Partida Rol por web

La lógica de las hogueras

1. AGENTES DE FENRE - Novokovo

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11/03/2022, 20:32
Ser Gherim van Wayden

@Shadha: —No lo conozco en profundidad, Cornelius Kotzträppus. Hace poco menos de un año que arribé a vuestro continente, y hace tan solo tres meses desde que resido en este poblado. No hablo con los lugareños, pero he oído que aquello del granero ocurrió hace diez años, durante la última guerra. Un grupo de bandidos de Herenhout atacó un granero donde se refugiaban unos hombres. Todos los refugiados fueron asesinados, decapitados y sus cabezas marcadas con dos tajos paralelos cruzando los ojos. El hecho indignó tanto a la aldea, que sus habitantes se alistaron como voluntarios para combatir en la guerra contra el reino de Herenhout.

Aquella pequeña narración le paralizó por un breve instante el pensamiento, incluso el latir del corazón.

La Eisenzähne.

Jamás habría podido olvidar la particular ejecución que la unidad de élite comandada por su padre dispensó durante la Guerra de los Destronados a los enemigos del Imperio. Jamás.

Notó cómo crujía su mandíbula de la tensión con la que apretaba los dientes.

Sintió la necesidad imperiosa de agarrar del cuello a la forastera solo para que se arrepintiese de haber deslizado aquella mentira con su lengua viperina.

Inspiró.

Aún... no...

Notas de juego

Si es que no me puedo resistiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiirrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr... XDDDDD

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11/03/2022, 20:47
Ser Gherim van Wayden

- Dónde estás... - Pronunció en una lengua extraña que no provenía de ella - Te encontraré... 

Ser Gherim avanzó, sus ojos ardiendo con ese Sagrado Fuego de Fenre que desprende la mirada de cualquier Ejecutor que se precie de serlo. Pareció estar a punto de dirigir la palabra a la extranjera cuando la hermana Laurien volvió a sufrir un episodio de sus visiones. Esta vez, con una voz extracorpórea. La joven desfalleció, a punto de caer al suelo de cara. Ser Gherim la tomó por el brazo con fuerza, como un halcón haría con una liebre tras un picado fulgurante. Evitó la caída, pero marcó su brazo.

—...

El Rostro de Plata clavó por un instante su mirada imbuida en plata sobre la mirada velada en sangre de Laurien.

Era indescifrable, de todo punto inaccesible.

La ayudó a incorporarse en el más incómodo de los silencios, esos que el enmascarado era un maestro haciendo flotar en el éter entre él y cualquier ser vivo con un mínimo aprecio por su vida.

Pareció querer decir algo, algo importante, pero no lo hizo.

Delante de la extranjera no lo haría.

Delante de la extranjera haría algo muy diferente.

A su debido momento.

Notas de juego

Y mensajito misterioso para concluir y corresponder a nuestra vidente, oigan. ^^

Hale, sean felices este finde. Salud y musha felicidad, camaradas.

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11/03/2022, 22:13
Dr. Cornelius Kotzträppus

Incluso para alguien con tanto aplomo como el profesor Cornelius, la manera que tenía aquella extranjera de blandir el katar que tenía por lengua requería un esfuerzo considerable por no perder la calma. Se hacía patente la nula predisposición de la mujer a mezclarse con los asuntos de los habitantes de aquel lugar, y mostraba su desprecio por Fenre y el Dicasterio con un regocijo y atrevimiento casi suicidas.

Kotzträppus estaba convencido de que Shada al-Qanan atesoraba mucha más información de la que estaba dispuesta a compartir, y pese a que generalmente el erudito disfrutaba del proceso de investigación, siendo sus herramientas predilectas la paciencia y el tiempo, en estos momentos no disponía de estas.

La manera en que todos los oscuros indicios de brujería que habían venido a buscar a estas tierras se arremolinaban en torno a aquella forastera suponía alguna especie de herética broma, y a Cornelius le extrañó que la turba furiosa en que se habían convertido los hastiados habitantes de Novokovo aún no hubiese aplicado su justicia provinciana sobre ella.

A fin de cuentas, aseguraba haber llegado a la par que los problemas. Tres meses.

Y a juzgar por la decoración más allá del umbral la desolación llegó allí de donde venía.

La explicación más simple y suficiente es la más probable, solía pensar el viejo, mas no necesariamente la verdadera.

Cornelius mantuvo la compostura, y se abstuvo de recordar a aquella mujer que Inquisidores no es acólitos, y que ante la sospecha de poder encontrar libros prohibidos en su casa, necesitaría algo más para frenar a la Inquisición que interponerse bajo el dintel de su cara propiedad.

- Hablar con los habitantes de esta localidad es lo que nos ocupa ahora, a pesar del poco ánimo para ello que puedan presentar. Como foráneos, esperábamos cierta empatía por parte de otra extranjera que además, por lo visto, se ha sabido adaptar muy bien al clima frío de estas tierras y estas gentes- El profesor ladeó la cabeza observando la vivienda y, directamente, preguntó:

>> Habéis encontrado una buena casa para vivir, es cierto. Estoy convencido de que a su antiguo dueño le habrá costado marcharse de aquí. ¿A qué os dedicáis?, ¿Acaso ejercéis algún arte?. Parece vuestra morada de artesano. Una curiosa configuración de vigas. Una estructura muy sólida, sin duda. Ni un cataclismo acabaría con ella.

Seguía el erudito buscando en los pozos de agua densa y oscura que eran los ojos de Shadha reacción alguna a alguna de sus palabras, cuando la joven Laurien se vio aquejada por otra de sus visiones. Esta vez parecía que alguna entidad, a través de ella, se dirigía a la mujer de piel oscura y altivas maneras. Directamente a ella, a través de nuestra nívea hermana.

- Dónde estás... - Pronunció en una lengua extraña que no provenía de ella - Te encontraré... 

 

Notas de juego

Me intriga mucho esta tipa. Y no sé, creo que no es la bruja. Demasiado de cajón. Igual me equivoco.

Qué será de Heinrich?

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14/03/2022, 11:03
Shadha al-Qanan

—El clima de las tierras de Fenre no es fácil para alguien como yo —replica la extranjera—. Y mucho menos el clima de aquí, de este lugar abandonado por Fenre. Falta sol. Falta arena. Sobran las nubes. Sobra la niebla. Pero me acostumbraré, Cornelius Kotzträppus. Los trotamundos somos, también, sobrevivientes.

El profesor pregunta por la casa donde vive, y si ejerce algún oficio. Cuando Cornelius pronuncia la palabra cataclismo, notáis cómo el cuerpo de Shadha al-Qanan, durante un efímero instante, se tensa.

—La casa es de buena factura, como veis. El dueño anterior era un comerciante de especias. Cuando un hombre de negocios se cruza con una bolsa de oro, no duda en llegar a un trato. Aceptó el intercambio sin más. He oído que usó el dinero para irse a vivir a la ciudad de Antongrado.

>>En mis tierras natales, Cornelius Kotzträppus, solía dedicarme a la confección de pócimas y elíxires. Creo que la palabra que usáis para eso es... ¿olcamia?, ¿olquimia? Pociones para el amor, para aguzar los sentidos o para acallar los fantasmas internos. En estas tierras, sin embargo, he tenido que permutar mi oficio. Vuestras gentes desconfían de los brebajes arcanos, de manera que ahora me dedico al arte de la tapicería. Los lugareños se muestran mucho más dispuestos a adornar sus casas con mis tapices que a regar sus gargantas con mis pociones.

En ese momento, Laurien pronuncia unas palabras en un idioma extraño y sufre un desvanecimiento, con lágrimas en los ojos. La extranjera, al escucharla, entorna los ojos. En ningún momento amaga a ayudarla. 

—Vuestra acólita necesita descanso, y yo debo volver a mi trabajo. Espero haberos sido de ayuda, sacerdotes. Si me necesitáis, aquí estaré.

Notas de juego

¿Alguna última pregunta para Shadha? Caso contrario, cierra la puerta en vuestras narices.

PD: ¡El hermano Llagas y Pústulas! Buen teaser trailer, Dew.

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14/03/2022, 12:00
Dr. Cornelius Kotzträppus

La extranjera seguía mostrando cierta premura por deshacerse de sus visitantes y regresar a sus quehaceres, mas a Cornelius le daba la sensación de que había relajado su discurso para con él, y la altivas maneras de la mujer que tan irritantes le resultaban en un principio permitió abrir paso a una extraña simpatía hacia ella. 

Se cuidaría de compartir estos pensamientos con su compañero Rostro de Plata, quien a buen seguro relacionaría este hecho con la consecuencia de alguna brujería o hechizo, inflexible el Inquisidor en su búsqueda y ajusticiamiento de las brujas.

El hecho de que Shadha tuviese conocimientos acerca de las artes alquímicas también interesaba el erudito, convencido a su vez de que quizá fuera este hecho, y no otro, el que acercaba posturas entre ella y Stanislav, el boticario. Cuando la mujer afirmó ya no practicar tales procesos sino dedicarse al tejido de tapices, el profesor buscó en las manos de piel oscura de la mujer los síntomas de aquella actividad, que sin duda dejarían el callo de la rueca, así como marcas en el calzado de al-Qanan, que habría de ser apropiado y desgastado por el uso del telar. Según ella, debía regresar a su trabajo, por lo tanto lo más probable sería portar atavíos o herramientas para ayudarle en la urdimbre. 

Tales observaciones eran ya parte del proceso rutinario de investigación de Kotzträppus, que simulaba disponer a marcharse mientras ya preparaba en su cabeza una última cuestión, que dejaría caer volviéndose en el último momento, táctica que solía pillar a los interrogados con la guardia baja, y que en más de una ocasión le había reportado jugosas pistas al curtido investigador, que estudiaba con profundidad el arte de interpretar esos pequeños gestos, minúsculos reflejos sinceros e inconscientes, que delatan los pensamientos a través de disfraces e imposturas.

El anciano apoyó con suavidad su bastón a un lado, y se despojó de la capa con capucha para olfatearla a continuación.

Era cierto, el vino de palma apenas dejaba mancha.

Una vez hubo sacudido un poco la prenda, se la colocó a la joven Laurien sobre los hombros, delicadamente, pidiendo su aprobación con la mirada. El día se estaba tornando más frío. 

Por el rabillo del ojo el profesor pudo ver a la extranjera disponiéndose a cerrar de nuevo la puerta, momento en el que aprovechó para interrumpir su acción con una última pregunta.

- Por cierto, Shadha al-Qnan - se volvió hacia ella, pues ya encaraba el camino dejando la casa atrás, con un gesto de curiosidad algo exagerado

>> Si vos y las desgracias siempre parecéis estar cerca, y no sois la que los causa, ¿No será que las enfrentáis, de una u otra manera?

 

 

 

 

 

 

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14/03/2022, 13:58
Hermano Timur

Timur patalea como un bebé cuando le echas alcohol en la herida y le extraes la bala. No te sorprende que este patán nunca haya obtenido un grado mayor a sargento.

—¡S-sí, hermano! Me ganaré tu confianza, lo juro. Puedes confiar en mí, colega. No más subterfugios, amigo, no señor. ¡No huiré! No quiero, y tampoco es que pueda hacerlo, no con el culo en el estado en que lo tengo. No puedo montar. Me has dado bien, ¿eh?

Le pides que te diga todo lo que sabe sobre Erik, Miloslava, Osip, Stanislav y la extranjera. Timur asiente fervorosamente con la cabeza. Es increíble lo colaborativo que lo ha hecho el balazo en las nalgas.

—Erik... Erik es un bravucón. Es veterano de guerra. Luchó en la Guerra de los Destronados a favor del Imperio, como todo el mundo en esta aldea. Detesta a los que venimos de Herenhout. Digo, os detesta, a mí no me detesta porque nunca supo de mi verdadera identidad... si la supiera, ya podría darme por muerto. Pero Erik, qué quieres que te diga, será valiente, será corajudo, pero es tonto como una mula. Tonto y corajudo, mala combinación. Ya lo has visto, ahí, fuera del ayuntamiento. Si lo empujas lo suficiente es capaz de hacer cualquier cosa.

>>Miloslava es una buena moza, compasiva. Tiene su aquel, eh, que si yo no fuera sacerdote, ya hubiera intentado... ah, ejem, te decía, que es buena moza. Cada tanto viene a confesarse, y te digo, hermano, que es una mujer piadosa. Cuando comenzaron a nacer los terneros deformes todos los campesinos sacrificaron los suyos, menos Miloslava, que aun los conserva. Pero es que Miloslava ama a sus animales. Esa mujer no mataría a un animal ni aunque tuviera cinco cabezas, ocho pares de ojos y trece patas.

>>Osip tiene la sesera floja, pero no es mal chico. Ha sido padre hace poco. Dice que vio no sé qué cosa en el cementerio, y yo no le tengo por mentiroso. Es honesto y trabajador, pero tiene un crío de cinco meses. El pobre no duerme, ¿entiendes? Y la falta de sueño pudo hacerle imaginar cosas...

>>Stanislav... escucha, no digas que fui yo quien te lo dije, pero creo que es —baja la voz—... ateo. Nunca se confesó, nunca vino a mis sermones, en algunas ocasiones hasta me ha soltado comentarios socarrones sobre Fenre. Es un listillo. Es educado, y por eso se piensa más que los demás. Pero la gente le aprecia. Está todo el día en su botica, leyendo sus libros, y pasa buena parte de su tiempo con los niños huérfanos de la guerra. También he oído que se lleva bien con la extranjera.

>>Y sobre la extranjera, qué decirte, hermano. Te diría que no es trigo limpio, pero quién soy yo para juzgar a otros, ¿eh? —suelta una risa que se convierte en una mueca cuando un latigazo de dolor le azota la pierna—. Apenas comenzaron nuestros problemas, la extranjera llegó aquí, días después. Menuda casualidad, ¿eh? No te creas que nadie se ha dado cuenta de esto. Erik se ha dado cuenta, y muchos otros vecinos también. Tampoco es que la extranjera haga mucho para ganarse la simpatía de las gentes de Novokovo. No habla con nadie, excepto tal vez Stanislav. Los que viven al lado de la extranjera me han dicho, en confesión, que por las noches la escuchan hablando sola, en su lengua natal. Pues no sé, yo no quiero tener nada que ver con ella.

>>Confío en que mi secreto está a salvo contigo, colega —dice Timur, con las manos en el culo.

Notas de juego

Supongo que con esto damos por terminado la escena con Timur? Ahora queda a tu decisión cómo seguir, si quieres buscar a tus compañeros, o visitar a algún PNJ.

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14/03/2022, 15:13
Heinrich von Bassenheim
Sólo para el director

Heinrich pasa un rato mesándose el bigote, pensativo, reflexionando sobre toda la información que acababa de soltarle el párroco. Había sido, sin duda, una situación que se desenvolvió muy contrario a como pensaba el explorador, pero bien está, lo que bien acaba. Cierto es que Timur podría estar mintiendo, pero después del agujero de bala, y teniendo en cuenta lo que se jugaba aquel hombre, cabría esperar que fuera verdad. Cuestión de contrastar, cuestión de hacer su trabajo.

-Bien Timur, por el bien de todos, incluido el tuyo, espero no hallar mentiras en tu discurso, al igual que espero que el comportamiento del pasado sea un lapso que no volverá a repetirse. Espero tu colaboración directa a partir de ahora. Yo no te daré problemas si tu no me los das y, como te he dicho, fuera de mi grupo inquisitorial, nadie sabrá por mi boca tu secreto. Eso si, te aconsejaría "regularizar" tu situación cuanto antes y hacerte párroco por la vía oficial. Tarde o temprano te toparás con alquien que exponga que no eres párroco de verdad, y no será como yo. Por cierto ¿dónde vive Erik?

 

Heinrich escuchó la respuesta del párroco y se dirigió hacia donde le había indicado que era la casa de Erik, al encontrarse frente a ella, llamó a la puerta.

Notas de juego

PD: La verdad es que se me han pasado un par de cosas al volverme a poner aquí, en la ristra de preguntas anteriores, le voy a pedir que me diga que es eso del incidente del granero que llevo a Novokovo a decantarse por participar en la guerra. Al final de la petición de información de toda esta gente, pondría un "y cuéntame también a que se debe la participación de Novokovo en la guerra, eso que llaman, el incidente del granero". También le habría preguntado por el alcalde: "a mayores de toda esta gente, que puedo esperar del alcalde, no quisiera tener que volver a pasar por una situación como la que hemos tenido aquí ¿qué sabes de él?" Por lo demás, si, terminamos la escena.

Si ves que este flash forward está fuera de lugar, pues al final de la charla con Timur del actual post, añadiría un:

-Hablas que Erik es rencoroso con Herenhout. Sé que esta aldea se sumó al conflicto por lo que llaman "el incidente del granero", ¿qué es exactamente?.. cuéntame lo que sepas de ese hecho. Y ya de paso, que puedo esperar del alcalde, no quisiera tener que volver a pasar por una situación como la que hemos tenido aquí ¿qué sabes de él?

PD2: por agilizar, si Erik no estuviese en su casa, a la primera persona que me encuentre:

¿Disculpe, podría indicarme donde puedo encontrar a Erik?

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14/03/2022, 15:28
Ser Gherim van Wayden

Suficiente.

Ser Gherim había hecho gala de una meritoria y abnegada paciencia que rara vez se le atribuía por sus compañeros, ignorantes de que la frialdad inherente del cazador de brujas le convertía en un depredador metódico y calculador. Su paciencia, cierto es, tenía un límite. Aguantó estoico, quizás mascullando algo entre dientes. Aguantó, desde luego. Casi podía intuir la mirada de soslayo del maestre suplicándole contención ante las continuas blasfemias de aquella deslenguada intrigante de piel tostada. Solo el desvanecimiento momentáneo de la hermana Laurien había impedido una más temprana acometida. En verdad, Shadha fue afortunada por disfrutar de tan sosegada conversación filosófica y teológica con Cornelius. Quién sabe. Quizás fuese su última conversación en este mundo.

El Ejecutor pareció impeler a la hermana Laurien a permanecer firme, una actitud que habría sido más lógica para con un soldado, no en una profetisa. Ser Gherim desvió su mirada de la sangrienta contrapartida de la joven vidente tratando de purgar de su mente las lágrimas de sangre manando por sus mejillas y alcanzó a dar unos pasos con ese semblante implacable que le caracterizaba.

Una de las ventajas del proceso de investigación inquisitorial estriba en el hecho de que resulta harto complicado para un sospechoso1 ocultar cualquier prueba de lo que en el argot del oficio se denomina La Visión de Fenre. Siendo este un concepto abstracto, merece la pena puntualizar que un Inquisidor no necesita órdenes para registrar tu sótano o tu trastero. De hecho, no necesita órdenes para calcinarlos si es necesario, incluso contigo dentro. Siempre que lo haga en nombre de Fenre, que no es cuestión de pecar de arbitrario, oiga. Esto presenta innumerables ventajas desde la perspectiva de la economía procesal y es en buena parte la razón por la que cuando se ve a un Inquisidor llegar a un aldea hay una selecta frase que desaparece del vocabulario popular:

—A mí que me registren.

Vayamos a tonterías.

La última pregunta del maestre Cornelius fue acompañada, matizada, apuntalada si se prefiere, con un sutil pero preciso desplazamiento del pie del Rostro de Plata, bloqueando así el inminente cierre de la casa de la extranjera. Su mano, sus dedos convertidos ahora en espolones de acero, abrió lenta pero inexorablemente la puerta de la casa, de par en par, aniquilando toda barrera protectora entre la extranjera y él.

Un Inquisidor jamás allana una morada. Simplemente, esta se desviste para él, mostrándole todos sus secretos.

—¿Acaso tenéis prisa? Contestad a la pregunta que se os ha formulado —dijo con una serena sonrisa tamizada de una peligrosa y velada suspicacia, clavando su mirada esmeralda en aquella femenina efigie de obsidiana.

Una vez más, la elocuente mirada de Ser Gherim portaba un silencioso interrogante, uno que nadie puede resolver.

Cuando el lobo está a las puertas, ¿a qué dios vas a elegir rezar?

Ups... Tarde. Ya te ha destripado.

Notas de juego

1Término este omnicomprensivo para un Inquisidor de pro.

Presiento que se acerca la hora de lucir al mejor Ser Gherim van Wayden... 

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14/03/2022, 17:05
Laurien Groote Stroek

La cabeza se sentía pesada, los ojos dolían mientras las caricias del carmesí recorrían su piel y entonces... Entonces el dolor de la presa del hermano Rostro de Plata provocó que lo mirase directamente a los ojos y aunque sus ojos iban volviendo poco a poco a la normalidad aún veía una imagen borrosa y poco nítida, aún así, sonrió... Una sonrisa cálida, dulce e inocente, la sonrisa de una joven que comprende cuál es su lugar...

Aquel dolor hizo que recuperase la compostura, volviéndose a erguir y asintiendo agradecida cuando el maestre puso la capa sobre sus hombros, no debía molestarles en su trabajo, tenían una misión, una misión sagrada...

- Podéis negarlo todo cuanto queráis pero Él sabe lo que escondéis y lo que buscáis... Seguid mi consejo y darles las respuestas que mis hermanos buscan o quizás vuestra búsqueda se quede sin resolver... ¿Acaso no queréis encontrarle?

En todo momento miró a la mujer, una mirada firme que resultaba ligeramente dura y fría por los restos de sangre en su rostro. 

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14/03/2022, 17:51
Hermano Timur

—Ah, eso del granero, eh... ocurrió mucho antes de mi llegada a Novokovo. Ocurrió hace... ¿nueve? No, no, diez años. Sí, ocurrió hace diez años. Fue una putada, según me contaron. La guerra ya había comenzado pero muy poca gente en Novokovo se había alistado a combatir. Tampoco hubo reclutamientos forzosos.

>>Resulta que un buen día vino a la aldea un grupo de oficiales del Imperio. Unos cinco o seis. Habían sobrevivido a una batalla con, ejem, con nosotros, con los de Herenhout, y estaban escapando. Pidieron permiso a los aldeanos para refugiarse aquí durante unos días antes de ponerse en marcha otra vez. Se ocultaron en el granero de Dina, una de las vecinas de la aldea.

>>Unos días más tarde vino una partida de Herenhout a por ellos: los Colmillos de Hierro. ¿Te suena ese nombre, colega?

Recuerdas vagamente a los Colmillos de Hierro. Era una unidad de élite de tu bando, del ejército de Herenhout, conformada por muy pocos hombres, que se dedicaban a cazar a los oficiales del Imperio. Las historias que se contaban acerca de los Colmillos de Hierro eran macabras, se decía que no había crueldad a la que no estuvieran dispuestos a atreverse, y que mataban a sus enemigos de las formas más retorcidas posibles. Su toque personal era decapitar a sus enemigos y marcar las cabezas con dos tajos paralelos en los ojos. Hasta donde sabes, hoy en día los Colmillos de Hierro ya no existen: todos murieron en la guerra.

—Seguro que recuerdas a los Colmillos de Hierro... si habré vomitado escuchando las historias que se contaban sobre ellos. Pues resulta que los Colmillos siguieron el rastro de los oficiales imperiales hasta el granero donde se escondían. No solamente asesinaron a los oficiales, también masacraron a la familia dueña del granero. Mataron al esposo de Dina, a sus padres, a sus suegros y a uno de sus hijos. Dina sobrevivió, aun vive en la aldea. Los Colmillos de Hierro escaparon sin un rasguño. Por estas cosas deserté, colega, y no hay un día en el que me arrepienta de ello.

>>Los aldeanos estaban que trinaban con esto del granero. Muchos fueron a la guerra, ¡como voluntarios!, los muy pardillos. Querían vengar la ofensa, recuperar el honor, y bla, bla, bla... casi todos murieron en la guerra. Si es que hay que ser idiota para ofrecerse como carne de cañón a una guerra, ¿no?

Luego le preguntas por el alcalde. Timur le quita peso al asunto con un gesto de la mano.

—Un papanatas. Según me han dicho, antes era feroz, pero luego de que le cortaron la cara no es más peligroso que gatete recién nacido, jé. Nadie le respeta, como te habrás dado cuenta, y hasta él es consciente de sus límites. Lo único que le interesa a Minsky es que esto de la brujería se solucione cuanto antes, porque cada día que pasa, tiene un poco menos de autoridad. Y si las cosas siguen así, lo que viste ahí fuera del ayuntamiento no será nada en comparación a lo que ocurrirá.

>>Gracias por tu, eh... mamadami... magmamani... magnanimidad, hermano. Te prometo que regularizaré mi situación cuanto antes, ya verás, ya verás. Pero primero tengo que regularizar mi culo.

Notas de juego

(sigue...)

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14/03/2022, 18:17
Erik

Timur te da indicaciones para llegar a la casa de Erik. Tras una breve caminata, llegas a ella. Es una casa humilde, de una familia de campesinos no pudientes. Erik está trabajando en la huerta adyacente a la vivienda. A su alrededor ves dos niñas y dos niños correteando por ahí, sus hijos. A través de una de la ventanas de la casa ves a quien debe ser la esposa de Erik, tejiendo. No pasas por alto el hecho de que la mujer tiene un moratón en el ojo.

Erik deja la huerta y camina hacia ti. Huele a sudor y campo, y la tierra le mancha las manos, las rodillas y la cara. Te mira mal, con el ceño fruncido y los puños en las caderas, sacando pecho hacia afuera.

—A ti ya te vi. Ibas con el enmascarado, el anciano y la mujer. ¿Vienes con buenas noticias, inquisidor? ¿Ya has cazado a esa puta bruja?

Notas de juego

Todo tuyo para interrogar ;)

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14/03/2022, 18:29
Shadha al-Qanan

El profesor remarca que Shadha parece siempre estar cerca de las desgracias, y pregunta si en vez de causarlas, quiere enfrentarlas. Por primera vez en la conversación, Shadha al-Qanan parece descolocada. El comentario la ha tomado desprevenida, como si Cornelius hubiera hurgado demasiado hondo en su interior. La extranjera, sin decir nada, se apresura a dar el portazo. Se topa con el pie de Rostro de Plata, quien abre la puerta de par en par.

Shadha suelta un bufido.

—He visto demasiadas desgracias, Cornelius Kotzträppus, y haré todo lo posible por evitar que se repitan. Ese es el motivo por el que estoy aquí.

Laurien la insta a hablar, para poder encontrarle a quien está buscando.

—No soy la causante de lo que está ocurriendo aquí. No es mi alma ni mi hogar lo que debéis inspeccionar. Estoy buscando a la misma persona que vosotros, acólitos. Queremos lo mismo, pero pero por razones distintas. Vosotros la llamáis bruja, yo la llamo portadora. Queréis verla arder, y yo no. La portadora puede ser reconvertida. Sé que puede ser apartada de la senda de la destrucción; sus poderes pueden ser usados para el bien.

>>Después de todo, vidente —le dice a Laurien—, veo que la magia también reside en tu cuerpo. Tú también eres una portadora, pero has sido instruida en el camino de la rectitud. ¿O acaso también deberías arder, solamente por haber sido bendecida con el don de los arcanos?

Por último, posa sus ojos de obsidiana sobre Rostro de Plata.

—¿Qué quieres esconder detrás de la máscara, acólito? O, mejor dicho, ¿de qué te escondes? En mis tierras tenemos un dicho: todos los enmascarados huyen de algo.

Notas de juego

>> Si vos y las desgracias siempre parecéis estar cerca, y no sois la que los causa, ¿No será que las enfrentáis, de una u otra manera?

¡10 puntos para Gryffindor!

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14/03/2022, 19:08
Heinrich von Bassenheim
Sólo para el director

Heinrich camina hacia la casa de Erik, con sus pensamientos puestos en la guerra, y en lo recién escuchado sobre el incidente del granero. Mala cosa. No es que alabe al imperio, ni mucho menos, pero en la guerra, igual que en la vida, todo es gris. El blanco y el negro son ideales, metas de caminos que nunca se terminan, pero ay, el gris, el gris está presente en todos, todos los días.

Sin darse apenas cuenta, al estar sumido en sus pensamientos, llega a los dominios de Erik. La escena que ve, le refleja un poco a que se va enfrentar. Sin duda, puede darle más problemas que el párroco, pero si Timur no mentían, quizá su falta de luces facilitase el trabajo.

Heinrich escuchó la bienvenida, y con un tono serio, pero relativamente afable, sin atisbo de su "común" sonrisa, le contestó al granjero.
 

-Así es, vengo con en grupo inquisitorial. Me temo que las buenas noticias tardan más en cosecharse que las manas, Erik, no obstante, mi propósito y mi trabajo es llegar a ellas cuanto antes. Por lo poco que he visto de ti, estarás de acuerdo, en que antes de quemar a nadie, debemos asegurarnos de quien es la bruja, y no hacer que paguen justos por pecadores. Que culpa tenéis los habitantes de Novokovo de que el mal se haya instalado entre vosotros. Con vuestra ayuda, pagará solo quien realmente lo merezca, y es eso por lo que estoy aquí Erik, quiero tu ayuda. He apreciado que el destino te ha puesto al mando del pueblo, en la ausencia de sus funciones del alcalde, así que quisiera pedirte que me hablases del pueblo y de sus gentes, lo que ha estado pasando. Cuantos más detalles puedas ofrecerme, antes terminaré mi trabajo. ¿Qué me puedes contar?

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14/03/2022, 22:05
Dr. Cornelius Kotzträppus

-Basta, es suficiente- el erudito interpuso su bastón como si fuera una barrera infranqueable frente a las provocativas palabras hacia el Inquisidor Púrpura, tratándose de adelantar a la respuesta de este, que contra todo pronóstico seguía conteniendo la afilada cuchilla que tenía por lengua y con la que habitualmente solía cortar a la altura del gaznate las discusiones de quien osaba enfrentarle... 

>> Vuestra importancia personal no está justificada en este caso, Shadha al-Qanan. Vuestra motivación es la erradicación del Mal, al igual que la nuestra. Cada uno somos diferentes instrumentos de lo que es justo y es bueno, y el camino es un Misterio. Por lo tanto, ninguno estamos en posesión de la Verdad. Tan solo recorremos las sendas inciertas, inescrutables, que nos acercan a ella. Por ello os pido, os exhorto, que nos ayudéis en nuestra tarea; oponeros a nosotros sería imprudente, nos alejaría a ambos de nuestros propósitos y además allanaría el camino a los que trabajan por oponerse a aquello por lo que luchamos. No son pocos, como vos ya sabéis.

>> Compartid lo que tengáis sobre este asunto con nosotros sin reservas, Shadha, pues llegar al fondo de este asunto es la única manera de terminar con el sufrimiento que asola estas tierras.

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15/03/2022, 23:15
Laurien Groote Stroek

Miró con desconcierto y desconfianza a la mujer cuando le dirigió aquellas palabras, sintiéndose insultada y no era la primera vez... ¿Cuántas veces había escuchado el insulto de bruja? Ella había sido bendecida por Fenre, no era como esas sucias, traidoras e impías brujas... 

- No soy eso que dices, mujer - Su voz intentaba parecer firme y seria - Soy una escogida, una bendecida por Fenre y una inquisidora.

Notas de juego

Perdón por el post corto... Mucho curro y en mi ciudad están las jodidas fallas, lo que me pone tensa y no me deja descansar bien. 

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16/03/2022, 20:28
Erik

—¿Que te dé detalles? No, mejor te digo quién es la culpable. O las culpables. La extranjera, esa zorra de piel oscura, llegó aquí hace tres meses, días después de que comenzó el mal clima. Si es que hay que ser idiota para pensar que eso es una casualidad, ¿no? Esa mujer apareció de la nada, compró una casa, se instaló allí, no habla con los vecinos, nadie sabe qué hace aparte de fabricar unos tapices horrorosos que te vende por un ojo de la cara.

>>Y si no es la extranjera, es Miloslava. Todos hemos tenido el problema de los terneros deformes. No veas las monstruosidades que nacen. Apenas una vaca tiene crías deformes las pasamos a cuchillo. Todos los campesinos de la aldea lo hacemos... todos menos Miloslava, que decidió conservar a esas asquerosidades. ¿Es que soy el único que piensa que es sospechoso? Que yo no soy inquisidor, pero luces me sobran, muchacho.

>>¿Quieres a tus sospechosas? Ahí las tienes. La bruja es la extranjera o es Miloslava, o ambas son brujas, malditas mujeres, todo el mundo sabe que no se puede confiar en ellas. ¿Así que vais a actuar pronto o qué? El tiempo apremia, y los demás la estamos pasando putas por culpa de esa bruja. Si tenéis algo de sesos, hoy mismo apresáis a esas dos, y las quemáis a ambas, por las dudas.

Tras unos segundos de silencio, Erik te mira de abajo a arriba, con el ceño fruncido.

—Tu acento me es familiar. ¿De dónde vienes? ¿Veterano de guerra?

Notas de juego

Si quieres mentirle a Erik sobre tu origen, puedes tirar Comunicación dificultad 11 (ten en cuenta que Erik luchó en la guerra y lo hizo contra tu bando).

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16/03/2022, 21:00
Heinrich von Bassenheim
Sólo para el director

Heinrich escuchó al hombre, pese a las tremendas ganas que tenía de cortarlo en seco. Una vez terminó, sonrió cínicamente, y contestó en el tono más frío que pudo armar:

 

-Deberías, Erik, recordar quien es el inquisidor, por que por un momento, da la impresión de que has asumido ese papel. Deja que sea yo quien decida quien es culpable y quien no tras reunir pruebas. No tengo por costumbre dar por cierto lo que me dice la primera persona que me cruzo. De ser así podría haberte quemado nada más poner un pie en el pueblo, y dar por solucionado el problema, siendo eso verdad o no. Eres veterano de guerra, o eso he escuchado en el pueblo, seguro que en la guerra has visto a mucha gente tomar decisiones sin sopesarlas demasiado, dándoles igual los daños colaterales, o directamente dándoles igual la verdad. No quieras convertirte en una. Menos con tus vecinos.

Heinrich calló unos segundos.

-Bien, una vez que he dejado eso claro, ciñámosnos a lo que te he preguntado. Me has hablado de Miloslava y de la extranjera. Que me puedes decir de otros ciudadanos. ¿Osip, Stanislav, Izolda...qué me puedes decir de Minsk, de Timur...qué me puedes decir...de ti?

En las últimas dos palabras Heinrich procura dejarlas veladas en el aire, para dar a entender que nadie está libre de sospecha, de momento.

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17/03/2022, 12:41
Ser Gherim van Wayden

Había que reconocer que el maestre sabía lo que se hacía. Con su interrogatorio, aquel viejo zorro había conseguido sacarle una muy interesante confesión a la extranjera, que tuvo a bien lanzar una estocada dialéctica a Laurien y dedicarle otra al propio Ser Gherim.

El enmascarado consideró que se había comportado con notable galantería...

Hasta entonces.

@Shadha: —¿Qué quieres esconder detrás de la máscara, acólito? O, mejor dicho, ¿de qué te escondes? En mis tierras tenemos un dicho: todos los enmascarados huyen de algo.

A los carnosos labios de la extranjera voló rauda una sonora y brutal bofetada con la contundencia con la que el huracán arranca de cuajo un árbol enfermo de la tierra. Ser Gherim se encargó de calibrar el golpe de modo que su anillo rasgara carne dejando marca indeleble, como haría la curvada garra de un halcón.

Un espolón no nace para acariciar la piel.

Ejecutor —matizó Ser Gherim con una cortante vehemencia, una media sonrisa siniestra dibujándose en sus labios. —Estoy seguro de que a partir de ahora lo recordaréis mucho mejor.

El Rostro de Plata parecía expectante, sorbiendo la emoción que destilaban los ojos de carbón de la forastera.

—Muy lejos os halláis de vuestros dioses y de vuestra tierra como para jactaros dándonos lecciones. He tolerado vuestra insolencia hasta ahora, pero mi paciencia se ha agotado. ¿Creéis que esto es una máscara? —dijo, saboreando el desafío en los ojos de aquella mujer de piel oscura, tan diferente a él, tan exótica y al tiempo ajena al miedo que experimentaban los novokovitas a su paso.

Erráis... Este es mi verdadero rostro —siseó, su rostro torvo fulminando a la mujer. Ser Gherim resistió el impulso de retirar con parsimonia la pesada plancha de plata que cubría y al tiempo protegía su cara. Sentía la horrible cicatriz bajo ella, el devorador beso del fuego surcando su piel muerta, otorgándole un raro, incluso simbólico contraste. Pese a su juventud y buena apostura, sus rasgos cobraban un halo terrorífico bajo la reluciente placa metálica. Quiso compartirlos con la extranjera, en un preludio íntimo antes de una revelación fatal.

—Todos huimos inútilmente del pasado. Todos. Sin excepción —dijo con un extraño deje lacónico. Aún mantenía sus ojos en la extranjera. —Vos también. El tiempo no se detiene. Nos obliga a correr tras él en una carrera que tenemos perdida de antemano —Ser Gherim se quedó por un instante en silencio, cogitabundo.

—Yo también tengo un dicho para vos, extranjera… El pasado predice el futuro —sentenció, cáustico y desolador.

La agarró del cuello sin contemplaciones, casi alzándola del ímpetu, obligándola a entrar en el interior de la casa.

—¿¡A quiénnnn… estáis… buscando…!? ¿¡Qué os hace aparecer en esta aldea justo en el momento en el que empieza a pudrirse el grano y a aparecer terneros deformes!? —dijo, la ira recorriendo sus venas como una yegua desbocada al tiempo que sus dedos se hundían en su presa.— Sabed que Fenre no os asistirá esta noche. Nadie lo hará. Abandonad vuestra pasión por el enigma y hablad como si la vida os fuese en ello… porque en verdad os digo que estáis mirando a vuestro Creador a la cara en este preciso instante…

Notas de juego

Bueno, vine aquí a dar espectáculo y me junté con un PJ que es en sí mismo una máquina de generar escenas de género noir.

Evidentemente, he aguantado hasta que he podido, oiga. Pero es la hora de investigar ese curioso cofrecito que guarda esta deslenguada forastera, ¿no creéis? ;-D

Enter the Bad Cop.

@Baalis: Querido amigo, usted dirá si es necesaria la tirada que corresponda, que yo voy rápido al corte. En esencia Ser Gherim ve que esta tipa sabe mucho más de lo que dice y va a hacer presión de la mala para intentar sacárselo. ;-)

Todos sabemos que lo estabas deseando, pequeño maleante. ^^

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17/03/2022, 13:28
Ser Gherim van Wayden
- Tiradas (2)

Notas de juego

¡UN MALDITO 9! ¡NO ME FASTIDIES, VAN WAYDEN! ¡Si tú y yo somos amigos! ¿Cómo me has vendido de esa manera, hombreeee?

¡Alto, alto, alto! ¡DETENGAN LAS ROTATIVAS!

¡DOBLONASO! ¡GASTO DOBLONASO AHORA MISMO!

¡LANZO Y...!

¡ÉXITOOOOOOOO CON COMPLICACIÓÓÓÓN! ¡MI FAVORITOOOOOO! ¡AJAJAJAJAJA! ;-D

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17/03/2022, 15:17
Erik

Tus palabras no le sientan bien. Notas cómo se le marcan las venas del cuello, y una en la frente que le palpita. No obstante, responde tu pregunta con laconismo.

—Osip es un cobarde que no quiso ir a la guerra. Que le den. Poco me importa lo que sea que vio en el cementerio. Stanislav no hace otra cosa que leer y llorar a su esposa muerta, pese a que lleva décadas bajo tierra. Un hombre que llora y que no sabe arar la tierra no es un hombre. Izolda... esa hembra habla y habla y habla y habla. Necesita un esposo que le diga cuándo callarse, pero esa mujer nunca se casó.

>>¿No te has dado cuenta de lo que pienso de Minsky? —junta saliva y escupe al suelo—. Que no tiene los cojones para ser un líder en los tiempos que corren. Si yo fuera alcalde, ya me hubiera encargado de la puta bruja, sea Miloslava o sea la extranjera. Y Timur, Timur es un hombre decente, honesto. Cuando da sus sermones habla claro, sin usar palabras raras, esas palabras con las que vosotros, las gentes educadas, tanto os pavoneáis.

No es de extrañar que Erik nunca haya detectado nada raro en Timur: este campesino no es la estrella más brillante del cielo.

—¿Que te hable sobre mí? ¿Qué quieres que te diga? Lo que ves es lo que hay. Trabajo la tierra, protejo a mi familia. Serví en la guerra, luché por el Imperio. Muchos amigos, buenos amigos, murieron a manos de Herenhout. Y yo me cargué a cuanto soldado de Herenhout pude. Lo único que hay en Herenhout es escoria. Son gente débil y cruel, y no me arrepiento de nada de lo que hice en la guerra. Si por mí fuera Herenhout sería tierra arrasada. No veo la hora de que la Emperatriz decida destruir esa mierda de nación.

Erik te suelta ese monólogo mirándote sin parpadear, con los puños bien apretados. Te está provocando, pero también te parece que lo realmente piensa eso.

—Te hice una pregunta, inquisidor. ¿De dónde eres? Si no vas a responder, lárgate de mi propiedad.

Notas de juego

¡Pelea, pelea, pelea!