Partida Rol por web

 Viendo como se le escapan las energías, el hombre de tez oscura, adopta de nuevo una posición más conservadora. Tal vez estas criaturas sean invocadas, si es el caso tarde o temprano desaparecerán.

 El joven lanza un ataque en horizontal para obligar a su adversario a mantener la guardia, pero insuficiente como para ser realmente una amenaza.

Entonces no me dejas alternativa... - Dice el mediano dando media vuelta como si fuera a rendirse ante el único gnoll ya debilitado y con alguna posible hemorragia interna a la altura del esternón, sin embargo, al final y casi como un aviso, aparece una tenue sonrisa en la cara del mediano, lo que explica su siguiente acción.

El mediano curva su espalda hacia la derecha para dar de nuevo media vuelta y descargar dos golpes simétricos al cánido con las manos izquierda y derecha , los cuales,cortan profundamente a la altura de los músculos pectorales y abdominales respectivamente, derramando sendos arcos de sangre del monstruo.

...acabarás como todos los tuyos.

De nuevo,vuelvo a evitar la banda de mariposas gigantes y me lo tomo alegremente riendo y saltando alégremente.

Jijijijiji....te lo dije,le digo al pajarraco,que al parecer ha sido afectado por el ataque de las mariposas,deberías haber aceptado mi oferta...ahahahaha...

Saco un pergamino de mi estuche,guardado en una de mis cartucheras,que utilizo para mis pociones,e inmediatamente,con la mirada fija en el pergamino y la palma de mi mano libre señalando,conjuro su magia.

Arde

De la palma de mi mano,surge un cono de llamas abrasadoras ,extendiéndose hasta los 15'.La anchura y altura de la llama son igualmente 15',con lo que es posible que las llamas afecte a las mariposas,además del lagarto-picudo.

Jjijijijijij...

Hima avanza con pasos cortos, apartándo las molestas ramas del árbol que entorpecen su paso. Sigue llamando tontamente a la mujer como si esa fuera la solución para que salga de su escondite. Tras un pequeño momento de intriga, tanto para él, como para Methgar no hay respuesta alguna como era de esperar. No obstante, de pronto, un rayo electrizante cruza la oscuridad para impactar de lleno en el oficial. (-3 pg).

Este ataque hace que el cuerpo de la mujer quede al descubierto, pero aún así, vuelve a esconder su cuerpo tras el tronco del árbol para protegerse. Hima avanza hacia allí, dolido por el impacto del hechizo pero se acerca lo justo para levantar su estoque a la altura de la garganta.

-Ríndete. Tengo un par de ojos que te están vigilando y te aseguro que no fallará- Trata de intimidar a la mujer, confiando en que si trata de escapar Methgar le de alcance con una de las flechas.

Un guardia medio moribundo y en tierra cuenta sus segundos de vida al hacer frente a la poderosa Bandida. La esfera prontó terminará con su vida si nadie lo impide. Así que, rezando a su Dios mentalmente se hace el muerto, esperando confundir a la mujer hechicera. Otro guardia cercano al capitán se encara contra uno de los numerosos trasgos que aún quedan en pie sin poder dirigir bien su ataque debido a los rápidos movimientos del trasgoide.

Tras ello, el Capitán hace lo propio y ataca al mismo trasgo, el cual se protege del amanazante espadón de Hojaflecha sin demasiadas dificultades.

Llegado el turno de los trasgos, deciden tomarse la revancha con el Capitán y el guardia que le acompaña. Y así ocurre, el trasgo atraviesa con su lanza al guardia y termina con su vida rápidamente. Hojaflecha al ver la muerte de su soldado se queda un tanto paralizado y ya es tarde cuando trata de esquivar el arma del trasgoide, la cual ha pinchado la zona alta de su pecho (-4 pg).

Las otras dos criaturas siguen aporreando a la puerta principal con duros golpes de sus mazas. Y finalmente la puerta se rompe, ofreciendo un pequeño orificio para poder entrar.

Finalmente, Gárret concluye el combate contra los Gnolls. Se ha jugado la vida en el intento, pero ningún obstaculo es dificil para él si quiere seguir la senda para liberar a su hermana o encontrar la respuesta de su muerte. En cualquier caso ha dejado sin aliento al último can que nada pudo hacer por esquivar los sendos golpes del pequeño guerrero. Tras quedar manchado de la sangre de los gnolls, sobre todo el filo de sus armas, Gárret escucha un pequeño aleteo cercano a él. Debe de ser el pajarraco que acudió en su ayuda y que fué muy importante para el transcurso del combate. -Crack, crack...-

El clérigo se da cuenta que su compañero esta bastante herido y sin la posibilidad de usar sus mejores conjuros en un espacio tan reducido, Caesar prefiere usar su poder en ayudar a su compañero a la espera de que pueda abrirle paso hacia la puerta... Mystra, ayúdame a sanar las heridas de este guerrero y permite que continúe su andar...

Enseguida Caesar toca el hombro de su compañero trasmitiendole su poder... Una vez que su compañero se encuentra mejor el hechicero da un paso a un lado para hubicarse mejor y dar un buen recibimiento a quienes pretenden entrar por la puerta caída...

Tras recibir el impacto del rayo Hima localiza a la Dama y la inmoviliza con su arma. Methgar asume que la malvada mujer intentará escapar pero es consciente que desde la roca no tiene un buen ángulo de tiro. Por ello, avanza en dirección a la pareja con el arco preparado y una flecha encajada con la que amenaza a la mujer caputada

El humano más conocido como Querelar trata de liberar un ataque contra la criatura situada sobre la cornisa, el movimiento del arma no resulta amenazadora para el ave y con un ligero salto esquiva la hoja del Valletano. Seguidamente, Caesar, otro humano de cabellos blancos canaliza energía curativa en una de sus manos y palpa el cuerpo del místico, que al instante siente como la magia logra regenerar algunas de sus heridas (+6 pg).

El picudo de la cornisa levanta el vuelo con salto acróbatico hacia atrás y cae en picado en tierra, alejándose del Valletano y acercándose a su dueña.

Racalín por su parte sigue en pie contra la correosa criatura que tiene enfrente y ve como sus mariposas siguen el vuelo, alejándose de la batalla. El lagarto mantiene una pose defensiva extraordinaria y a pesar de que las llamas golpean su cuerpo, la magnifica pose evita que pueda prender sus escasas plumas o la túnica que les cubre (-5 pg)

El orco se sitúa tras el trasgo que acaba de abrir un orificio en la puerta, el agujero es algo pequeño y parece que tendra que esperar para entrar en el interior del pueblo. Así que lo unico que hace es defender la posición.

-Nos atraparán, no es buena idea entrar..- Deduce el estúpido orco hacia los trasgos al ver como los caballeros y el capitán están cada vez más cerca.

La bandida observa orgullosa de si misma el montón de cadaveres que ha generado por culpa de la esfera de fuego. Aprovechando que ya no hay nada amenazante a su alrededor se acerca hasta la criatura alada que saltó las murallas. -Buen trabajo mis pequeños. Id a por el Capitán- Le ordena con su voz tan gélida como las rocas.

Cansada y algo herida decide tomar un respiro y canaliza una energia muy similar a la de Caesar que hace que se regenere, principalmente, una herida bastante fea.

Methgar realiza un movimiento largo hasta localizar un buen punto estrategico para atrapar a la Dama en caso de que esta huya. La elfa sabe perfectamente donde se encuentra, el único riesgo de disparar es que la zona está muy oscura y eso podría hacerla fallar. No obstante, decide quedarse en ese mismo punto concentrada por si tuviera que soltar la flecha en un momento de huída.

...

-¡¡LA VICTORIA ES NUESTRA!! Grita con libertad uno de os jinetes alzando su arma. YAAAAAAA- Acompañado de otro jinete avanzan hasta la puerta para derrocar a todo enemigo que trate de derribar la puerta. Sus lanzas consiguen atravesar a uno de los trasgo que intentan entrar y cae derribado a un solo paso de colarse por el orificio. El arquero retrocede un poco a lomos de su caballo para tener una mejor visión y dispara hacia el único orco que queda en pie. La flecha penetra por la espalda (-4 pg), pero aún tiene las suficientes fuerzas como para poder moverse, y de seguro que intentará colarse por el orificio.

 Querelar siente como el hombre de caballera blanca le canaliza parte de la gracia de su diosa, sintiendo un patente alivio al recuperarse parte de sus heridas.

 - Gracias, gracias a Mystra y a tí.- dice fugazmente para lanzarse con arrojo a por el humanoide en en forma de pájaro que resta amenazándoles.

 Está vez ataca a fondo, protegiendose con la rodela. El filo de la cimitarra resbala por la dura piel escamosa de la criatura, pero es un patente aviso de lo que le espera si no decide huir como su compañero.

 Gárret guarda la espada corta de su mano izquierda en la vaina mientras se acerca al pájaro, al cual lo recoge con delicadeza al cuervo que a penas unos instante antes le había salvado, para guardarlo en el bolsillo más grande de su capa, donde podría estar a salvo hasta que el combate acabara. Luego camina hacia el puente desenvainando su segunda espada preparándose para matar a aquella hechicera que al parecer parecía ser la líder de los asaltantes.

Aguanta pajarito, dentro de un momento estarás bien y todo habrá acabado...

Desde el puente divisa a su objetivo que no queda muy lejos de las murallas cuyas puertas acababan de ceder mientras el mediano acababa con la manada de gnolls, cuyos cadáveres ahora quedaban esparcidos al otro lado del río, cubiertos de sangre.

Justo en cuanto se alejan las mariposas,lanzo dos proyectiles mágicos,que surgen de mis dedos.

¡¡Magie Flech dirixo!!

En cuanto los rayos impactan sobre la criatura,atravesando cualquier tipo de armadura que lleve,doy un paso hacia atrás...*y cojo el bastón,que tiré al piso.

Cita:

-No has cambiado desde entonces. Te dije que te vinieras conmigo, hubieramos sido muy felices juntos..- Mira por detrás de su hombro, intentando averiguar donde se encuentran esos dos ojos que la están vigilando detenidamente. Parece haberlos detectado, pero en cualquier caso el hechizo que va a realizar a continuación es lo único que puede salvarla.

-¡Duplicum satkrum!-

Finaliza el conjuro, y duplicados misticos de ella aparecen a su alrededor dificultando seriamente cual de todas será realmente la Dama de Fuego.

Hima se deja poseer unos instantes por las palabras de la mujer. Analiza en poco tiempo una previa de lo que podía haber sido su futuro en una vida con ella. -Jamás me hubiera ido contigo. Siempre supe que me estabas ocultando algo, y lo único que intentabas era provocarme para que me aliara contigo. Aún tienes una oportunidad para que todo esto termine bien, solo tienes que entregaté, ¡vamos!..- Sigue apúntandola con el arma.

Pero en lugar de entregarse, la mujer realiza un hechizo muy pocas veces visto y el oficial no puede ocultar la sorprendete situación. -Pero.. Methgar, ¿habías visto alguna vez algo así?- Pregunta a la elfa, intentando averiguar cual de todas ellas es la verdadera Dama.

-No dejas alternativa, atacaremos hasta que te descubramos..-

Solo piensa en sus niños, su mujer... esos pensamientos son su única arma para poder sobrevivir.

El Capitán no quiere verse perjudicado, ni si quiera pensar por el estado que ofrecen sus múltiples heridas. Tiene una herida muy fea justo en la parte del riñón izquierda, no deja de sangrar y le está debilitando a medida que pasa el tiempo y eso se nota en sus numerosos ataques. A pesar de eso, no se rinde como todo líder y vuelve a la carga con el espadón en mano para quitarle la vida a un nuevo trasgo.

Tras ello continúa, veroz, y contundente con el ataque pero el trasgo se agacha a tiempo para equivar la hoja del arma que no pretendia otra cosa más que decapitar la cabeza de ese bichejo verdoso.