Partida Rol por web

Mientras te diriges al lugar donde tienes que actuar, y que sale indicado en el reverso de la carta, ves un documento que no te habías dado cuenta de que estaba, es un plano, donde te dice las habitaciones que tiene la casa. Esto te reconforta un poco más. Llegas y paras el motor de tu vehículo. Te bajas y lo cierras cuidadosamente. Te colocas la careta... la función está a punto de empezar. 

Estás en la puerta principal. Ésta es fácil de abrir. Puedes mirar por la rejilla, que es más ancha de lo normal. Dentro de la casa, en la salita ves a dos hombres. Uno parece estar armado, el otro, parece desarmado.

Mientras te diriges al lugar donde tienes que actuar, y que sale indicado en el reverso de la carta, ves un documento que no te habías dado cuenta de que estaba, es un plano, donde te dice las habitaciones que tiene la casa. Esto te reconforta un poco más. Llegas y paras el motor de tu vehículo. Te bajas y lo cierras cuidadosamente. Te colocas la careta... la función está a punto de empezar. 

La puerta principal estaba bloqueada, pero tú pudistes entrar fácilmente forzando la ventana. No era nada difícil para ti. Ahora estás en lo que parece ser un dormitorio. el dormitorio a tuderecha tiene una cristalera por la cual puedes ver y te pueden ver, aunque la luz del dormitorio por ahora está apagada, y no te pueden ver. Tú sin embargo, a través de la cristalera, y agachada tras una cama, ves a dos tipos. Uno parece desarmado, el otro, parece armado.

Armados. ¡Pues claro! ¿y tú por qué no llevas nada? Se recrimina aunque sus nudillos le dejan bastante claro que quizás su arma principal ya la lleva puesta.

De todos modos a ver qué encuentro… se planta Gina hurgando debajo de las almohadas de la cama, rebuscando en los cajones de la mesilla de noche y fijándose en la lamparilla que bien podría servirle de no encontrar nada.

Presiona con un dedo el colchón de la cama para comprobar su grosor.

No encuentras nada, solo lo visible. Una lámpara que no hará mucho daño pero quizás sea mejor que unos simples puños. En los cajones solo fotos y papeles que no son interesantes a simple vista y con la poca luz que hay. El colchón parece muy fino.

Ok, llegamos, hagamos esto rapido, me duele la cabeza.

Intento ver por las ventanas para saber cuantos sujetos hay, por lo que dice la carta, asumo que estan armados, asi que debo hacer esto con cuidado, la delicadeza es la clave.

Toco la puerta fingiendo ser un repartidor o algo, quiero que uno se acerque a la puerta para sorprenderlo, espero poder romper la puerta de una patada, si no, buscare con que romperla

La única ventana por la que puedes mirar es la del dormitorio. Las luces están apagadas, así que no puedes ver nada en esa habitación, aunque aparentemente parece vacía. Igualmente eso es algo que no sabes a ciencia cierta debido a la densidad de la oscuridad.

Tocas a la puerta y se escucha a los dos hombres hablando. Finalmente escuchas pasos y la puerta cede un poco. Si no haces algo acabará abriéndose y descubriéndote. Por detrás se escucha una voz que comienza a articular alguna palabra.- ¿Quién...?.- hay que actuar.

Escuchas como alguien toca a la puerta y uno de los tipos se levanta a abrir.

Una lampara es mejor que nada.

¿y el colchón? ¿me valdría de cutre escudo?

Me caüen la puta ¿llegan más?

De poder ver quien llega sin ser descubierto miraría. De tenerlo chungo por el cristal. Tiraría de cutre escudo y me preapraría para arrojar lamparas sin soltar el cable de la misma.

Tomas el colchón como escudo improvisado y la lámpara como arma improvisada. El hombre desarmado comienza a abrir la puerta de fuera, porque alguien ha llamado.

Pues alé, a esperar Piensa Gina lampara en mano mientras se desliza por el suelo tirando del colchón para mantenerlo vertical a su lado.

Una vez está cerca de la puerta observa hacía donde mira el tipo armado y ya puestos que arma lleva.

Te asomas un poco, la llamada a la puerta captó la atención de los dos, el que está abriendo la puerta es el que tienes más alejado, que tiene una palanca de hierro. El otro está mirando hacia su compañero con una escopeta recortada en sus manos. No sabes si en las otras habitaciones hay más gente y si están armadas o no. En caso de que hubiera podrían aparecer y sorprenderte si tardas demasiado en hacer tu trabajo, quién sabe.

Excelente, solo un poco mas, anda, acercate, ya casi... ven a mi.

Toco la puerta una vez mas, esta vez en la orilla de las visagras para evitar que se abra, despues me escondo junto a la puerta, tras la pared, para que en el momento que alguien salga no le sea tan facil verme, pero me sea muy facil saltarle encima

¿Llaman al timbre y se ponen todos a mirar como perrillos esperando al cartero?  No creo que sea alguien esperado, pero en fin… Más problemas para mí.

Gina se escurre en la habitación e intenta estrangular el tipo de la escopeta con el cable de la lámpara.

Si consigue rodear el cuello del tipo y tirar del cable realmente parecería un leprechaun cabreado.

¡Dame mi oro maldito!