Partida Rol por web

A la mediana le brillaron los ojos y sonrió ampliamente.

-¡Genial!-exclamó- entonces... ¿que tengo que hacer? Escribo la carta y te la doy, o te digo lo que le tienes que decir a esa persona... Disculpa pero hace siglos que no me junto con un mago, bastantes problemas me dan ya mis hijos-bromeó-, y tengo falta de costumbre con los jummm "procesos mágicos"-explicó.

El mago meditó unos segundos la respuesta con una mano sugetando su barbilla.
- Pues ahora que lo pienso la carta tendrá que ir en un formato especial…- miró de arriba a abajo a la mediana evaluando mentalmente su capacidad de hacerlo.- Por lo que supongo que deberé escribirla yo- terminó por decir de mala gana.- Piensa bien lo que quieres decir pues el mensaje deberá ser breve y conciso. La clase de magia que voy a emplear no suele usarse para estos menesteres tan mundanos, por lo que habrá que ahorrar bastante en palabras- argumentó misteriosamente.

-Está bien, supongo que podrá bastar con que le avise de que tardaré unas semanas en volver. Ay dioses, me va a matar cuando vuelva...-dijo la mediana reflexionando para si- dime, ¿que tengo que hacer?

Ante la indiferencia a mi propuesta, sólo me levanté y me despedí de Silkar con un gesto de cabeza. Miré a los demás y seguí a Isildel hacia la puerta. Iríamos todos a ver qué nos había dejado Gundren en la tienda de suministros. Tendríamos que volver a atar nuestro carro al de nuestros nuevos compañeros. En ese momento pensé en los caídos. Tal vez por el camino pasara por un templo o algo parecido, donde pudiera rezar por sus almas.

-"Freir, nos vamos."

Cuando salis de la taberna podeis ver Phandalin mejor que en la noche anterior. Phandalin es un pequeño pueblo, Podeis ver que tiene unas 40 o 50 edificios desperdigados, la mayoria son de madera, pero unos pocos estan construidos sobre cimientos de piedra. Restos de ruinas más viejas ( muros demoronados recubiertos de hiedra y zarza) rodean las casa y tiendas mas modernas, mostrando como este lugar debio de ser una ciudad grande hace siglos. la mayoria de los nuevos edificios estan colocados a los lados de camino, que se ensancha en una fangosa calle mayor mientras asciende hacia una ruinosa mansión en la falda de una colina al este del pueblo. 

Al caminar, veis niños jugando en el prado del pueblo y a aldeanos atendiendo sus tareas o haciendo recados en los comercios. Muchos os miran al acercaros, pero todos vuelven a sus asuntos cuando pasais. 

Vuestros carromatos estan listo y preparados, parece que escucharon vuestras intenciones y montaron todo para el trasporte y os indican donde podeis encontrar los suministros Barthen ... estan cerca, en dirección norte, justo en la entrada del pueblo. Es unos pocos 5 minutos llegais allí y un humano enjuto y medio calvo de unos cincuenta años y amables maneras.

- IMAGINO QUE  ESAS SON MIS MERCANCIAS, LAS QUE ME PROMETIO GUNDREN, NO??? DONDE ESTA QUE NO LE VEO? -

Le explicais la situacion y se ve que le afecta - Pobre ... me parecia raro ya que no viera desde hace tiempo a ninguno de los 3, lamento escuchar esas noticias ...-

Con un gesto simple veis como ordena a unos chicos jovenes a descargar las mercancias y os entrega a cada uno de ustedes 10 po, segun habia prometido a Gundren que os pagaría.

Cuando estaba a la mitad de descargado el carro con cosas de metal, uno de los chicos se acerca a el hombre y le da un papel, el cual lee y en su rostro se observa una clara expresión de sorpresa ...
- Vaya, parece que Gundren se ha vuelto mucho más generoso de lo que nunca ha sido JAJAJAJA, bueno, creo que teneis algunas cosas para ustedes ... aqui dice que hay 2 armaduras de placas, para un enano y un humano ...  asi que tomarlas ... debe pensar que necesitareis ayuda .... incluso antes de desaparecer ..., eso me preocupa aun mas ... -

Finalmente entregaron la mercancía en su destino. Isildel volvía a leer su querido libro de plegarias a la Diosa de los Misterios hasta que oyó al señor Barthen decir algo que le llamó la atención:
- ¿Y dice usted que hacía tiempo que no veía a ninguno de los tres? Imagino que se refiere a Gundren y Sir Sildar pero ¿a quién más?

- ¿Y dice usted que hacía tiempo que no veía a ninguno de los tres? Imagino que se refiere a Gundren y Sir Sildar pero ¿a quién más?

- Jovencito ... - dijo a pesar de que seguro Isildel es mucho mayor que el - no se quien es ese Sir Sildar ... yo me refiero a Gundren y sus Hermanos, llegaron áqui hace tiempo, pero de un tiempo a esta parte no los he vuelto a ver ... espero que no hayan tenido el mismo destino los 3 ... -

Las palabras del hombre picaron la curiosidad de Auric. ¿Los hermanos de Gundren también habían estado allí? Eso podía ser una potencial pista...

"¿Y no ha sabido nada de ninguno de los tres? Cualquier cosa que sepa usted sobre ellos podría ayudarnos... Por favor."

Lo haremos. Contesto el enano asintiendo al minero. Ahora me tengo que ir, el tiempo apremia. O los compañeros. Pensó el enano, al que le hubiera gustado poder sacar más información al minero. ¡Ya voy! Respondió a Izmael para después seguirles lo más rápido que sus cortas piernas le permitían.

Freyr no se sorprendió del detalle de su primo, él podía ser muchas cosas, pero sabía recompensar a la gente. En otra situación se hubiera detenido en mirar la armadura minuciosamente, pero escuchar que sus dos primos también andaban desaparecidos le chirrió. Debían buscarlos de inmediato, no tenía tan claro que a ellos no les fueran a hacer algo en caso de haberlos atrapado, a Gundren lo necesitaban vivo por el momento, pero a ellos...

¿Sabe dónde solían reunirse cuando los tres estaban en la ciudad? ¿Sabe de alguien que pueda saber de ellos? Preguntó Freyr manteniendo la calma, aunque estaba empezando a preocuparse seriamente, esto estaba empezando a pasarse de castaño oscuro... 

Al llegar a la tienda de suministros, hablamos con Berta, que nos comunicó su preocupación sobre la suerte de los otros dos enanos. Aparte, nos dio a Freír y a mi unas armaduras que había apartado Gundren para nosotros. Mientras que Isildel y Auric seguían conversando, yo me quitaba mi vieja armadura y me iba probando la nueva.

-Osea que no hemos perdido a un enano gruñón sino a tres-dijo Dalya poniendo los brazos en jarras- Estupendo.

¿Sabe dónde solían reunirse cuando los tres estaban en la ciudad?

¿Y no ha sabido nada de ninguno de los tres? Cualquier cosa que sepa usted sobre ellos podría ayudarnos... Por favor."

El comerciante se pone pensativo - pues normalmente la verdad es que cuando lo veia era o bien aqui comprando provisiones o sino en la taberna, bebiendo como 3 enanos JAJAJAJA, pero no recuerdo que fueran mucho a ningun otro lado ...  dormian en los bosques y no sabria como ayudarles ... hace un par de semanas, Gundren me propuso ayudarme con mis mercancias ... ese dia no vi a sus hermanos, fue la ultima vez que le vi ... y a sus hermanos mucho antes ... deberian haber venido por mercancias, pero no se si se habran marchado o en el peor de los casos , les haya pasado lo mismo que a Gundren ... -

Después de probarme mi nueva armadura, hablé con Bardem para venderle mi vieja cota de escamas. Llegamos a un buen trato y se la di. Mi bolsa engordó sobremanera. Miré mis compañeros para ver qué íbamos a hacer ahora. Al parecer los hermanos de Gundren hacía tiempo que no pasaban por el pueblo. Quizá el minero que habíamos visto en la posada podía haberse cruzado con ellos por las montañas o sabría decirnos por dónde estaba su mina.

-"Bueno, ya hemos vendido los suministros. Vayamos ahora a seguir investigando. ¿Al final nos vamos a separar en grupos o preferís ir todos juntos?"

En el camino hacia Provisiones Barthon habeis visto que en la zona central del pueblo hay una pequeño santuario, un descampado verdoso donde seguro que celebran cosas en ellos o reuniones campestres, y un edificio grande, el cual presenta un escudo que os suena de haber visto antes, un escudo con un leon azul pintado, el símbolo de la Ambula Escudo del León. Al fondo de la plaza un edificio de piedra con un miliciano en la puerta se alza majestuoso ... debe ser el ayuntamiento.

-Creo que deberíamos ir al ayuntamiento, si alguien debería saber lo que pasa por aquí es el alcalde, ¿no?-preguntó la mediana- eso o visitar el resto de posadas que haya por la ciudad, me parece haber visto una cuando llegamos-les dijo.

- No deja de maravillarme la facilidad de la gente para remarcar lo obvio como si hubiera redescubierto la magia- comentó en voz baja Isildel mientras echaba a andar en dirección al Ayuntamiento.