Partida Rol por web

Jueves 13 de Septiembre. Hora 18.15

Universidad Complutense de Madrid. Facultad de Ciencias Biológicas

Hace apenas unos minutos que las clases han terminado y empiezan las prácticas de laboratorios, todos deben estar allí. Bueno todos menos Luis Ramón quien se encontraba en esos momentos correteando por el campus, atrás quedó la salida del metro de Ciudad Universitaria. Para variar, en un alarde de fortuna que tiene a bien proporcionar universo, perdió una vez más el metro y le tocó esperar los seis minutos de rigor. ¡Qué tiempos cuando pasaban cada dos o tres minutos!.

Multitud de estudiantes se encuentran reunidos por las extensiones verdes y no tan verdes, algunos poniendo rumbo al metro, otros charlando y comentando las batallitas de la clase. Otros por el contrario empezando a preguntar por los contactos necesarios para agenciarse el temario de años anterior y no sentir el yugo perpetuo de la toma de apuntes.

Hace tiempo que todo eso quedó atrás para Luis Ramón, becas era su idioma, colaboraciones, prácticas empresariales, todo tenia el mismo nombre y el mismo objetivo. La formación.

-¡Hey! -Gritó Jimmy. Uno de los estudiantes que iban a asistir a uno de los laboratorios. Algunos de sus compañeros le llamaban cariñosamente el porretas. -Dónde tanta prisa, aún hay tiempo.

Jueves 13 de Septiembre. Hora 18.15

Universidad Complutense de Madrid. Facultad de Ciencias Biológicas

Hace apenas unos minutos que las clases han terminado y empiezan las prácticas de laboratorio. Enrique ya se encuentra allí esperando a sus alumnos. En ese momento siente un cosquilleo en la pierna: un whatsapp de Alejandro.

Qtal las class guapo?Akbo dcomprar atún xa acr Tataki com a ti tgusta. Bss TQ.

Como si algún demiurgo hubiese querido hacer coincidir aquel momento el laboratorio se empezó a llenar. Varios estudiantes empezaban a ocupar sus sitios, situándose a ambos lados de los fregaderos que dividían las alargadas mesas de color oscuro que se encontraban dispuestas en aquel laboratorio. La quietud del lugar empezó a ser envuelta por una algarabía entre la que se distinguían algunas de las batallitas y anécdotas de las clases. 

Es la clase de cosas cuando se combinan un vida mirada por un tuerto con el descuido de los servicios básicos del Campus. Y al menos él no se podía quejar tanto como otros en que aquello le hubiera DESCALIFICADO automáticamente. Para él sólo era un increíble, jodidoso fastidio, teniendo en cuenta que vivía ahí dentro.

-¡Hey! 

-Hey, Jimmy -saludó, elevando la cabeza- A mí me toca entrar antes, es lo que tiene. ¿Cómo va?

Jimmy le caía extra-bien en el orden de que podía colaborar con él pero no le suponía ningún trabajo: los de las empresas particulares llevaban sus propios papeleos y los llevaban más agarrados que los clavos de cristo. Y a él todo lo que le pudiera arañar nueve minutos más para completar el resto antes de la hora de cierre... pues eso.

Jueves 13 de Septiembre. Hora 18.15

Universidad Complutense de Madrid. Facultad de Ciencias Biológicas

Hace apenas unos minutos que las clases han terminado para dar paso a las prácticas de laboratorio. Miguel se encontraba en esos momentos de pausa revisando las novedades en las publicaciones científicas, ningún hallazgo de interés... Parece que ese año la investigación seguirá en campos genéricos dejando a los alumnos que escojan el área de interés.

Entonces un titular atrajo su atención:

Crean nanorobots capaces de destruir un cáncer

Con una mezcla de nanotecnología y microbiología, un equipo de investigadores canadienses ha logrado curar así el cáncer de colon en ratones.

Aunque la quimioterapia es una de las mejores herramientas de las que disponemos para luchar contra el cáncer, no deja de ser un veneno que se inocula a los pacientes con el objetivo de que mate todas las células tumorales sin dañar en exceso el resto del organismo, algo que en demasiadas ocasiones no se cumple, ya sea por no acabar con el cáncer o por destruir demasiados tejidos en su intento por lograrlo. Por eso hay muchos equipos trabajando en formas de inocular los compuestos químicos sólo a las células cancerosas y no a las demás [...]

El artículo atrajo su atención pues llevaban varios años teniendo diferentes grupos que habían escogido este área de investigación. Incluso desde el área de la botánica se había experimentado buscando los efectos de diferentes tratamientos naturales sobre aquel mal... Una vez más los norteamericanos se les adelantaban, al menos no eran de los EEUU.

Como si no quisieran que siguiese leyendo aquel artículo, varios estudiantes empezaban a entrar ocupando sus sitios, situándose a ambos lados de los fregaderos que dividían las alargadas mesas de color oscuro que se encontraban dispuestas en aquel laboratorio. La quietud del lugar empezó a ser envuelta por una algarabía entre la que se distinguían algunas de las batallitas y anécdotas de las clases. 

Jueves 13 de Septiembre. Hora 18.15

Universidad Complutense de Madrid. Facultad de Ciencias Biológicas

Dirigir una universidad era duro y nadie lo sabía, lo que todo el mundo sabía es que había que tener tirria al Decano. Era culpa del Decano pretender delimitar un área para celebrar el festival de San Cemento. También era culpa suya que el gobierno decidiese iniciar una política de recortes muy agresiva... ¡Qué diablos! También le culpaban de los suspensos generalizados y de los aprobados por porcentaje. Vagos y maleantes eso era lo que eran.

No tardó en venirle a la cabeza los sucesos que le habían traído a aquel momento: con el fin de las recuperaciones de julio se produjeron numerosos actos vandálicos por toda la universidad, la reparación de los destrozos y desperfectos hubo que corregirlos eliminando la climatización del lugar hasta enero. Así que tocaba venir los primeros meses de invierno con chaqueta. Vagos y maleantes.

Tras hacer ajustes de cuentas que había afectado al material de laboratorio tenían la solución en sus manos. Una nueva vigilante de seguridad.

-Entonces, ¿la digo que pase?- Preguntó María Luisa de personal. Llevaba un rato en el umbral de la puerta esperando respuesta de su superior.

Jueves 13 de Septiembre. Hora 18.15

Universidad Complutense de Madrid. Facultad de Ciencias Biológicas

Hace apenas unos minutos que las clases han terminado. El silencio interrumpido por el rascatecleo de la administrativa que tenía delante fue apartado primero por un murmullo hasta que una algarabía lo apartó a grandes empujones. Justo en ese momento llegó una cara nueva.

-Bienvenida... ¿Sara era no?-. Preguntó al tiempo que le estrechaba correctamente una mano. Se veía que prefería marcar distancias en lugar de los dos clásicos besos. -Soy Maria Luisa de personal. Por favor sígueme, iremos al despacho del Decano, él fue quien solicitó que contratásemos a alguien para su puesto. 

Jueves 13 de Septiembre. Hora 18.15

Universidad Complutense de Madrid. Facultad de Ciencias Biológicas

Marcos era plenamente consciente de que estaba en la Facultad de Ciencias Biológicas, se repetía una y otra vez que estaba allí, trabajaba allí, hacía lo que le habían dicho que hiciera. Lo hacía bien le habían dicho. La verdad es que no sabía qué significaba Facultad de Ciencias Biológicas.

Hace apenas unos minutos que las clases han terminado. Los pasillos se llenaron de jóvenes manchando allá por donde pisaban... Mucha gente, allá donde miraba había gente, muchos chicos jóvenes, algunos le miraban raro, otros le señalaban mientras se reían, el resto le ignoraba.

Mientras Enrique prepara sus anotaciones para la practica de hoy un leve cosquilleo hace que una pequeña sonrisa se dibuje en su cara. - Mensaje de mi nenin. Piensa mientras saca el Iphone de su bolsillo. 

Al leer el mensaje otra sonrisa, esta vez mas grande aparece en su rostro, pero la entrada de sus alumnos hace que el profesor alce la vista un segundo mientras pone cara de sorpresa. Escondiendo el teléfono en la mesa y aprovechando que los alumnos están charlando mientras toman sus asientos, aprovecha para responder.

Las clases muy bien  Gracias por mimarme tanto!!!!! Te compensare después de la cena... Bss Te escribo cuando termine. 

Mientras guarda de nuevo su teléfono, Enrique hace un ruido con su boca como aclarando su voz, para que los alumnos se calmen y se preparen para la practica. - Buenas tardes a todos, se que a estas horas ya estamos cansados todos. Enrique sonríe. - Pero bueno después de las practicas estaremos todos libres.  

Lentamente se levanta de su asiento y sale de su mesa para ponerse frente a sus alumnos. - Como os comente en esta nueva etapa de las practicas vamos a hacer un estudio de algas, líquenes y Hongos.

Girando y caminando hacia la pizarra les sigue hablando. - Esto es lo que vamos a hacer durante las próximas tres practicas. Enrique saca un rotulador de su maletín y empieza a escribir mientras les dice lo que esta poniendo. 

- Observación microscópica y diversidad morfológica de las algas.

- Preparación y observación de muestras de hongos con micelios con hifas cenociticas y estructuras reproductoras asexuales (esporangios y endosporas).

- Preparación y observación de muestras de hongos con micelios con hifas tabicadas y estructuras reproductoras asexuales (conidioforos y sus respectivas conidiosporas externas).

- Estudio y descripción de estructuras reproductoras sexuales de algunos hongos (ascocarpos y basidiocarpos).

- Observación de talos liquénicos.

Al terminar de escribir redondea con un rotulador de otro color las dos primeras. - En esta practica vamos a trabajar con las dos primeras. Ahora quiero que os fijéis en los portaobjetos que tenéis junto a vuestros microscopios. En ellas teneis por un lado las muestras de distintas algas y por la otra de distintos hongos. 

Enrique se aproxima hacia ellos y levanta su vista buscando a un alumno en particular. - Señor Sanchez, recuerde que son de cristal. Espero que esta vez tenga mas cuidado y no la rompa..... Sonríe. Y si la rompe. Por Dios no se corte como la ultima vez.

Los alumnos tras el comentario del profesor empiezan a reírse. - Venga, chicos esto no es para reírse. Tras decir eso Enrique se gira intentando no reírse. - Bueno, recordar que estáis por parejas así que, dejar todos que vuestro compañero tenga el mismo tiempo que vosotros para observar las muestras. 

Enrique se dirige a su mesa y se apoya en ella mirando a todos. - Antes de explicar nada, quiero dejaros diez minutos para que observéis la primera muestra de las algas y después la primera de los hongos. Quiero que anotéis que observas en ellas, que diferencias encontráis y si hay algo que os llame la atención, después comentaremos lo que habéis visto en ellas.

Cuando los alumnos se ponen a mirar sus muestras, Enrique se sienta de nuevo en su mesa y saca su portátil para mirar las imágenes que después les quiere mostrar al resto.

Tengo que limpiar. Me gusta limpiar. Las cosas limpias son más bonitas. Marcos avanzaba por el pasillo balanceando su cuerpo de derecha a izquierda mientras barría el suelo.Me gusta limpiar. No me gusta limpiar cuando hay gente. Mucho ruido.

Como cada día desde que le habían dicho que tenía que limpiar aquel lugar seguía las instrucciones que le habían dado en el orden que se le habían dicho. Cogió la papelera y observó que estaba vacía pero le dijeron que había que vaciarlas de modo que abrió la bolsa de basura y volcó el contenido de la papelera vacía en la bolsa. Una tarea hecha. La siguiente es limpiar los servicios. Sólo el que tiene un muñeco sin falda.

De repente la gente empezó a salir de las clases. A Marcos no le gustaban las multitudes. Eran demasiado ruidosas y no se entendía lo que decían. ¿Cómo iba a saber que hacer si no los entendía?  Y lo peor era que muchas veces al cruzarse con ellos lo tocaban.

Empezó a arañar el brazo izquierdo con las uñas de la mano derecha. Eso solía tranquilizarlo. Marcos se colocó de cara a la pared mientras seguía balanceando su cuerpo. No me toques, no me toques, no me toques repetía una y otra vez como si fuera un mantra protector. 

Le gustaba trabajar. Le gustaba limpiar. No le gustaba la gente. ¿No puedo limpiar en un sitio sin gente? 

Buenas tardes. Estreché la mano de la mujer con firmeza. Así es, Sara Gómez, un placer.

Estaba realmente contenta. Había conseguido un trabajo en la Universidad Complutense de Madrid. Aún no me habían expecificado nada concreto, pero ir a ver al decano de la Facultad indicaba que sería un buen puesto. Seguí a la mujer en silencio, manteniendo una sonrisa en el rostro mientras caminábamos por los pasillos del edificio. El eco de nuestros pasos era el único sonido audible en el lugar. Podía notar como la excitación por lograr el puesto se distribuía por mi cuerpo. Tenía ganas de correr y saltar. Debí tomarme medio Lorazepam antes de venir.... pensé mientras apretaba mis puños, tratando de contener así ese exceso de energía.

Er... sí, que pase.

El Doctor Martín estaba pensando en sus cosas, de ahí la vaguedad de su respuesta. Nada profundo; en el calor que hacía para estar a mediados de septiembre, en que por culpa de la próstata tenía ganas de echar una meaíta cada dos por tres, en todos los alumnos que se iba a cargar este año aun sin dar clase, y en batallitas varias. 

Me puse a firmar papeles para que pareciera ante la nueva vigilante de seguridad que mi trabajo era muy importante.

La señorita finalmente llegó a una puerta, llamó con firmeza y dedicó una sonrisa a su acompañante antes de asomar la cabeza. Se la escuchó murmurar algo, no quedaba claro si la habían contestado pues no se oía respuesta por lo que volvió a insistir, esta vez fue perfectamente audible.

-Entonces, ¿la digo que pase?

Esta vez la respuesta pareció convencerla.

Tras oír aquella respuesta Maria Luisa de personal abrió la puerta y se colocó en el interior invitando a su acompañante a entrar.

-Te presento al Doctor Martín. -Indicó con un gesto de su mano-. Él te contará lo que debas saber. 

Como si aquello la convenciese, se marchó del lugar. Parecía estar bastante ocupada, o al menos con mejores cosas que hacer.

Los alumnos rasgaban el papel mientras empezaban a hacer anotaciones. Por un lado estaban los que lo llevaban al día y y escribían ideas con cierta iniciativa. Otros se dejaban llevar por las corrientes propias de la clase y se limitaron a anotar las palabras de la pizarra. No tardaron en empezar a cuchichear mientras Enrique se centraba en la búsqueda en el ordenador.

TOC TOC

La búsqueda se vio interrumpida por el sonido de la puerta. No tardó en abrirse asomando el rostro de Miguel, profesor especializado en investigación. Normalmente estaba en el laboratorio de al lado.

-¿Puedes salir un momento por favor?-. Preguntó al tiempo que levantaba un dedo pretendiendo remarcar la brevedad de la petición. El ambiente de concentración de la clase era prácticamente inexistente, no había más remedio que satisfacer la curiosidad que empezaba a embargarle.

Ya en el exterior cerraron la puerta para evitar oídos indiscretos.

-Perdona por interrumpir las prácticas... -El nerviosismo con el que comenzaba sus palabras evidenciaba que no parecía tener muy claro cómo empezar. -Te quería hacer una sugerencia. Verás he visto este artículo.- señaló al tiempo que le mostraba un extracto impreso de alguna publicación digital.

Crean nanorobots capaces de destruir un cáncer

Con una mezcla de nanotecnología y microbiología, un equipo de investigadores canadienses ha logrado curar así el cáncer de colon en ratones.

Aunque la quimioterapia es una de las mejores herramientas de las que disponemos para luchar contra el cáncer, no deja de ser un veneno que se inocula a los pacientes con el objetivo de que mate todas las células tumorales sin dañar en exceso el resto del organismo, algo que en demasiadas ocasiones no se cumple, ya sea por no acabar con el cáncer o por destruir demasiados tejidos en su intento por lograrlo. Por eso hay muchos equipos trabajando en formas de inocular los compuestos químicos sólo a las células cancerosas y no a las demás [...]

-Tengo algunos alumnos que iniciaron su investigación particular en esta temática. Creo que sería interesante potenciar su ambición. También recuerdo que me comentaste que tuviste algunos alumnos que hicieron algo del estilo en la rama de la botánica. -Entonces entrelazó sus dedos como buscando subrayar sus palabras-. Si unimos ambas clases dándoles un objetivo común bajo nuestra supervisión tal vez podríamos desarrollar nuevos avances en la materia. Desde luego que no es tan vistoso como los nanobots pero por algo se empieza.

Luis Ramón seguía corriendo, recortando chavales que podían tener casi su edad, torció una esquina y empezó a descender los escalones rumbo a los laboratorios, volvió a torcer a mano derecha y... Chocó estrepitósamente contra el chico de la limpieza. Lo único que alcanzó a pensar además de su día de mierda era en lo raro que encontrarse a alguien tan pegado a la pared.

Algunos se os quedaron mirando, otros sonrieron y sacaron los móviles. Incluso se escuchó un susurro diciendo en tono de burla "Maricón".

El carrito quedó varios metros más allá empujado por unas manos invisibles, el suelo se encontraba encharcado de algún tipo de limpiador, hedía a amoníaco. Y sobre aquel charco de higiene un lío de extremidades.

...owwwwwwwww.

Se levantó mientras apretaba la espalda, se frotaba la sien y le dolía la rodilla. Cuando parecía que el día no podía ser más de mierda.

-¡Joder Santana! -dijo mientras se levantaba, echándole una mano para que se levantara del suelo, con cuidado- ¿Qué leche hacía detrás de la esquina?

Lo trataba de usted y por el apellido. Era lo que hacía con la gente que entraba dentro de su dominio en el proyecto porque era lo que tenía que hacer y ya por fuerza del hábito; y Marcos Santana (del que sólo se acordaba del apellido) era uno de ellos, aunque fuera sólo en personal autorizado a estar por la zona a las horas. Rodrigo Tuco también, pero bastante menos horas y bastante menos días.

"Dime que no me has manchado de amoniaco"

Tengo una camisa allí en la taquilla. PERO LLEVA DÍAS ALLÍ. ¡No me hagas esto, Dios!

"Dime que no me he manchado..."

Me cago en Diooos, y me cago en la Virgen, y me cago en Dios, ¡y me cago en Diooooossss!

Hostin, ahora toca improvisar... a ver cómo salgo de esta!

Bienvenida. Como ya le han informado, soy el Dr. Martín, decano de la Universidad Complutense. Doctor en ciencias biológicas, mi tesis trataba sobre [...]

Y ahora que nos "hemos" presentado, le diré que esta es una de las más prestigiosas universidades del país, y sin duda de la Unión Europea. Su acometido será el de velar por la seguridad de todo el personal universitario y estudiantil.

Y bueno, esta -señalo la caja de seguridad de mi despacho- contiene los secretos de mi investigación privada. No se debe abrir bajo ningún concepto, a no ser que yo esté en grave peligro, ¿estamos? Ni un maldito y perfectamente hipotético apocalipsis zombie justificaría su apertura en caso de que yo esté a salvo.

He aquí su pistola, porra y placa. Hale, a trabajar!