La regeneración era mientras estuviese Bloodied, y como hice uso de dos esfuerzos curativos, ya dejé de estarlo.
Ahora tengo 23 pg y 7 temporales.
Máster: ¿Vuelvo a tirar entonces el ataque?
Cita:
Ahora tengo 23 pg y 7 temporales.
Ah, es que en el tablero ponía que tenías 13, de hecho creo que esos 7 temporales te los habría dado yo con mi llama sagrada, que no estoy seguro de si impactó. Y sobre lo de gastar dos esfuerzos, entiendo que además de la curación de Sureya usaste nuevas energías, no me había dado cuenta, fallo mío.
Cita:
No, al final me ha atacado a mi para no comerse el daño de mi desafío divino. Oye, ¿y como es que no les has hecho lo de presa del cazador para quitarle más daños en cada ataque?
Cita:
Porque al romper la cuerda me he puesto como una moto y se me ha olvidado.
No, porque sustancialmente has hecho lo mismo. Varis tampoco la ha repetido
Le toca a Sureya.
Procuraré tomar nota correctamente las proximas.
Sureya intenta, sin éxito, atestar un golpe al escudero, incluso a pesar de las distracciones de Aelar.
Sureya no consigue herir al escudero y Sir Oberest grita a Varis
Deja a mi fiel escudero malandrin y enfrentate a alguien de tu talla! sus palabras impregnadas de magia feeria, inducen a Varis a hacerlo
-4 PG si Varis no ataca a Oberest.
Turno de Aelar.
Esta vez Aelar se toma su tiempo, señala con el arma secundaria al escudero [presa del cazador] y luego su arma principal se convierte en un torbellino, que se cierne sobre Ilsifan con aviesas intenciones.
Después, da un paso atrás, separándose de su blanco.
Tirada: 1d20(+10)
Motivo: Larga
Resultado: 9(+10)=19
Tirada: 1d8(+6)
Motivo: Larga
Resultado: 5(+6)=11
Tirada: 1d6
Motivo: Larga
Resultado: 4
Si doy con el 19, le van 15 puntos de daño: 1d8+6 normal y 1d6 por la presa del cazador.
Nimble attack: ataco y muevo.
El mago eladrín vuelve a conjurar un proyectil de energía azulada contra el cabecilla, pero el pulso parece temblarle en el último instante y la saeta mágica se pierde hacia un costado.
-Yo más bien creo que deberíais rendiros antes de que sea demasiado tarde--invita Hadarai al caballero de la lanza y su escudero--Nosotros no deseamos mal alguno a nadie. Como véis, sólo estamos defendiéndonos.
Ilsifan cae al suelo fulminado por el poderoso espadazo de Aelar mientras su caballo comienza a trotar por los caminos.
El proyectil mágico de Hadarai hace estallar la cara de Sir Oberest, quedando solo su cuello descabezado.
Sin embargo, cuando estais a punto de celebrarlo una extraña hiedra comienza a crecer del cuello del caballero verde reformando su cabeza que parece más rejuvenecida.
Turno de Varis, Boran y Sureya.
Ahora que ha desaparecido la amenaza del escudero, Aelar enfunda las espadas y corre hasta donde dejó caer su arco, buscando entre sus pertenencias una cuerda de recambio. Una vez conseguido, se pone con calma a cambiar la cuerda rota, y se apresta a volver a utilizar su mortìfera puntería.
Aclaro: son acciones para el próximo turno.
Dire: tú dirás cuánto tardo en hacerlo; yo diría que correr hasta el arco es una acción de movimiento, y cambiar la cuerda una acción estándar, por lo que el turno próximo no debería poder actuar, pero tú mandas.
Boran, cansado de discutir y no ser escuchado, volvió a tirar al caballero al río.
Tirada: 1d20(+12)
Motivo: Marea de hierro
Resultado: 19(+12)=31
Tirada: 1d10(+7)
Motivo: Daño
Resultado: 9(+7)=16
Aelar, buscar las cuerdas es acción de movimiento y ponerlas otro, de modo que en el siguiente asalto haces lo que declaras y en el siguiente podrás disparar pero no mover.
Cita:
OK.
Yo necesito saber donde acaba el caballero y si podría atacarle desde el puente hacia el agua de caer él al agua, porque como no pueda me como 4 daños! :(
Con un potente golpe Boran arroja al caballero y al caballo al río.
Tanto el jinete como el caballo, no vuelven a asomar la cabeza.
Fin del combate.
220 PX para cada uno.
¡Será grosero! ¡Se ha ido sin despedirse!, dice Aelar. Yo que le estaba preparando un regalo...
Bien, gente, ¿cómo andamos de heridas y demás?
-¡Mmm! ¡Menudo par de dos!--comentó Hadarai al tiempo que regresaba junto al grupo--¿Se puede ser más borde?
Durante unos segundos, el mago eladrín echó la vista al río por si aquel tipo volvía a resarcirse de las heridas hasta que quedó patente que no regresaría.
-¿Habéis visto lo que le ha ocurrido al caballero en la cabeza? Os aseguro que eso no es normal entre los de mi especie. Algo muy extraño debe haber detrás de todo este misterio, sin duda.
- Por la Señora, ¿qué clase de engendro era ese?
Mirando a Hadarai, con expresión asiente a sus palabras y añade:
- Desde luego, no parecía un Eladrin.
Joer, qué torpe me he sentido este combate. Que veeerde estoy en cuarta
- Odio hacer estas cosas, ya hay suficientes seres malignos en el mundo como para enfrentarnos entre los del bien. Por alguna razón... da la impresión de que el eje bien mal va a partirse para añadir una nueva opción...