Partida Rol por web

Dana se mete en el lado que da a la ventana y tras darte la espalda te desea buenas noches quedando dormida casi al instante al igual que tú pues en cuanto tu cabeza se apoya en la almohada los ojos se te cierran como si llevases días sin dormir

Aquello desmontó todo lo que podía estar pensando. Lo último que me había imaginado es que Eda pudiera estar embarazada y además que no quisiera tenerlo. Además, tenía pinta de no ser algo digamos que excesivamente natural, dadas las palabras de Eda al referirse a lo que llevaba en el vientre. Algo que con toda seguridad, no podría llamarse feto o bebé.

Por supuesto que te acompañaré. Dime cuando deseas ir y estaré a tu lado para lo que sea y tendrás todo mi apoyo y ayuda.

No quedaba claro todavía cuáles habían sido los métodos de engendración del hijo de Eda, pero esperaba que me lo revelara en un futuro. Mejor no forzarla aún más en aquella situación. Esperaría que se estabilizara emocionalmente para volver a preguntarle por ello y obtener respuestas.

La muchacha parece sobresaltarse un poco con tu respuesta y una expresión que no logras identificar pasa por sus ojos los cuales cierra brevemente antes de inclinar la cabeza y apoyarla en tu hombro

-"Gracias,Threkor.Me gustaría hacerlo después del baile.Si en ese tiempo cambias de idea sólo tienes que decírmelo,lo entenderé"-se queda con la cabeza en tu hombro y sin soltar tu mano.Por una vez parece cómoda contigo o quizás sea que necesita la presencia de alguien a su lado en estos momentos.En cualquier caso,no se aleja de ti ni te suelta a no ser que tú te muevas

Le pasé un brazo por detrás de los hombros para intentar darle seguridad. Me dolía verla así de deprimida y haría lo que fuera para que olvidara todo aquello cuanto antes.

Así me quedé todo el tiempo que Eda decidió quedarse así. No prentendía en ese momento dejarla sola. Notaba su cuerpo contra el mío y como poco a poco su respiración iba relajándose. Eda llevaba varios días rara y no era momento de molestarla con más preguntas.

En un momento dado decides salir a por comida para los dos aunque ella apenas prueba nada sin embargo te da las gracias con una suave sonrisa.Se da cuenta del tiempo que llevas allí encerrado y te mira con expresión culpable

-"Threkor,creo que te he robado toda la tarde,lo siento.Te prometo que compensaré lo que estás haciendo por mi"- se queda pensativa unos momentos antes de enrojecer violentamente aunque se anima a decirte lo siguiente-"¿Puedo pedirte que duermas conmigo?"-se retuerce nerviosa las manos mientras muerde su labio inferior-"Es que...no quiero estar sola...."-susurra mirando al suelo.En estos momentos parece la mujer más frágil del mundo

¡Guau! No esperaba esto.

Me quedé un tanto perplejo ante la petición de Eda. Tan directa, no parecía que fuera la inocente Eda la que hiciera esa proposición. Por supuesto no había nada más implícito en la petición que la simple compañía, pero el mero hecho de pedirlo me pilló un tanto desprevenido.

Si... si, claro. Si deseas que me quede, me quedaré contigo.

Me acerqué a ella y le puse las manos en los brazos acariciándolos suavemente arriba y abajo. - No te voy a dejar sola.

Medio sonríe y apoya la frente en tu pecho

-"Gracias,no sabes lo que significa que estés haciendo todo esto.No tenía buenas referencias sobre ti pero creo que estaban equivocados"-musita sin apartarse de tu contacto aunque sin buscar nada más.Se estremece un poco cuando tus manos tocan sus brazos heridos pero no hace nada por quitarse de tu lado e incluso se atreve a abrazarte suspirando imperceptiblemente

Le devolví el abrazo a Eda y me quedaría así hasta que ella decidiera separarse. El contacto de su cuerpo contra el mío me despertaba sensaciones que no había sentido en mis otras anteriores conquistas fuera de la Cromería. Aquellas correrías de tiempo atrás sólo buscaban un revolcón entre las mantas de nobles y plebeyas, pero Eda me despertaba otros sentimientos. Quizás fuera por esa inocencia que destilaba o tal vez fuera la forma de hablarme, pero me sentía muy a gusto cuando estaba con ella y su contacto me erizaba el vello.

Mañana tendremos un día ajetreado. Deberíamos descansar.
 

Todos vuestros mentores os pasan a buscar apenas pasan unos minutos de las ocho,llamando a las puertas con suavidad y esperandoos fuera para llevaros hasta el comedor a desayunar

El día estaba soleado, pero había encontrado un buen árbol sobre el que apoyarme y leer un rato el último libro que había conseguido comprarle a uno de los vendedores ambulantes que se pasaban por la ciudad cada cierto tiempo. Ya casi no encontraba un libro nuevo que leer en los que estaban a mi alcance... No se las horas que pasaron, pero cuando el sol cambió su posición e iluminó de pleno el libro que estaba leyendo, la hoja por la que iba se iluminó como si fuera el propio sol a mis ojos, lo que hizo que los cerrase, a la vez que el libro por el dolor que estaba sitiendo... entonces lo note, primero en las yemas de los dedos... luego en toda la mano. Me estaba quemando las manos de alguna forma... Al abrir los ojos... el panomara no mejoró... Todo estaba en llamas, incluyendo el árbol, por lo que me separé de él... notaba el calor arrancandome la piel, ulcerándomela... pero no podía ir a ningún sitio... ¿Qué estaba pasando? Si no estuviera lo suficientemente confuso... incapaz de aceptar que iba a morir sin saber qué había ocurrido... del cielo se abrió un cono de luz que me enfocaba directamente del que apareció mi madre... Con una cuerda... una promesa de liberación... de la que no iba a dejar escapar el momento. Estiré el brazo y sin dudar ni un segundo... tiré de la cuerda... pero nada pasó...

Con estupor, al mirar hacia la cuerda, podía ver mi brazo colgando de la cuerda... el fuego había dañado tanto el brazo que al tirar... se me había desprendido del cuerpo... entonces pude ver la cuerda ascendiendo hasta perderse entre las nubes con mi madre... el brazo desgarrado cayó desde el cielo hasta golpear con fuerza en el suelo justo delante de mi...

Y desperté, danto un brinco de la cama y cayéndome a un lado. Golpeando mi cabeza contra un mueble y perdiendo durante unos instantes la ubicación de dónde me encontraba... No era mi dormitorio y al ponerme de rodillas mirando a la cama había una bella mujer que me hizo abrir los ojos como platos al no reconocerla en un primer instante... Pero al volver en mi no pude más que sonreír... era tan guapa.. parecía un angelito durmiendo. Me quedé unos segundos mirándola hasta que decidí darle las gracias. No se qué hubiera pasado si me hubiera despertado, desubicado como estaba... sin reconocerla a ella. 

Me visto y bajo al comedor para coger el desayuno y subo de nuevo a mi cuarto para llevárselo a la cama. Creo que le hará ilusión y siempre es una buena forma de dar las gracias. Al llegar a la cama, antes de hacer nada... abro para que entre algo de luz y me acerco a ella, a una distancia prudencial... 

-Buenos días Dana... ¿Has dormido bien?

Después cuando ella se encuentre a si misma y vea el desayuno, ya me acercaré del todo y me sentaré a su lado para darle su desayuno.

Apenas he dormido en toda la noche, mi mente iba de pesadilla en pesadilla, haciendo que me despertase a cada rato bañada en sudor y con el corazón a punto de salírseme del pecho.
Había pasado la noche entre cucarachas, varas de madera y sangre, por lo que mi humor no era el mejor.
Cuando los golpes sonaron en mi puerta, di un salto de la cama, con los ojos de mi padre aun grabados a fuego en mi frente. Me dirijo a abrir la puerta, sin acordarme de dónde estaba, pensando que sería Britt, mi dama de compañía.
La puerta se abre con un crujido y veo a un chico en la puerta.
¿Pero qué...?
Liam.
La Cromería.
Todos los recuerdos del día anterior vuelven de golpe a mi cabeza. Miro hacia abajo y me doy cuenta de que estoy en camisón, delante de Liam, delante de un chico. El rubor cubre mis mejillas y doy un portazo antes de decir palabra.
Voy corriendo a cambiarme de ropa, y me miro de arriba a abajo en el espejo mientras selecciono el vestido.
No deja mucho a la imaginación este camisón, madre mía...MADRE MÍA DIT.
Tras adecentarme y vestirme, abro la puerta y me planto ante Liam.
-V-vamos a desayunar. -digo alborotando mi pelo unos segundos para más tarde volver a colocarlo en su sitio.

Tras llegar a su habitación y ponerse ropa cómoda para dormir (un pantalón y nada más) se asomó a la ventana, abrió esta y se sentó en el travesaño aspiró el aroma de la noche y de donde estaba, cerró los ojos para oír a los animales que hubiera por la zona, aunque llevase ya casi un año fuera del bosque lo añoraba como el primer día, dormir arropado entre los lobeznos, alguno que soñaba que correteaba y terminaba dándole patadas en la espalda... 

Estuvo un rato así a y también aprovechó para observar todo su alrededor.

Cerrando la ventana para irse a dormir se tumbo en el camastro y cerró los ojos. Pasó una noche tranquila entre lobeznos y aguiluchos sin pasar por alto ese momento en el que Marie aparecía unos instantes.

Cuando Douglas llamó a la puerta había terminado de bañarse y fue a abrir esta justo antes recordó algo importante que le había dicho Kilyan en muchas ocasiones, ponte ropa, se giró para coger los pantalones que iba a ponerse y abrió dejandole pasar mientas se colocaba la camisa. 

-Buenos días Douglas, he de preguntaros unas cosas, la nueva chica Marie, me resulta muy curiosa, tiene una mirada salvaje y una sonrisa bonita, sabes de algún lugar en el Gran Jaspe donde llevarla y que sea bonito? o por aquí cerca, la llevaría al Bosque Sangriento pero está algo lejos. -

Hablaba como si llevar a una chica a un bosque lleno de animales salvajes fuera algo normal, lo miraba muy serio y esperando una respuesta muy clara a su curiosidad, sobretodo para identificar que era eso que le pasaba.

La chica abre lentamente los ojos mientras estira su cuerpo bajo las sábanas y te mira un poco sorprendida,parpadeando ante la luz y tratando de ubicarse.Cuando lo hace sonríe un tanto azorada y con la sábana se tapa parte de la cara 

-"Buenos días"-dice mientras te mira por encima de la sábana antes de ver el desayuno.Sus ojos se abren sorprendidos mientras termina de incorporarse mirándote con curiosidad-"¿Es para mi?Vaya,es la primera vez que alguien me trae el desayuno a la cama....Bueno,también es la primera vez que duermo con un chico"-dice riéndose y sentándose sobre sus rodillas intentando peinarse el pelo revuelto y mirando su vestido arrugado con desaprobación.Con gesto indiferente deja de prestar atención a su persona y se concentra de nuevo en ti

-"Yo he dormido genial"-dice respondiendo a tu pregunta-"¿Y tú?Te has movido un poco esta noche,espero que no hayas tenido pesadillas"-dice mientras coge un panecillo de la bandeja y comienza a mordisquearlo con delicadeza

La chica asiente a tus palabras y ambos os metéis en la cama.A Eda se le nota tremendamente avergonzada y te da la espalda pero junta su cuerpo al tuyo y coge tu mano haciendo que la rodees quedando ambos abrazados.No tarda mucho en relajarse entre tus brazos y su respiración acompasada te indica que por fin ha quedado dormida,haciéndolo tú poco después

Cuando despiertas al día siguiente te encuentras boca arriba mientras la cabeza de la chica reposa sobre tu hombro mientras te rodea con un brazo y una de sus piernas semidesnudas se enreda con las tuyas.Su respiración te indica que aún duerme

Cuando vuelves a abrir la puerta Liam sigue allí con gesto de asombro.Te mira de arriba a abajo frunciendo el ceño

-"¿Te encuentras bien?Pensé que te había molestado de algún modo.Si te cuesta madrugar me temo que tendrás que acostumbrarte"-dice mientras vais al comedor.

No parece enfadado por el portazo y camina de forma relajada a tu lado esperando una explicación a tu comportamiento

El muchacho se cruza de brazos mientras terminas de vestirte y le expones tus dudas

-"Pues no sé,apenas la conozco pero por lo que pude escuchar anoche le gusta el teatro.Quizás deberías llevarla allí y ver juntos una bonita obra,luego la invitas a comer y a lo que surja"-te dice el chico con una sonrisa amable-"Del bosque olvídate,dudo que a una chica como ella le gusten los bosques"-dice con una carcajada

Una vez te vistes salís juntos en dirección al comedor

Me desperté un poco desorientado al principio, pero al notar el cuerpo de Eda contra el mío, recuerdo qué hacemos allí. Mi primera intención fue despertar a Eda, pero preferí quedarme un instante contemplándola desde mi posición.

Su aspecto relajado y confiado me enterneció y levanté la mano libre para apartarle un mechón de pelo de la cara para poder contemplar su rostro si nada que molestara. Contemplé su pierna sobre mi y su brazo que me rodeaba y no pude evitar besarla en pelo y acariciarle la mejilla con mi mano.

Esperaba que no se hubiera despertado para poder gozar de su imagen durante un instante más. En ese momento, qué hora fuera y si llegaba tarde a alguna clase pasó a un segundo término. Tenía que disfrutar de ese momento cuanto pudiera.

Al notar mi mano sobre su mejilla, noté como su cuerpo se movía y tuve miedo de haberla despertado y que hubiera roto la magia del momento, pero Eda simplemente se acomodó mejor, apretándose más contra mí, buscando el calor de mi cuerpo.

Vaya, creo que me estoy enamorando. Yo, enamorado, hm, ¿quién me lo hubiera dicho?

Atendió a las palabras de Douglas.

Teatro, comer y lo que surja, bien le diré de ir al Teatro.

Parecía meditar las palabras de Douglas -De acuerdo ya te contaré que tal, espero no estropearlo mucho con mis formas- le dice sonriente antes de entrar al comedor y ver quienes estaban.

Tras unos minutos observándola ella comienza a despertar abriendo lentamente los ojos.Aún con ellos entornados la chica alza un poco la cabeza y te sonríe aunque te das cuenta de que parece creer que aún duerme pues en vez de alejarse Eda se aprieta contra ti cerrando los ojos y con una sonrisa relajada en la cara

No pasa ni medio minuto cuando notas que se tensa y en voz baja pregunta con voz temblorosa

-"¿Threkor?"-despacio se aleja de tu cuerpo y apoya la cabeza en la almohada tapándose con las sábanas hasta el cuello sin apartar los ojos de tu rostro-"Perdona...yo no...."-se calla sin saber muy bien qué decir.

La zona del rostro que recibió el golpe presenta hoy un aspecto peor,un poco más amoratado y levemente hinchado aunque a pesar de todo la chica sigue siendo bella

-"¿Quieres...que te acompañe a...a las clases"-dice recordando sus obligaciones-"Ayer no pude hacerlo y no quiero faltar al compromiso que tengo para contigo y menos después....después de esto..."-su mano se atreve a tocar tu brazo bajo las sábanas en un suave roce

Parecía haber olvidado que ella me pidió que me quedara. Por debajo de los moratones, pude ver que se había ruborizado al descubrir que habíamos compartido cama.

Tranquila, Eda. No ha pasado nada de lo que te pudieras arrepentir. Simplemente estaba mirándote dormir y he perdido la noción del tiempo.

Como desde el primer momento que la vi, esa expresión inocente y desvalida de Eda me tenía robado el corazón e internamente sonreía cuando la evía tan avergonzada por hechos que deberían ser normales.

Comamos algo primero. Después ya me acompañarás a las clases.