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SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

ALGO MÁS DE MEDIA TARDE.  - CIELO GRIS.

El Herrero respondió a Analista con una reverencia y una inclinación de cabeza que no parecían del todo sinceras.

Analista y Fringilda salieron de la Herrería y la esposa del Alcalde siguió al oficial de la Compañía Negra hasta la salida del pueblo. Pareció pensar un poco antes de suspirar y explicar:

- "El mayor entró en la guardia ciudadana de Ridwan. No escribe mucho, pero por lo que sabemos está bien. Incluso es posible que se case pronto.

El segundo intentó entrar en la Guardia Diamantina, pero no soportó la Ordalía del Lamento.

El tercero es Inquisidor en Ridwan, aunque ha roto con sus lazos familiares." -

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

ALGO MÁS DE MEDIA TARDE.  - CIELO GRIS.

Escuchó en silencio el pequeño drama familiar. Entendía el posible dolor de la madre si bien, como miembro de una compañía mercenaria, sabía que la mayoría de sus integrantes habían dejado atrás familia, amigos y un pasado que no deseaban recuperar. Y no conocía a uno solo que mantuviera contacto con su familia, siquiera de forma esporádica. No obstante, la suya era una vida peculiar. La de aquella mujer era la de una persona inmersa en una sociedad cuyo culto religioso era demasiado pesado como para sobrellevarlo con entereza. Dos hijos fallecidos, otro que había roto sus lazos familiares y un cuarto que si bien se casaría y tendría hijos, estos no sabrían quiénes eran sus abuelos. De hecho, el alcalde y su mujer parecían absolutamente seguros de su futuro tan solo por haberles ofrecido un saco de harina.

Su paseo les condujo a la puerta de salida, desde donde podría ser visto por sus compañeros de partida.

-Mi Señora Fringilda, entre vos y yo, de forma privada. ¿Hay algo que pueda hacer por vos?

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

ALGO MÁS DE MEDIA TARDE.  - CIELO GRIS.

La mujer se queda en silencio unos segundos, mientras camina junto a Analista hacia la entrada del pueblo. Su expresión se vuelve entonces dura y fría como el hielo.

- "En la aldea hay división de opiniones.

Pauvet el Curtidor quiere a los "Capas Rojas" ahorcados, y posiblemente destripados, en la plaza del pueblo.

Algunas mujeres del pueblo, las que hubieran querido que Verdín los acogiera hace diez años, cuando eran unos niños huérfanos, pedirán clemencia. Que simplemente sean expulsados y no vuelvan nunca.

Y luego está Laura, la chica violada, que sufre un trauma que, sospecho, pueda ir más allá de la violación. Creo que hay algo más, y sospecho que puede tener que ver con la Cábala de Brujas que se dice habitan en el bosque. Los recaudadores de impuestos dicen que son Brujas Desnianas, pero yo no estoy tan segura.

En cualquier caso, dudo que expulsar a esos jóvenes sea la solución. Han violado, han matado, y puede que se hayan entregado a cosas incluso peores. Creo que cualquier otro destino que les aguarde en el futuro en Nidal es mucho peor, y que posiblemente lo mejor que podáis darles sea una muerte limpia y rápida." -

La expresión de la mujer se endurece todavía más, antes de añadir.

- "Y si las brujas del bosque han tenido algo que ver en lo que le ha pasado a Laura, quizás separarlas de sus cabezas y quemarlas por separado de sus cuerpos en piras separadas sea lo más parecido a la justicia que pudiera ocurrir." -

La mujer se detiene ante las puertas abiertas de la aldea y vuelve a mostrar una expresión más dulce. Con una sonrisa triste se despide de Analista:

- "Bienvenidos a Verdín, bienvenidos a Nidal." -

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

ALGO MÁS DE MEDIA TARDE.  - CIELO GRIS.

Lengua Negra había perdido a su madre hacía seis años como consecuencia de una extraña enfermedad de la sangre y aún conservaba viva y nítida la imagen de su rostro. Más allá de lo que la Sargento Blanca representara para al Compañía había sido su madre. Sin embargo, no conservaba recuerdo alguno de sus abuelas. La vida en la Duodécima tendía a ser corta y privilegios como la longevidad les parecía estar vetados, con lo que ello implicaba de cara a los lazos familiares.

Pero no le costaba poner el rostro de Fringilda en el cuerpo de una de aquellas muejres de haber llegado hasta sus días. Incluso su mirada dura y fría en rápida sucesión a una expresión de dulzura.

-Gracias por vuestra bienvenida y por vuestra ayuda. Tendré en cuenta vuestras palabras. Procuraré que los Capas Rojas hallen un fin... digno, más que el que pudieran merecer por sus actos. Y tratré de conseguir información acerca de esas brujas -prometió-. Mi señora, ¿creéis que esa muchacha, la tal Laura, hablaría conmigo? Si os parece bien, mañana iré en vuestra busca y tal vez podáis ayudarme con esa joven. Y una cosa más que, quizá, os parezca absurda. ¿Qué opinión os merece el herrero?

No iba a robarle más tiempo. En cuanto respondiera, saldría a campo abierto e iría donde sus compañeros.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

ALGO MÁS DE MEDIA TARDE.  - CIELO GRIS.

- "Laura necesita más tiempo. Si intentáis hablarle huirá aterrada o se retraerá en sí misma." - Suspira con resignación. Después sonríe ante la pregunta sobre el Herrero.

- "¿El herrero? Gorkus Maderson es un hombre simple, pero bueno. Si creyera por un segundo que vos tramáis algo malo contra el pueblo de Verdín sin duda trataría de abriros la cabeza con su martillo de forja. Y sin duda, también, acabaría muerto pocos segundos después, pues es un artesano y no un guerrero." -

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

ALGO MÁS DE MEDIA TARDE.  - CIELO GRIS.

-Os haré caso y gracias por todo, una vez más -dijo tras haber sonreído por su breve pero explícita descripción del herrero-. De todos modos, me gustaría visitaros mañana. Al menos si estáis disponible. Esta noche haremos noche en las ruinas de esa granja y mañana a primera hora nos desplazaremos a las tierras del norte, las del pozo. Buenas tardes, mi Señora Fringilda.

Tras su despedida, se encaminó hacia el lugar en el que había dejado a Barril y los suyos.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

FALTA MENOS DE UNA HORA PARA EL OCASO.  - CIELO GRIS.

TRANSCURREN TRES DÍAS.

SÉPTIMO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: CALISTRIL (MITAD DEL INVIERNO, MES DOS).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - TIEMPO: LLOVIZNA LIGERA. DÍA BASTANTE FRESCO.

DÉCIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: CALISTRIL (MITAD DEL INVIERNO, MES DOS).

DÍA: 16, DÍA DE LA LUNA.

HORA: POCO DESPUÉS MEDIODÍA. - CLIMA: SOL DE INVIERNO. NUBES DISPERSAS.

Pasaba muy poco del mediodía cuando el Capitán llegó al pueblo de Verdín escoltado por Campaña, que parecía un tanto debilitado por su reciente enfermedad, y Palomita, que se encontraba ilesa y apretaba los dientes, predispuesta a cumplir con su deber, fuera éste el que fuera.

En el pueblo vieron al Alcalde, a Giraud y a otras personas del pueblo atendiendo en la plaza del pueblo con especial mimo y esmero a los tres caballos de los nobles. Resultaba evidente que los nidaleses amaban a esos nobles animales, quizás incluso más de lo que temían y respetaban a sus nobles amos.

El Alcalde parecía triste y compungido, cuando señaló al Capitán la puerta de su propia casa, dando a entender que los nobles nidaleses esperaban dentro.

DÉCIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: CALISTRIL (MITAD DEL INVIERNO, MES DOS).

DÍA: 16, DÍA DE LA LUNA.

HORA: POCO DESPUÉS MEDIODÍA. - CLIMA: SOL DE INVIERNO. NUBES DISPERSAS.

Campaña avanzaba a un lado de Capitán, marcando el paso con el suyo. Iba con Svraisse en la mano, vertical, llevándola igualmente al compás. Cuando escuchó que le elegía para acompañarle, junto con la experta Palomita, instintivamente se había erguido, cuadrando los hombros. Era un gran honor sin duda, y una enorme responsabilidad. La espontanea fiereza y el impulso de protección hacia la Compañía Negra se había multiplicado, exacerbándose en esa situación. Campaña era un ser concentrado en una cosa: proteger.

Miraba regularmente a los lados por las aberturas de su casco, mirando con fuego a cada cosa que se movía.

Si había quien quisiera atacarles, se las verían frente al gran Campaña.

EL pueblo estaba lleno de gente deambulando en sus rutinas, una vida normal. Hacía tiempo que no presenciaba algo tan sencillo, y a la vez tan importante como eso. Le sorprendió estar pensándolo. Casas con camas. Ayyyy, bueno sólo había que apretar los dientes un poco más, y cumplir con la misión.

Dentro de aquella casa estarían aquellos señores, los nobles nidaleses. Se preguntó si de aquí a un rato habría cortado algún trozo, o no. Sentía cierta curiosidad, nada más. Por supuesto que sentía el debido respeto a la situación. Lucha o no, y quizá la lucha sería la opción más sencilla, no sería nada fácil. Su instinto le decía que por muy relamidos que hablaran, eran también expertos guerreros.

Muy pronto lo verían.

Miró brevemente a su prima Palomita, a ver cómo se sentía, sin atreverse a decir nada en aquel momento. Le hubiera gustado decirle algo, animarla. Ahora no osó hacer ni un gesto.

Capitán iba hacia delante, callado, y contaba con ellos. No le defraudarían.

DÉCIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: CALISTRIL (MITAD DEL INVIERNO, MES DOS).

DÍA: 16, DÍA DE LA LUNA.

HORA: POCO DESPUÉS MEDIODÍA. - CLIMA: SOL DE INVIERNO. NUBES DISPERSAS.

Palomita tan sólo iba dos pasos detrás de Capitan, casi al lado de Campaña. Sus armas estan en su sitio, pero ella estaba presta para desenvainarlas en cuanto fuera preciso. La primera reacción de ellos habia sido atacar a la compañia y no pensaba permitir que ni Capitan, ni Campaña, ni ninguno de sus compañeros que quedaban atrás fueran de nuevo atacados si ella podia remediarlo.

La tensión marcaba los músculos de la mandíbula, prietos los dientes y la mano derecha, abria y cerraba los dedos levemente, haciendo que entraran en calor mientras mantenia la cabeza recta, mirando hacia adelante pero tratando de percibir cualquier tipo de movimiento a su alrededor.

Agachó levemente la cabeza, en señal de agradecimiento, al gesto del alcalde de Verdín, y con sus ojos trató de transmitir un mensaje de tranquilidad, tranquilidad que se mantendrá si los hombres de dentro de la casa no cometian una estupidez.

DÉCIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: CALISTRIL (MITAD DEL INVIERNO, MES DOS).

DÍA: 16, DÍA DE LA LUNA.

HORA: POCO DESPUÉS MEDIODÍA. - CLIMA: SOL DE INVIERNO. NUBES DISPERSAS.

Capitán marchaba sin ninguna prisa, aunque procurando mantener el aire marcial que se supone que la Duodécima debería tener, a pesar de lo ocurrido y del ejemplo que se "esforzaban" en dar continuamente a los habitantes de Verdín y todo aquel con el que se cruzaban.

-Nadie va a hacer ningún movimiento hostil sin que ellos ataquen primero. No respondáis a provocaciones, no vamos a dar más excusas para el desastre-dijo en voz baja a sus compañeros antes de llegar, procurando ser contundente en su tono. Bastante se había hecho ya, y bastante complicada era su situación. 

-Alcalde, gracias por sus palabras-dijo al hombre al llegar a su altura, pues puede que gracias a él tuvieran un futuro. Tras eso, entró en la casa. 

DÉCIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: CALISTRIL (MITAD DEL INVIERNO, MES DOS).

DÍA: 16, DÍA DE LA LUNA.

HORA: POCO DESPUÉS MEDIODÍA. - CLIMA: SOL DE INVIERNO. NUBES DISPERSAS.

Extrañamente, el Alcalde permanece fuera de su propia casa, aunque su esposa está dentro, sirviendo vino a los invitados.

El noble y sus dos caballeros de escolta están sentados a la mesa del comedor, del lado opuesto al de la puerta, de modo que ven perfectamente quién entra en la casa. Los tres permanecen en silencio, sin yelmo, observando a los tres miembros de la Compañía Negra recién llegados con severo interés.

Fringilda sirve a todos los presentes una copa de vino y un poco de pan y de sal.

DÉCIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: CALISTRIL (MITAD DEL INVIERNO, MES DOS).

DÍA: 16, DÍA DE LA LUNA.

HORA: POCO DESPUÉS MEDIODÍA. - CLIMA: SOL DE INVIERNO. NUBES DISPERSAS.

La mujer entró y esperó tan solo unos segundos hasta que sus ojos se acostumbraron a la iluminación interior, aprovechando para respirar un par de veces calmadamente.

Retiró su casco, llevarlo puesto ahora mismo sólo podía significar una clara intención de estar preparada para el combate y, de momento, lo que primaba era la conversacion, aunque lo mantuvo bajo su brazo izquierdo.

Su rostro femenino podría dar que hablar, no sabía cuán común era encontrarse mujeres en las milicias locales pero quizá en aquella oscuridad, podían tomarla por un jovencito sin más, sería problema de ellos menospreciarla.

Observó sin embargo a los guardianes que había elegido ese hombre como su escolta, tratando de hacerse una idea de cómo eran, su estilo de lucha fijándose en sus armaduras y sus armas y la disposición que tenían, si estaban con los brazos cruzados en postura defensiva o erguidos, con los hombros estirados, con altanería. El lenguaje corporal podía decir mucho a un soldado

DÉCIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: CALISTRIL (MITAD DEL INVIERNO, MES DOS).

DÍA: 16, DÍA DE LA LUNA.

HORA: POCO DESPUÉS MEDIODÍA. - CLIMA: SOL DE INVIERNO. NUBES DISPERSAS.

Los dos Caballeros de la escolta observan apreciativamente a Campaña, Palomita, y al propio Capitán. Palomita es una mujer, pero su magnífica armadura y su expresión seria y serena transmiten una enorme seguridad en sí misma. El físico de Campaña habla por sí mismo, está agotado y casi al límite de sus fuerzas, pero eso ellos no lo saben, e incluso en ese disminuido estado ha sido capaz de partir a un miliciano por la mitad como si estuviera hecho de manteca fundida.

Después los Caballeros miran al severo Capitán, sus aceros, su extraordinaria armadura de cuero tachonado. Las preciosas capas negras de los tres, que ondean de manera elegante ante cualquiera de sus movimientos y parecen absorber la luz circundante, evidenciando así sútilmente su naturaleza mágica. Finalmente asienten con respeto, sabiendo que están en presencia de auténticos guerreros.

DÉCIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: CALISTRIL (MITAD DEL INVIERNO, MES DOS).

DÍA: 16, DÍA DE LA LUNA.

HORA: POCO DESPUÉS MEDIODÍA. - CLIMA: SOL DE INVIERNO. NUBES DISPERSAS.

De momento, no había bravatas por parte de aquellos tipos, ni insultos, lo que quizás auguraba una negociación menos hostil de lo que había estado dispuesto a apostar. Comida, en forma de pan y sal, y algo de vino... ¿Quizás una costumbre local? Capitán no estaba seguro, pero no estaba dispuesto a ofender a sus anfitriones por un fallo como ese, así que asintió en señal de agradecimiento a la mujer del alcalde, tomando asiento y mirando a los hombres que había ante él durante unos segundos, antes de hablar.

-Mi nombre es Capitán-dijo, ahorrándose un "al menos, de momento" que crecía en su interior conforme más sabía de la situación y veía el desempeño de los suyos-he sido convocado para parlamentar, y aquí estoy. 

DÉCIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: CALISTRIL (MITAD DEL INVIERNO, MES DOS).

DÍA: 16, DÍA DE LA LUNA.

HORA: POCO DESPUÉS MEDIODÍA. - CLIMA: SOL DE INVIERNO. NUBES DISPERSAS.

El noble y sus Caballeros echan una pizca de sal sobre el pan y le dan un bocado, bebiendo a continuación un sorbo de las copas de vino. Todo esto al parecer tiene un simbolismo ritual que implica una cierta medida de protección contra la violencia y las malas intenciones. Es como una declaración formal de que se pretende que haya paz.

- "Soy el Señor Jacques de Malar, Señor Feudal de los pueblos y señoríos de Cántaro Roto, Carnonegro, Cruce del Pinar, Sotomayor y Verdín, bajo la autoridad de Ridwan en esta cuenca Sur-oriental de Nidal.

¿Ustedes son los Capas Negras? ¿De dónde vienen? Veo con agrado que no todos son salvajes, aunque la primera impresión que dan cuando se les ve no podría ser más negativa...

Hará cosa de un mes recibí una misiva del Alcalde de Verdín pidiendo ayuda contra los niños de Rocasone, los bandidos conocidos como los Capas Rojas. No creí que fuera un problema realmente acuciante, pues además hay problemas similares o incluso peores en diferentes señoríos y regiones de la zona, pero reuní a unos jóvenes milicianos de la ciudad de Ridwan con el objetivo de atajar el problema de los bandidos. Y hete aquí que llego y me encuentro la Granja abandonada del Tío Samuel ocupada por pieles negras, cubiertos por capas negras, que ocultan corazones aún más negros.

¿Qué tiene que decir el señor Capitán...? ¿Capitán qué?" -

DÉCIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: CALISTRIL (MITAD DEL INVIERNO, MES DOS).

DÍA: 16, DÍA DE LA LUNA.

HORA: POCO DESPUÉS MEDIODÍA. - CLIMA: SOL DE INVIERNO. NUBES DISPERSAS.

Campaña permanece de pie, tras Capitán, al que ve sentarse e iniciar la plática. Se mira brevemente con Palomita, mientras casi a la vez, afirman su postura con un sutil movimiento de hombros. A continuación viene un torrente de sonidos palabrales del que, finalmente sólo se desprende... ¿el qué? por una parte reto, y por otra un reconocimiento de la valía de la Compañía Negra. Si estuviera en el cuartel, con sus compañeros, relajado, podría haber reflejado en su expresión la perplejidad absoluta que siente en aquel momento.

Afortunadamente está en una misión, y una de las primeras cosas que se aprende como soldado es a poner la cara tan tiesa como un palo y a no dejar ver lo que pasa por dentro.

Claro que, eso de quitarse el casco tampoco se le ha pasado por la cabeza, por lo que la masiva forma envuelta en placas de metal, cota de malla y cuero probablemente es el rasgo más aparente de su presencia. Aparte del brillo de la hoja de Svraisse.

DÉCIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: CALISTRIL (MITAD DEL INVIERNO, MES DOS).

DÍA: 16, DÍA DE LA LUNA.

HORA: POCO DESPUÉS MEDIODÍA. - CLIMA: SOL DE INVIERNO. NUBES DISPERSAS.

Capitán decidió imitar los gestos con la comida de sus "anfitriones", pues en aquellos asuntos más valía curarse en salud con aquellos asuntos.

-Nosotros somos la Duodécima Compañía Libre de Khatovar, también llamada Compañía Negra. Venimos de... Muy lejos. La Compañía no ha hecho más que alejarse de su cuna, y cada paso nos lleva aún más lejos de la misma. Los Capas Rojas ya no existen, nos hemos ocupado de ello... Aunque puede quedar algún elemento oculto. Además de sospechar que mantienen una alianza con algún culto de brujas o similar, claro, o más bien mantenían. 

Capitán informó con tono firme, pero sin dejar traslucir orgullo alguno u hostilidad. Al fin y al cabo, simplemente era la verdad, su trabajo, y toda la historia que aquellos tipos necesitaban saber. 

-Ni todos mis hombres tienen pieles negras, ni albergan corazones negros. Los grupos mercenarios no son precisamente conocidos por sus modales ligeros y su generosidad, pero no creo que entre ellos haya más oscuridad que la que puede encontrarse en cualquier grupo de personas. Y... Simplemente Capitán. Es costumbre en nuestra Compañía que el cuadro de mandos deje atrás su nombre al asumir su función. 

DÉCIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: CALISTRIL (MITAD DEL INVIERNO, MES DOS).

DÍA: 16, DÍA DE LA LUNA.

HORA: POCO DESPUÉS MEDIODÍA. - CLIMA: SOL DE INVIERNO. NUBES DISPERSAS.

- "Desde luego nunca había oído hablar de Khatovar ni de su Compañía. En cuanto a usted, permítame que en los registros le anote como "Capitán de la Compañía Negra", ya que Capitanes hay muchos y el rigor registral exige concretar un poco más.

Bien, entiendo por sus palabras que han cumplido con el cometido que me traía a este feudo, cosa que podría agradecerles, sino fuera porque nos han costado nuestros milicianos. Aunque podríamos entender que todo ha sido un lamentable malentendido.

Sin embargo, eso exige compensación.

El caso es que la situación en mis Feudos, y en otros de la Cuenca de Ridwan, por lo que he oído decir, es un tanto inquietante. Bandidos, grupos itinerantes de mercenarios y asesinos, y agitación entre el campesinado, tanto debido a los crímenes sin resolver como a la agitación al parecer de grupúsculos ocultos de desnianos que buscan sembrar el caos en nuestra gran nación.

El Inquisidor Karrukh Serpejo está investigando los pueblos que están bajo mi responsabilidad y mi obligación es prestarle todo el apoyo posible. Nos pidió tropas, pues hay indicios de fuerzas oscuras ocultas, y mi intención era llevarle a esos milicianos una vez se curtieran un poco en el campo de batalla derrotando a algún grupo de bandidos, como esos Capas Rojas.

Ahora me encuentro sin esos refuerzos prometidos, pero tengo ante mí una desconocida Compañía mercenaria. Espero que sus servicios estén disponibles y que debido a su nula fama, éstos no sean demasiado costosos, Capitán." -