Lylia despierta sola en casa. Se hace el desayuno y desayuna sola también. Su madre no ha llegado durante la noche.
Tras desayunar, ducharse y vestirse, Lylia abre la puerta de la calle para salir, y se encuentra de cara con su madre, que iba a abrir la puerta.
Necesito el nombre de tu madre. Le voy a hacer PJ.
- Espero que me hayas preparado el desayuno. Y hoy quiero que vengas pronto a casa. ¿Ha quedado claro?
El tono de la madre era sobrio, aunque severo. No parecía aceptar un no por respuesta.
- El desayuno está en el horno. Si quieres te lo caliento. - Si me dice que sí perderé el tren pero lo último que quiero ahora es pelearme con ella.
- Pronto serán los exámenes por lo que planeaba quedarme estudiando en la biblioteca... - No tengo muy claro como seguir por lo que capitulo. - Volveré lo antes que pueda. -
La madre de Lylia mira a su hija con una gran severidad de nuevo.
- Espero que sea así. Tengo que presentarte a alguien. Ahora largo.
Y se mete en casa, cerrando tras ella.
- Va todo bien, ¿cariño?
Oye decir Lylia a Yuko, asomada por la puerta de su casa con cara de preocupación.
- Ven, ven. Te he preparado un ben-to para la escuela.
Aparto la mirada de Yuko cuando contesto. - Sí... Va todo bien. Señora Hisakawa. -
Esta vez acepto el Ben-to sin oponer resistencia.
- Gracias, tengo que irme que llegaré tarde.. - Digo para evitar más conversación y irme.
Realmente pese a que acepto el Ben-to el gesto me entristece mucho más de lo que aprecio la generosidad de la señora Hisakawa.
Lylia llega finalmente a la estación y toma el tren.
Ahí está Satoshi.
- Buenos días Lylia.
Parece algo más despierto que de costumbre.
Mientras tanto, os suena el móvil a ambos:
Saki: Hola, espero que nos os importe que invite al grupo a una amiga. Se llama Chika, la conozco desde hace bastante y resultó que también tenía un Arcano. Lleva años con uno y parece que tiene una buena relación con él. Supongo que puede ser de ayuda.
Saki ha agregado a Chika al grupo
- Buenas días, Satoshi ¿Cómo va? -
Cuando le respondo suena el móvil. Lo miro y luego lo miro a él, le hago un guiño de ojo para escribir en el whatsapp y pongo.
"Lilya: Bienvenida Chika! ¿De qué os conocéis las dos?"
Cuando envío el mensaje vuelvo a mirar a Satoshi. Realmente no tengo muchas ganas de hablar pero prefiero concentrarme en cualquier otra cosa,
[Música sonando a mínimo volumen] https://youtu.be/YVFLgx8o7XM
- Bueno, bien. Ayer fui a un evento donde se reunían varias empresas, pero hoy vuelvo a la normalidad. ¿Y tú?
Suena de nuevo el whatsapp.
Mira el thread de Whatsapp.
- Oh, ayer estuve preguntadome por qué no estabas en el tren. -
[Por mi seguimos hablando, aunque charlamos de cosas triviales mientras pasa el rato.]
Para en la estación de Akito, y se suben él y Kyoya, como es habitual, de los primeros.
No le levanto pero los saludo con la mano.
"Con un poco de suerte seguirán a su rollo... " Pienso mientras les sonrío.
Akito no dice nada en todo el viaje. Kyoya te saluda con la mano y hablan entre ellos.
Al llegar al instituto, cada uno va por su lugar, y cómo no, vas al club de teatro.
- Buenos días Lylia. Oye, no quiero presionar, ¿pero cómo estarás estos días para venir a ensayar? Lo digo por los exámenes. Hay varios del club que ya han comentado que no se pasarán mucho hasta terminar las clases. ¿Y tú?
Directo al grano.
- Creo que estos días no podré venir mucho a ensayar. - Lo digo bajando la cabeza porque me entristece por bastantes razones.
- Si veo que todo va mejor de lo esperado me pasaré más, te avisaré en el momento en el cual vea que puedo escaparme un rato para ensayar. - Lo digo intentando arreglar el golpe que decirle que no en un principio.
Durante un instante, parece que Saburou se iba a enfadar hard. La máscara cabreada que flota alrededor de su cabeza está a punto de quedar enfrente, pero vuelve a esa posición la máscara feliz.
- Bueno... es comprensible. Muchos estáis así al fin y al cabo. Confiaba que tú no pero... al fin y al cabo eres una estudiante como el resto. De acuerdo Lylia, no hay ningún problema.
Puesto que la mayoría de gente estaba muy ocupada con exámenes, Saburou decide ir esa mañana a saco con las prácticas. Ensayáis todo el tiempo que podéis y Saburou hace lo posible por optimizar el tiempo disponible.
Para cuando llega la hora de empezar las clases, os dais cuenta de que ha sido muy productivo, pero estáis cansados.
La gente se despide hasta mañana, Sábado (que tendríais un rato de clase) y vais a vuestras respectivas clases.
El profe os recuerda todos los exámenes que tenéis para la semana que viene. Tenéis 4. Uno para cada día de la semana excepto el Martes. Iba a ser una semana dura.
Cuando las clases de ese día terminan (y han consistido en repasos de cara a los exámenes), Lylia sale de clase...
Cuando acaba el teatro voy a estudiar a casa. No estudio para nada bien allí pero le dije a madre que volvería temprano...
Erais poca gente en teatro, así que ha sido calmado y habéis podido perfilar muy bien vuestra actuación.
Os despedís, y Lylia va a la estación de tren.
El tren está bastante solo. De hecho, Lylia no ve a nadie en todo el vagón. Más tranquilidad.
Se pone los cascos y espera pacientemente.
[...]
https://www.youtube.com/watch?v=wVXNyqpZ4rM
Lylia espera a llegar a la siguiente estación. No recordaba el camino tan largo.
Un indicador del tren decía que aún estaban entre la estación del instituto y la siguiente. El túnel por el que pasaba el tren parecía interminable.
Uno.
Dos.
Tres.
Hasta siete minutos, y el tren no sale del túnel, y aún menos llegaba a la siguiente estación.
Entonces sonó la megafonía del tren:
"Próxima estación, #$j%!H4"
Un ruido muy raro e incluso espeluznante había sustituido al nombre de la estación, y el tren seguía sin salir del túnel. ¿Qué narices estaba pasando?