Partida Rol por web

Bebía tranquilamente mi cerveza mientras iba viendo como poco a poco la cerveza de mala calidad del local iba haciendo mella en nuestra amada líder... enserio me sabía mal tener que recurrir a un truco tan viejo como el mundo, algo que sabía es que a menos que estés acostumbrado a estas bebidas portuarias antes o después te afectan al juicio. Y yo no queria aprovecharme de Naya, solo protegerla de ella misma.

-Creo Anthor, que nuestra amiga ya ha bebido suficiente...- le susurré mientras abrazaba a Naya y la alejaba del tipo al que se le había caído encima.

-Sí claramente se trata de una coincidencia...se parece mucho-dije al tiempo que iba llevándomela fuera del local ayudado por Anthor, no sin antes dejarle una buena propina al lugareño que había sufrido el accidente con Naya. Vamos el tipo se parecía lo mismo a Warumax que a cualquier orangután...pero creo que el juicio de mi nueva amiga estaba algo nublado.

-No te preocupes si quieres una cita con Warumax o cualquiera de sus asociados puedo conseguiros una sin problemas, son simples negocios...- le dije a Anthor recordando si no les había dicho eso mismo hacia unas horas...

Aunque ahora lo mejor seria llevar a nuestra joven héroe a que se recupere un poco de todas estas aventuras.

-Naya creo que el trabajo de campo de hoy acaba hoy....tengo que reconocer que te pones preciosa cuando te enfadas y bebes, pero mañana será otro día... y tienes que estar fresca para ganarte el primer puesto en la Guardia Negra- dije con una sonrisa.

Naya miraba a Anthor tambalenadose muy ligeramente, intentando comprender sus palabras pero de repente se vió rodeada por Luther. Extrañamente se dejó guiar con facilidad por ambos aunque no pudo evitar girar el rostro para visualizar al hombre que seguramente tendría información de Warumax - Pero.. seguro que él lo conoce... - dijo en tono quejicoso mientras se aferraba donde podía para no volver a tropezar. De repente el suelo se le antojaba demasiado inestable aunque el aire fresco del exterior alivió en una pequeña parte ese malestar

- No lo entendeeeeeeeeis. Tengo que tener algo para darle a cambio - el volumen de su voz iba decayendo, perdiendo fuerza. Ladeó la cabeza para apoyarla en Luther. El mareo no cedía y la cosa se complicaba, pues su estómago también quería formar parte de la fiesta. - No puedo fallarle - murmuró mientras su rostro se contraía en una mueca de preocupación.

- Naya, Naya... Escúchame. -Comenta mientras clavaba su mirada en los ojos de la joven- Es tarde. Y sería ingenuo pensar que íbamos a encontrarlo a la primera, así que vayámonos y descansemos... -Hizo una breve pausa- Por favor. -Musitó esto último, quizá tratando de obtener un efecto más persuasivo.

- Así que dime, ¿Qué te parece que volvamos y te llevemos a tu habitación, sí? -Sonríe de lado a lado sin darle mayor importancia. -Te prometo que seremos buenos.

La muchacha intentaba enfocar el rostro de Anthor mientras le hablaba. Extendió la mano para acariciar la cara del chico de forma algo torpe - Eres muy guapo. ¿Porque te maltratas tomando esa porquería? Dime ¿Porque? - soltó un suspiro de resignación

- Si. Yo se que sereis buenos. - de repente gira el rostro hacia Luther estrechando la mirada en ademán desconfiado - Bueno... éste no lo se todavía... te tengo vigilado, que lo sepas - asintió muy ufana mientras seguia intentando encadenar un paso detrás de otro

Levanté las manos a la defensiva ante la acusación de Naya.

-Ya se que me tienes vigilado pero nada de mirarme mientras me baño eh, yo no te quito ojo de encima tampoco- dije con una sonrisa.

En ese momento pensé que menos mal que no había invitado a aguardiente y licores de la zona... Estaba claro que beber el matarratas que solian servir en estas tabernas no era para todos los paladares. Pero habia que reconocer el merito de la chica por aguantar tanto.

-Vamos, no te preocupes ahora toca descansar, si es tan importante para ti esta misión te conseguiré la información que necesitas o te conseguiré una reunion de negocios con nuestro amigo- dije sin ningun tono de burla.

Realmente estaba decidida a conseguir hablar con Warumax...si era algo tan importante habria que echarle una mano. Al menos para asegurarme su seguridad.

Estoy seguro que mañana lo vera algo más claro todo, aunque a juzgar por lo que hemos bebido...la resaca va a ser algo epica.

Fui caminando a la derecha de Naya mientras dejaba que Anthor estuviera a su izquierda en caso que trastabillara. Mientras caminabamos por el barrio del muelle miré a algunos ladronzuelos que se acercaban hacia la joven para luego darse la vuelta al ver que no iba sola por aquí. Tanto Anthor como yo eramos caras conocidas en este ambiente y no deberia haber ningun problema para llegar a la Cromeria y al dormitorio de Naya.

-Oye pero si me vuelve a ver tu hermana acompañandote creo que acabará pensando que soy una mala influencia...- dije pensando en la belleza que tenia y en lo enfadada que estaba la primera vez que me crucé con ella mientras acompañaba a Naya a la enfermería.

Vamos ya va quedando menos...en cuanto salgamos de los muelles, la zona de peligro ya habrá pasado.

Miró rápidamente a Luther tras aquel comentario, por suerte parece que pasó por alto y luego suspiró no sin antes añadir una discreta sonrisa. -¿Qué importa eso, Naya? Anda, vayamos haciendo camino que se hace tarde. Por cierto... ¿Vosotros ya os conocíais antes, verdad? -Pasó una mirada a cada uno de ellos- ¿Puede ser que os tocase pelear entre ambos? ¿Cómo fue? 

- Si. Peleamos. Y fue jodidamente mal para mi - sin previo aviso metió un dedo por el escote del vestido y dejó al descubierto parte de la piel donde se mostraban diminutos puntitos.

- Así que andate con ojo que sabe trazar con mucha imaginación - el tono de ebriedad ocultaba si lo decía con admiración o con envidia.

Su mirada volvió a centrarse en el suelo con interés, pues no podía permitirse caerse. Tenia que llegar a la Cromeria sana y salva. Solo esperaba que se le hubiera pasado el mareo para cuando tocara el entrenamientos

- Bueno, a mí me han golpeado con una maza en repetidas ocasiones. No sé si con tanta creatividad como a ti, pero me durará el recuerdo... No podré ir en unos días. -Suspiró y continuó caminando- Ha sido una semana complicada.

El hecho que fuese enseñando el escote no ayudaba a concentrarse en nuestra misión.

Llevar sana y salva a Naya a su habitación. El resto lo dejariamos a la imaginación del lector. Dos hombretones guapos como nosotros con una chica preciosa llevandola a la cama...

Bah en realidad creo que necesitaria primero una ducha, pero a ver quien es el que le dice eso mismo sin que se lo tome mal. El olor tabernario estaba haciendo mucho daño a los sentidos olfativos. Eso unido al hedor de los muelles y las tabernas en las que habiamos estado no ayudaba.

Menos mal que la ropa que llevaba Naya era vieja...porque probablemente la tendria que quemar despues de esto. Eso si el alcohol que se le derramo al chocar con aquel tipo no disolvia antes la tela.

-Bueno tiene una buena derecha, tuve mucha suerte en ese combate y acabamos rodando en el suelo como unos adolescentes. Todo pasión, la ropa desgarrada por la emoción... si fue bastante bien la verdad es que solo tuve un golpe de ingenio y un poco de suerte.- dije con una sonrisa recordando la manera en que me impidió trazar despues de inmovilizarme.

-Bueno no te quejes, las mazas al menos no te dejan la ropa hecha un asco lleno de sangre.- dije riendo despuer de recordar como tuve que volver a por un nuevo uniforme el primer dia de clase y la cara que pusieron al devolver el viejo.

-Atajaremos por este callejon, luego dos calles mas y salimos de la zona de los muelles. Solo espero no encontrarnos con ningun guardia en la Cromeria.- susurré mientras intentaba guiarlos por el entramado laberintico de callejuelas infectas.

Efectivamente Anthor tiene pálido el rostro y os dais cuenta de que anda algo encorvado y procura moverse poco,casi sin mover el lado izquierdo del cuerpo y haciendo muecas de dolor de tanto en tanto

Finalmente llegáis a la Cromería sin mayores problemas,los guardias de la puerta no dicen nada,tan solo alzan una ceja al ver el estado de Naya,la hija del Capitán de la GUardia Negra pero al fin y al cabo ellos ni siquiera pertenecen a ese cuerpo por lo que sin ningún comentario os ceden el paso

Sin embargo antes de que entreis algo llama vuestra atención.Diversas exclamaciones procedentes del puente hacen que os volvais con curiosidad a tiempo de ver cómo una sombra desaparece en un recodo hacia el Gran Jaspe

Os besáis con intensidad mientras sus manos se apoyan en tu cintura y te atrae hacia él apretándote contra su cuerpo.Cuando os separais,ambos sin aliento,Thony te sonríe sin decir nada mientras se pone detrás tuyo de nuevo para abrazarte,apoyando la barbilla en tu cabeza

La bahía resplandece ante vosotros,un viento algo frío soplaba y el cielo,aún azul comenzaba ya a oscurecer.Las aguas se mantenían extrañamente serenas en vez de exhibir su habitual encrespamiento y la bahía estaba sospechosamente desierta.La flota que solía estar allí aún no había vuelto de Ru,donde al parecer intentaba detener el avance del Príncipe de los Colores.Escuchasteis esto mientras unos hombres hablaban cerca de vuestra posición,observando como vosotros el mar en calma

De repente algo dobló un recodo del Pequeño Jaspe en dirección al Gran Jaspe.No era sencillo apreciar su tamaño a primera vista pero a unos cien metros de las murallas que rodeaban la ciudad emergió un demonio marino que solo era visible al principio por la estela que iba dejando a su paso,levantando olas a izquierda y derecha.

A medida que se aceraba aceleró.Sus enormes fauces entreabiertas engullían el mar entre sus anilladas hileras de colmillos y lo expulsaban por las agallas que se distribuían a lo largo de todo su cuerpo.El agua salí disparada en grandes abanicos hacia atrás y los lados.El demonio iba directo al rompeolas que protegía la bahía Occidental,donde también se dirigía una galera a marchas forzadas en su intento por salir a mar abierto

-"Pobre incauto,espero que no les ataque"-murmura Thony sobre tu cabeza abrazándote más fuerte-"Si consiguen traspasar el rompeolas los tripulantes quizás puedan escapar a tiempo"-

Los hombres sacaron los remos del agua como un solo hombre intentando agitar las aguas lo menos posible ya que los demonios marinos eran muy celosos de su territorio aunque no depredadores.La criatura pasó junto a la galera sin detenerse y tanto Thony como la multitud curiosa que se había arremolinado junto a vosotros exhaló un suspiro de alivio.EL demonio desapareció bajo el agua y se perdió de vista.Cuando reapareció estaba al rojo vivo y las aguas hervían a su alrededor mientras ponía rumbo a alta mar.Se dio la vuelta y aceleró dirigiéndose directamente a la galera para embestirla mientras los presentes lanzaban una maldición y gritos contenidos.La criatura chocó contra la nave a una velocidad de vértigo mientras varios marineros salían disparados contra el agua.Algunos cayeron al mar pero un par cayó sobre la cabeza del demonio, repleta de protuberancias y pinchos.La proa de la embarcación se desintegró y cientos de fragmentos de madera volaron en todas direcciones y los mástiles se partieron.Lo que quedaba de la galera salió disparada hacia atrás varios metros proyectando por el aire inmensos abanicos de agua.

El avance del demonio apenas perdió velocidad y la embarcación terminó por desaparecer bajo las olas cuando aquella cabeza de martillo se elevó aún más sobre el agua y continuó empujando.La criatura se zambulló y prendidos de su monstruosa cabeza repleta de espinas por un centenar de cabos,los restos del naufragio se hundieron con ella

Lo único que quedaron fueron fragmentos y de sus tripulantes apenas quedaban una docena braceando entre las olas.Un rastro de burbujas era lo único que indicaba la posición del demonio bajo el agua

Su lomo se vislumbró nuevamente cuando atravesó el Embarcadero del capitán y llegó al extremo septentrional del Gran Jaspe

Los ocupantes del Tallo de la Azucena y los que se hallaban aún en la entrada al Pequeño Jaspe habían perdido de vista a la bestia cuando ésta penetró en el Gran Jaspe por lo que a nadie le dio tiempo a reaccionar cuando el demonio se abalanzó sobre el puente.La estructura flotaba a ras de las olas.Sin sostenes de ningún tipo la luxina amarilla y azul se combinaba para formar un entramado de color verde que había resistido los embates del mar durante siglos,sin embargo el primer contacto con el demonio marino provocó que el puente entero se tambalease y decenas de personas perdieran el equilibrio entre gritos
La enorme figura se deslizó a lo largo de la pista de luxina varios metros antes de aminorar la marcha desconcertada por la resistencia que obstaculizaba su avance,pero su confusión apenas duró un instante tras el cual se elevaron nuevas columnas de vapor a su alrededor.Hundió la cabeza bajo las olas y ganó velocidad mar adentro.Su descomunal cola azotó el agua junto al puente levantando surtidores por encima de casi toda la estructura.Una vez en alta mar volvió a girar sobre sí misma,preparándose de nuevo

Desde la Isla de los Cañones comenzaron a abrir fuego.El primer proyectil se quedó corto y los otros cinco cañones de la isla atronaron en veloz sucesión.El estampido de las detonaciones combinadas se dejó oír justo detrás del primer fogonazo pero todos fallaron y el demonio continuó su avance

El caos se apoderó del puente y carros y personas trataban de salir de allí ocasionando un tapón que impedía el avance a uno u otro lado

De improviso una segunda silueta surcó las aguas por debajo del puente procedente del lado contrario al demonio.La espectacular colisión entre ambos levantó litros de agua a cientos de metros de altura.La bestia salió despedida por los aires,doblada de costado.Una enorme figura negra empequeñecida por el demonio marino lo había embestido desde abajo.Ambos se estrellaron de nuevo contra el agua a pocos metros del Tallo de la Azucena.El peso del demonio era mayor e impulsó su cuerpo hasta el mismo puente envolviendo por completo la estructura con una muralla de agua.La construcción entera se estremeció...pero aguantó

En medio de una nube de agua unas aletas y una cola negra emergieron a la superficie.Después de que la cola cayera como una maza sobre el cuerpo del demonio la ballena salió disparada en dirección a la bahia del Pequeño Jaspe hacia el interior,lejos del puente.El demonio marino estaba visiblemente aturdido,su cuerpo incandescente que había adquirido una tonalidad azul se hundía bajo las olas pero a medida que el mar recuperaba la calma tras la marejada el fulgor anaranjado de su cuerpo se intensificó de nuevo y las aguas comenzaron a sisear.La mole se revolvió bajo el agua y reanudó la marcha directo al cachalote.A cuatrocientos metros el agua entró en erupción cuando los dos leviatanes volvieron a chocar con violencia.

Los cachalotes eran los únicos adversarios naturales de los demonois marinos en el mar Cerúleo pero hacía mucho que los demonois habían acabado con todos.Supuestamente.Los gigantes colisionaron de nuevo pero esta vez más lejos,hacia el sur hasta que poco después se perdieron de vuestra vista

Naya no podía creer lo que estaban viendo sus ojos. Se llevó las manos a la cabeza al ver a la imponente y descomunal criatura embestir el puente. No entendía porque el demonio actuaba así. No era normal. Salió corriendo hacia éste, pero sus piernas, y el mareo que seguía acosandola, provocaron que perdiera el equilibrio cayendo cuan larga era.

El agua que hizo elevar la bestia cayó sobre ella como una rociada, despejando un poco su mente, pero no mucho más. Su mirada fue rápidamente hacia La Isla de los Cañones, sintiendo cierto alivio, volviendo de nuevo al puente, donde se había producido un gran atasco. Si aquella mole no los mataba, lo harían entre ellos.

Se levantó con esfuerzo intentando no pensar en el miedo que le atenazaba el estómago y corrió de nuevo hacia la entrada del puente para poder gestionar la salida de la gente y evitar males mayores. Mientras hacía aquello, un cachalote entró en escena. Imponía ver aquella batalla tan de cerca, por lo que por un momento olvidó lo que estaba haciendo para observar la escena con el pecho encogido. Se apoyó, con alivio y jadeando ligeramente, en uno de los muretes del puente cuando vió que ambos se marchaban finalmente.

Buscó con la mirada a Anthor y Luther para comprobar que estaban bien

Demonios de las profundiades...

Cachalotes...

Agua salada...

En mi pequeña lista de cosas que no esperaba que me pasaran esta noche se habían cumplido tres de ellas.

Supongo que lo de hacer de diana para las practicas de tiro de los cañones era una cosa extra que ni había contemplado previamente.

Pero como narices podía haberse torcido tanto la noche? Primero salvando a Naya de si misma? Luego salvando mi higado de la bebida nauseabunda del local y ahora esto!

Todas mis reacciones fueron instintivas y pasaron de la autopreservacion a la preocupación legitima por mis compañeros a los que no veía despues de rodar hacia una lado y ser casi arrollado por el gentío

Toda la escena era tan extraña que parecía irreal, bueno tal vez estoy aun en el trillador pensé al tiempo que me cubría despues de la demostracion de potencia de fuego que habiamos presenciado.

Fue entonces cuando localice a mis copañeros de mision y borrachera. Alcé las manos para que me viesen entre el gentío.

-Jefa! como va el estomago?- pregunté a Naya a voces

-No quiero que pienses que he montado esta escenita para impresionarte! esto no suele pasarme normalmente- dije a Naya risueño mientras caminaba tambaleandome un poco tras el subidón de adrenalina.

En cuanto escuchó a Luther hacer mención de su estómago sintió como le venía una arcada. Se giró hacia el murete de nuevo, que no era muy alto, y se inclinó para acabar vomitando en el mar. Se quedó en esa postura, con la mejilla apoyada en la fría luxina que formaba la estructura, sintiendo que todo seguía dandole vueltas

- No pienso beber más -farfulló

Me acerqué a Naya comprobando que al parecer el efecto del alcohol habia llegado ya al punto algido de la noche en el que decide que mejor continuar la fiesta cada uno por su lado.

Esperé pacientemente a que echase todo lo que tenia que echar vigilando de cerca que no corriese riesgos y por un mareo pudiese hacerse daño.

Saqué una petaca metalica que llevaba en uno de mis bolsillos interiores y se lo tendí.

-Es agua, con un toque de limon ... te vendrá bien para quitarte el mal sabor de boca y recuperarte antes.- dije mirandola de arriba a abajo.

No estaba mal para su primera noche de fiesta en los muelles. Solo esperaba que no le diese por seguir experimentando las maravillas de la cocina local, las drogas y las bebidas pintorescas.

Me coloque nuevamente a su lado y le ayudé a caminar nuevamente en dirección a la Cromeria.

-Vamos bella dama... su escolta le espera, proxima parada su cama.-dije con una sonrisa mientras comprobaba si seguia igual de mareada.

Los gritos y lamentos se mezclan con las órdenes que Carver Negro y la Doctora Lucy comienzan a impartir a diestro y siniestro incluyendoos a vosotros en el proceso por lo que no os queda más remedio que quedaros allí a ayudar

El día de la partida os reunís en el patio de entrada a la Cromería donde ya se encuentra Puño de Hierro.Cuando todos llegáis con vuestros petates el hombre hace un gesto para que le sigáis y partís en dirección a los muelles

Mientras recorréis los muelles,dejando atrás pescadores que descargan sus capturas,aprendices de distintas profesiones que corren de un lado a otro,holgazanes,comerciantes que discuten con los capitanes a cuenta del precio de sus productos o sus pasajes,son muchas las personas que dejan de hacer por un momento lo que tuvieran entre manos. Abría la marcha Puño de Hierro y la gente le observaba boquiabierta, admirándolo. Era un hombre alto e imponente,y apuesto,y caminaba con una confianza absoluta,pero lo que depara tanta atención no es su mera presencia física.Comprendeis que el comandante es famoso.Tras Puño de Hierro iban Liv y Kiop seguidos de Naya y Luther y tras ellos todos los demás

Pero si Puño de Hierro consiguió que la actividad aminorara,la llegada del Prisma consiguió que cesará por completo.Gavin paseaba entre la gente repartiendo sonrisas y saludos con la cabeza automáticamente pero todos le trataban como si fuera casi una deidad. Nadie intentó tocar al Prisma directamente aunque abundaban las manos que se extendían para rozar su capa sobre la marcha

Con todas las miradas puestas aún en él Gavin se detuvo ante el comandante y fijó la mirada en el petate del hombre.El silencio que flotaba entre ambos se eternizó

-”No puedes venir,no necesito ningún guardaespaldas”-dijo el Prisma-”Eres el comandante de la Guardia Negra,no puedes dejarles”-

-"No pensaba acompañarte"-responde sin entonación el hombre-"Acompañaré a Kip.Como miembro de la familia del Prisma  tiene derecho a que lo proteja"-alza una ceja ante las últimas palabras-"Puedo hacer lo que considere apropiado para cumplir con el cometido de la Guardia Negra.Nadie puede interferir con eso.Nadie"-

El Prisma miró a Kip y luego a Puño de Hierro

-"¿Sabes que eres un malnacido taimado?"-suspiró y dirigió su mirada hacia atrás,donde os encontrabáis los demás-"Está bien,tú ganas así podremos tratar un asunto que tenía pendiente contigo"-accede al fin

El comandante se permitió una pequeña sonrisa triunfal

-"Por eso sigo con vida"-repuso Puño de Hierro-"Y tú probablemente también"-

Sin perder más tiempo tras el breve intercambio los hombres se dirigieron hacia un rincón alejado del muelle,al pie de una rampa que desembocaba en el agua y en donde el Prisma trazó una plataforma de luxina azul,el primer componente de una trainera.Impulsaban la embarcación unas hileras de pequeñas espaldillas que sobresalían a los costados.Según os habían explicado en una de las clases tras generaciones de estudio,los trazadores verdes y azules habían ideado la manera de emplear engranajes,ruedas y cadenas para accionar los remos;cada trazador personalizaba su embarcación conforme a sus características físicas para ser capaz de impulsarla con la combinación de movimientos de brazos y piernas de su elección y realizaba las modificaciones necesarias para aumentar su eficacia.Puesto que la embarcación ejercía una fricción mínima sobre el agua los trazadores más atléticos podían mantener la velocidad de una persona a la carrera durante una hora.Eso era rápido,muy rápido pero ni de lejos tanto como os dijo Gavin que sería antes de que todos montaseis en la barca

Tras subir todos a bordo la trainera zarpó y os pusisteis en marcha hacia Garriston,hacia la guerra