Partida Rol por web

Maldito bicho que no se muere nunca, nos terminara comiendo si Moess no logra darle un buen tiro... 

-Joder... Me odio... ¡Mas te vale que no falles gilipollas!- Preparo los detonadores termales para que exploten en caso de que el bicho me tragara y hecho a correr como si mi vida dependiera de ello, que por cierto, de eso dependia.

Lástima que el andador no funcione, pero al menos sus armas son operativas, y hacen mella en el gusano.

Espero que alguno de ellos logre llamar su atención y ponerlo a tiro de las armas del andador.

El mandaloriano era un héroe, un jodido héroe. Corrió delante del gusano que al notar la vibración o verle o como quiera que percibiera aquella criatura, se deslizó a una velocidad pasmosa, el mandaloriano corrió más despacio que un Hutt y el gusano le engulló,entre los detonadores que llevaba adosados al cuerpo y el certero disparo del AT-ST, el gusano reventó y cubrió todo el patio de armas de una sustancia gelatinosa naranja.

Habíais vencido a la bestia gracias al sacrificio del mandaloriano, vosotros le recordaríais pero para el Imperio sólo sería un número a tachar...

Ahora hay que pensar en cómo salir de allí...

Alucinante...

Salpicado de fluidos viscosos me aproximo hasta la puerta que de acceso al edificio principal más cercana, esto iba en serio, este entrenamiento no era duro, era mortal.

¡Eh! Habría que buscar a algún oficial o algo ¿No? Aquí tiene que haber alguien al mando...

El mandaloriano había muerto peleando, como se supone que les gusta, pero alguien como el hubiera dado mucho juego al imperio, sin duda una gran pérdida para el equipo.

Caramba con el mandaloriano. Ha hecho un buen sacrificio. Ahora que empezaba a caerme bien...

Los trajes de los cinco supervivientes han quedado muy maltrechos, los filtros parecen estar obstruidos y en alguno ya se va notando el calor, síntoma de que el traje no aguantará tampoco mucho más, así que lo primero es buscar trajes y supervivientes.

El complejo es apenas un barracón para una unidad de unos cuarenta o cincuenta soldados y otro edificio con soportes vitales, comedor y sala de instrucción. Encontráis trajes nuevos pero lamentablemente, sólo unos pocos cuerpos (cuatro) y ningún oficial. Lo cual bien podría ser por el gusano, no deja nada de sus víctimas sino que las devora enteras.

Respecto a la forma de salir de allí, por fortuna encontráis cuatro bonitos Speeder Bikes. Alguien tiene que comprobar que estén en buen estado...

Una vez llegamos a la sala de los Speed Bikers corro ilusionado com un niño

¡Ahora hablamos el mismo idioma! Mucho mejor que una de las monstruosas fábricas de producir mierda en las que hemos llegado.

Me pongo a urgar entre los vehículos

Esto no debe de ser más difícil que robar cualquier otro vehículo, ¡já!

Una sonrisa de satisfacción se planta en mi cara cuando escucho rugir el motor de uno de los vehículos tras manipular un poco la maquinaria

No puedo evitar sentir una punzada de dolor cuando Jahn es devorado por el gusano y posteriormente convertido en picadillo de bantha, ya que era con el que mejor me llevaba del grupo (por diferentes motivos) camino hacia el lugar de la explosión en busca de algún objeto para recordarle, bajo el casco derramo unas lagrimillas.

cuando encontramos los cuerpos los examino para deducir las causas de sus muertes, y busco algún datapad que me diga algo de como murieron o lo que hacian.

"si hubieran sido por el gusano no estarian presentes, o bien se suicidaron, se mataron entre ellos, o un agente externo."

después me paso por el taller y examino una moto sin tener ni idea de lo que hacia

Aunque parezca increíble, los soldados murieron de un infarto, se les paró el corazón, seguramente del susto al ver al gusano tan de cerca o de un shock muy fuerte. Habrá que dar parte de ello en la Academia a vuestro regreso. Claro que regresar no va a ser tan sencillo.

Armando concluye que los speeders no funcionan porque no las células de energía están agotadas, tenéis dos opciones: Buscar cédulas entre los restos del patio y el AT-ST o de la fuente principal del complejo.

- Buenos chicos, tenemos que poner en marcha estos speeders. Buscaré en el andador, a ver si encuentro algunas cédulas de energía que se puedan usar.

Doy cuatro pasos cuando me paro, giro y le hablo a Armando.

- Estoy orgulloso de tu amigo mandaloriano, se ha portado como un héroe. Espero que aprendas de él.

tras examinar el problema de los speeders, me apoyo sobre uno, me quito el casco con ambas manos con dificultad por la herida en el hombro y me meso el pelo, con gesto ausente cuando Moess empieza con su pique habitual en el cual no tenia ninguna intención de seguir

-si, así es....un heroe muerto, y con muertos el impero nunca ganara a sus enemigos....no necesitamos heroes sino soldados competentes y vivos.

me volví a poner el casco, no hacia falta, pero no quería mostrar su rostro ante los demás compañeros, no era el momento para ello y necesitaba ser "duro"

-chicos, si alguien tiene idea de controles y maquinas que se venga conmigo, me gustaría dar un repaso a los informes antes de cerrar el kiosco.

mientras caminaba hacia su destino no pudo evitar pensar en el mandaloriano 

¿porque hiciste eso? ¡te dije que lanzaras el jodido detonador, no que corrieras con el, ESTÚPIDO!

—Mierda, mierda...¡mierda!

Estoy conmocionado por la muerte de Jahn. Había sido muy valiente, pero también temerario como solo un mandaloriano puede serlo. ¿Por qué demonios no siguió las instrucciones? ¡Tenía que jugar al héroe!

—Un guerrero, eso es lo que era — digo de cara a todos, sin importarme que se me vea emocionado como una nena.

Después me dedico a buscar las dichosas células de energía, primero por el patio y luego acompaño a Antilles a echarle una mano. Por otra parte, sigo estando con la mosca tras la oreja.

—¿De verdad creéis que a un pelotón de soldados imperiales les ha dado un infarto en masa, por ver a un jodido gusano? Bueno, a mí casi sí que me lo da, pero es el primero que veo y casi me cago por los pantalones. Pero aun así hemos luchado...¿y estos, se limitan a morirse del susto? No me lo trago, aquí tiene que haber algo más.

En fin, me voy a ganar reputación de paranoico, pero igual que sucedía con los negocios de mi padre, en las misiones del imperio hay que desconfiar de todos los hechos. Esto es una pesadilla.

—Moess, tú por si acaso mantén la posición de artillero en el AT-ST, hasta que encontremos lo que buscamos y podamos marcharnos en estos cacharros. No está de más mantener la vigilancia.

Con desdén y frunciendo el ceño miro a Terion. ¿Ahora le da por darme órdenes?¿Pero no entiende que él es sería suboficial y no puede darme órdenes a mi?

Prefiero no discutir, medito sus anteriores palabras y tienen parte de razón. Es extraño la manera en que han muerto esos soldados.

Llego al andador y empiezo a buscar las células energéticas.

Yo al igual que el resto bsuco las células, pero aprovecho para bsucr cualqueir cosa de valor, quizás algúna rma exótica, dinero, o joyas, lo que vea que me pudiese interesar y sacar algún beneficio.

A los comentarios de mis compañeros sobre la reciente muerte no les presto mucha atención, esto es el ejecército, si no muriesen soldados no se molestarian en reclutar. Seguramente no sería el último en palmar...

- Voy a intentar averiguar algo de los ordenadores antes de que quiteis las células, quizás explique algo más.

Este sitio parece un cementerio de mal gusto, ojala no tardemos mucho en salir de aqui, o puede que tengamos más pérdidas.

con la compañia de Jaral y Terion me dirijo a las consolas, examino el lugar buscando algo que me dijera mas sobre las operaciones de esta mierda de lugar, busco la célula de energía y espero a que los demás hallan acabado para quitarla. luego me voy hacia las speeders y la dejo en manos de alguien mas competente para instalarla

Organizados en dos grupos la cosa va bastante más rápida que en un solo pelotón. En el AT-ST hay dos cédulas de energía, suficiente para dos speeders, el problema es que el más espabilado de vosotros se da cuenta de que sólo puede ir una persona por speeder. Éstos normalmente pueden llevar hasta a tres, pero con el calor tan intenso del desierto el motor se sobrecalentaría y dejaría a los infortunados a merced del sol y las bestias. Así que con dos cédulas sólo hay para dos speeders.

En el centro del complejo descubrís que se produjo un ataque desde el subsuelo, los gusanos aparecieron sin más. Los aparatos apenas pueden decir nada más salvo que la guarnición estaba comiendo, os dáis cuenta de que no estaban alerta y que la seguridad y el sentido común brillaban por su ausencia. Hacéis una copia de las grabaciones para adjuntar a vuestro informe y os encontráis con el dilema: Hay cuatro cédulas de energía, suficientes para los tres que no tienen aún speeder, el problema es que si se quita más de una cédula del centro del complejo, éste saltará por los aires en pocos días, si se quitan dos, será en pocas horas y si se quitan tres será en pocos minutos. El problema es que no conseguís cuantificar en cuántos minutos saltará el complejo por los aires. Hay que acercar los speeders al centro, quitar las cédulas corriendo y colocarlas lo más rápido posible para salir de allí zumbando antes de que reviente el asentamiento.

tras darme cuenta de las implicaciones de todo aquello miro a los demás preocupado

-esto es una locura chicos, si conseguimos salir de esta me parece que voy a hacerme un fanático de "la fuerza" bueno si algo falla...a estado bien servir con vosotros.

me preparo para la carrera, espero hasta que los demás confirmen su movimiento para dar el tirón, correr hacia las speeders y montar la célula para salir pitando.

- Antes de partir, cojamos todo el equipo que podamos, armas, comida, afuera puede que haya saqueadores o más gusanos.