Partida Rol por web

Intrigas en la Corte

Salón Principal

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02/11/2017, 17:04
Elizabeth

Le sonrío de forma cálida, siempre consigue lo que quiere, sabe que tengo debilidad por él, por algo es mi hermano pequeño.

- Como quieras, ¿cómo decirte que no?. Pues para no hacerte sufrir, empezaré hablando con las dos damas, si me disculpas querido hermano mío, en cuanto sepa algo te tocaré el hombro para que nos acompañes, lo que hagas con Lady Katherine ya, no será de mi incumbencia, pero a la pequeña Eleanor... aún es pronto para corromperla.

 

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02/11/2017, 17:05
Elizabeth

Todos pueden ver como dejo de hablar con mi querido hermano, me acerco entonces a mi dama de compañía Eleanor, para susurrarle al oído discretamente...

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02/11/2017, 17:06
Elizabeth

- Eleanor querida, requiero de tu compañía, este corsé me está impidiendo respirar, siento que me ahogo cada vez más, me gustaría que me ayudases a aflojarlo en mis aposentos si es posible, sino siento que voy a desfallecer en cualquier inoportuno momento. Ya sabéis como son las ropas de las damas, un absoluto incordio.

Espero su respuesta.

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02/11/2017, 20:03
Edmund

Si estuviera borracho bien poco caso le haría a vuestra sonrisa y más a...* con dos dedos cerró su boca antes de decir palabra y saludó a la criada que ya se despedía con la atención en otra parte, lejos del mozo de cuadras. A punto estuvo de advertirle de que aguardara, pues podía tomarse por ofensa dejar la mesa mientras el Rey todavía masticaba, pero pensó que seguramente ella tenía algunas prebendas que sus tareas le conferían, y de las que él no disfrutaba, y la dejó ir.

Ya todos en la fiesta cuchicheaban y murmuraban, y solo el bufón jugaba a lanzar y atrapar uvas con gran destreza, como solía. desde la distancia Edmund pudo reír sus cabriolas y le dedicó algunos aplausos, aunque la gente alrededor se centraba en vaciar sus vasos y platos. Los nobles comían menos y hablaban más. Y los jóvenes príncipes apenas probaban bocado y pronto buscaban las atenciones de sus sirvientes, que no tenían un instante para echar un tiento a sus copas.

En eso estaba el mozo cuando cogiendo una gran fuente de higos escogió uno bien maduro y abriéndolo de pleno, lo devoró con ahínco, manchando sus dedos de aquella pulpa rosada y pegajosa. El Rey, empero, requería a su guardia en un aparte, y Edmund temió por la suerte del cocinero, pues pareciera que la manduca le estaba cayendo torcida al monarca, y alguien podía pagarlo en breves.

Se acodó en la mesa decidido a disfrutar del final de la velada antes de volver a sus quehaceres, y ni aun terciando su vaso de un trago logró desprender de su boca el dulce sabor del higo, así que tomó otro y se dispuso a comerlo.

Notas de juego

En cursiva los pensamientos.

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02/11/2017, 23:38
Príncipe Dionysos

El príncipe, como casi todos, aún seguía comiendo, así que entablaba conversación con sus compañeros de mesa más cercanos.

Antes la princesa, ahora con el bufón a juzgar por cómo se inclinaba hacia el lado en que este estaba y cómo reaccionaba Enzo.

Bajo el barullo general, la conversación quedó en privado.

Quiso la fortuna que Lady Katherine eligiese el mismo conversador simultáneamente, por lo que su conversación se volvió a tres.

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02/11/2017, 23:42
Lady Katherine

Mientras disfruto de la excelente cena voy observando como se van fraguando las conversaciones. Las primeras como es lógico entre los individuos más cercanos. Pequeños cuchicheos entre los criados, entre los hermanos, entre los monarcas...
La princesa comienza una conversación privada connsu dama de compañía. Y yo la verdad aún no tengo la suficiente confianza como para incluirme.
Miro al bufón. El tiene un deber por encima de disfrutar de la cena. Me dirjo a él.
Aunque no puedo negar que la cena me produzca una gran satisfacción, estoy convencida que vos en vuestra calidad de bufón conoceréis algún entretenimiento que nos ayude a amenizar la velada.

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02/11/2017, 23:47
Príncipe Dionysos

Querido Enzo, ¿qué nos tendrás preparado para esta velada? Mucho me temo que como nuestro querido mozo de cuadras siga así, haciéndome la competencia, voy a tener que buscarme otras distracciones más terrenales que las habituales.

En ese caso, aquello que nos tengas preparado podrá ser un soplo de aire fresco que me impida sucumbir al letargo de una noche en sociedad entre los nobles de palacio.

Sus palabras casi coinciden en tiempo y sentido con las de la joven y bella dama, y el príncipe no duda en incluirla en la conversación.

Oh, pero discúlpeme Lady Katherine, ¿no es ese su nombre? Parece que hemos tenido el mismo pensamiento simultáneamente*.

El príncipe le dedica una sonrisa amistosa.

Este tipo de situaciones demuestran que tan sólo somos peones en el juego al que juegan los dioses.

Notas de juego

*nos hemos pisado

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02/11/2017, 23:58
Enzo

Enzo parecía estar emocionado como un chiquillo el día de su cumpleaños.

 -Qué no os tendré preparado para esta velada, alteza. Ya me conocéis, soy un hombre que adora su trabajo y los disfruta como el pintor disfruta plasmando lo que ve en sus lienzos.

El bufón bebió un poco de vino y arrugó el gesto nada más hacerlo. ¿Por qué la gente diría que el vino tenía gusto afrutado o un delicioso aroma a semillas cuando sólo sabía a alcohol o a agrio? Apartó la copa y volvió a centrar su atención en el Príncipe y Lady Katherine.

 -No obstante, debo admitir que las sugerencias son siempre bienvenidas. ¿Hay alguna historia que os apetezca oír? ¿Alguna canción con la que queráis bailar? ¿O tal vez un truco de magia que deseéis presenciar?

Y tras decir esto, pasó la mano cerca del rostro de Katherine y, sin rozarla, fingió que sacaba algo de detrás de su oreja. Sonrió mientras ofrecía a la doncella una pequeña violeta.

 -Enzo es vuestro humilde servidor para ahuyentar el aburrimiento.

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03/11/2017, 00:10
Príncipe Dionysos

Ahora que lo decís, me encantaría escuchar alguna nueva historia, quizás una de intriga, como la del Maestre y la Doncella, o tal vez una historia menos novedosa, más liviana y pícara como la del mozo de cuadras que adoraba montar. - Dice con la naturalidad del cordero entre lobos sin perder su sonrisa afable.

Milady, ¿qué historia os gustaría oir a vos?

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03/11/2017, 00:36
Lady Katherine

Mis mejillas se encienden al escuchar las palabras del príncipe hacia mi persona.
A mi? Bueno me temo que mi condición de mujer me condena a una debilidad por las historias de amor milord. Pero es un poco pronto aún para escuchar una tragedia. Pues todos sabemos como terminan las mejores historias entre amantes... me muerdo el labio inferior, como siempre he realizado un comentario osado y poco apropiado. Todos sabemos como terminan los amantes... Muertos.

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03/11/2017, 00:55
Enzo

El bufón empezó a reírse y se vio obligado a taparse la boca con la mano para no empezar a carcajearse en voz alta. Por suerte supo controlarse y mantener el tono bajo.

 -Alteza, siempre sabéis lo que decir para arrancarle una sonrisa al bueno de Enzo. Justo es que os pague con la misma moneda, pero… -se mordió el labio inferior para evitar empezar a reírse de nuevo- Me temo que las historias que me pedís no son del todo adecuadas para esta celebración. Aparte que la reina de seguro daría la orden de emascularme si me pusiera a contar historias subidas de tono en mitad del banquete.

Dicho esto, volvió a mirar a Lady Katherine.

 -Lo que nos deja las historias románticas. ¿Hay alguna que queráis oír en particular? ¿O dejaréis esa elección en mi mano, milady?

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03/11/2017, 01:00
Lady Katherine

Emasculado por la reina? Niego con la cabeza pues lo más probable sea que se trate de una ironía. Qué inocente eres Kathy. No obstante soy inocente y curiosa.
Mi señor. La reina no osaría hacer semejante atrocidad, no es así?
Y sin embargo estoy a la expectativa, me encanta escuchar una buena historia y no dudo de las habilidades del cuentacuentos. Creo que el vino me está haciendo efecto pues no consigo retener mi lengua.
Deseo... La historia de un amor prohibido. La historia de dos amantes... Qué emocionante.

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03/11/2017, 03:11
Ivan O´Conell

jajajja, padre tiene un dicho para eso : " Los mejores tratos se dan donde nadie los esta llamando"- a la vez que levanto la copa y agito levemente en signo de brindis.

- pues si, como usted dice señor, aquí estoy un poco perdido, no estoy ni siquiera representado a la guild de comercio, así que mis apuestas están 10 a 1, pero dígame señor, que seria el hombre sin las apuestas y el riesgo ?- mientras le sonrío a mi vecino de asiento- y usted señor, debe tener una historia tan interesante como la mía, aun cuando tiene los aires y ropajes de un noble echo y derecho, sin ofender, ahí algo en su mirada y en sus gustos que me recuerda a mis queridos paisanos del reino- mientras suelto otra carcajada leve y le acerco la bandeja cercana llena de carnes y fiambres que el resto de invitados estaba ignorando - ahí que aprovechar mientras están aun caliente, después de todo este día se ve para largo y consumir algo en mal estado podría provocarnos mas de algún inconveniente.

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03/11/2017, 06:01
Príncipe Dionysos

El príncipe sonríe satisfecho con la conversación.

No sufráis, milady. La Reina no haría eso. - Más bien le pediría a su señor marido que lo ordenase sin que se percibiese su mano en ello - piensa para sí. - No. La Reina es dulce y comedida. - Tranquiliza a la joven.

Y vos, mi querido Enzo, no sufráis tampoco. En el peor de los casos, no dejaríamos que nada os sucediese.

En cuanto a la temática añade.

Nada de intriga, pues. La dama os ha hecho una petición, Enzo: Una historia de amor cortés. Un amor prohíbido. Es una suerte que estas sean tu especialidad, ¿no es así?- El príncipe bromeaba con una sonrisa cálida. Quizás sorprendiera la camaradería con el bufón, pero para ellos era la normalidad.

La mejor elección posible, milady. El amor es la savia que mantiene vivo el árbol milenario de la humanidad y la raíz que lo conecta con el mundo y su alimento.
Y, de entre todos los amores, los prohibidos tienen la virtud de ser magia además de relato.

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03/11/2017, 10:43
Eleanor

Eleanor había estado distraída, apenas había probado bocado. La sala se iba animando, ya había algunas personas que se habían levantado de su sitio. La joven dirigió una mirada de soslayo a la mesa presidencial. Al parecer, Enzo había conseguido que el príncipe y una dama bastante bonita le rieran las gracias. Puso los ojos en blanco; no sentía mucha simpatía por el bufón. 

La voz de la princesa sonó suave en su oído. Asintió a sus palabras y se apresuró a ponerse en pie. Con delicadeza, se cogió del brazo de la monarca y se acercó a ella para susurrarle de la misma manera. 

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03/11/2017, 10:47
Eleanor

-Alteza, ¿volveremos a la cena en breves? Estoy segura de que a vuestro regio padre no le gustaría que os ausentarais durante mucho tiempo. -Eleanor sospechaba que la princesa no solo quería ayuda con el corsé. Quizá la muchacha quería hablar de algo que la inquietara.

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03/11/2017, 12:12
Elizabeth

- Gracias querida, ahora acerquémonos a mi hermano y con los que habla, él también quería acompañarnos.

Me cojo de tu brazo arrastrándote hacia ellos...

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03/11/2017, 12:13
Elizabeth

Me pongo en pie cogida del brazo de Eleanor y me acerco a mi hermano y con quienes está entablando conversación para unirme a ellos, tengo unas preguntas que hacerles, bajo la voz para que solo el grupo me pueda oir.
 

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03/11/2017, 12:14
Elizabeth

- Querido hermano, como ves Eleanor está más que dispuesta a ayudarme con mi ejem... pequeño problema, al final ¿nos acompañarás? junto quizás, con Lady Katherine ¿también?. Enzo, mi estimado amigo, no es por dejaros atrás pero seguro que os aburririáis con mis problemas, para cuando os queráis dar cuenta estaremos de vuelta en esta magnífica celebración.

Les dedico una sonrisa a todos.

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03/11/2017, 13:12
Príncipe Dionysos

El príncipe asiente con la cabeza.

¡Sea pues! Debo pasar por mis aposentos y no hay mejor momento para ausentarse del banquete que en tan bella compañía. Además, de seguro mi querida hermana ha solicitado permiso a nuestro padre para ausentarse a resolver su ejem... situación, por lo que esta será casi la única oportunidad de la que gozaremos en lo que dure la cena de respirar un aire menos viciado. - Nada en su tono indicaba algo que no fuese afirmación, pero a su hermana no se le pasaría desapercibido el significado. Probablemente a nadie se le escapase.

Me pongo en pie junto a mi hermana.

Por favor Lady Katherine, aceptad la invitación de mi hermana. Me parece una gran oportunidad para que os enseñe el palacio. Yo, os acompañaré gustoso, al menos mientras nuestros pasos avancen en la misma dirección. - Acompañó sus palabras, que navegaban entre la invitación y la recomendación, de su siempre perenne y acogedora sonrisa y de una mano tendida para ayudar a la dama a levantarse.

Enzo, id preparando ese famoso relato. No queremos que nuestra querida invitada se sienta defraudada.