Partida Rol por web

I need a hero [+18]

[SAKAAR]: Parte I

Cargando editor
22/05/2018, 16:14
Stanley Rogers

Limitándose a esperar a que todos terminasen, Stan iba sintiendo cierta vergüenza por la pregunta que había lanzado acerca de las necesidades de usar fuerza mortal. A todos, incluso a aquel que se hacía llamar Spiderman, les resultaba adecuado tal despliegue de letalidad, pero no al nieto del Capitán América.

-Nunca he jugado al fútbol americano, Spiderman. Ni en el instituto ni en la universidad, no sería muy apropiado abusar de mis rivales de esa forma.

Se paseó un poco, observando a los caídos, como si estuviese pensando qué decir aunque, en realidad, ya lo había pensado desde el momento en el que todos habían señalado lo imprescindible que era el tomar una vida para salvar otra, algo que era poco aceptable.

-Os agradezco que nos hayáis salvado, Jen y Thyra. No cabe duda de que os debemos nuestras vidas y nos encontramos en deuda con vosotras. Si nos necesitáis, no dudéis de que os ayudaremos en todo lo que podamos -observó a Matthew, a quien había incluido en la ecuación sin preguntar -. Pero, tras ver vuestro despliegue de fuerza, sigo creyendo que podríais haberlos sometido, puede que con ciertas dificultades, pero sin tener que matarlos. No estar en la Tierra no es excusa para no hacer lo correcto. Cada vida es valiosa, incluso la de alguien que intenta acabar contigo.

Cuando terminó de lanzar su pequeño discurso, prefiriendo no seguir dando más vueltas a un asunto que ya no tenía solución, pensó en algo más apremiante mientras tomaba rumbo a la nave que Thyra había señalado.

-¿No habréis visto a otra terrícola por aquí? ¿De un metro setenta, delgada, piel clara, rubia y ojos verdes? -preguntó por si acaso. A lo mejor, si las cosas eran propicias, ellas sabrían dónde estaba Irina.

Cargando editor
24/05/2018, 11:45
Narradora

Notas de juego

Jenn o Spidey, os toca. 

Cargando editor
24/05/2018, 18:44
Matthew

Acompañé a Jenna hacia la nave, intentando evitar, sin éxito, que mi mirada se centrara en su trasero cuando mencionó ella misma la palabra "culo". 
- Tal vez te sorprenda, pero a pesar del rollo de las cuerdas - dije, señalandome a la muñeca y lanzando una telaraña hacia la nada para demostrar de lo que hablaba. - mi experiencia con las redes eléctricas no ha sido muy satisfactoria. Voto por lo de aceptar el alojamiento y sin rechistar.

Levanté un dedo hacia el cielo, como si fuera a contestar sarcásticamente al comentario de Stanley, pero me detuve. No sabía que decir. Tenía sentido lo que decía, y le pegaba al nieto del capitán américa. Por supuesto que no habría competido en ningún deporte para no abusar del rival. Yo tampoco lo había hecho, pero en mi caso había sido para no destacar. El discurso que vino a continuación solo recibió un largo suspiro des respuesta. Aquella moral siempre me había aburrido, o más bien, siempre me había superado. Las cosas que había visto ya por aquel entonces me hacían creer que no todos los seres vivos podian ser considerados seres, ni merecian vivir. Stanley estaba hecho de otro tipo de madera.

Cargando editor
24/05/2018, 19:27
Jenna S. Roden

Thyra aparece por la abertura de la nave seguida por el salvador de vidas y el chico spiderman, una vez entran y no hay peligro de seccionar extremidades de alguno de ellos, cierro la compuerta presionando uno de los controles y me hago con el mando para dirigir la nave hacia nuestra...casa. 

El discurso de Stanley hace que ponga los ojos en blanco y que apriete los dientes, sentí unas inmensas ganas de contestarle y mandarle fuera de mi nave, pero no creía que eso fuese lo correcto cuando sabía de sobra que necesitábamos su ayuda para ganar la contienda y hacernos con nuestro premio. 

Aunque...pensándolo bien...la poli buena era Sparks.

-Será gracioso ver tu cara cuando comprendas de qué va esto realmente, y cómo es la vida en Saakar. -esquivo una nave que venía hacia nosotras en el último momento, y giro la cabeza para mirar al nieto del capitán américa- O te los desayunas, o te comen vivo.

Me encojo de hombros y vuelvo a lo mío, no estaba dispuesta a seguir discutiendo algo tan básico en la supervivencia de las personas con un bonito de cara, no, me niego

Pasados unos minutos, el montón de chatarra que era nuestro hogar apareció ante nuestros ojos y yo hice descender la nave en el terreno que habíamos habilitado para ello.

-Bueno, bienvenidos a nuestro resort de vacaciones, espero que todo sea de vuestro gusto, y que no os pique ningún insecto sakaariano venenoso. -suelto una carcajada mientras apago el motor y me levanto de un salto del asiento, mirando a Spidey- Y a ti más te vale no volver a mirarme el culo, -sonrío- a no ser que quieras morir. 

Tras una mirada de Thyra, levanto las manos en son de paz y rebusco en un compartimento de la nave mis armas, que había guardado.

-Es broma, es broma, de verdad, no voy a matar a nadie. -vuelvo a sonreír, esta vez de forma mucho más cálida, dejando el sadismo a un lado- Ahora en serio, bienvenidos a nuestra casa, le pediré a Nancy que os prepare algo de comer, e iré a prepararos un sitio para que descanséis. 

Me adelanto unos pasos y abro la puerta, desapareciendo por ella con rapidez. 

Cargando editor
25/05/2018, 09:19
Thyra Odinson

En parte Stanley tenía razón, pero era más rápido tirar a matar y largarse, porque cuando dejabas heridos siempre acababan llegando más, y te pasabas medio día esquivando balas e intentos de asesinato. No respondió de nuevo. Jenn ya respondió, ella solo pudo suspirar y apoyarse en la parte trasera para poder ver a la nave acompañante como les seguía. 

No es necesario "sin rechistar" -respondió a Spidey, con una sonrisa cansada y ladina-. Toda opinión es bienvenida -le dio una palmada a la espalda y se lo quedó mirando de frente-. El tema de la máscara... ¿La llevas incrustada en la cara o es que eres tan feo que no quieres mostrar el rostro? -obviamente estaba bromeando.

Lanzó una mirada de reprimenda a su hermana menor cuando "amenazó" a Spidey, claro que ella sabía que estaba haciendo coña, pero no quería que la primera vez que hacían amigos. Amigos que no habían tenido que capturar, u obligar a acompañarlas, malinterpretaran una broma tonta.

Nancy es una chica Krylorian, es otra raza alienígena... Aunque aquí todos somos alienígenas. Os lo digo para que no os extrañéis mucho al verla, es un poco sensible -bajó las redes eléctricas y fue metiendo en una especie de vagón lo que habían encontrado en el mar de chatarra-. La rescatamos del mercado de esclavos, así que tampoco toquéis este tema delante de ella...

Jenna ya se estaba metiendo dentro de la casa, la miró y volvió a mirar a los dos humanos. 

Mi hermana es Señora de la Arena, eso significa que luchamos en la Contienda de Campeones... Resumiendo, es una lucha de gladiadores, al estilo romano pero futurista. Si se os da bien pelear, nos vendría bien vuestra ayuda, el premio es un billete de salida de este planeta de mierda y chatarra.

Cargando editor
25/05/2018, 11:29
Stanley Rogers

Durante el trayecto en nave, Stanley estuvo meditativo sobre Irina, la cual mantenía esperanzas de que la chica se hubiese quedado en la tierra; y también acerca de qué harían Jenn y Thyra, que habían comunicado ser de origen terrestre, en un planeta como en el que estaban ¿Habrían sido abducidos como Matthew y él? ¿ tendrían alguna extraña razón para encontrarse allí tantos terrestres? La verdad, era un tema que estuvo a punto de preguntar, mas prefirió posponerlo al llegar a lo que era su casa, una que sorprendió a Stan. 

Habiendo recibido el permiso para entrar en su hogar, algo que iba implícito en su invitación, asumió la importancia de no molestar a Nancy, pues no era plan llegar a un lugar y ofender a quien ya vivía en él.

-Gracias por acogernos y por el detalle de ir a darnos de comer -correspondió a la hospitalidad que Jenn y Thyra les brindaban -. De acuerdo. No os preocupéis, no sacaremos temas que puedan resultar delicados para Nancy -miró a Spiderman y asintió para ver si también estaba conforme con lo que él decía, pero seguro que así era -. Solo espero que no seamos una carga para vosotras. 

Lo siguiente que Thyra mencionó, todo lo de Jenn como Señora de la Arena y la Contienda de Campeones, era como mínimo extraño e incluso, dentro de lo raro que era estar en un planeta alienígena, ligeramente perturbador. Si guardaba similitudes con una lucha de gladiadores, la sangre correría a mares.

-¿Cómo? ¿Podrías explicar un poco mejor todo eso de la Contienda de Campeones?, por favor -pidió con tono amable pero sin simular lo peculiar que le había parecido todo ese tema.

Cargando editor
25/05/2018, 17:29
Matthew

Me encogí de hombros después de la palmada por parte de Thyra. El comentario no había sido ninguna especie de rendición ni humillación, lo había dicho para el capitán tengo-que-tener-la-superioridad-moral-incluso-ante-mi-sombra. Patente en trámite. El comentario que hizo sobre mi máscara me provocó una sonrisa socarrona debajo de la tela.
- No, no está incrustada contra mi cara, pero si que la llevo para protegeros a vosotros. Conocéis la historia de como el Spiderman original consiguió sus poderes, ¿no? Una araña radioactiva le mordió y su cuerpo mutó obteniendo cualidades típicas de un arácnido. Bien, en mi caso fue al revés. Un humano radioactivo mordió a una araña y mi cuerpo mutó a una forma antropomórfica. Así que no, tampoco soy feo, en realidad soy muy guapo. Para el estándar de una peluda tarántula con ocho ojos y sus afilados colmillos. - en ese momento abrí exageradamente la boca, marcando los dientes contra la máscara, y haciendo un ruido, "hisssssss", típico de una criatura agresivo, sacado de Predator. Gran clásico entre clásicos. Stanley era el único que no iba a tragarse la broma y que, además, seguramente no se iba a reir.

Permanecí con la espalda apoyada en una pared el resto del trayecto hasta que, Jenna, nos indicó que ya habíamos llegado a nuestra destinación. A parte de la bienvenida, de regalo también dejó una amenaza dirigida hacia mi. Tenía que buscar por aquél montón de chatarra a ver si encontraba un maldito trozo de tela que camuflara mejor hacia donde miraban mis ojos, claro que ante aquel nivel de percepción seguramente no serviría de nada.
- Bueno, en el peor de los casos lo intentarías. Es posible que vaya a arriesgarme. - le guiñé un ojo y lancé un beso en su dirección, todo debajo de la máscara. Imaginé que para ella no tendría ningún problema en enterarse. Y no, no tenía ninguna intención de repetir lo que había pasado, no había sido nada más que una reacción a un estímulo, lejos de nada parecido a un acto premeditado, pero... ¿ignorar una amenaza y perder la oportunidad de responder con una burla? Jamás.

Seguí al resto en dirección a la vivienda choza favela. Tenía un punto de encanto. No desde el punto de vista arquitectónico, claro, pero si que encajaba perfectamente en aquel vertedero de chatarra. Nadie que pasar por ahí diría que aquella basura puesta de forma aparentemente aleatoria fuese el hogar de nadie. Y para mi tenía una utilidad especial. ¿Sabes ese momento en el que estás montando un cacharro que ni tu sabes para qué funciona pero te falta una pieza clave y el cabrón de la tienda de electrónica te dice que no le llegan más hasta dentro de 8 meses? Pues arrancas un trozo de una pared y voilá! Todo solucionado! Aquello casi compensaba por todas las enfermedades de diferentes planetas que se debían de acumular, y yo sin ponerme la anti tetánica. Asentí a la mirada de Stanley. Algo habían dicho sobre una alienigena Maya, o Azteca, no había prestado atención, miraba los cachibaches que formaban aquella construcción buscando algo que fuese útil mientras pensaba en como incorporar las redes eléctricas a mi repertorio.

Entonces el tono de la conversación cambió a algo más turbio y mi atención se centro en ellos.
- Lo que el grandullón quiere decir, es que si tiene que matar a alguién prefiere buscar otra salida del planeta. Aunque no estoy seguro si su interés también viene fomentado por su claro gusto reprimido a la violencia. La paliza que le dabas al Centinela tenía vicio. A mi me interesa más la forma en la que dos asgaardianas saldrán del planeta.

Cargando editor
26/05/2018, 21:17
Jenna S. Roden

Una vez estoy dentro del que ahora es nuestro hogar, miro a mi espalda y veo a través de la puerta abierta que tanto Thyra como los dos chicos se han quedado fuera de esta.

¿Pero qué cojones...?

Suspiro y me aparto el pelo de la cara, recogiéndolo en una coleta pegada a mi nuca.

- ¡Naaancy, tenemos invitados! -vocifero caminando lentamente hacia la cocina- ¿Podrías preparar algo rico para comer? -le guiño un ojo cuando me la encuentro de frente, recogiendo por aquí y por allá- Aunque siempre que lo cocines tú, se da por hecho que está rico, aunque es mejor que no sea nada con tentáculos, ya sabes que a Thrya y a mí nos encantan, pero nuestros invitados son terrestres, y no quiero que se asusten a la primera de cambio, mejor dejarles un periodo de adaptación de unas horas.

Después de esto, vuelvo a acercarme a la puerta que da al exterior, que aun sigue abierta, y asomo la cabeza por ella.

-Si no entráis, pondré vuestras camas en el patio, -señalo a mi alrededor- o sea, esto que estáis viendo.

Un terreno seco lleno de chatarra espacial, y, probablemente, de ratas espaciales, o algún que otro insecto que pudiese transmitirles la rabia espacial, ¿existiría una enfermedad llamada rabia espacial? Seguro que sí. Intento no darle muchas vueltas a aquello que Thyra está hablando con los dos terrestres, sea lo que sea, ella sabe lo que hace, siempre ha tenido mucha más cabeza que yo, aunque los "socorros" se me diesen mejor a mí por ser mejor actriz, ella era la cabeza pensante, o, al menos, el sentido común de las dos. 

Sí, si no fuese por ella, ya me habrían matado seis o siete veces, y eso es quedarse corta. 

Cargando editor
30/05/2018, 20:04
Thyra Odinson

No lo sois -aseguró en dirección al Capitán América Nueva Versión-. Es agradable ver rostros conocidos, o amigables. Sobre todo teniendo en cuenta que desde que hemos llegado nos han intentado matar varias veces... Y solo llegamos hace un mes -sonrió divertida.

También sonrió ante aquel intercambio de amenazas y ¿coqueteos? entre Spidey y su hermana. Interesante y entretenido, cuanto menos. 

Normalmente no es tan gruñóna -la disculpó cuando entró a decir que si no entraban iban a tener que dormir a fuera-. ¡Y yo quiero tentáculos! -¿qué más daba cómo sonaba aquello? Pero no quería que ahora le pusieran un plato vegetariano para no ofender a sus invitados. Bienvenidos a Sakaar, cuanto antes se adaptaran, mejor. Y aquí se comían bichos muy feos.

Entraron en la casa. 

La Contienda de Campeones es una arena. Gradas, una pista, un palco con el Gran Maestro... Y contrincantes. A veces luchamos unos contra otros, otras veces contra un Campeón designado, otras contra criaturas. Por lo general, se puede elegir el contrincante. Y no, no siempre es a muerte... Casi nunca lo es, pero a algunos se les va un poco la mano, o se infectan heridas y te toca un médico de mierda... Todo eso. Son unos juegos, patrocinados por el Gran Maestro, que es el Mandamás de por aquí, que se aburre mucho.

Miró una vez más a spidey y se encogió de hombros.

El plan es ganar la Contienda, se supone que el Gran Maestro nos da una nave, pero... Entre vosotros y nosotras, su palabra vale lo mismo que una mierda de kree. Así que nos estamos montando una nave en la parte trasera, como podemos y sabemos -que en realidad era bastante nada.

Cargando editor
30/05/2018, 20:16
Stanley Rogers

Asintió a las palabras de Spiderman acerca de que no iba a matar para salir de allí, ni para cualquier otra cosa si se podía evitar. Al haber lanzado varios mensajes a favor de la vida suponía que tanto Jen como Thyra entenderían que era preferible otra solución, como la de crear su propia nave tal y como mencionó la chica que les estaba explicando todo acerca de esa Contienda de Campeones y el tal Gran Maestro.

-No te preocupes, Jen, no hará falta que muevas camas -contestó a la que ya se había introducido en su casa cuando se internaron ellos -. En cuanto a lo de comer, pues nos vale cualquier cosa -observó a Matthew, y se sintió seguro que se iba a arrepentir de esas palabras, pero es que sería un tanto prepotente exigir tras todo lo que estaban haciendo por ellos. Por parte de Stanley, comería lo que le diesen, tentáculos incluidos.

Retornó su atención nuevamente a Thyra, puesto que deseaba saber más sobre todo lo que le estaba contando.

-¿Y ese gran Maestro? ¿No se puede tratar con él de alguna otra forma para lograr una nave? -le preguntó por si acaso, aunque supuso conocer la respuesta en forma de un contundente no. 

Conocía la opinión de Thyra sobre la credibilidad del individuo que mandaba en Sakaar, pero tal vez existiese alguna forma alternativa de conseguir el billete de vuelta al hogar sin luchar.

-Has dicho que nos necesitabais, Thyra, así que estoy dispuesto. No me gusta tener que luchar, pero si es por un buen motivo como el de volver a casa y no supone matar a nadie... Bueno, puedes contar conmigo y supongo que también con mi amigo, porque lo que es yo, de mecánica de naves espaciales, soy de poco valor. No sé si Spiderman podría ayudaros en ese tema.

No le terminaba de gustar lo de una batalla de gladiadores, pero apreciaba que eran buenas mujeres, les habían ayudado y se consideraba en deuda con ellas. Si debía pelear para ser de utilidad a las dos hermanas, sin dudar mucho acerca de ello, Stanley lo haría.

Cargando editor
02/06/2018, 19:27
Matthew

- Un público exigente. - comenté al ver que nadie se había immutado con mi imitación de araña-hombre. Ese fue el momento en que, por un segundo, me planteé si no era tan gracioso como me creía cuando me ponía la máscara. Solo durante ese segundo, luego se me pasó.

No tardé en unirme al resto entrando en la humilde morada, prestando, una vez más, más atención a los cachibaches que formaban su estructura que a la conversación que tenía lugar a mi alrededor, ignorando por completo a Jenna cuando dijo lo de las camas. El capitán podía encargarse de eso. Sin embargo cuando se habló de comer tentáculos todos mis sentidos arácnidos se dispararon y casi salto hacia el techo, lo cual seguramente me habría hecho más daño que comer algo con tentáculos.
- Bueno, a ver, cualquier cosa cualquier cosa... estaría bien que no nos hiciera vomitar, no nos matara, no intentara comérsenos a nosotros y que no se me cerrara el estómago al verla. Llamame tiquismiquis, eh, pero no estoy muy acostumbrado a la comida alienigena. O autóctona. No terricola, o como la llameis. - durante el mini discurso sobre la comida que no debía matarnos, gesticulé exageradamente tanto con los ojos de la máscara como con las manos, dejando patente la importancia que tenía para mi el no morir por causas alimenticias.

Cuando me volvió a nombrar Stanley no pude hacer otra cosa que encogerme de hombros. ¿Qué coño le hacía pensar que cabía la posibilidad de que yo supiera algo de mecánica espacial? Ah, si, que no conocía mi identidad de estudiante de secundaria.
- No he tenido el placer de tratar con naves espaciales, no. En ese aspecto seguramente las hermanas sepan más del tema, teniendo en cuenta que su vehículo está bien mantenido y no hemos muerto en el trayecto. Pero puedo echarle un vistazo a lo que sea, siempre es un placer meter la mano en tecnologia desconocida. Bueno, el resumen, patear culos, ganarnos al respetable, confiar en que el tio que se hace llamar Gran Maestro y seguramente tenga genitales pequeños no nos engañe, seguramente esta sea la peor parte, y salir de aquí. ¿Después qué? ¿Vais a la tierra? ¿Tenemos que hacer autostop en una xenogasolinera?