Partida Rol por web

Notas como la pequeña serpiente que Hellen tenía enrollada en su mano la muerde y luego empieza a reptar hacia el demonio, mientras los ojos de Hellen se quedan en blanco.

¿Qué había sido eso? ¿Un pinchazo? ¿Con qué me había pinchado?

La pregunta me hizo mirar en derredor y notar como la terrorífica visión, así como el dolor de mi pecho titubeaban, hasta que de repente Salazar decidió hacer acto de presencia.

- ¡Ni se te ocurra, seguro que están esperando que aparezcas!

Le protesto al mago pensando más en su seguridad que en la mía o la de mis compañeros, porque podía ser un mero recuerdo, pero era su último vestigio.

  Tras ver que el ataque de Kat no ha sido efectivo y que Hellen y Freddy parecen haber sido afectados por la criatura Dominique decide respirar hondo y vencer sus propios miedos, entendiendo que es su responsabilidad enfrentar al demonio invocando el mismo conjuro que parece haberle afectado al ente un momento antes, de manera que después de concentrarse dice mientras que apunta con la vara mágica 

        - Fliipeendoo!!!.  

Logras percatarte de una pequeña víbora que se arrastra por el suelo hasta el demonio.

Mientras el demonio reía, Dominique lo golpeó con un certero hechizo el cual lo hizo ponerse totalmente serio.

Mocosa insolente. ¡Ahora veras! - rugió el demonio mientras extendía su mano hacia la niña francesa disparando dos proyectiles de energía, los cuales erraron su blanco por muy poco,causando estragos en una pared cercana. 

Al parecer el tiempo de juegos se había terminado,aquél oscuro ser iba a por todo.

Mientras estoy hablando con Janelle se abre un nuevo portal por que aparecen Allison con Alexander y un cansado Artemis. Dejo la conversación para ir corriendo a ver a mi mejor amiga.

- ¡Allison! - le digo mientras me lanzo a abrazarla - ¿Cómo estás? ¿Qué os ha ocurrido? - me separo del abrazo para mirar a Artemis - ¿Te encuentras bien? ¿Necesitas ayuda?

Katherin al escuchar la afrenta del demonio apretó los dientes molesta, no esperaba que su ataque fuera mas patético de lo que era realmente. En medio de sus palabras venenosas pudo notar que una serpiente ponzoñosa estaba en el antebrazo de Hellen con intenciones de morderla a lo que Kat reaccionó como bala disparando un:

-Expelliarmus.

Este golpeó con rapidez a la víbora haciendo que esta fuera disparada hacia la parte opuesta de la habitación.

Hecho esto de repente sintió un calosfrio que recorría todo su cuerpo, todo de repente se oscureció y Kat se encontraba en otro sitio: se encontraba sola y en paños menores de color blanco enfrente de todos sus amigos y conocidos, Jane, Artemis, Hellen, Freddy, Alison, Mérida y su hermano Fred; todos mostrando caras perversas y en sus manos tomates y verdura podrida a la que con saña maliciosa arrojaron hacia la niña. Kat al principio quería ponerse a llorar por esta cruel agresión pero entonces recordó un cálido sentimiento de su interior, como una llama que ardía en el fondo de su corazón, esta se toco el pecho con su mano y mientras sonreía tiernamente le dijo a la multitud:

-Se ve que tu no lo entiendes, tu no puedes asustarme, no mientras tenga a mis amigos y a mi familia no estaré sola. Yo creo en mis amigos y ellos creen en mi, así que tu pesadilla no me hará daño.

Dicho esto de la espalda de Kat surgió un poderoso Fénix en llamas, este rugía con gran fuerza alejando las tinieblas que estaban a su alrededor. La multitud que antes denigró a Kat expuestos ante este resplandor ahora se convirtieron en esculturas de barro seco y con muecas de terror en sus rostros, la niña apretó el puño, lo puso en donde tenía el corazón y comando con gran valentia:

-DESAPARECE...

Al decir estas palabras el fénix a su espalda dio un feroz rugido mientras estallaba en llamas, esta explosión de luz solar hizo pedazos a las esculturas de barro y al mismo tiempo también la visión terrorífica en donde antes estaba atrapada Katherin. Ya de vuelta en ese cuarto Kat seguía con el puño en el pecho, sonrió ante el ente y le dijo:

-Jamás dudaré de mis amigos. Y tu no podrás hacer que dude de ellos.

Allison respiró aliviada al ver que el mago les ayudaba a llevar a Artemis a un lugar seguro, una vez que tuvieron que despedirse, la pelirroja se volvió un momento para mirar al hombre, que al parecer no podía acompañarlos más allá de la puerta de madera. Un momento, había dicho ¿Helga? Pudiera ser que... Pero de nuevo, no tenían tiempo de hacer preguntas, así que la pelirroja se apresuró a hablar antes de que se separasen. - Le agradezco de corazón que nos salvaran, p-por favor tengan cuidado. - dijo a modo de despedida, esperaba de veras que la señora Helga estuviese bien y ambos pudieran acabar con aquella cosa.

Aunque no tenía muy claro a dónde debían dirigirse, obedeció sin rechistar y tras cruzar el portal les esperaba una sorpresa, que hizo que el nudo que tenía en el estómago desde que se había despertado se deshiciese un poco. - ¡Mérida! - fue también corriendo hasta su amiga y la apretó en un fuerte abrazo, mientras intentaba contener las lágrimas que se le agolpaban en los ojos. Lo bueno era que no estaba sola y Janelle y Daphne también estaban allí. - Estaba tan preocupada.. Sí, sí estoy bien, ¿y vosotras? - preguntó mientras se separaban y miraba a las chicas.

Cuando preguntó por Artemis, fue con ella, para ver si el chico recuperaba la consciencia. - Unas sombras nos atacaron en un bosque, también un monstruo enorme nos perseguía... Pero apareció un tejón, que resultó ser una señora llamada Helga, que nos condujo al exterior del bosque y... Y entonces apareció...- Allison se quedó callada un segundo y sacudió la cabeza mientras continuaba hablando.

- También debía ser una de las sombras que intentó engañarnos, agarró a Artemis y yo pude evitar que me atrapase. Pero gracias a los cielos, la señora Helga y el hombre que nos condujo hasta aquí nos ayudaron a escapar. - explicó como mejor pudo mientras intentaba reordenar todo lo ocurrido en su cabeza. - ¿Qué está pasando..? ¿Sabéis algo de los demás? - preguntó dejando caer los hombros, mientras miraban si Artemis recobraba el sentido.

La serpiente me soltó el dedo antes de que pestañeara un par de veces volviendo a la realidad, aún así permanecía bastante asustada. Si era por el demonio o algo diferente estaba por ver.

- ¡Salgamos de aquí! ¡Serpent Sortia!

Dije alarmada y lancé el hechizo casi sin mirar dónde apuntaba pues ya me encontraba iendo a por Freddy. No me importaba errar el hechizo, la serpiente recordaría su objetivo y sería una buena distracción.

- ¡Distráele!

Ordené apremiante al ofidio, aunque dudaba que ninguno lo hubiese oído.

Freddy veía como sus compañeros morían una y otra vez. Ya había dejado de ver la realidad para ver unicamente un futuro oscuro, un futuro que se negaba a creer...

" No puede ser ", pensaba mientras veía como Artemis volvía a caer, esta vez devorado por una serpiente enorme, Hellen yacía en el suelo golpeada por un hechizo del señor oscuro y mientras Kat, que ya había visto morir de mil maneras distintas en sus visiones, ahora se aliaba con el enemigo para volver a golpear al Gryffindor con un conjuro imperdonable. Todo volvía entonces al principio. Todos vivos, atravesando la puerta que llevaba al demonio. Freddy intentaba gritar que no debían pasar... Pero era tan débil...

Ya más tranquila al ver que Allison se encontraba a salvo escucho su historia. Una señora Helga que se transformaba en tejón, después de lo que nos hemos encontrado... Parece que se encontraron con Helga Hufflepuff, ya sea en espíritu en otro tipo de manifestación. Hay tantas preguntas que hacer, pero no es el momento ni el lugar todavía.

- No, no sabemos nada de los demás. Apenas acababamos de volver cuando reaparecisteis. Tras esa horda de demonios, acabamos en lo que parecían una mazmorras subterráneas en las que algo nos perseguía y nos amenazaba con comernos. Esos dos, - digo despectivamente señalando a Richard y Eliphastus - salieron corriendo dejando a las chicas atrás. - lanzo un bufido - Mientras buscabamos la salida, un demonio nos tendió una trampa y casi atrapa a Janelle, pero conseguimos librarnos de él antes de que fuera demasiado tarde. Entonces, apareció una mujer que curó las heridas de Janelle y nos trajo hasta aquí.

Espero que, por mi manera de hablar, Allison pillé que entraré en más detalles cuando estemos a solas.

       Dominique le dice a Kat mientras que de reojo ve a Fred y a Hellen retrocediendo afectados ante el demonio que los enfrenta y se concentra para invocar nuevamente:

       " ¡Flipendo!    Creo que debemos de cubrir la retirada de los chicos amiga para seguirlos cuando se hayan alejado del peligro para cerrar alguna puerta detras de nosotros y así interponer la entre el demonio y nosotros mientras que les quitamos el encantamiento que les afecta y nos recuperamos para insistir contra esta criatura! "   

Cuando el demonio se disponía a atacar a las chicas, la pequeña serpiente que estaba bajo sus pies, se transformó en un enorme basilisco, el cuál se abalanzó sobre el demonio, atacándolo con suma brutalidad.

Mientras aquel demonio luchaba por su vida, un viejo mago apareció ante ustedes.

Luego de liberar a Freddy les señaló hacia el portal que se encontraba detrás del demonio.

Apresúrense, salgan de aquí, no puedo retenerlo por siempre.

Sonreí al comentario de Mérida antes de ponerme seria.

- No sé si lo estarán, pero desconfío de ellos, especialmente de Richard. A la tarde tuvimos un encuentro algo sospechoso - le dije poniendo un rostro pensativo - espero que los demás vuelvan pronto, estoy muy inquieta por ellos.

Miré alrededor esperando que aparecieran en cualquier momento.

Al cruzar el portal, se encuentran con los demás chicos quienes parecen bastante desconcertados. 

Artemis yace en el piso inconsciente, Mérida y Janelle conversan entre sí y Dominique simplemente ha desaparecido.

Cuando el último grupo de estuduantes llega una lúgubre voz resuena por todo el lugar.

Así que sobrevivieron y la mayoría de ustedes consiguió volver a este plano. Bien, muy bien. Eso prueba que me voy a divertir un poco más con ustedes.

Veamos como manejan esto. - dice la voz de Kronos mientras un enorme demonio aparece ante ustedes.

Al ver aparecer al demonio, coges firmemente tu varita. Sin embargo, algo te llama la atención sobre esta, su peso ya no es el mismo.

De pronto tu varita se siente mucho más pesada y fría al tacto, cuando miras hacia abajo, hay está, en tu mano, la espada de Gryffindor.

Tan pronto te percatas de ello, una voz firme pero géntil suena en tu cabeza.

Muéstrame que eres digno de llevar mi nombre, ruge joven león, ruge con todas tus fuerzas y clava tus colmillos en la carne del maligno.