo eso es esperar, buscar un lugar del que nos podamos cobijar y aguantar cinco minutos más-

Quizá me equivoque, ¿pero que otra solución podía haber?. Es entonces cuando Eva no me hace caso, y sigue dando cuerda al zombie. -Deberías de haberle matado, joder vamonos de aquí..- Contacto con su brazo para hacerla girar y que deje a ese hombre no-muerto a sus anchas, pero se queda finalmente en un amago.

 Y me quedo a su lado, junto a la niña, para ver que mas dice ese ser.

El zombie les hace señas a Eva y Alan de que lo siga. Por los relojes en cinco minutos se cumple el plazo. Eso los llena de alivio, pero también de tensión. Bub, como se presenta el ser, descorre un panel que estaba oculto y una pared se abre, dejando ver a dos pequeños, vivos, sanos y salvos. Uno de ellos es una niña de unos diez años, y el otro es Peter, el jovencito rescatado del hospital. Los chicos están a salvo en esa habitación anexa y oculta. Su protector, el pobre de Bub, parece que ha sabido bien cómo ocultarles. Sin embargo, también se nota el miedo en sus ojos, como si supiera que los últimos minutos serán los peores...

-Tenemos que aguantar... espero que tod.. todo termine pronto. ¿Los demás están a salvo?

Me quedo sorprendido por la reacción del no muerto, Eva parace poner mas confianza en él, así que me fiaré de su instinto. Pero aún mas me sorprende ver la pericia que tiene para caminar y revelar sitios ocultos ese zombie.

Una pequeña compuerta se desliza, escondiéndose por la pared para dar paso a un lugar secreto.

Al ver lo que se ocultaba tras ese pared falsa, supe que el final a todo esto estaba cada vez mas cerca, en cualquier caso habíamos conseguido el primer objetivo que se nos anunció, el siguiente es detener toda posibilidad del ritual, y por el momento no pueden hacer nada. -Eres una caja de sorpresas Sr. Bub- Recnozco mi error y no tengo mas remedio que regalarle una sonrisa por su trabajo.

-Volved a mi pequeños..-

No se nada de donde está el resto así que me tomo ese periodo de tiempo para llamar a los insectos. -..¿Sabés algo tú Eva?- Digo al terminar la orden.

-La última vez que conseguí contactar con ellos seguían en pie, aunque por lo visto muchos de la organziación no han tenido tanto éxito...- mira hacia atrás, hacia los pasillos que han quedado detrás de ella, con cierto pesar y resignación para después observar a los niños con una sonrisa más afable y esperanzada.

-Lo mejor será que resistamos aquí todo lo desapercibidos que podamos, después nos pondremos en contatco con ellos- para ella las prioridades estaban claras, y sin duda los niños eran lo más importante. Sólo cinco minutos más y estarían fuera de peligro, aunque podía apostar a que serían los minutos más largos de su vida... pero al menos ya no estaba sola, ahora contaba con más apoyo...

-Espera- de repente detuvo a la pequeña y volvió a alzarla entre sus brazos, apretándola contra su pecho de forma protectora mientras retrocedía unos pasos -Niños, ¿estáis bien?- mira a los niños inquisitiva y desconfiada. Bien podría ser una trampa bien montada, así ya tendrían a los tres pequeños juntos.

-Él nos cuidó pero...

-Pero la cosa afuera quiere que volvamos... la cosa afuera dice que no... dice que no va a perder...

-Es así. Afuera se está poniendo muy feo. Sentimos que esas voces, son voces que escuchamos sólo nosotros, nunca Bob las escuchó... nos dicen que es hora. Nos dice que no va a esperar más. Tengo mucho miedo, Eva. Tengo miedo de que entren y nos lleven porque de alguna manera...

saben que estamos acá.

-No sé de qué hablan. Tod.. todo el día me han di.. dicho de estas voces pero no... no siento nada... Mal... maldición, fal... falta tan poco te...nemos que aguantar per... pero yo, cuando vine, yo ví a to... ví a Ludwig muerto y Ludwig es muy fuer.. es muy fuerte ¿saben? Y... y aunque faltan cin.. co minutos siento que es toda la e.... eternidad... Me... mejor estemos prepa..rados. ¿Son los únicos? ¿No... no ha so... sobrevivido nadie mas??

No??

Los insectos vuelven, a millares, cuando Bub termina de contar sobre los niños y las voces. Ellos se mutan con el coco, entran en él y se callan, pero Alan siente miedo. Miedo desde cada diminuta criatura que ahora ha formado con su persona un sólo ser. Eva también siente temor, apresionante, tedioso, pegajoso, que no se le quiere quitar. Faltan cinco minutos pero ver a Ludwig muerto, no saber qué ha sido de María, si ha habido o no más bajas. Todo hace pensar que realmente se juegan el destino de la humanidad y, por lo pronto, son simplemente un cuco, una bruja y un viejo y buen zombie.

-No os asustéis, no dejaremos que nada ni nadie os haga daño, sólo debemos esperar 5 minutos... Eso es muy poco tiempo, ¿verdad?- sonríe a los pequeños con ternura, accediendo finalmente a que los tres se reúnan, aunque supone que no se conocen pero eso en realidad da igual. Quizá esta mala experiencia les una de por vida.

-Yo tampoco les oigo, supongo que lo hacen para asustarles o intentar convencerles, así que será mejor no quitarles el ojo de encima...- mira de reojo a los niños y luego suspira hondamente -En la Oficina no hay nadie más, pero hace unas horas María seguía en pie acompañada de otros compañeros. Se quedaron a combatir a esos monstruos... pero supongo que todavía queda alguno en pie- la bruaj se pregunta qué demonios estarán haciendo el resto. Deberían haber acabado con la posibilidad de que eso siguiera sucediendo gracias a la daga... aunque quizá ya no había nadie capaz de empuñarla, pero mientras ellos siguieran en pie defenderían a los niños a toda costa.

Seguía sin comprender por que esos demonios, en vez de, organizarse y crear un mundo para ellos se empeñaban en matar a todos nosotros, o aún peor, a esclavizarnos. Si eso era lo que querían, no me queda mas remedio que pensar que su mente es tan estrecha e inútil como la mente humana.

Siento un cosquilleo infinito cuando esos insectos se introducen en mi interior, completándome. Los pequeños estaban con nosotros, al menos hemos demostrado que somos un poco mas listos que ellos. Echo una mirada hacia Eva viendo como intenta decirles a los pequeños que solo deben de aguantar cinco minutos más, sonrío por su gesto y seguidamente me fijo en Bub. -Tampoco les oigo. Es tan extraño todo esto. Hago una pausa. Pienso que he estado la mayor parte de la noche a solas. No tengo ni idea de donde se puede esconder el resto. Mi bichejos me comunicaron que había mucha gente muerta, que estaban todos muertos. Espero que se equivoquen. Bien, digo tratando de quitar miga al asunto. No cabe duda de que van a ser los cinco minutos mas largos de nuestras vidas, propongo quedarnos aquí, a esperad y enfrentarnos todos juntos a ellos, ¿qué os parece a vosotros pequeños?, supongo que tendréis ganas de quitaros esas voces feas y malas de la cabeza ¿verdad?..- Añado en un tono jovial, preparándome mentalmente para lo peor.

"Vaya estúpidez. Ojalá puedan salir de aquí todos ellos junto a Eva"

-Vamos chicos, aguantemos todos juntos-