Partida Rol por web

La lechucería es una sala situada en la parte más alta de la de torre oeste del Castillo de Hogwarts. Es donde las lechuzas de los estudiantes viven durante el año escolar.

La lechucería es una sala circular de piedra, bastante fría y con corrientes de aire ya que ninguna de las ventanas se puede cerrar. La falta de vidrios en las ventanas permite a las lechuzas entrar y salir cuando se les antoja.

El suelo esta cubierto de paja y excremento de lechuza, además también hay restos de ratas y ratones de campo que las lechuzas cazan. De las paredes cuelgan perchas donde las lechuzas se posan.

En invierno el frío es tal que hay que tener cuidado con el hielo que se acumula.

Había acudido a la lechucería para mandar una carta a mi madre, seguramente ella y Pedro estarían preocupados por mi.

Una lechuza con aspecto algo demacrado recogió mi carta y salio volando de la lechucería en dirección al sol.

La carta era la siguiente:

“Queridos, Mama y Pedro.

Ya he empezado las clases y de momento no es que sea realmente buena pero estoy empezando a mejorar. En la clase de Encantamientos he hecho levitar una pluma pero el encantamiento incendio no me ha salido especialmente bien y me a explotado en la cara jajaja. En Herbología sin embargo me ha salido algo mejor pero aun así no he podido conjurarlo. La clase de Astronomía es muy interesante pero me he olvidado de los planetas y no es que se me de muy bien buscar planetas en el telescopio.

Tengo que hacer los deberes en la biblioteca, espero vuestra respuesta y creo que intentare mandarle una lechuza a Papa, dicen que las lechuzas encuentran a cualquier mago que este vivo, por probar no pierdo nada.

Muchos besos y abrazos.

Katherin.”

Había tomado de la mano a Arietis y ambos salieron corriendo hasta la Lechucería. Comenzaron a subir las escaleras apurados, hasta llegar al punto donde los escalones ya tenían una fina capa de hielo por lo que Johan se juntó más con Arietis y fueron caminando despacio. Una vez dentro del lugar, vió que no había nadie mas y el niño pareció no darle la más mínima importancia al entorno, corró directo hacia la ventana - Desde aquí se puede ver todo!-
 

Feliz y ansiosa por dar un paseo junto a Johan nos fuimos corriendo del Gran salón tomados de la mano, era la primera vez que me relacionaba con un niño y mas aún con tanta cercanía. Pero la verdad es que me encantaba y lo estaba disfrutando. 

Nunca había imaginado que las distancias dentro y fuera del castillo eran tan amplias, es más al llegar a la entrada de la torre que nos conduce a la lechuceria noto el acercamiento de Johan y sin pensarlo demasiado me aferro a su brazo para no caerme por el suelo resbaladizo. 

Lo bueno era que la cantidad de escalones ni lo sentí,  no estaba cansada y al escuchar como el niño comentaba sobre las vistas me coloco a su lado para observar todo desde allí.  Simplemente era magnífico,  no podía creerlo. 

-¡Mira! ¡El lago! Tenemos que volar sobre él algún día Johan, es precioso este lugar. ¿Te gusta? - entusiasmada y feliz señalo cada detalle del maravilloso paisaje que teníamos a la vista.

Acturus subió a la lechuceria al salir de la Biblioteca...para el, hijo de auror, la situación era alarmante.

Escribió al Profeta:

Hija de Voldemort ingresa en Hogwarts, ya está montando incidentes en el colegio y amenazando a los alumnos. Digna hija de su padre, está en Slytherin

Esperaba que ese aviso de noticia le sirviese un pago en Galeones o algo así, además odiaba a los magos tenebrosos tanto o mas que a los Muggles, o a los sucios y cochinos Huffelpaf.

Tras mis primeros días en la escuela y al notar lo difícil que se me hace levantarme. Decido escribir una carta a mi padre. - Papá necesito con urgencia un despertador lo suficientemente ruidoso como para despertar a todo mi dormitorio, podrías enviármelo con la lechuza familiar. Mil gracias, cariños a todos en la casa. Artemis. Por cierto podrías preguntarle a mi mamá si el apellido Megele le suena para algo y de ser así ¿de dónde?

PD. - La escuela es genial ya he hecho varios amigos y me siento muy feliz.

Observó el lago junto a Arietis y se sobresaltó cuando ella habló de volar sobre el -Sin duda es hermoso y puedes contar conmigo para sobrevolarlo, pero... como piensas hacer eso?- Se rió y pensó que ella solo bromeaba.

Luego tuvo una idea que no se le había ocurrido hasta el momento -Algún día puede ser hoy...-

Vislumbrada por la belleza del lago escucho el comentario de Johan, al cual le dedico una sonrisa. - Claro que cuento contigo, de ahora en mas seremos compañeros exploradores del castillo. ¿Te gusta la idea? - afirmo contenta mientras sujeto su mano hasta que me doy cuenta de lo que estaba haciendo y la suelto ruborizada. 

Mordiendome el labio inferior mantengo la mirada en el lago hasta que su propuesta generó que mi atención se centrara nuevamente en él. -¿Te animas a llevarme? Mi escoba es un poco vieja... - le propongo esperando ansiosa su respuesta.

Pensó en la hora y le pareció que si se apuraba, podían volar por el lago un rato y luego volver a los cuartos. -Esperame- dijo sin dar muchas explicaciones y salio corriendo.

Pasaron unos minutos hasta que regresó, pero cuando apareció, lo hizo cargando con el una escoba completamente cubierta de vendas. -Quiero volar- dijo y las vendas que cubrían las escoba comenzaron a retirarse solas con magia y enrollandose. Cuando el proceso terminó, Johan tenía en sus manos una escoba completamente negra, un negro brilloso y que se encontraba adornada con diseños de rayos dorados que la recorrían de punta a punta.

Johan se ruborizó un poco al mostrar su escoba, pero no deseaba perder tiempo. Dió la orden y la escoba voló, el se montó e invitó con la mano a Arietis. -Es la primera vez que llevaré a alguien, me alegro de tenerte como amiga!-

-¡Yo también! ¡Me encanta volar! - respondo dando pequeños saltos de alegría y cuando Johan me pide que espere aquí asiento conforme. Finalmente al cabo de unos minutos regresa con su flamante escoba. 

Al ver de cerca su color mis ojos se abren como platos.- ¡Era muy bella y seguro volará muy rápido! - pienso al tocarla, estaba alucinada porque jamás había visto algo así y cuando me indica de subir,  sin dudarlo doy un salto para aferrarme detrás suyo rodeando con mis brazos su cintura. 

-¡Cuando quieras! ¡A volar! - expreso con alegría de forma doble, tenía un amigo y conocería el lago volando. 

Feliz por lo que iban a hacer, aunque no supiera si estaba permitido o no... aceleró la escoba lo mas que pudo y salió por una de las ventanas abiertas. -Perdona por esto- bromeó, pues iba a hacer algo que le encantaba pero estaba seguro de que Aretis no lo esperaría.

Descendió en picada hasta practicamente chocar con el lago y en el momento justo, enderezó la escoba y de repente ambos se encontraban volando al ras del lago congelado. De a poco aminoró la marcha y por la cercanía y velocidad parecía que ambos recorrían el lago en patines.

Después dirigió la escoba hasta los jardines y de a momentos aceleraba la misma, para luego disminuir la velocidad cada vez que veía algo lindo. -Los alrededores de la escuela son hermosos... tenemos mucha suerte de estar aquí.-

-Descuida... - respondo tranquila hasta que emprende el vuelo de una forma muy rápida,  no sólo eso vamos en picada. -Ohhhh... - alcanzo a decir mientras aprieto su cintura con fuerza escondiendo mi cabeza en su espalda hasta que finalmente aminora la velocidad para disfrutar del paisaje. 

-Tienes razón Johan... Es precioso estar aquí,  sabes tenemos que prometernos algo: que siempre año tras año haremos esto al menos una vez hasta séptimo curso. - era una experiencia digna de recordar y que mejor compañía que el slytherin.

-Tienes razón...- estaba convencido. Debían cumplir esa promesa -Prometido- dijo asintiendo con la cabeza.

Luego de recorrer un poco los jardines, dirigió la escoba hacia arriba una vez más, hacia la punta mas alta de Hogwarts, allí descendió e invitó a Arietis a tomar asiento -Me gustaría que Stella tambien estuviera aquí, tenemos que invitarla la próxima vez- La vista era genial, todo en ese preciso momento, era genial.

El paseo en la escoba estaba resultando ser muy especial, era la primera vez que estaba a solas con un niño y más aún que me llevara en su escoba. Supongo que la magia de Hogwarts es aplicable en todo los sentidos, poco extrañaba mis días en casa porque este lugar era magnífico y guarda muchos secretos por descubrir pero también es poseedor de un paisaje maravilloso imposible de olvidar. 

-Cuando quieras invitamos a Stella, me cae muy bien mi prima. - comento mientras desciendo de la escoba para tomar asiento a su lado. -Sabes yo no conocía nada de Hogwarts, ni siquiera por rumores. La verdad es que estoy muy sorprendida por todo, ya no tengo miedo de ser una Black aquí. -  en parte era una confesión, tantos años creciendo con el miedo a ser asesinado hacía mella en mi, pero esto lugar me brindaba esa seguridad que estando en mi casa no tenía, además... Podía jugar y pasar lindos momentos con amigos como Johan. 

- ¿Qué esperas de este colegio Johan? - pregunto en un momento que centro la mirada en la suya.

Día cuatro. Jueves Por la Mañana (10 horas) antes del desayuno.

Tres días más tarde de mi visita a la lechucería había vuelto por si la lechuza que mande a mi madre había regresado con respuesta.

Mi madre me había mandado una carta y con mucha ilusión la abrí y comencé a leerla:

Querida mía.

Me alegro de que hayas podido entrar en el colegio tan especial en el que estudio tu padre, seguro que se sentiría muy orgulloso de ti. Tranquila por las clases porque si no me equivoco es solo tu primera semana seguro que el mes que viene todo te ira de perlas, cielo. Tu hermano esta muy atareado últimamente, pues a encontrado trabajo en el congreso de los diputados, creo que esta en un partido político y se esta moviendo mucho, como yo pienso y siempre he pensado, este país necesita gente joven en la cabeza aparte de la reina de Inglaterra claro.

En cuanto a tu padre, ya sabes que no he perdido la esperanza aunque tu hermano no quiere saber nada de él si esta vivo pues tres años desaparecidos es muchísimo tiempo.

Puede que al fin y al cabo te responda, él siempre me enseño a no dejar de mirar al horizonte si alguien no estaba a tu lado. ¿Te gustaría ir con él en navidad si lo encuentras? Desde que te fuiste el ambiente en casa esta muy tenso y tu hermano no se encuentra demasiado bien, si recibes carta de tu padre házmelo saber, cielo.

Muchos Besos y Abrazos.

Mama.

Meditó un poco sobre la pregunta de Arietis, pero la verdad no tenía muchas dudas sobre lo que quería -Espero encontrar amigos, Ari...- Hizo un silencio esperando la reacción de ella al ver que había transformado su nombre en un diminutivo -Espero jugar al Quidditch, y espero no avergonzar a mi familia... solo son eso estoy contento.- luego la miró -y tu?-

Lunes, Octubre. Medio día (sobre las 13 horas)

Pedido urgente para Flourish y Blotts (Callejón Diagon. Londres)

Dirección: Hogwarts.

A entregar a: Katherin Darling (Ravenclaw)

Libros nuevos (no alta calidad)

- Las fuerzas Oscuras: una guía para la autoprotección, Quentin Trimble- 9 galeones

- Mil hierbas y hongos mágicos, Phyllida Spore- 9 galeones

- El libro reglamentario de Hechizos (Clase 1). Miranda Goshawk. 10 galeones

- Guia de la transformación para principiantes, Emeric Switch- 9 galeones

- Filtros y pociones mágicas, Arsenius Jigger- 9 galeones

A Pagar: 46 galeones.

Me gustaba escuchar a Johan, daba mucha paz y me divertía. - Pues he venido para limpiar el apellido de mi familia. Todos creen que los Black somos magos malvados pero no es así. - era una realidad y una gran sombra, pertenecer a ese linaje era un condena. Seguro le pasaría a Stella y a Helle también, pero en mi pesaba un poco mas porque estaba del otro lado ya que éramos los Black rebeldes.

Luego de un rato caigo en la cuenta de que había utilizado un diminutivo para mi nombre, sonriendo le doy un beso en la mejilla para luego seguir contemplando el paisaje. - Pues... Aquí ya tienes una. - comento entre risas, un poco vergonzosas.

Lunes 6 - después de comer

Fui a la lechucería a llevar buscar a Sù. Solía gustarle volar con las lechuzas y pasar el tiempo en aquel sitio tan aireado, por lo que supe que a aquellas horas de la tarde estaría allí descansando. En cuanto entré en la sala, el fénix descendió con un sonido musical, dándome la bienvenida contenta. La acaricié en el pico y le pedí que llevara una carta hasta el callejón Diagon.

Visto mi falta de ingredientes para la clase de pociones y conociendo mi poca maña para buscar ingredientes, a pesar de que durante la clase tuve bastante suerte, decidí asegurarme de no faltarme ningún ingrediente para la siguiente clase. Metí una esmerada lista de ingredientes con el dinero correspondiente en la carta y alcé el brazo para que Sù echara a volar. En unos minutos, no se veía del fénix nada más que una estela estrellada.

Estimado vendedor de la tienda Slug & Jigger:

Me gustaría que me mandara la siguiente lista de ingredientes con la mayor brevedad posible junto al mensajero que lleva esta carta,

Muchas gracias.

PD: Adjunto el dinero correspondiente.

- 5 Raíces secas. 3 galeones - 15 galeones
- 5 Polvo de cuerno de unicornio. 4 galeones - 20 galeones
- 10 Ojos de escarabajo. 2 galeones - 20 galeones
- 5 Polvo de colmillos. 3 galeones - 15 galeones
- 5 Polvo de garras. 3 galeones - 15 galeones
- 5 Mandrágora. 4 galeones - 20 galeones
- 1 Pinta de veneno de acromantula. 100 galeones 
- 1 Cuerno de unicornio. 21 galeones 
- 1 Medio litro de Elixir Cerebral de Baruffio. 12 galeones
- 1 Pelo de unicornio. 10 galeones
- 12 Hígado de dragón. 17 sickles por onza - 2 galeones y 4 sickles
- 17 Bolsa de púas de knarl. 6 knuts - 1 galeón y 2 sickles
- 20 Ojos de escarabajo. 5 knuts por cucharada - 1 galeón
- 5 Especial: Bolsa mágica con 10 ingredientes (salen los que te hagan falta). 10 galeones - 50 galeones

TOTAL: 302,06 galeones

James se dirigió a la lechuceria y escogió una de las lechuzas para que llevase su nota en la que solicitaba que se le enviase un despertador adjuntando el pago.