Partida Rol por web

Sin dudarlo estreche manos con él.

- Genial, poco a poco vamos captando mucha gente y clubes a pesar de que hoy mismo se ha propuesto el viaje. Helga Achenbach y su club también están metidos , por supuesto siendo yo el principal organizador no nos podemos olvidar del de baloncesto -cuando expuso su idea sobre aprovechar esa rivalidad a mi favor se me ilumino la cara- Me gusta como piensas veré si puedo conseguirlo. Y si, si puedes conseguir que salga en los periódicos sería fantástico. En caso de que necesite información Helga o yo podremos responderlas perfectamente. Creo que con eso ya esta todo lo que quería hablar contigo, ha sido un placer te dejo terminar con lo tuyo. Si necesitas cualquier cosa de mi se la puedes decir a alguien del club de baloncesto o a Tachibana-san, el profesor de gimnasia

Y con esa despedida deje a Joel con sus cosas viendo como Tsuyoshi parecía estar mirando en mi dirección como si me esperara.

- Ey ¿que pasa Yoshi? ¿Has terminado ya?

Miré a Taka y esperé que se dirigiera a mí para responderle.- ¡Hey! ¿Qué pasa Taka? Al final me apunto a la excursión, voy a hacer un esfuerzo por superar mis traumas pasados.- Dije con la mirada perdida pero contento de haber tomado una buena decisión.

En cuanto Tsuyoshi me confirmo que iría al viaje mi cara se alegro de inmediato y le pase el brazo por el hombro sin perder ni un segundo.

- Eso es genial ¿que ha pasado? ¿Helga consiguió convencerte? Porque entonces le debo una. Si necesitar cualquier cosa sabes que puedes contar conmigo para eso están los amigos ¿no? -y le arrastré un poco hacía mi sin dejar de sonreír 

Recibí con agrado el apretón y se lo devolví al mismo tiempo que decía.- Ah, pensaba que era idea suya el convencerme, pero ya veo que estabas detrás de todo... como un cerebro malvado.- Me reí y le di un golpe en la espalda con la mano abierta en señal de colegueo.- Digamos que sus palabras me han encandilado, y es hora de enfrentar los miedos, no podemos vivir con ellos siempre. Si la relación fracasa al menos habrá sido intentándolo.

Hice aspavientos con las manos para quitarle importancia al asunto, no es como si realmente hubiera sido cosa mía.

- Lo importante es que vas a ir y me encanta hoy que vas a enfrentar tus miedo, en serio si sigues así el resto del año estoy seguro que no te vas a arrepentir... Pero si vas a ir, también significa que nos vas a ayudar con la organización ¿verdad? -y directamente cayó en mi perfectamente ejecutada trampa, bueno, vale, no, lo acabo de pensar ahora mismo pero ha quedado perfecto igualmente- Todos tenemos que colaborar para que salga adelante y seguro que Helga no espera menos de su queridisimo novio.

Hubo una palabra que resonó en mi mente "Organización". No me gustaba organizar cosas porque se me daba fatal, pero había que ayudar a Taka y Helga.- Claro... cuenta conmigo.- Dije rascándome la cabeza y sonriendo.- ¿Qué hay que hacer?.- Esperaba que la organización al menos fuera sencilla.

Me cruce de brazos, ladeé un poco la cabeza y puse un dedo en mi mentón como si estuviera pensando muy bien cada cosa que debías llevar a cabo para poder asegurar el viaje.

- De momento habíamos pensando en ir reclutando gente que pudiera aportar algo al viaje, por ejemplo he convencido a varios chicos populares entre las chicas para que usen su popularidad a favor del viaje y se apunte mas gente, el club de cocina nos echara una mano con el coste económico y en general ese tipo de cosas. El objetivo principal es conseguir que el máximo número de personas vayan al viaje y tuve un plan perfecto, escucha, escucha... - acerque un poco mas la cabeza y mire a todos lados como si fuera a decirle un secreto de estado- ...si conseguimos que muchos chicos populares vengan, vendrán las chicas y si la mayoría de las chicas del instituto vienen sin duda los demás chicos las seguirán. Es un plan perfecto sin fisura alguna y lo sé, lo sé... es sorprendente hasta donde puede llegar mi intelecto a veces -dije de la forma mas burlona y exagerada posible

Tsuyoshi estaba viendo que su compañero se estaba tomando la organización demasiado en serio, pues si salía bien tampoco iba a ganar nada, y si no se apuntaba nadie tampoco. Imaginaba que era cuestión de orgullo, de que la gente hablara bien o mal de él como organizador de eventos para el colegio.- Se te ve muy ilusionado con la organización del viaje, así que haré todo lo posible por enganchar a gente influyente que atraiga a más gente.- Aunque no sabía cómo iba a hacerlo, Tsuyoshi se rascaba la cabeza en busca de una iluminación divina o algo parecido

Tan solo la idea de llevar a todo el mundo de vacaciones a un lugar paradisíaco me encantaba, además de que sería el lugar perfecto para una cita doble, por lo que en cuanto Tsuyoshi menciono el hecho de que se me veía emocionado no dude en asentir de inmediato lleno de energía.

- Tan bien puedes echar una mano en las actividades como tal, organizar algún tipo de venta para costearnos el viaje, si no se te ocurre nada pregunta a Helga seguro que algo se le ocurre. Yo me puedo encargar sin problemas de convertir el viaje en algo realmente popular que capte la atención de todo el instituto así que solo quedaría el tema del dinero... -ahora si que empezaba a hablar mas serio y si que sonaba como alguien a cargo de un evento escolar casi en su totalidad- y una última cosa... aunque supongo que yo lo veré antes... Si ves a Demian dile que tengo le estoy buscando, ya sabes el chico que esta en el club de baloncesto conmigo el que siempre te digo que come demasiado azúcar y que "asalto" el puesto de pasteles en el festival escolar del año pasado.

Era habitual que cuanto mas se acercaban las competiciones del club mas hablara sobre los entrenamientos, los problemas de cada miembro del equipo y cualquier cosa que tuviera un mínimo que ver con el club pero sin lugar a dudas el año pasado el incidente fue memorable durante varios días y motivo de risas durante todo ese tiempo, incluidos el propio Demian y yo.

Mientras charlabais entretenidamente sobre un asunto tan importante como era el viaje de fin de curso, no os disteis cuenta de que el tiempo volaba. El timbre sonó, anunciando que las clases se retomarían en unos pocos minutos. ¡Menos mal que ibais juntos a clase!

A paso rápido, llegasteis justo a tiempo de sentaros en vuestros pupitres antes de que el timbre sonara, anunciando el inicio de las clases de la tarde. Después de eso ya sólo quedaría ayudar a limpiar con el resto de alumnos, pasaros por el club y luego ya ir a casa.