Partida Rol por web

El lugar de reunión se convirtió en el punto de reunión, mientras vagabundeabamos por los pasillos en busca de un aula libre. Ciertamente el colegio era más bullicioso de lo que parecía cuando todo el mundo se movía libremente, lo que contrastaba con la quietud de las noches y el silencio de los pasillos en las horas de clase. 

Al final encontramos un aula en el séptimo piso, que hasta dentro de una hora no usarían los alumnos de segundo de las casas Ravenclaw y Griffindor, por lo que nos había comentado un intrigado mocoso de nuestra propia casa.

-¿Listas?- Pregunto mientras saco el colgante y estilo la cadena, indicando con un ademán que se agarren a la misma.

Ya desde sus vacaciones Madelain sabía que ese año en Howgarts se saldría bastante de lo común, pero entre todas las cosas extrañas que se había imaginado que ocurrirían en ningún momento pensó que iba a terminar usando un giratiempos. ¿Cómo habría conseguido Spencer que se lo permitieran usar? Posiblemente su familia tuviera algo que ver, los Ollivanders no eran una familia cualquiera.

Cuando por fin encontraron un lugar vacío, Spencer sacó el colgante y les indicó que se tomaran de la cadena. Madelain estiró la mano y se agarró de ella. Miró a Alana.

_Lista.

Alana volvió a mirar hacia todos lados y tomó la misma como veía que era la instrucción. Se sentía como un elemento fuera de lugar ahí, no porque no quisiera formar parte del asunto, pero no se veía verosimil que un alumno ejemplar como ella estuviese haciendo esa clase de cosas. Pero tenía sus buenos motivos despues de todo.}

No respondió, pero asintió con suavidad indicando que también estaba preparada.

Todos estabamos agarrados en círculo alrededor del giratiempo. Nos devolvería al mismo lugar que ocupabamos hace unas horas. Acerco el dedo al colgante, y despacito empujo la parte de arriba. El reloj de arena engastado se balanceo, la parte de arriba y la de abajo cambiaron posiciones, una, dos, tres y cuatro. Con ese simple gesto el tiempo se retorcía sobre sí mismo.

A nuestro alrededor el escenario era familiar pero diferente, nos encontrabamos en el aula en el que nos habíamos reunido hacía unas horas. La puerta se cierra frente a nosotros, era el momento en el que después de saludarnos por la mañana cada uno se iba a hacer sus cosas. nuestros yoes pasados se encontraban al otro lado de la plancha de madera.

-Deberíamos esperar diez minutos, para no cruzarnos con nosotros mismos. -susurro mientras me siento en unas silla cercana.

Madelain no sabía cómo sería ni cómo se sentiría el uso del giratiempo. Los chicos más avanzados que conocía y sabían aparecerse le habían dicho que no era una sensación plácida al principio y ella se imaginaba algo así, pero no fue tan malo, ya estaba hecho y se sentía como siempre.

Miró a su alrededor maravillada. Una cosa era escuchar el plan y otra muy distinta era ver que ya habían dado el primer paso; una cosa era saber cómo funcionaba un giratiempos y otra era ya haberlo usarlo. Todo se hizo más claro en ese momento, sobre todo después de la indicación de Spencer.

_Está bien. ¿Cuánto tiempo tendremos? Había pensado en hacer turnos de un minuto, para que cada uno de nosotros tenga dos minutos revisando el despacho. Primero podemos ir Spencer y yo mientras Alana hace guardia, luego hace guardia Spencer mientras Alana y yo revisamos, y finalmente hago guardia yo mientras ustedes dos revisan. ¿Qué opinan?

-Es justo -dictaminó, mientras echaba un rápido vistazo por la ventana. -¿La última vez fueron ustedes a los que atraparon en el despacho? Escuché algo de que habían hecho que limpiaran durante un buen rato como castigo, sin magia.

Hizo una mueca, evidentemente la idea se le hacía desagradable.

_Sí. Pedí que alguien controlara pero todos se miraron y nadie hizo nada. Por eso ahora todo el tiempo alguien debe estar vigilando que nadie nos atrape.

-¿Un par de minutos? Los profesores tienen clases, deberíamos poder disfrutar de ese tiempo algo más. Además, Alana se supone que está en sus horas libres, si la ven merodeando por la zona, siempre puede decir que solo estaba dando un paseo. Quiero decir, el giratiempo no nos permite volver a ir hacia adelante, tenemos que gastar cuatro horas, y terminar volviendo al punto de partida.

Me levanto y me estiro. 

-Hora de ponerse en marcha.- Camino hacia la puerta, y la abro con cuidado, oteando los pasillos del colegio, antes de aventurarnos.

Madelain temía que los descubrieran. Al fin y al cabo ella no tenía permiso para usar el giratiempos, incluso si no estuviera haciendo nada por fuera de las reglas.

_¿Pero qué pasaría si nos descubrieran? ¿Qué ocurriría si por algún motivo no pudiéramos volver al punto de partida dentro de cuatro horas?

Con la pregunta formulada, la chica siguió los pasos de su compañero de casa.

No parece haber mucho movimiento de gente en los pasillos a esa hora. Algún alumno rezagado que se ha dormido y corre hacia su clase intentando llegar puntuales, pero seguramente entrarán en clase cuando ya haya comenzado. Por lo demás, todo parece tranquilo y sin ningún profesor patrullando los pasillos pues la mayoría tienen clase en esos momentos.

En general se respira tranquilidad en el lugar.

Alana permaneció en silencio largos minutos, solo escuchando. Estaba atenta a los pasos, pero de forma satisfactoria no escuchaba ninguno. Se paseo por el cuarto como un felino acosado, esperando que pasaran los minutos, aún sin escuchar moradores del castillo cerca.

-Creo que ya podríamos aventurarnos...

Asiento con un gesto seco. Mientras saco el cuaderno de mi apuntes.

-Tenemos dos formas de subir, dando un largo paseo esquivando fantasmas...- Sus rutinas eran predecibles si nada los distraía y era fácil por donde iban a ir y cuando.-... o podemos coger un pasadizo hasta el séptimo, pero no me gusta escalar y es muy cansado. En marcha ¿no?

Cogiendo el tirador con determinación pero con cuidado, hago que la puerta gire sobre sus goznes sin hacer ruido, para deslizarme al pasillo que había al otro lado.

Madelain miró a Spencer con cara extrañada.

_Pero si ya estamos en el séptimo piso. ¿Te sientes bien? ¿Estos viajes con el giratiempos traen efectos secundarios? Si quieres podemos esperar un poco más si necesitas recuperarte.

La chica lo miraba con franca preocupación, esas cosas no eran propias de Spencer. Si aún así él quería seguir adelante, ella iría tras él.

-Lo siento, estaba pensando en otras cosas. Ultimamente o estoy metido en un montón de pasteles a la vez, o apenas tengo nada que hacer. No te preocupes, el giratiempo es completamente seguro, mientras no nos crucemos con nosotros mismos. Creo que entraríamos en un bucle mental en el que nos moriríamos, muy probablemente.- Suspiro.- ¿Nos vamos entonces?.-me hago a un lado.- No hay nadie, las damas primero.

_U otros. Podríamos tener problemas si alguien nos viera fuera del lugar donde deberíamos estar.

Madelain pensaba seguir a Spencer, pero dado que él decidió quedarse atrás ella hizo un acopio de valentía y luego de revisar que no hubiera nadie, avanzó. Tampoco quería poner a Alana en la situación de tener que ir adelante. Con cuidado pero sin perder tiempo fue directamente hacia el aula donde se encontraba el despacho del Basilisco.

Alana avanzó como era de esperar, pero siguiendo bien de cerca a Madelain demostrando que no quería quedarse atras. Ella también se veía bastante atenta a cualquier sonido que no fuese el silencio de la soledad que necesitaban. Habló en un susurro, con cautela:

-El despacho tiene alguna cerradura mágica o alguna protección imagino, ¿no es así?

Spencer había sido el primero en entrar en aquella oportunidad.

_¿No tuviste que hacer nada para entrar, no? Aunque es posible que ahora sí esté protegido.