Partida Rol por web

[HLdCn] Asesinato en el Orient Express

Compartimento 10

Cargando editor
26/10/2014, 22:52
Director

La noche transcurre con calma y puedes dormir plácidamente. Antes de dormir, oyes algunos pasajeros que hacen algún paseo hacia el aseo, pero luego coges el sueño con facilidad.

Aun así, un ruido te desvela de madrugada. Oyes claramente como uno de los pasajeros del compartimento 11 abandona éste a esas horas intempestivas. Asumes que no debe ser más que una visita nocturna al excusado y vuelves a dormir.

Cargando editor
27/10/2014, 17:43
Phineas Poirot Lansbury

La noche había caído, fría. El cansancio y el castigo que ejercía su propio mal trato, sobre el cuerpo, deberían haber sido suficientes para tenerlo rendido y se durmiera con facilidad. No así, Phineas estaba desvelado, mil pensamientos oscuros azotaban sus ideas y sin saber porqué no conseguía apartar los ojos de la ventana.

-Sí, sí.- Respondió a la advertencia de su esposa agitando la mano como quién asusta y aleja las moscas para que no le estorben. -Buenas noches.

No obstante, copo a copo, la nieve surgió un efecto hipnotizador y somnoliento sobre él, y sus ojos se cerraron con una última incertidumbre, ¿le había puesto a la bebida pastillas para dormir Abbey? No sería la primera vez que, cansada de sus vicios o de sus actos imprevisibles de media noche, había conseguido de tomado sus medidas, incluso, con el tiempo, esta habría aprendido a hacerlo sin que, él, experto y avizor como era, lo detectara.

Fuera como fuese, finalmente, se durmió y tan solo por la mañana, le despertó: un buen grito.

Cargando editor
28/10/2014, 10:13
Phineas Poirot Lansbury

Notas de juego

Estoy en el trabajo y no puedo proponerlo on-rol. A la tarde postearé, aun así Phineas está demasiado ocupado con el cadáver y la escena y la gente. Por otro lado Abbey, tu estás más próxima a la señorita Ada.

Así que creo acertado y oportuno que le propongas si quiere trasladarse a nuestro compartimento, yo mismo dormiré al sofá. ^^

Lo he consultado con el máster, y si ella acepta no hay ningún problema dado que las bases del juego contemplan un solo cambio en la partida.

Pregunta que hice:

Literariamente, queda raro que dejen a la cría dormir las próximas noches donde ha habido un asesinato.

Pensando en ello, si esto fuese un libro (que no lo es, sé que es un juego y lógicamente con sus normas) Abbey, por ejemplo podría invitarla a dormir en nuestro compartimento en una cama, mientras uno de los dos duerme en un sofá. (Dado que nosotros, como pasajeros de segunda, no podemos ir a primera, y tampoco deberíamos por ser escena de un crimen, al menos por ahora. que es el primero :P).

Igual esto no es posible, entendería por normas, pero dejo la pregunta ahí. ¿Podemos invitarla en caso de que Abbey quisiera?

Respuesta obtenida:

Lo de cambiar a Ada de compartimento: en las reglas está recogida la posibilidad de un cambio de compartimento por partida. Si lo habláis con Ada y ella así lo acepta, preguntadle al revisor en la escena pública y lo gestionará. Dicho de otra manera, tendréis que rolearlo, pero no niego la posibilidad de entrada. Es más, lo veo lógico y apropiado.

Cargando editor
28/10/2014, 15:43
Abbey Lansbury de Kent

Notas de juego

Oh, perfectito :)

Pues, ya me encargo de ponerlo on-rol para que quede bien y demás ^^

Cargando editor
28/10/2014, 16:24
Phineas Poirot Lansbury

Notas de juego

Ya lo veo. Ha quedado genial ^_______^

Cargando editor
28/10/2014, 16:25
Abbey Lansbury de Kent

Notas de juego

¡Bieeeen! :D

Cargando editor
30/10/2014, 00:51
Director

Notas de juego

Ya está habilitado el acceso de Ada a este compartimento.

Cualquier cosa que escribáis aquí lo podréis leer los tres.

Cargando editor
30/10/2014, 08:50
Phineas Poirot Lansbury

Era negra noche, y un humor, y ánimo negro, cubrían como un velo al detective mientras emprendían el camino, cabizbajos y pensativos, hacia sus estancias.

-Un segundo.- Entró Phineas antes que las dos mujeres, y dio un repaso rápido en el compartimento para comprobar que todo estaba en orden. -Pasad. Todo bien.- Afirmó cuando hubo completado su labor. Nunca estaba de más ser precavido.

Había pasado el dia en bata pero no parecía ni percibirlo, ni darle importancia al detalle. Acompañó a su esposa y a su protegida a la habitación interior. -Podéis dormir en la litera que os apetezca, señorita Birdwhistle. Yo dormiré en el sofá, justo aquí adelante, aguardando la puerta. Podéis estar seguras, mientras esté aquí no os va a ocurrir nada.- Se palpó el bolsillo con un par de suaves golpecitos de su palma donde guardaba el arma y dedicando una mirada de complicidad a su esposa. -Haré cuanto esté en mi mano para que esos asesinos paguen por su crimen.- Proclamó muy serio y concentrando. Hizo una pausa en qué su atención se perdió en la pared, y prosiguió con una sonrisa. -Id a guardar vuestras cosas.- Invitó a la pequeña queriéndole decir una cosa a Abbey, pero sin asustar innecesariamente a la jovencísima Ada.

Como decía, no tengo solo la pistola para protegernos. -Y no dudaré a emplear, si hace falta, mis propias manos.- Confesó. -Si creo que van a escaparse de la justicia o a comenter más asesinatos o haceros daño alguno... En cuanto sepa que alguien es culpable, no esperaré a que los votos sean únianimes para sentenciarlo.

Notas de juego

Perfecto. Bienvenida, Ada. ^^

 

Por si no queda claro, soy Justiciero además de Poirot.

Pongo el mensaje para que lo lean las dos, aunque hable para Abbey, ambas jugadoras tienen derecho a leerlo, y qué sé yo si la pequeña no escucha conversaciones de adultos. Los pequeños no siempre obedecen a los mayores :P

XDDDDDDDD

Cargando editor
30/10/2014, 10:46
Ada Birdwhistle

En cuanto entró en su nuevo compartimento los ojos de Ada se dirigieron a la litera de arriba, con la que Abbey había estado tentándola por la mañana. Asintió a las palabras del detective y empezó a colocar su ropa en un rincón del armario, intentando no molestar ni ocupar el sitio que ya estaba siendo usado. 

Las paredes que separaban las dos partes del compartimento eran verdaderamente finas y no pudo evitar escuchar al hombre hablando con su esposa. Asomó la cabeza por la rendija de la puerta y miró a Phineas con agradecimiento en los ojos. - Mi padre tenía razón. - Dijo con voz dulce, sin darse cuenta de que estaba interrumpiendo una conversación de adultos. - Es usted un hombre extraordinario. - Aseguró, asintiendo con la cabeza. Salió entonces y miró a su alrededor, comparando sin querer ese compartimento con los de primera como el suyo y decidiendo que el de segunda le agradaba más. Tenía literas. - Muchas gracias por dejar que me quede con ustedes. No quería dormir sola. Tengo miedo de que esas sombras vuelvan, o los asesinos, o algo venga a por mí.

Miró entonces a Abbey y le dedico una sonrisa, un poco apagada por la tristeza y el temor del día que había pasado. - Usted es buena, yo lo sé, la vi anoche cuando fui al excusado, pero no he querido decirlo ahí fuera. Tiene un maletín de médico y podría curarnos con él si nos hacen daño, ¿verdad? - En realidad la pregunta debía ser retórica, pues Ada no esperó ninguna respuesta antes de seguir hablando. - Mi padre siempre decía que yo soy muy observadora y sé conocer a la gente si me fijo muy bien en ellos. Decía que de mayor podría ser una detective famosa como su marido. 

Se quedó pensativa un segundo y habló de nuevo. - También sé que el señor Lancaster es bueno, aunque no me he fijado aún en él. Él y usted -miró a Phineas-, los dos eran amigos de mi padre y sé que los dos son buenos. Y Abbey también. - Hizo una pausa y sus labios dibujaron una mueca de disgusto. - Pero no me fío de ese hombre que quería llevarme con él. ¿Por qué con él y su compañero sí podía dormir y con ustedes no? Creo que quería hacerme daño. - Dijo, frunciendo el ceño. - Y tampoco me fío del que salió corriendo a apoyar a la monja para que me mataran. ¿Por qué quieren matarme? Yo no he hecho nada malo. ¿Cómo iba yo a querer que matasen a Fraulein Rottenmeier? Ella me cuida desde siempre. Creo que me fijaré en uno de ellos dos, seguro que son malos.

 

Notas de juego

Supongo que queda todo claro en el roleo, si no es así, avisadme y me explico mejor ^^.

Cargando editor
30/10/2014, 11:31
Abbey Lansbury de Kent

Tendí la mano a Ada para que la estrechara mientras caminábamos hacia el compartimento. Contemplaba la espalda de Phineas mientras andábamos por el estrecho pasillo, y sonreí para mis adentros.

Oh, sí, había ocurrido una tragedia. Y, probablemente, podrían llegar a ocurrir más. Pero, sabía que Phineas lo estaba disfrutando al máximo, que su particular entretenimiento acababa de empezar, y que llevaba mucho tiempo esperando algo así. Lo comprendía. Podía entender su sopor y aburrimiento de los días pasados, su letargo de su cerebro cuando no pasaba nada. Y entendía que necesitara algo de este calibre para volver a sentirse vivo. Lo único que lamentaba era que la pequeña Ada estuviera en mitad de todo aquello.

Sonreí a Phineas cuando comprobó que el lugar era seguro, y le di un beso en la mejilla cuando pasé por su lado.

Ada, elige la que quieras— dije, mirándola, sonriente—. Puedes dormir donde te plazca— y con el mentón señalé la litera de arriba, ensanchando la sonrisa.

Escuché a Phineas, sus planes para la noche, y asentí con gravedad. Realmente, la situación era peliaguda. Pero, sobre todo, después de ver lo que eran capaces algunas personas del tren, mi inquietud se incrementó. Phineas estaba expuesto a la ira de los criminales, y aquel sitio estaba cerrado. Temía que pudieran ir a por él, vengarse porque podía atraparlos, y los asesinos tratarían de ir más rápido, cortando la fuente de información. Matando a aquel que podía detenerlos.

Abrí la boca para expresarle mis temores, cuando escuché la tierna y dulce voz de Ada. Pestañeé varias veces, sonriendo, al ver que nos estaba escuchando. Y atendí a sus palabras, a sus sabias palabras.

Miré a Phineas de soslayo porque era de ese maletín que narraba Ada de donde sacaba mi querido esposo algunas de las drogas para evadirse del mundo real, y asentí ante el pequeño descubrimiento de Ada.

Cuando mis hermanas perdían el tiempo probándose lazos y vestidos, yo me dedicaba a mirar unos manuales que tenía mi padre sobre Medicina. Aprendí lo básico. Y durante la Gran Guerra me presenté unos meses de voluntaria como Enfermera— narré, recordando las heridas, los gritos y las miradas perdidas. Sobre todo las miradas—. Desde entonces, viajo con lo necesario para atender a quien lo necesite.

Sonreí a Phineas, y apreté su brazo con dulzura.

—Yo también trataré de protegeros— dije, sonriente.

Tras aquello, me llevé una mano al mentón, pensando y analizando las palabras que Ada dijo a continuación. A mí también me escamó el hecho de que aquel hombre quisiera llevarse a la niña a su compartimento.

¿Por qué?— pregunté, encogiéndome de hombros, como si se me escapara algo—. No entiendo. A lo mejor quería dar a entender que era buena persona. O que podía protegerte mejor que nosotros— aventuré, algo dubitativa.

Examiné lo que sabíamos, y negaba con la cabeza, sin llegar a ninguna conclusión posible.

No sé— me rendí, suspirando—. Pero, si alguien es malo, muy malo— miré a Ada—, también puedo hacer algo al respecto. El veneno de serpiente cura, pero también hace daño— añadí, llevándome un dedo a la nariz, como si acabara de revelar un secreto. 

Notas de juego

Clarísimo queda :)

Este el post que dejo antes de marcharme :) Ya no podré postear hasta mañana ^^

Cargando editor
30/10/2014, 19:04
Phineas Poirot Lansbury

Acababa de hacer una importante revelación que no debería ser tal, porque su esposa le conocía en todas sus facetas. Habían muchos casos que terminaban resolviéndose mediante una necesaria intervención de "asalto". Pero, si bien, una vez confió a la jovencita a guardar sus cosas y no había emprendido medidas de discreción con mucho esmero, no había esperado que ella oyese la conversación y, menos, que fuera a decir aquellas palabras, asombrosas e impropias para su edad.

Phineas se dejó caer al sofá, más divertido que abatido, y escuchó, apoyando su cabeza al puño, con placentero asombro.

-Veo que James*, vuestro padre, os habló de mí. Pero temo que enarboló quizás demasiado mis... virtudes.- Se levantó y acortó la distancia hasta situarse delante de ella aunque habló con su mujer. -Bey, no reconocí a ésta joven hasta oír su apellido, pero, es sin duda es la viva imagen de su padre.- Se giró y le habló. -Eráis muy pequeña cuando os vi por primera y última vez. Poco menos de un año teníais, si no recuerdo mal. Un infante, pero el orgullo se leía con letras muy claras en la mirada de vuestro padre. Siento muchísimo no haber podido asistir a su ceremonia. Quería despedirle y lo habría hecho de serme posible. Lamento mucho vuestra pérdida, sé...- Rectificó para incluir a su cónyuge. -Sabemos. Cuanto habéis sufrido. Vuestra madre, vuestro padre y ahora vuestra institutriz. Pero, no temáis, os prometo por lo más sagrado que hay en este mundo, que por poco que pueda, impediré que os ocurra nada más. Bey y yo cuidaremos de vos a partir de este momento. Consideradnos, de ahora en adelante, si así lo aceptáis: vuestros padrinos. Y no tengáis reparo en pedirnos cualquier cosa, sea hoy, o en un futuro cuando salgamos triunfantes de este tren.

Cuando reveló lo del maletín de Abbey, él se rió a buena gana. -¡Te atrapó!- Recibió la mirada de soslayo de su esposa, la explicación que venía a continuación, la cual él conocía. Eran aquellos detalles que a sus ojos la hacían una mujer única. Recogió la barbilla a aquella niña y le dedicó una sonrisa que si bien no era su rasgo más natural, era completamente sincera. -Vuestro padre estaría orgulloso y gozoso de veros. Sois realmente es una dama muy observadora, seréis, si así lo deseáis una detective incluso mejor de lo que pueda aspirar ser yo.- Eso viniendo de él, lo pensara realmente o no, era mucho cumplido. En cuanto a que Abbey estaba dispuesta a cualquier cosa, no le sorprendió, eran almas gemelas y afines y ambos comprendían que para aliviar un mal mayor a veces debían de ensuciarse las manos.

Volvió a su esposa. -Como dice nuestra pequeña invitada, su padre entabló amistad con la familía Lancaster, a quién a su vez reconocí ayer cuando nos hizo su pequeño asalto e invitación. Le recuerdo como un joven adolescente muy prometedor, que también apuntaba a ser un buen detective con el paso de los años. Me divertí un rato con él ayer, dado que no atisbó a recordarme, pero parece ser, que al oír mi reputación, me ha reconocido al fin.- Hizo un esfuerzo para no reírse. -Hemos concertado una vista para vernos, los tres.- Indicó a la joven Birdwhistle como la tercera. -Tu, será mejor que esperes aquí, para no despertar suspicacias erróneas en ese joven. Al menos ésta noche. Saldremos a medianoche. Hasta entonces dormid, descansad lo que os sea posible, que yo estaré con ojo avizor para que no nos sorprenda nadie. Luego, llegada la hora os despertaré y tendremos de escurrirnos a hurtadillas, y veremos que tiene para contarnos. Sé que es arriesgado, una vez salgamos quiero que cierres o bloquees, con lo que puedas encontrar, la puerta entre las dos partes de este compartimento hasta nuestra llegada. Al volver, te pasaré una nota escrita por debajo la puerta para que sepas que somos nosotros cuando estemos de vuelta. Espero que si se repiten esas reuniones nocturnas, en próximas ocasiones sean en este compartimento. Una persona entrando, es menos llamativa que dos o tres saliendo.

-En cuanto a esos dos hombres.- Volvió sobre los sospechosos de Ada. -Son los mismos que yo me fijé, Bey. Hablaremos esta noche de ello en la reunión, pero nos iría muy bien una opinión tuya de antemano. No es que desconfíe tanto de las intenciones dudosas de invitar, o mejor dicho, apartar a la señorita Birdwhistle de nuestro lado, como del hecho de que se prestase tan deprisa a buscar una excusa y culpar a su compañero lo que me impulsa a sospechar del sr. Heath. Aun así mis desconfianzas para el departamento de aquí al lado están en proporciones similares.- Dicho esto calló de golpe y probó de acercar su oído al lado. Un buen rato. no obstante si oyó algo de momento no lo dijo.

Notas de juego

*Licencia que cambiaré encantado si me ofreces otro nombre. ^^

Sonreí a Phineas cuando comprobó que el lugar era seguro, y le di un beso en la mejilla cuando pasé por su lado.

Aunque no lo comente retroactivamente... ese detalle me gustó mucho XDDDDD

Cargando editor
31/10/2014, 11:41
Ada Birdwhistle

Los ojos de Ada reflejaron asombro con la última revelación de Abbey. Por un lado saber que las dos personas que la habían acogido estaban dispuestas a acabar con la vida de otras personas le provocaba un leve temor. Pero por otro, estaba segura de que si lo hacían sería para librarles de los que ella había empezado a denominar en su mente "los malos". Y ciertamente, con esa capacidad de los niños para adaptarse a cualquier circunstancia y asumir como normales situaciones que a los adultos les resultan impensables, Ada prefería que se muriesen los asesinos a morirse ella o alguno de los buenos. 

El asombro se volvió agradecimiento con las siguientes palabras de Phineas. Al principio le había parecido un hombre raro y le había provocado cierto respeto. Pero en la intimidad y con la adrenalina del caso corriéndole por las venas, le resultaba un hombre amable y agradable, incluso cariñoso.

- Gracias por todo. - Respondió, incluyendo a los dos en sus palabras. - Sé que no tienen por qué hacer nada por mí -se encogió levemente de hombros-, pero lo hacen. 

Y cuando el hombre rió, señalando a su esposa que había sido descubierta, la niña no pudo evitar soltar también una risita, cada vez más cómoda en su nuevo compartimento. Después escuchó sus planes con atención, intentando no perderse nada, sobre todo de la parte que la incluía a ella. Y finalmente asintió.

- Creo que voy a espiar al señor Heath. Así sabremos si es él quien salió del compartimento 11, o si fue su compañero.

Notas de juego

James está perfecto ^^.

Cargando editor
31/10/2014, 14:50
Abbey Lansbury de Kent

Asentí con la cabeza y mi boca formó una “o” grande cuando recordé a quién se refería Phineas. James. Con una niña preciosa, pequeña entre tanto tul blanco, con su pequeño gorro de encaje.

—Realmente, sigues siendo bonita— dije sin pensar, mirando a Ada, recordando su pequeño rostro de la primera vez que la vi.

Sonreí mientras Phineas hablaba y asentía donde tocaba, y ensanchaba la sonrisa cuando debía hacerlo. Quería tranquilizar a la pequeña, quería que se sintiera a gusto entre aquellas cuatro paredes que formaban la diminuta estancia. El viaje iba a ser largo, y lo peor que se podía hacer era tenerla en un estado de estrés y nervios constantes. Podía ser perjudicial para su estómago y su salud en general.

Al igual que la pequeña Ada, escuché con atención las palabras de Phineas. Asentía para quedarme con todos los datos y que no se me escapara nada, pero mi mente no funcionaba a tanta rapidez como la de él. Fruncí el ceño al ver que Ada y él se ausentarían durante la noche.

—De acuerdo— dije, tratando de que el temblor no apareciera en mi voz. No quería asustar a Ada—. Os esperaré. Pero, no tardéis mucho, ¿vale?— supliqué, algo apurada—. No quiero estar más del estricto tiempo necesario sola en esta lata pequeña y claustrofóbica— traté de reír, pero me salió una siniestra risa amarga.

Los miré a los dos, divertida, y los señalé.

—Vosotros, tenéis muchos secretos que luego tendréis que contarme— murmuré, sonriente con los ojos brillantes—. No es justo que sepáis tantos chismorreos y yo me quede aquí sin enterarme de nada— susurré, mirándolos—. Después me contáis. Tened cuidado— advertí, algo temerosa—. Sobre todo con aquel al que espiarás, Ada— dije, dirigiéndome a ella, mirándola—. No sabemos por qué dijo todo aquello horas antes. Da escalofríos.

Los miré, pestañeando con algo de nerviosismo. Suspiré, finalmente, y me llevé una mano al mentón.

Me pregunto si podremos reclamar a la compañía una indemnización por daños y perjuicios por todo lo que está pasando— torcí la boca, pensativa, algo divertida. 

Notas de juego

Aunque no lo comente retroactivamente... ese detalle me gustó mucho XDDDDD

Me alegro que te gustara :)

James está perfecto ^^.

Tendríamos que haber dicho que se llamaba Godofredo... ¬_¬

XDXDXDXDXX

Cargando editor
31/10/2014, 17:59
Phineas Poirot Lansbury

Notas de juego

Tendríamos que haber dicho que se llamaba Godofredo... ¬_¬

x__________DDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD

Os roleo mañana o hoy, desde el móbil ya. Me duelen cervicales y cabeza. U___u' Malditos criajos... Ains... no no va por ti Ada. XD

Cargando editor
31/10/2014, 19:29
Ada Birdwhistle

Notas de juego

Tendríamos que haber dicho que se llamaba Godofredo... ¬_¬

Eso habría sido genial XDDDDDDDD. ¡Godofredo el Audaz!

¿Os parece bien si hacemos un saltito temporal hasta que volvamos de lo otro?

Cargando editor
01/11/2014, 19:41
Abbey Lansbury de Kent

Notas de juego

¿Os parece bien si hacemos un saltito temporal hasta que volvamos de lo otro?

Por mí, vale :)

Cargando editor
01/11/2014, 19:44
Phineas Poirot Lansbury

Notas de juego

Por mí también. Cuando postée lo haré cerrando por mi parte el presente y sigiuendo la otra parte. Así que no problem. ^^

Cargando editor
01/11/2014, 22:17
Phineas Poirot Lansbury

Ante aquél sincero agradecimiento, Phineas agitó la palma como si pudiese apartarlo igual que quién espanta moscas. Las gracias eran innecesarias. Seguramente, Abbey y él, habrían hecho lo mismo por cualquier niño desvalido, pero obviamente harían eso y más por la hija de James, y personalmente, el detective iría más allá de la obligación solo por satisfacer la curiosidad de ver en que se convertía una cría tan prometedora. 

-Pues bien.- Secundó. -Al señor Heath tocará observar. A ver hasta donde llegan las dotes deductivas de esta joven que posiblemente sea mi digna sucesora.- Replicó divertido pero no falto de orgullo.

Por lo demás, el plan estaba trazado y todos conocían su parte, así que nada agregó y, simplemente, asintió con la cabeza a las palabras de su esposa. -No tardaremos mucho. Aun así, guarda el revólver cerca de ti, no des tiempo a actuar, si alguien entra y no desliza una nota por debajo la puerta... no pierdas el tiempo. Ni una sola pregunta, tu dispara. Actúa sin pensarlo pues ellos es lo que harán.

-No tantos secretos.- Le devolvió aquél murmuro divertido. -Y a la vuelta te contaremos cualquier cosa que se haya debatido. Seguramente no sea más que ponernos al día cuanto sabemos y ultimar encontrarnos aquí para la próxima reunión.

Tuvo que reprimir una carcajada ante el hecho de imaginar a Abbey denunciando la compañía del Orient Express. La creía bien capaz. Simuló bostezar desperezando cualquier rastro de cansancio que pudiese sentir. -Y ahora, creo que es tiempo de que intentéis dormir. A media noche os despierto.- Anunció sentándose ya en el sitio donde pretendía hacer guardia.

Cargando editor
01/11/2014, 22:50
Director
Sólo para el director
- Tiradas (4)

Motivo: ¿Oye algo Abbey?

Tirada: 1d100

Dificultad: 75-

Resultado: 23 (Exito)

Motivo: ¿Toma conciencia Abbey?

Tirada: 1d100

Dificultad: 40-

Resultado: 63 (Fracaso)

Motivo: ¿Oye algo Ada?

Tirada: 1d100

Dificultad: 75-

Resultado: 15 (Exito)

Motivo: ¿Toma conciencia Ada?

Tirada: 1d100

Dificultad: 40-

Resultado: 69 (Fracaso)

Notas de juego

 

 

Voy a ver si oyen algo de lo que sucede en el compartimento 9. Que es un jaleo importante. Tiro sólo por Abbey y Ada, que Phineas estará en otra parte, debatiéndose entre la vida y la muerte.

Tanto Abbey como Ada duermen profundamente mientras en el compartimento de al lado se están dando castañas como panes. El ruido llega claramente, pero la profundidad de sus sueños es tal que no llegan a despertar. Supongo que estaban muy cansadas de lo mucho que han estado en vela esta noche.

Cargando editor
01/11/2014, 22:55
Director
Sólo para el director
- Tiradas (2)

Motivo: ¿Oye algo Abbey?

Tirada: 1d100

Dificultad: 30-

Resultado: 92 (Fracaso)

Motivo: ¿Oye algo Ada?

Tirada: 1d100

Dificultad: 30-

Resultado: 92 (Fracaso)

Notas de juego

En otro momento temporal, el vecino de la 11 que ha ido a dar una vuelta, puede haber hecho suficiente ruido como para desvelar a alguien. Así que también tiro por Abbey y por Ada.

Tampoco oyen nada. Idem de antes.