Partida Rol por web

Pluma observaba la situación. Escuchaba a unos y otros, guardándose sus opiniones, dejando que los demás expresasen la suya, hasta que hizo sonar su voz, pero no para acusar a nadie.

Delos, me inspiras confianza, y no es algo que pueda decir de muchos de los presentes. ¿Dices tener información? ¿Un traidor? Me gustaría compartieses esa información con nosotros. Tal como están las cosas no podemos dejar nada a la mitad, ya que en el momento que afirmas tener información, los traidores te echarán el ojo encima, así que ya que has corrido ese riesgo, dinos que has averiguado, por favor.

El viento susurraba a sus oídos. Era un mensaje cargado de dolor. La madre tierra sufría, los traidores debían ser castigados.

Miro a Delos con una mezcla de admiración y lastima en sus ojos, ¿como podía arriesgarse tanto por gente que ni si quiera conocía?-

-Se que entre nosotros hay gente con mucho poder, gente que posee la capacidad de proteger a Delos, por eso le pido que esta noche lo proteja a él, ya que creo en él y si nos dice la verdad, puede que no ocurra ninguna muerte más- Dijo la pelirroja elfa que hasta ahora, había permanecido callada y aterrorizada.

La temperatura desciende drásticamente cinco o seis grados de golpe. El frío os envuelve y os hace encogeros y abrazaros, incluso pareciese que no os permitiese conjurar vuestros poderes. Tan sólo Arya, Kel-nar y Nuraus parecen no verse afectados por el descenso brusco y la capa de escarcha blanquecina.

Delos miró a la pequeña elfa pelirroja y sonrió viendo su mirada, se alegraba de que no todos le mirasen como a un bicho raro, volvió a calentar sus manos en el fuego y miró directamente hacia la llama como buscando algo en ella.

- Da gusto escuchar que la gente confía en mi, pero Aldinesüe, decir eso en voz alta solo hará que la ira de los traidores se dirija hacia otro lado. De todos modos mis acusaciones no son directas, no poseo el conocimiento de la verdad... yo no soy el importante, solo se lo que me han contado.- Dijo callando de nuevo dejando que el silencioso viento rompiera la quietud de nuevo.

- Como bien dijisteis el viento trae palabras de dolor, me han explicado que esto no es seguro al cien por cien y que de entre los nombres que voy a dar ahora solo uno es un culpable. Neheri, Isar'i y Troolshy... yo ya tenía mis dudas sobre el anciano, sobretodo cuando sus palabras hicieron cambiar mi voto. Aunque ahora que se esto, quizás sea o no uno de los culpables.- Dejó de mirar al fuego inexpresivo y volvió su vista al resto.

- Ahora bien, que los acusados se defiendan quizás con esto saquemos algo en claro.

Como si fuera un presagio, la temperatura descendió de golpe y Delos no pudo hacer más que mantener la calma y tratar de aprovechar todo el calor que pudiera del fuego que  Arya les había brindado.

Aun sobrellevando mejor que la mayoría el cambio de temperatura, Arya se sobresalta con el cambio brusco. Siguió esforzándose para alimentar el fuego con su magia, pero incluso ese esfuerzo empalidecía frente a las condiciones cada vez mas adversas del entorno. Sus runas parecen brillar aún con más fuerza, pero no es suficiente. Incluso sobre su piel se está acumulando cada vez más escarcha.

Entonces duda y mira a Kel-nar, como si tratase de encontrar algo reconocible en él, antes de girarse para responder a las últimas palabras de Delos.

- Si ni siquiera es una visión que hayas tenido tu mismo e difícil saber cuanto confiar en ellas, pero si hemos de darle peso, yo confiaré en Neheri. Sobre los otros dos no sabría que decir.

Observo y escucho las palabras de todos, hasta que Delos, da mi nombre entre los nombres de los acusados

dices que uno de esos 3 es un esbirro del sombritas ( rakedus)

creo.... que mas que decir los 3 nombres, deberías haber esperado a confirmarlo. Decir las cosas de manera apresurada, puede provocar, que la gente, vote a un inocente pensando que es culpable. Pero bueno, a lo hecho pecho, creo que deberías de haber esperado un poco mas. En fin, sobre defenderme a mi de la acusación creo que no es necesario

retrocedo unos pasos alejándome de la multitud. Ya os he contado a todos mi historia y mi decisión durante el juicio, no tengo ningún interés en que haya tanta muerte, de hecho,  solo vine aquí buscando algo de emociones, el termino de poder y todo eso, como que me da un poco igual, lo único que no puedo permitir, es que mueran todos los mundos

mi rostro se torna serio a la vez que triste

hay una persona, que no puedo permitir que muera..... y si todos los mundos desaparecieran, esa persona moriría. Y algunos de los presentes, ya saben a quien me refiero

paso mi mirada por todos los presentes, sin pararme en nadie particular

no seré una hermanita de la caridad, pero tampoco sirvo al sombritas

- ¿Yo, una sierva de Rakedus?...- le dijo ofendida- preferiría morir mil veces antes que servir a ese loco. Si de algo soy culpable es de tratar de buscar la verdad con todas mis fuerzas, siempre he dedicado mi existencia a defender el bien y lo voy a seguir haciendo aunque sea lo último que haga en esta vida. Me temo que si tus poderes consisten en ver el corazón de las personas o has errado, o eres tu mismo servidor de Rakedus... Con respecto a los demás, me parece extraño que Isar´i sea un traidor... con respecto a Trooshy... no se que pensar. En verdad ¿has mirado bien...?

Era gracioso el danzar de palabras de la silenciosa Rienott, siempre tan callada y en cuanto un mal paso descubrió en mi mente su maldad, y mis palabras desvelaron su intención, parecía más habladora que nunca.

Tan solo esgrimí una sonrisa, mientras que a continuación, comenzé a frotar mis brazos, la fría noche del desierto parecía llegar al lugar.

Mientras intentaba entrar en calor, Delos, confesaba el poder de sus sueños, el cuál a diferencia de otros, tras lo servido ante todos, a mi me servía bastante. Pues de ellos tres tan solo uno, había hablado para silenciar las palabras encontra del hijo de Zyba y Rienott, y luego había luchado por cambiar el tema de actuación.

Sería firme en mi decisión, nada podía cambiar ya, aunque quizas las dudas contra cualquier otro fueran más fructiferas no podía dejar de pensar en que solo estaba seguro de una decisión.

De mis labios exhalaba vapores de indecisión, mientras mi mente quería ser firme, aunque aquel frió me hacía dudar... ¿por qué el frio nos inundaba?, ¿acaso la muerte del hada del invierno había roto el orden de las estaciones?.

Mi mirada se perdía en la entrada del panteón, mientras las horas pasaban, sin cambio alguno, tan solo frio a mi alrededor.

Nuraus escuchaba a unos y otros. Las acusaciones iban y venían y eso al modo de ver de Nuraus era bueno. Aunque las acusaciones fuesen ciertas o no. Nuraus estaba contento.

Nuraus dio un paso al frente y habló. Al igual que hizo el día anterior dio su nombre en el día de hoy:

-Nuraus tiene dudas hoy, pero hoy Nuraus tiene que dar un nombre. Nuraus dará el nombre de Kel-nar. No gustar a Nuraus comportamiento de Kel-nar. Kel-nar calla mucho y sólo dice para demostrar nada. No tener nada objetivo contra Kel nar, pero Nuraus tener que dar un nombre hoy. Nuraus acepta las reglas de la Amalgama.

Se giró hacia Delos y preguntó:

-¿Y cuál de los tres caídos te reveló sus sueños? Nuraus quiere saber.

Ya se habían exculpado dos, Isar'i parecía incluso indignado de sobremanera, resultaba una actitud más que curiosa. Mientras que Neheri despotricaba contra Rakedus prefiriendo morir mil veces antes que servirlo. Solo quedaba el anciano por exculparse, al parecer quería esperar hasta el último momento, la pregunta de Nuraus había sido bastante sagaz, al parecer era bastante más listo que los que otros pensaban, Delos sonrió mientras se abrazaba a si mismo con sus brazos y alas.

- Nuraus, seré un descuidado en muchas cosas como dicen muchos aquí.- Dijo el ser alado mientras miraba a Lianne por los comentarios que Neheri hiciera sobre él antes.- Pero no voy a vender a nadie. Bastante es que me exponga yo, como para que si resucitara alguien, la ira de los lobos recaiga sobre él. Sin embargo no soy el único que guarda secretos de otros... ¿verdad Pharao? Parece que estás pensando en algo... ¿Porque no lo compartes con todos?

Esto cada vez se pone mas tenso...Delos no puedo demostrar que tu información sea falsa pero...al igual que creo que It'bure es un mentiroso tu también creo que lo seas. Creo en la inocencia de Lianne pero tu Delos ocultas algo que descubriré  a ciencia cierta lo que es aunque tu maniobra de distracción es realmente buena, te inventas un Don para distraer la atención de la culpabilidad o inocencia de la única acusación directa que hay, Lianne yo te creo y It´bure quien traiciona a la familia es la mayor traición posible así que estoy convencido que venderías a tu padre por salvar tu cuello....ups perdona, lo he dicho sin querer.

Saco mis catas y reparto el As de diamantes a It'bure, el As de tréboles a Shadow, Rey de corazones a Nuraus, Rey de picas Pharao, Rey de tréboles Kel-mar, Reina de corazones Neheri, Reina de picas Mei y el otro comodín de Joker a Isarí. Espero que no os toméis a mal el pequeño obsequio que os doy algunos de vosotros y que lo hago con buena intención.

Mire la carta que Sheph me habia dado.

Una chica reflejada por la cintura, mitad negra mitad blanca. Estaba observando la palma de su mano y parecía sorprendida, atónita. Como si se acabase de dar cuenta de algo que nunca habia apreciado. Era un dibujo bonito sin duda. Pero sería más útil si jugásemos al Poker con ellas en vez de repartirlas. ¿Tendría algún significado para Sheph? ¿Querría decir algo con ello?....Quien sabe.

-Gracias. Dije en un tono serio y guarde la carta en mi bolsillo.

Levante las manos y las acerque más al fuego de Arya, quien parecía tener cada vez más dificultades para mantenerlo vivo.

-Tener cuidado cuando habláis de lo que sabéis. Esa información es muy útil, pero tambien os convertiréis en un blanco de todas las miradas, y por desgracia aquí algunas sí que matan. Dije sin apartar la vista del fuego. –Yo ya sé a quién votare hoy, hay gente aquí cuyo comportamiento desentona demasiado. No parecen tener un fin lógico entre nosotros. Pero no diré mi voto, no es sensato pues podría cambiar el parecer de alguien para que tambien votase a esa persona, y eso no sería justo para él.

Dibuje una sonrisa y me quede mirando al cielo mientras pensaba en la carta.

-Aun que demasiada justicia no hay en todo esto, al menos una pizca sí que merecen.

La carta de Septh llegó hacia Neheri volando con suavidad, cuando llegó a ella quedó suspendida en el aire. Neheri extendió la mano y la examinó con curiosidad. Sonrió y la guardó sin hacer ningún comentario.

Tomé la carta que me entregaba Sheph sin molestarme en mirarla, y la guarde.

- Por eso Delos no me gusta hablar demasiado, porque juzgáis por lo que escucháis, y nunca oís el silencio.

El súbito cambio de temperatura hasta me resulta agradable.

Quizás el frío logre calmar los ánimos...

- Me parece justo Nuraus, tu voto quizás sea el mas justo de todos.

Al sentir la mirada de Arya sobre mi, no puedo evitar sentir cierta curiosidad por ella

Esta es la carta que mencionaste, Shep? Curioso..... algún motivo concreto para darme a mi esta?

Pregunto con curiosidad

- Soy un mentiroso...- Delos volvió su rostro hacia Sheph y sonrió tranquilo.- No he dicho ninguna mentira, asi que estoy bien tranquilo, aunque caiga me voy con el alma tranquila que es más de lo que algunos pueden asegurar. Por otra parte, Demónidus...- dijo mirando a Sheph.- si tienes algo de lo que acusarme dilo.

Los ojos del ser alado mantuvieron la mirada hacia la capucha de Sheph, sin inmutarse, seguro de si mismo y pese al frío sus alas cubrían su cuerpo, abrigándolo de la bajada de temperatura. Se quedó así quieto esperando a que el encapuchado reaccionara.

- El rey de tréboles... que irónico - se dio cuenta de que lo había estado mirando y eso no le había pasado desapercibido a él. Aparta la vista hacia el fuego con evidente verguenza y aprieta los labios. - No debería hacer esto... malditos sueños, maldita indecisión.

Arya traga saliva antes de hablar, con la mandíbula tensa, mientras se esforzaba por mantener vivo el fuego - Kel-Nar, perdona que te pregunte algo. ¿fuiste tú quien prometió a una criatura de fuego enseñarle a nadar? Me basta con un sí o un no. - Mantiene la mirada fija en las llamas, tensa como una cuerda de piano mientras en silencio se odiaba a sí misma por aquella curiosidad.- No tiene que ver con la batalla. En realidad no es nada... nada importante. Es una tontería.- Su voz ha ido bajando hasta perderse en un susurro

Tonta, tonta... eres tonta, Arya. Ni siquiera son tus sueños, no tiene que ver con lo que está pasando. Aquella criatura murió y no deberías recordarlo. - Frunce el ceño y niega - Olvídalo... no tiene importancia... Solo es una historia que escuché, no se muy bien donde. Olvídalo.

Nuraus mira extrañado la carta que Seph le tiende. La mira y confundido vuelve a mirar a Seph:

-Nuraus no sabe que significa esto. ¿Seph puede explicar a Nuraus? Nuraus quiere saber por qué Seph le da una carta a Nuraus y la carta es el rey de corazones. No tiene sentido para Nuraus.

El enorme hombretón observa de nuevo su carta. No sabe que hacer con ella y espera la respuesta de Seph para terminar de decidir que hacer.

Guardo la carta en mis ropajes, y miro a Sheph. Gracias, aunque espero no arrepentirme de tal obsequio.

Luego miro a Delos y digo con rotundidad y firmeza: Espero poder hablar tras el atardecer... Y justificar mis palabras con el don de otros a la vez. Pero antes, no movere mis labios, ni siquiera para adormecer las llanuras al atardecer.

El anciano no se sorprendió al ser acusado por Delos, desde que comenzó del día lo miraba de mala manera. Solo tiritaba por culpa del tiempo, hacia mucho frio incluso para él, quien pasaba los inviernos en el bosque.
-Bueno que puedo decir, veo que me acusáis primero de cambiaros vuestro voto, cosa que no es cierto. Después de manera circunstancial el reguero de sangre llega a mis pies, y pensáis que soy un asesino, cosa que no es cierta. Mas mis palabras valen lo mismo que las tuyas. Os diré que siempre e estado al lado de mi mentor, el viejo Cell, mas seguro que no queréis creerme, y a estas alturas... algo me dice que tu voto ya esta dado al igual que muchos aquí.-Asintió con la cabeza.-Esta bien, para eso hemos venido, solo espero que no te equivoques aposta y realmente estés confundido.-Sonrió ligeramente mostrando su dentadura imperfecta.

Después se acerco hasta la mujer de cabello de fuego y poso su mano en su muslo para llamar la atención, después un gesto con el dedo, esperando que se agachara.
-Me temo señorita, que lo que pedís, según que salga, no sera posible.-Y se golpeo dos veces la nariz, sonriente.