Partida Rol por web

En efecto, los trajes que os han dado no son más que un montón de chatarra que no es propia ni de la peor escoria de la galaxia. Seguís con la ruta marcada por vuestro "líder" y el calor va siendo cada vez más y más intenso, los trajes no protegen una mierda y sudáis a chorros- literalmente - pero así es la vida del recluta "pringao", el caso es que cuando creéis que váis a morir deshidratados por un equipo muy deficiente (o por el deseo del Imperio de ahorrarse unos créditos en los equipos de los reclutas), véis a lo lejos una construcción rectangular de dos alturas, cubierta por el polvo del desierto, rodeado por un muro en el que pueden verse dos grandes torretas a cada lado (cuatro en total) y una gran puerta. Tras unos eternos minutos llegáis a la puerta principal donde desde arriba de la muralla varios soldados os saludan con la mano.

Entráis en el patio de armas de la fortaleza, o bastión o como quiera llamarse, véis cómo hay apenas media docena de soldados subidos a la muralla, llegáis casi hasta el centro del patio y estáis aún desmontando, cuando frente a vosotros véis cómo un soldado corre por el patio arenoso proviniente del depósito de comida para Dewbacks, levanta los brazos y parece gritaros algo, pero entonces el suelo bajo sus pies se abre  y véis claramente un enorme gusano

Que emerge del suelo y se traga al soldado imperial entero. Vuestras monturas echan a correr hacia la salida espantadas por la horrible visión, el gusano desaparece y aparece a la altura de la salida del patio de armas (por donde habéis entrado), tragándose a dos de las monturas y lanzando por los aires al resto. Dos Debacks caen pesadamente frente a la puerta del complejo, bloqueando la salida.

el agua de mi cantimplora hacia ya rato que se había agotado, afortunadamente ya podiamos divisar el enclave al que teniamos que ir...

en cuanto llegamos al patio desmontamos como dicta el protocolo para dar el informe, bajo del Dewark con dificultad y apoyando me en Kain, veo de lejos como un soldado quiere decirnos algo pero esta demasiado lejos como para entenderle.

de pronto un gusano de las arenas emerge y se lo come, de inmediato desenfundo la pistola y trato de dispararle antes de que se sumerja otra vez en el suelo pero es demasiado tarde, al poco veo como los Dewarks mueren estupidamente en la entrada...

miro la pistola con asco "esto no vale para nada" y rebusco en mi mochila hasta coger los detonadores termales

-chicos....por lo que puedo ver, estas criaturas son ciegas y sordas, creo que se guian por el tacto y reaccionan al movimiento, si tratamos de correr nos comera uno a uno, deberiamos probar con los detonadores termales, si funciona me pagáis las copas cuando volvamos, pero no estoy seguro de que halla uno solo.

miro el detonador y espero la respuesta de mis camaradas 

Cuando entramos en el recinto a lo único que soy capaz de prestar atención es a la posible ubicación de la cantina. Maldita sea, ¿es que aquí no se come?.

Mientras ayudo a desmontr a Antilles no prsto atención al soldado ue agita los brazos, solo cuando el dewback se retuerce pra huir y me tira al suelo veo como ese bicho enorme se sumerge de nuevo en la arena. Es entonces cuando escucho las palabras del médico del grupo y aún en el suelo, agito levemente la cabeza de forma afirmativa mientras busco con la mirada la forma más fácil y rápida de llegar a tierra firme, ya sea corriéndo haic auna puerta o subiéndome a algo para llegar a una muralla, una escalera o lo que sea. No pienso quedarme demasiado tiempo en la arena

Despues de un buen rato cociendome dentro de la armadura, pensando en como serían nuestros cadáveres en la arena, la base aparece ante nuestros ojos y siento un gran alivio, al fin podriamos refrescarnos un poco después de tanto desierto.

Mientras desmontamos busco con la mirada donde estarán las duchas pero como no podría ser de otra manera en nuestro grupo marcado por la desgracia, un gigantesco gusano aparece de la arena dispuesto a devorarnos.

- Claro Armando, pero como vas a conseguir que salgan por donde quieras para darle con el detonador?

¡Dioses, qué muerte más horrible, ser digerido por un gusano!

—¡Busquemos un sitio elevado, deprisa!

Mientras me muevo (supongo que hacia los bordes del patio), hablo atropelladamente.

—Creo que Armando tiene razón en eso, uno de los detonadores puede hacer saltar por los aires al gusano. Pero supongo que estarán diseñadas para ser trampas fijas ¿no?, podemos instalar alguna en el patio, para cuando emerja la criatura.

Pienso un momento, sin dejar de mirar hacia el patio. Apenas vea un sitio para subirme, me pongo a trepar como un mono.

—¡También tenemos las granadas de impacto, esas no llevan temporizador y apenas se le cuelen por el gaznate al bicho explotarán en su interior!

Claro que la objeción de Jaral también es obvia.

—Supongo que habrá que estar preparado para lanzarlos y esperar que salga a la superficie. Yo desde luego no me pongo de cebo.

Dicho y hecho, apenas me acomode más o menos a salvo agarro una de las granadas y apunto hacia el patio de armas.

sin moverme, y mirando el suelo en busca de oscilaciones que me permitieran descubrir la posición del gusano mientras escuchaba a los miembros de mi equipo

-haber...no tengo ni idea de como funcionan los explosivos, pero yo pensaba en ponerle unos segundos al temporizador para que explotara digamos 5 o 10, después lanzarlo con fuerza como si se tratara de una piedra en el agua, con el objetivo de que no se quede parado y el gusano piense que se trata de un objetivo vivo en movimiento, entonces y solo si mi plan funciona, el gusano emergera y engullira el detonador termal, si funciona probaremos hasta que ningún gusano salga y entonces correremos a la desesperada para subir a algún punto en alto.....bueno también podemos enviar a nuestro queridisimo lider/jefe/oficial al mando, Moess a hacer la prueba y si aparece algo pues le cubrimos.

-otra opción podría  ser coger a alguien....digamos Moess, darle todos los explosivos y hacer que corra y cuando le coja el gusano accionamos el detonador, el gusano morira con garantias garantizadas y Moess quedara como un heroe ya que al ser de una pasta especial y nosotros aves de corral el viviría a la experiencia...al contrario que nosotros. termino con una sonrisa y un guiño a Moess

El espectáculo del gusano es... casi maravilloso. Esa fuerza de la naturaleza, ese poder... eso nos tiene que hacernos dar cuenta lo insignificantes que podemos llegar a ser.

El ruido de los difuntos me quita en mi ensimismamiento. Tengo que actuar si no quiero ser el próximo a ser engullido por esa enorme bestia.

- Muy gracioso, Antilles - digo al oír sus "propuestas" para acabar con el gusano. - Tenemos que organizarnos. Terion, tú y yo vamos a probar con las granadas de impacto, a ver si hacemos algo de daño a ese gusano... y no me refiero a Antilles. Por si eso no funciona, que Antilles preparo los detonadores termales.

Da un paso al frente –Por suerte este bicho nos ataca aquí y no en medio del desierto… A saber que nos pasaría, Armando entrégame los detonadores me ofrezco de carnada… - “Creo que el calor me afecta la cabeza” –Cuando volvamos quiero una cerveza bien fría de parte de cada uno-

Tomando los detonadores espero que me avisen cuando empezar a correr como un desaforado perseguido por el diablo, que tampoco distanciaba mucho de la realidad.

-que gilipollas gracioso Moess-por primera vez le sonrio sinceramente a ese patan...bueno aunque la gracia que me hacia era directamente proporcional a las ganas que tenia de estamparle el puño en la cara...bueno, mejor cuando volvamos con unas botellas de alcohol...

miro a Jahn extrañado, dudoso de que hubiera escuchado lo que segundos atras había tratado de explicar

-Jahn....si echas a correr el gusano te comera, la idea es lanzar  la granada como piedras a un estanque, que de "saltitos" cuantos mas mejor-después de explicarle lentamente el plan "otra vez" le paso el detonador no sin antes me de el la señal de que a entendido lo que le e dicho.

Mientras el grupo habla, el gusano emerge en tres partes diferentes muy cerca de ellos, luego una cuarta en la que rompe un trozo del muro superior. Entonces os dáis cuenta de que las granadas puede ser una muy buena opción, pero también véis justo en la esquina sudoeste del patio, bajo la muralla, a la sombra, un gran montón de chatarra que se parece a un AT-ST

Pero en pésimas condiciones, aunque claro, igual funcione y podáis darle matarile al horrible gusano...

Tenemos que actuar ya, este gusano es muy rápido y pronto acabará con nosotros.

Me fijo en el AT-ST, puede ser una buena oportunidad. Su potencia de fuego puede ayudarnos a combatir contra la criatura.
Corro hacia la máquina, me cuelo dentro y disparo.

-Disparad las granadas lejos del andador, tenemos que mantener ese trasto a salvo.

Veo como el tipejo de Moess corre a pilotar el AT-ST, si asi podía llamarsele, y decido cubrirlo porque parecia nuestra mejor opcion y yo no sabia como manejar esa porqueria.

Apunto a alguno de los agujeros por donde salia el gusano y lanzo la granada.

Estoy a punto de echar a correr hacia el AT-ST, pero Moess se me adelanta y me lo pienso mejor.

—¡Qué demonios, dónde esté una buena granada en el hocico, que se quite lo demás!

Estoy bien atento a la próxima aparición del monstruo, la granada parece que me quema en la mano, estoy ansioso por hacer diana en todo el morro del bicho. Por lo menos, hay que intentar mantener nuestra reputación de aspirantes a demoledores.

Moess corre todo lo rápido que puede hasta el vehículo, el gusano emerge a su izquierda pero el fuego de Jaral, Jahn y Terion hacen que el gusano tenga que volver al subsuelo por dos veces, dando tiempo a Moess para colarse por la escotilla superior del bípedo. Una vez dentro, enciende los controles y paneles de mando, el gusano emerge de nuevo...

Pedazos de tierra saltan por los aires. Me encanta esto de hacer explotar cosas, creo que he nacido para destruir.

—¡Venga, ahí va otra! ¡Yiiihaaaaaa!

Lanzo otra granada para atraer la atención del gusano y darle tiempo al AT-ST a apuntar y, de paso, con la esperanza de alcanzarle y hacerle estallar en pedazos.

Espero mientras los demás sigen disparando ahora que Moess está en el andador, yo ya gasté granadas antes y no quiero quedarme sin munición, preparo el rifle blaster por si acaso, pero sin mucha fe en que sea efectivo.

Mientras Jahn, Terion, Jaral y Kaín hacen fuego de cobertura a base de granadazos, una de ellas incluso impacta al gusano y le hace un buen agujero, pero que no le deja K.O. , Moess intenta activar el artilugio bípedo, no obstante sin éxito. Los controles están fundidos y la bestia permanece inmóvil, pero por suerte para todos las armas del AT-ST sí que funcionan. Moess apunta y dispara al gusano, haciéndole otra gran herida.

La enorme bestia ahora se sumerge bajo tierra y aparece en el centro del patio. Para que vuelva a estar a tiro del AT-ST, un valiente tiene que atraer su atención* y acercar a la bestia al montón de chatarra imperial par aque Moess lo tenga a tiro y pueda acabar de una vez por todas con él.