Partida Rol por web

- Laia tiene razón... no debes abandonarnos pues tu futuro está ligado al nuestro, eres uno de los elegido y no importa lo lejos que corramos... tenemos un destino que cumplir - Tiberio secundó las palabras de Laia ante las intenciones de Asavar

Asavar se levantó avanzó hasta Laia hasta quedarse en frente de ella, y alzó el espadón a un lado para que lo viera bien, y mirándolo, dijo:

-¿Qué crees que puede hacer esto contra el poder, por ejemplo, que ha detenido al muchacho? Dime- enfundó el espadón a la espalda y andó hacia la puerta-Además, esto son cosas de magos, y no quiero tener nada que ver con magia. Es peligrosa-en ese momento habló Tiberio, y solo giró la cabeza,mirando a un lado- ¿Elegido? Sólo soy el hijo huerfano de un herrero, no soy nada de eso.

- Te equivocas... un espadón puede atravesar el pecho de un mago... también sangran creeme... no sería la primera vez que casi acabo con una espada al pecho; puedes hacer aquello que creas posible ser capaz de hacer... así pues... podréis matar a un mago cuando lo creáis posible - afirmó Tiberio muy serio - ¿Cosas de magos? El fin de este mundo es cosa de todos... precisamente si tanto miedo da la magia buena diea sería luchar contra quien la utiliza con vileza -

Tras una pausa pensativo se colocó la ropa para quitar el polvo y continuó con los ojos puestos en Asavar - Seamos serios… no sois mal hombre por tanto no abandonaríais a la joven a su suerte viendo las atrocidades que el enemigo es capaz de cometer – dijo mirando a Parim

- No sois estúpido y bien comprendéis la magnitud de lo que hablamos… por último obviando que siendo un mercenario errante seguro que estáis dispuesto a ser contratado por Lord Tiberio y por supuesto que se os presenta la oportunidad de ganar la gloria por ser uno de los héroes que derrotó al mayor mal jamás temido… queda otro posible incidente como el de Kaen, bien apuesto a que no dejaríais pasar una diversión tal... - Tiberio parecía satisfecho de su argumentación

Asavar empezó a arrastrar los muebles que obstruían la puerta,mientras decía con la voz un poco entrecortada por el esfuerzo:

-Insisto en que no quiero tener nada que ver con magos, sois gente extraña y peligrosa, tratais temas como el que ha dicho el hombre que a la gente terrenal como yo o él-señaló a Kaen- no podemos comprender. Nosotros nos ocupamos de los nuestros, y eso es lo que voy a hacer. Tengo que buscar a mis seres queridos, saber de ellos y salvarlos. Buena suerte en vuestra cruzada contra el mal.

Me pongo delante de la puerta... mi cuerpo era pequeño y delgado pero aún así me posicione.

Crees que somos diferentes a ti... si en algo nos diferenciamos... tu sabes decir cual es tu procedencia... yo solo se decirte que me abandonaron nada más nacer...

No se si mis padre viven o murieron... se que abandonaron junto a una Cabaña en las tierras de Laos...

Te preocupas por tus seres queridos... pero no quieres salvarlos del mal que se avecina...

Como bien dice Tiberio no es esta tu mejor arma... digo tocando la espada enfundada con una mano... sino está... digo poniendo la otra mano en el pecho de Asavar a la altura del corazón...

Y para que nadie te pare deberas acompañarla de esta... digo cambiando la mano de la espada hasta tocar con la yema de los dedos la frente de Asavar...

En mi mente recordé una vivencia con el pueblo bárbaro y pensé que era el momento de rememorarla...

Hace un tiempo... cuando apenas era una niña... en un pueblo de bárbaros un anciano se consumía por una estraña enfermedad... No mire las diferencias entre aquellos bárbaros y yo... solo en la necesidad que tenían de mi visita... sin más visité aquel pueblo... y con un ungüento elaborado con magía sane sus males...

En aquella ocasión... no creo recordar que los bárbaros odiasen la magía... es más agradecian su existencia por haberles ayudado...

No es la herramienta la maldita ... sino la mano que la empuña y da uso... la magía puede usarse para hacer el bien... al igual que para hacer el mal...

- Laia tiene toda la razón... - colocándose junto a Laia

- No podrás escapar del destino mas eres libre de intentarlo, tú solo no podrás salvar a tus seres queridos si el mal triunfa... por otro lado es incomprensible que no estés interesado en este asunto pues a diferencia de Kaen apostaría a que no hay una familia o amigos esperando, bueno quizá sobreviviese alguno de los mercenarios y tengáis suerte... si es así espero que tengáis cuidado y buena fortuna. En cualquier caso poco más puedo decir, acosejar... que lo penséis bien mientras todavía se puede elegir... - tras una pausa se colocó bien la mochila y se acercó a los muebles - ... espera, te ayudaremos con esos muebles -

Asavar tomó la muñeca de Laia con más delicadeza de lo que ella se podría pensar, y dijo:

-Tu cara me sonaba de algo y ya recuerdo bien, como ya te dije, muchas gracias, salvaste a mi maestro, y espero que ahora, te apartes, para que pueda ir a buscarlo y seguir manteniendo con vida a la única persona a la que puedría llamar padre. Además, ¿cómo sabes que soy una buena persona? ¿Quién puede decir eso?- Asavar apartó la mano de Laia, esperando a que le dejaran paso.Mirando a TIberio dijo:

-Creo que cada uno escribe su destino, no lo escribe nadie por tí.Dejadme paso.

- Las cosas no son tan simples... poder escribirlo no lo hace menos predestinado... como poder elegir el orden no altera el encadenamiento de sucesos... además no se debe confundir huir del destino con decidir el mismo, eso está sólo en manos de quien puede hacerlo. No es momento de filosofar sino de retirar los muebles - apartando un último par de sillas que bloqueaban el paso quedando la salida libre

-Muchas gracias Tiberio, sois un buen hombre-dijo esperando a que Laia se apartara para poder salir.

Tiberio saludó con la cabeza y se acercó a Laia tomando su muñeca

Laia querida... yo también creo que comete un error pero es su decisión

Un gesto de decepción inunda mi cara:

De nada Asavar... de nada...

Me aparto de la puerta y le digo abriendole la puerta... Sabía que me recordarías... yo te reconocí desde el primer momento... esperaba que ahora fuera tu mano la que me ayudara a no caer... pero veo... que esperaba demasiado.

Con la puerta abierta... miro la escena de miedo y sangre que se abre ante ella y le digo sin apartar la mirada del paisaje dantesco que se me presentaba.

Ve en su busca... y dile que aquella pequeña niña de ojos azules... aún lo guarda en su corazón.

La sonrisa de aquel pequeño bárbaro se ha esfumado... ¿donde estará ahora aquel pequeño que me agradecía y me brindaba su ayuda para la posteridad?...

El aire huele a sangre... espero que el futuro lo vuelva a traer junto a nosotros...

-No caerás por las manos que pueden y deben sujetarte-miró a todos-en cambio, mi maestro y mi pueblo no tienen a nadie a quién agarrarse. Y sí, esperabas demasiado, no soy una buena persona lo siento. Adiós, suerte-y salió, cerrando tras él.

La gente cambia... comete errores... es el mismo bárbaro, en el pasado creíste en lo que pensabas que era o sería, recuerdas su palabra mas él tiene otras prioridades... ha tomado su decisión y debemos respetarla... las prioridades de cada uno definen nuestras relaciones, lo que realmente nos importa. Como ya le dije... no tiene forma de escapar ante lo que está por venir, volveremos a verle por mucho que intente parecer un duro bárbaro que no tiene sentimientos.

No sabía nada sobre tu pasado... pensaba esperar un momento de tranquilidad para preguntar, lástima tener que enterarme así, lo siento...

Recuperemos la compostura y salgamos de la torre, esta gente necesita ayuda y yo necesito a Laia Laos

Apretando suavemente la mano de Laia

Abro de nuevo la puerta y digo a los de dentro:

Vamos... no debemos perder el tiempo... Miro a Kaen y le digo: Gracias por esperar... para compensarte iremos contigo en busca de tu hermana... espero que esté bien...

Luego si quereís podreis seguir con nosotros ... no sabría decirte hacia donde se encaminaran nuestros pasos... lo que si sé decirte es que no pienso quedarme quieta y esperar a que la muerte venga en mi busca...

Esta noche los heraldos de la muerte han salido a pastar... y nosotros los hemos distraido... esperemos que sigamos la misma suerte en próximas.

Debemos agradecer su posición... creo que de esa manera ganaremos su confianza y nos ayudará en nuestra empresa...

No podemos retenerle esta noche y obligarle a seguirnos sin más... debemos de ayudarlo para demostrar nuestra sinceridad... muchas veces un acto vale más que cien palabras...

Respecto a lo de mi familia, no hay que pensar en eso, Laurielle, Morgul, Breska y tu sois mi familia ahora... y eso me es suficiente... el resto son lágrimas ya derramadas...

Es buena idea... por desgracia dependemos de los planes trazados por Morgul, aunque seguramente tome en consideración todo lo que con Kaen ha sucedido. Quizá sea pretérito y ahora algo superado... igualmente el pasado siempre estará ahí, los recuerdos y los hechos nos marcan para siempre... no te molestaré con ello mas desearía saber... si acabo de enterarme que Laos es tu lugar de nacimiento... en fin no es el mejor momento.

En realidad más bien hemos llamado a los heraldos de la muerte... desde luego eso es recuperar la compostura...

kaen se levanto al escuchar las palabras de la mujer de cabellos de oro, su mirada era dura como si les jusgara por no actuar ante el miedo, parecian que todos habian estado seguros de que esa nube nos matarias.... Si eres un elegido algo bueno de toda esa chachara podria ser verdad.

Camino hacia la puerta y salio de al torre - No necesito su ayuda... ayer quizas, hoy solo las esperanzas se diesmaron como el ganado con la sequia - Estaba furioso mas su rostro intentaba disimularlo - Si me sigue bien por ustedes, si tiene otras cosas qeu hacer, vayan a ser heroes y dejenme tranquilo - Dicho esto comenzo a caminar hacia el ultimo lugar donde les habia visto, buscaria y rastrearia si era necesario.

Tiberio se encaminó en busca de Sargón y su padre

Veamos como está el pobre hombre...