Partida Rol por web

HLCN - Ciudad Bala Dorada.

Caseta del Sheriff

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21/01/2015, 14:53
Rosalind

Sí, será después de las votaciones- contestó, pensativa- Oiga reverendo, ¿y cómo puede saber usted que esas personas son inocentes? Quiero decir, está claro que esos hombres que yo le he dicho huelen un poco a podrido, pero, ¿cómo podemos estar seguros de descartar absolútamente esos nombres que ha dicho Giese? 

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21/01/2015, 15:04
Reverendo Adam Strong

- Oh, por supuesto que no podemos. - Respondió Strong. - De hecho si Giesie es el más votado, como espero que sea, yo de usted emborracharía a Francis. Pero es su manera de tratar de librarse a la desesperada de sospechas que aún no se habían producido lo que me hace desconfiar de Giesie.

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21/01/2015, 15:13
Maybelle Canary

La mujer asintió con la cabeza cuando escuchó la explicación del sacerdote y la arruga de su ceño se suavizó sin llegar a desaparecer. Sin embargo, cuando el hombre desestimó su confesión, no pudo contener una carcajada, breve pero sonora, la primera desde que había llegado a ese pueblo. 

- Claro, le divertiré confesándole mis pecados, reverendo. - Comenzó, enarcando las cejas en un gesto divertido. - Siempre y cuando usted me confiese los suyos también. - Terminó, mientras sus labios se estiraban en una sonrisa. 

Hizo una pequeña pausa, valorando las últimas palabras del hombre y recuperando en parte la seriedad. - Giesie. Probablemente Lila se irá con él... No creo que a nadie le pareciese raro que yo dijese su nombre después de que él me haya señalado a mí. - Se encogió de hombros. - Cuente con ello.

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21/01/2015, 15:26
Reverendo Adam Strong

Al escuchar la carcajada de Canary Adam Strong se acercó a la silla libre para tomar asiento y se colocó hacia adelante, con los codos apoyados en las rodillas. Una media sonrisa mezcla de complicidad e ironía se dibujó en su rostro al escuchar su propuesta, pero negó con la cabeza.

- Si apostásemos un trago por cada uno de los pecados del otro, - Le dijo. - usted estaría devolviendo en el abrevadero hasta el primer desayuno de su vida antes de que pudiera empezar a calentarme el estómago. - Aseguró mirándola fijamente. Sin embargo aquellas palabras no eran las del reverendo Strong, ni mucho menos. Eran frases que habría dicho el hombre que era antes. Y aunque durante un instante fue un alivio sacar eso de dentro finalmente apartó los ojos con un suspiro.

- Creo que otros están esperando a que Giesie sea acusado. - Comentó. - No le voy a pedir que sea la primera porque eso podría atraer mucho la atención sobre usted. Pero alguien tendrá que serlo.

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21/01/2015, 16:25
Wyatt Stolesouls

-¡¿Pero có…?!- El fotográfo estuvo próximo a preguntar al reverendo como podía anunciar y pronosticar aquél baño de sangre de una forma tan concluyente y con tanta seguridad. ¿Qué razón podía moverlo a pensar que la desdicha no hubiese terminado ahí? ¿No era suficiente catástrofe por sí sola? Por unos minutos, mientras dejaba que el hombre desahogara sus inquietudes estuvo pensando que quizás pecaba de alarmista y de haberse dejado arrastrar por los hechos del día. Habían sido testigos de un escenario difícil de digerir y no le extrañaba que aquél hombre le nublasen los pensamientos más sombríos, más aún, con el peso de la carga que llevaba sobre sus hombros.

Pero cuanto más hablaba, más dudaba de su propio criterio. Fue determinante y comprendió aquellas oscuras conclusiones cuando le enseñó la herida. Sus ojos se abrieron y se dilataron con horror al ver aquella mancha roja y húmeda.

-¡Por todos los santos! ¿Alguien ha asistido esa herida?- Preguntó lívido y arremangándose dispuesto sin dilación a recorrer, de ser necesario, a sus escasos conocimientos de medicina. Poco más podría hacer que lavarla, coserla, y vendarla. Rezando para que ésta no se infectase. Pero no podía quedarse impasible ante una herida que era a todas luces de consideración. –¿Quién ha sido?¡¿Cómo ha sido?!

No obstante, antes de hacer nada, Wyatt recibió la propina de otro baño de agua fría. –¿El sr. Pres-prescott?- El Reverendo sabía de su secreto más íntimo incluso antes de confesárselo, durante un instante que duró hasta que no le quedó aire en los pulmones lo miró como sí tuviera poderes místicos, cósmicos, o como si Dios le hubiese dado el poder de leer las mentes, o en su defecto, el de la omnipresencia.

Pasado el susto el lavandero volvió a la realidad y con la claridad de racionamiento que ofrece tener los pies con frecuencia en el suelo, entendió que los habría visto al mediodía en el salón hablando, cuando se separaron a hacerse confidencias en aquél rincón oscuro. O peor aún, alguien los habría visto y se lo había contado.

El impulso de cualquier otro hombre habría sido negarlo, podía inventarse mil excusas, pero no estaba en su naturaleza, Stolesouls, a diferencia de aquél ganadero que había amado tan solo verlo, era alguien avanzado a sus tiempos. –Bueno, supongo que sí lo sabe, no estaría muy bien negarlo. Es decir, sé que puede verse como un acto contra natura y que muchos dirían que Dios castigará ese sentimiento impuro. Pero… ¿Cómo Dios puede odiar y sentenciar algo fruto del amor?¿El amor no es su obra?¿Su legado?¿Su mensaje?¿Cómo puede poner ese sentimiento tan nítido, brillante y que me hace sentir tan puro, y decir que está mal?- Iba a seguir su diatriba pero el Reverendo no estaba buscando ni una confesión, ni excusas. Sencillamente había expuesto conocer los hechos, así que a un signo él se calló y siguió escuchando lo que tenía por decir. Calló hasta que hubo concluido. Entonces tuvo mucho en qué pensar.

-No sé como sabe todo lo que dice saber.- Murmuró sin tener idea por donde empezar. –Lo que usted ha dicho, a lo que a mí me atañe; es cierto.- Era una buena base para pensar que Adam estaría por lo demás sobre la pista correcta. Reflexionó sobre la reunión en la taberna, los comentarios de unos y de otros, los razonamientos y las acusaciones esgrimidas. Como unos, habían señalado a otros. –¡Buuuuffffffff…! Es mucha información para asimilar de golpe. No esperaba que, es decir, esperaba que hubiera sido un crimen aislado. ¿Qué buscan?¿Qué quieren?¿Es qué no es suficientemente loco éste desierto?¿No tienen suficiente con matarse con plomo?¿Quieren ver más sangre?¿Necesitan más?-

Probó de serenarse y ordenar sus pensamientos.

–Bueno, en vista de lo que sé ahora… Veo dos frentes claramente delimitados. Por un lado tenemos a nuestro querido crupier, Joey, y a nuestro joven reportero, Geisie. Y el señor Riley. Alguno de ellos pensé que podría ser culpable. Pero también está, está, Prescott.- De haber sabido todas esas historias de antemano y de haber creído una conspiración, quizás Wyatt se habría ahorrado dar ese nombre. No podía creer que al ser que amaba pudiese ser culpable de nada, pero ahora estaba claro que una omisión lo perjudicaba más que otra cosa. –Bueno, por ello creo que esa gente estará al lado correcto. Espero. Creo. No sé.

-Por otro están los que se han lanzado prestos a acusarlo.- Varios nombres venían a su cabeza, Rosalind, Lila, el Coronel e incluida a la cazarecompensas por mucho que en su momento los argumentos expuestos no podían encajarlos como otra cosa que no fuese más que cierto y obvios. -Aunque quizás pueden haberse visto arrastrados por la rudeza de sus palabras. Unos pensamientos que muchos tienen en la cabeza y pocos osan decir en voz alta. Los de Prescott, digo. No es que los comparta, ya… ya he censurado a… bueno. Me entiende, Padre. Se ha criado en un mal entorno, pero no es un mal hombre. Estoy seguro que es todo bondad. En el fondo, en el fondo es un ser frágil que ha visto poco mundo.- Concluyó con una sonrisa al pensar en él. - Francis no es malvado. Créeme. Ya lo ha visto, ni siquiera serviría para tramar planes maliciosos sin que se pudiese oler sus intenciones a kilómetros.

Volvió a las confrontaciones que había podido observar aquella mañana. Había varios frentes, decía: -Y en mitad de ellos, en tierra de nadie, ese tal Red que ha mediado para poner un poco de paz, algo que iba a hacer yo, aunque… No quise exponerme.- Confesó avergonzado. Era muy extraño que Stolesouls mismo no hubiese intervenido a poner paz. Aunque a ser justos con él, otros se habían avanzado incluso antes de ver por donde venía el problema. -No sé, es todo muy lioso y estamos hablando de almas humanas. ¿Cómo podemos señalar a alguien sin pruebas? Puedo hablar yo por usted, puedo llevar sus palabras como si fueran propias, y… y que Dios me empare si nos equivocamos.- Era justo lo que podía hacer por él.

Al notar aquella carga se sentó, y sentó aun más recostado al volver a pensar y sentirla más pesada. Luego, se vio arrastrado por el pasado. –Cree que Dios, comprenderá. ¿Verdad? No soy un hombre malvado. Quizás no siempre he sido perfecto, incluso he fotografiado alguna escena algo… osada, picante, ¡obscena! Si lo prefiere. Un hombre y una mujer besándose en un rincón y él con la mano sobre su rodilla desnuda.- Solo la rodilla. Pero en aquellos tiempos eso solo ya era un acto contra la moral. -Una imagen a la vista de lo que nadie debería ver. Pero… nunca he cruzado otra frontera, no he hecho daño a nadie. Osado, puede que poco sumiso e irreverente. Pero no malvado. Siempre he ayudado al prójimo. No por sentir culpa de ser quién soy o de los sentimientos que tengo, o por esperar recompensa alguna ni siquiera en ojos de Dios. Sino, porque es lo correcto. Creo que el mundo es mejor haciendo lo correcto. Todo eso no puede ser en vano. ¿No? ¿No lo comparte? No pueden tener ellos razón. Lo de Prescott y yo… no es algo malo. Es algo puro. Más reluciente que cualquier pepita o lingote de oro. - Se quedó pensativo. De pronto, bocetó una sonrisa cargada de recuerdos y nostalgia. Sus ojos brillaron sensibles anegados de emoción. Se sentía vulnerable como si esas fuesen las últimas horas de su vida. -¿Sabe una cosa, Padre? ¿Algo que no suelo contar? Una vez salvé a una doncella de que lo dejase de ser, y que, puede, la hubiesen matado. Quién sabe. Es posible que salvase su vida.- Tragó saliva y ordenó sus recuerdos.

-Empezaba mi peregrinaje, había abandonado mi oficio. Carpintero, ya sabe, aun seguía en la costa este, haciendo mis primeras fotografías. El día había sido largo y había aprovechado hasta la última hora de luz para sacar el mejor perfil de aquella ciudad. Regresaba a mi hotel cuando escuche los gritos ahogados de alguien clamando auxilio. Podía haber hecho oídos sordos, había sido apenas audible. Era un callejón estrecho. Oscuro. Y en ese momento de coraje, encontré en la oscuridad a mi aliada. Cargué mi disparador del preparado de magnesio y clorato potásico,  y disparé.- Wyatt no pudo evitar reírse al evocar sus caras de sorpresa. -Esos cinco depravados quedaron tan desorientados que pude arrastrarla por el brazo y sacarla de allí. Luego se fue por su propio pie, huyendo de lo que pudo ser.- Se frotó la sien y se sintió culpable de confesar aquél acto altruista. -Salvé una vida y volvería a hacerlo sin dudarlo, aunque me costase la vida. ¿Cree que si me equivoco eso ayudará?¿Si muero hoy… cree que el Todopoderoso me acogerá?

Notas de juego

P.d.: Ahí tienes mi rol. Ahora te toca a ti ser avispado y saberlo ver  :P entre tanta palabra XDDDDDDDD

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21/01/2015, 15:38
Maybelle Canary

La sonrisa volvió, leve y de medio lado, al escuchar la bravuconada del reverendo. Enarcando una ceja, Maybelle respondió con voz grave.

- No debería subestimarme, padre... - Comenzó, de forma que parecía referirse a la gran cantidad de pecados que pesaban sobre sus hombros. Apoyó la palma sobre la mesa para acercarse un poco y mirar al sacerdote más de cerca y un pequeño brillo divertido apareció en sus ojos. - Tengo un estómago de hierro. - Aclaró tras un instante, medio bromeando. 

Recuperó la seriedad y la postura recostada en el respaldo de la silla para valorar las últimas palabras del sacerdote que cada vez lo parecía menos. - Quizá podría pedirle usted a la señorita Watson que fuese la primera en señalar al muchacho... - Dejó caer, mirando al hombre de medio lado. Había notado la expresión que se dibujaba en su rostro cada vez que ella mencionaba a la bailarina y ciertamente le producía una maliciosa diversión sacarla a colación aunque tan sólo fuese para ver al reverendo revolverse incómodo. 

- O podría hacerlo yo misma. - Terminó, encogiéndose de hombros. - Si la cosa se alarga, tiraré esa piedra.

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21/01/2015, 16:57
Reverendo Adam Strong

El reverendo permaneció paciente y atento durante todo el discurso de Stolesouls, y en varios momentos le miró de manera aprobatoria, instándole a continuar.

- Tranquilo, Stolesouls, tranquilo. - Dijo, intentando animarle. - Espero que otros párrocos más acérrimos no me oigan decir esto, pero lo único que quiere Dios es que al final del día hayamos hecho más bien que mal. Así que no se preocupe por lo que tiene con Prescott. Mientras no hagan daño a nadie, tienen ustedes mi bendición.

- En cuanto a lo que está sucediendo en Bala Dorada, - Continuó luego. - ha de saber que los grupos no son exactamente como propone. Canary y Rosalind, por ejemplo, van por libre. No tienen nada en contra de Francis o de la india.

- Por otro lado de cara a las votaciones de hoy mucha gente sospecha de Giesie. No puedo darle más detalles ahora, pero convendría que usted y Francis sumasen sus votos a esa causa, y que lo hicieran cuanto antes. - Dijo antes de hacer una pausa. - ¿Podría decírselo por mí?

Notas de juego

Estoy desde el trabajo, no puedo responder más ahora y las votaciones están cerca.

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21/01/2015, 17:11
Lila Rocarroja

El Reverendo era un hombre sensato y mostraba eso con cada una de sus palabras, pero hubo algo que llamó su atención y era algo que no podía obviar - Lo que ha dicho Francis no suena a retractarse, reverendo. Él sigue pensando lo mismo, solo que no se ha callado. Sus palabras son claras, él me mataría de estar en su pueblo y de una manera terrible. Lo siento, pero mi voto es para mi propia protección - reflexiona un poco sobre lo que dice de Riley y Giesie.

- Creo que Riley ha tratado de desviar la atención, es cierto, aunque el hecho de pensar que todo comenzó con los extranjeros no es descabellado. Pero eso no es mejor que lo que hace Francis que es señalarme por ser de la tribu que soy. A pesar de ello, Giesie me parece un chico impulsivo y despistado y dudo que sus insinuaciones sean algo más allá de su propia ingenuidad. No quiero decir que usted no tenga razón, es solo que mis sospechas van más directamente ligadas hacia Francis y Riley que hacia Giesie. Lo he visto en este pueblo desde que era una niña y dudo que él estuviera detrás de una masacre que solo daña a su pueblo -.

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21/01/2015, 18:38
Rosalind

Pues a mí Francis me huele peor de Giese. Creo que lo voy a hacer al revés, Reverendo. Presiendo que va a haber más gente votando a Francis que a Giese, y si todo sale como espero, emborracharé a Giese esta noche. -dijo, suspirando. 

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21/01/2015, 19:16
Reverendo Adam Strong

Adam Strong escuchó lo que Rosalind tenía que decir, y valoró las opciones que les quedaban durante unos instantes.

- Si cae Francis, Stolesouls caerá con él. - Dijo entonces, observando largamente a Rosalind. - Y por lo que sé Stolesouls es alguien que nos será útil que se quede con nosotros. De hecho es probable que sea mi esperanza de llegar vivo a mañana.

Notas de juego

Ahora mismo no puedo postear más, cuando tenga un rato te cuento más cosas que he descubierto.

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21/01/2015, 20:26
Rosalind

Pues lo tenemos complicado, Reverendo. - contestó, mesándose la barbilla- Ese Francis no ha dejado de dar la lata, y es casi imposible que lo señalen. Stolesouls no tiene muchas opciones, me temo. 

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21/01/2015, 20:31
Reverendo Adam Strong

El reverendo dedicó a la mujer una media sonrisa cuando ella le dijo que no le subestimase, y esta terminó de completarse al escucharla hablar sobre su estómago. Sin embargo acto seguido empezó a recuperar la seriedad. Lo que tenían entre manos era peliagudo.

- Se lo he dicho, pero lleva todo el día callada. - Comentó. - La verdad, me preocupa que esté en shock o algo parecido.

- Dígame, ¿qué pasará con Rosalind si el elegido es Giesie?

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21/01/2015, 20:32
Maybelle Canary

La mujer frunció un poco el ceño al escuchar la respuesta sobre Ella. Pensó en decir alguna frase de ánimo pero en realidad no tenía mucho que aportar y no le gustaba hablar por hablar. Al fin y al cabo apenas conocía a esa mujer desde el día anterior, no tenía ni idea de cómo le habría afectado toda la situación. 

Se centró entonces en la pregunta del sacerdote, pues a eso sí que podía responder algo. - Si algo le pasara a Giesie, sospecho que Lila no podría evitarlo e iría detrás. Pero el desengaño que sufriría Rosalind la libraría de cometer alguna tontería. - Hizo una pausa y se encogió de hombros. - Su corazón quedaría libre de nuevo, listo para encontrar el consuelo en otros brazos. ¿Por qué? ¿Tiene algún candidato para ocupar ese lugar? - Preguntó al final, mirando al reverendo con curiosidad.

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21/01/2015, 20:40
Reverendo Adam Strong

El rostro de Strong dibujó una mueca de ligero disgusto al escuchar la respuesta de la mujer, sin saber muy bien cómo enfrentarse a lo que tenía por decir. Sin embargo poco a poco esa expresión fue convirtiéndose en una sonrisa de confianza.

- Hay al menos cinco personas que votarán a Giesie, sólo están esperando el momento para que los votos de él y sus compañeros no cambien de golpe. - Explicó. - Se lo aseguro, puede estar tranquila en cuanto a eso.

- Por otro lado... - Dijo antes de detener su voz un instante. - Voy a serle completamente sincero: él no es el verdadero objetivo. Giesie puede que sea uno de ellos. Desde luego es sospechoso, y estoy casi seguro de que así es. Sin embargo la asesina confirmada es Lila Rocarroja.

- Tengo nueva información. Ha habido tres ataques esta noche, no dos. Y ella es una asesina. Sé que Giesie y ella se encuentran a escondidas, y por eso vamos a por él. - Dijo antes de mirarla fijamente y cambiar su voz a un susurro. - También sé lo que tiene usted con la india. - Dijo en un tono nada acusatorio, más bien comprensivo. -  Si vamos a por Giesie caerán sólo ellos dos y usted estará a salvo. Si fuésemos a por la pielroja es algo que no podría garantizar. - Explicó, antes de hacer una pausa y decirlo de la manera más clara posible.

- Estamos haciendo esto con Giesie para salvarla a usted.

- A ella no le diga nada, por favor. - Le pidió entonces con un tono que dejaba claro que eso era verdaderamente importante. - Al contarle a usted esto estoy poniéndome en un peligro muy grande. Otro motivo para ir a por él es que si es inocente los compañeros de Rocarroja no sospecharán que sabíamos lo de ella. Ya me han atacado una vez. Cuando más despistados crean que estamos, mejor.

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21/01/2015, 20:48
Rosalind

Rosalind se quedó sin palabras, absolútamente sorprendida- Veo que se ha tomado su trabajo en serio, Reverendo- suspiró- Y lo que me pide es muy difícil. Yo amo a esa mujer. Y aún no entiendo muy bien qué es lo que puede hacer usted para que su caida no me lleve a mí con ella.  

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21/01/2015, 20:52
Reverendo Adam Strong

El hombre no pudo evitar que un suspiro escapase sus pulmones cuando la cantante le dijo que se había tomado su trabajo en serio. Sí, lo había hecho. Con todo lo que había en juego era necesario. De hecho el verdadero Sheriff era quien tenía que haber hablado con la gente. Pero había tenido que ser él, poniéndose en evidencia con todos.

- Sé que es algo difícil. - Le dijo de manera comprensiva. - Pero no tenemos muchas opciones. Ahora que sabemos que es una asesina, si no lo hacemos así alguien terminará por ir a por ella. Alguien con buenas intenciones, u otro de los asesinos por temor a que ella lo mate. Y entonces sí que no podremos hacer nada por usted.

- La persona que ha... - Comenzó, y se quedó un momento buscando las palabras adecuadas. - Propiciado el encuentro de ambas me lo ha explicado. Cuando usted vea que ella misma pierde la vida detrás de Giesie, cuando vea cómo le ama ella a él, lo que usted siente se disipará y no sentirá la tentación de hacer ninguna locura.

- Sé que son momentos difíciles, pero lo más que puedo hacer mientras tanto es ofrecerme a estar con usted, necesite un confesor o un compañero.

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21/01/2015, 22:38
Francis Prescott

pero Padre... que mas puedo hacer? , me he ccalmado, he  pedido disculpas y y y y no he acusado a nadie a la ligera... me he defendido de la india y NADIE NADIE me a dicho nada a favor y he expuesto en mi ultima intervención todo y nadie señala a la pelo plumas por pasarse conmigo.

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21/01/2015, 22:46
Reverendo Adam Strong

Adam Strong suspiró, y puso una mano en el hombro de Francis como muestra de orgullo.

- Lo estás haciendo bien. - Le dijo. - Pero nadie va a acusarla directamente. Aún así no te preocupes por eso: yo he estado hablando con gente, haciendo algunas averiguaciones y pidiendo favores, y muchos votarán a Giesie. Si quieres salvar el cuello, deberías hacer lo mismo e intentar no ganarte más votos antes del atardecer.

- He tenido que jugármela mucho por ti, muchacho. - Observó el reverendo. - Así que espero que lo tengas en cuenta si en algún momento otra persona necesita algo y te lo pido a ti.

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21/01/2015, 23:00
Francis Prescott

 Padre... no se si Giesie es culpable o no al igual que no se si la india lo es, me resulta curioso el tullido ya que siendo Coronel del Sur le falte tiempo para votar me, eso dice mucho de el, no cree?  Corintios 4:5

Por tanto, no juzguéis antes de tiempo, sino esperad hasta que el Señor venga, el cual sacará a la luz las cosas ocultas en las tinieblas y también pondrá de manifiesto los designios de los corazones; y entonces cada uno recibirá su alabanza de parte de Dios.

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21/01/2015, 23:08
Red Hardigan

- Estaré preparado para ayudarle en lo que pueda, Padre. Hasta entonces, no se me ocurre nada más honesto que intentar no dar pasos en falso. No pienso acusar a nadie porque sí.

- Le contaré una cosa, Padre. - Una pausa en la que pienso si hablar o callar. Finalmente, hablo. - Hace muchos años yo habría estado entre los papeles de la tal Maybelle, pero algo pasó. - En ese momento, mi mirada se turba en un expresión sobrecogedora. - Y me juré no volver a usar un arma contra nadie, que no sea en defensa propia.

- Hace mucho de eso, pero aun me persigue por las noches. No hay nadie sobre la tierra que recuerde lo que hice. Sólo yo.

Dicho esto. Saludé al sheriff en funciones con un toque de sombrero y me alejé de la caseta, de regreso al Saloon.