Partida Rol por web

La segunda Ciudad .

Reunión , azul , bosque .

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01/07/2013, 04:08
GM .

Habías llegado en la última travesía y la siguiente tardaría varios meses en llegar , el tiempo estimado de llegada a la Segunda Ciudad fue el previsto debido a que no hubo incidentes por el camino . Se te había enviado con un claro objetivo , tus superiores en la familia Otomo quieren sabe como andan los ánimos de los clanes en la Segunda Ciudad y cuanto partido se podría sacar de ello , además había que conocer los problemas que pueden ocasionar los barbaros gaijin y sus conocidos en el porvenir del bien del imperio . 

Se te ha dado carta blanca para actuar según creas oportuno , pero ya conoces las repercusiones de un fallo en esta importante labor , y por supuesto tu misión es secreta , ni siquiera la gobernadora de la segunda Ciudad sabe de esto , solo eres un rico Otomo que viaja por gusto . 

En tu nueva residencia en la Ciudad oyes el rumor de que el Embajador de los clanes menores está buscando a jóvenes para algo relacionado con una reunión no se sabe con quien , los clanes de los miembros que vayan recibirán un regalo por su parte , y los ronins una recompensa en metálico . 

Por supuesto lo de la recompensa no es algo que te interese , pero si podría resultar curioso el conocer el motivo de este asunto . 

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01/07/2013, 04:32
GM .

Vosotros 2 habéis sido seleccionados por el Embajador de los clanes menores para una importante reunión , sin duda es honor servirle para la mayor gloria de vuestros clanes representados por el embajador Katsuga , y por lo visto corre el rumor de que vuestros clanes recibirán regalos a cambio , lo cual os hace sentiros más útiles y agraciado al servir tan directamente al clan . 

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01/07/2013, 04:35
GM .

El propio Daimyo Miya te ha enviado a la Segunda Ciudad para conseguir información de primera mano de lo que ocurre en el lugar , no es que haya nada extraño hasta ahora salvo la muerte del anterior gobernador lo cual ya es un caso cerrado , pero no se fía de la gobernadora ; disfrazandote de ronin con el nombre de Aki has llegado al lugar , es una enorme y bulliciosa ciudad con una gran presencia extrajera .... al menos en la parte donde vives por ser un mísero ronin , pero al menos gracias al embajador de los clanes menores , que tambien se hace cargo de esa zona , puedes vivir decentemente . 

Un lugar idoneo para conseguir información en esa zona es un tugurio que tiene la desfachatez de declararse casa de té , permiten entrar a cualquiera y una parte del servicio ni tan siquiera es rokuganes , por lo cual dudas de la calidad de todo cuanto sirven ahí , pero es frecuentado por una gran cantidad de individuos ya que es el sitio con los precios más bajos en toda la Segunda Ciudad . 

El nombre del local es : " El saltamontes cojo " . 

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01/07/2013, 04:54
GM .

Habíais sido elegidos para hacer un favor que tendrá que devolver el embajador de los clanes menores , han sido enviadas invitaciones a todos los clanes , pero solo los vuestros han respondido por el motivo que fuere . 

El asunto es sencillo en principio , vuestros señores quieren sacar algo de información útil a parte de unos pocos regalos por la cesión de vuestros servicios temporales a los clanes menores . Hay concertada una reunión en el Kyuden de los clanes menores y posiblemente no seais los únicos en acudir la la llamada pues los ronins acudirán por la promesa de dinero . 

Notas de juego

La poca información que teneis os la han pasado vuestros superiores .

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01/07/2013, 06:21
GM .

La casa de té conocida como " El saltamontes cojo " es una taberna más que una casa de té , una parte del servicio no es rokuganes sino de gentes del lugar , es conocida por ser el lugar más barato de toda la Segunda Ciudad lo cual hace dudar a veces de su calidad , pero desde que abrió nadie ha enfermado . Suele estar frecuentada por ronins , gaijins y gentes de los clanes menores dado que está ubicada en esa zona , la cual acoge a los otros ; no es un lugar donde se mantengan la etiqueta y las normal más de lo estrictamente necesario pero es la mayor fuente de contactos , chismorreos y rumores de la zona por lo que es idonea para saber quien necesita de una espada de alquiler , mercancias o cualquier cosa que pueda asegurar trabajo e información en la Segunda Ciudad a cualquiera que esté dispuesto a tomar algo aquí y a disfrutar de sus pintorescos parroquianos . 

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01/07/2013, 13:30
Ameko

Entre en el lugar con calma, en el tiempo que llevaba en la cuidad me habia acostumbrado a ese lugar y tenia cierto beneficio si sabias ser paciente. Busque con la mirada un lugar donde sentarme y pedir un té.

"Parece que hoy la cosa esta bastante tranquila, mejor menos peleas"

-Buenos dias- dije a mi entrada a nadie en particular.

Hice un gesto a Kojiro para que dejase de revolotear a mi alrededor y se posara en mi mano, al tiempo que buscaba unas migajas para que picotease. Me gustaba ese lugar entre otras cosas por que nadie se habia molestado por que llevase a mi cantariana mascota conmigo.

Pase la vista por el lugar un instante y luego relaje los hombros, no iba a encontrar un trabajo solo al entrar asi que opte por relajarme un poco. Pase un dedo con suavidad por las plumas de kojiro para distraerme.

Notas de juego

bueno no se que hora es pero bueno XDD

Kojiro es un jilguero =)

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01/07/2013, 16:20
Toku Ayaki

Cuando le dieron la noticia no cabía en si de estupefacción¿ No había nadie mejor? Se había pasando la vida escuchando regañinas por su comportamiento y por unos anhelos mal entendidos por parte de su familia y aún así le mandaban a representar no solo a su clan sino a otros menores, lo bueno que tenía aquello es que al menos viajaría, vería otras montañas y otros cielos, pero él en una corte era algo que le sorprendía... ninguno de sus logros los había hecho a través de cauces oficiales e incluso dudaba que se pudiera presumir de ellos abiertamente delante de daimyos o embajadores.

Cuando se lo comentó a Ai ella se mofo de él, pues tendría que ir repeinado, arreglado con ese haori de seda que le habían regalado y que tenía aquellos pompones que le gustaban tan poco. La imagen de él tratando de parecer serio hizo que ambos rieran un buen rato, jamás pensó que Ai no pudiera ir y Aí jamás hubiera aceptado esa proposición. Ninguno hizo preguntas, ella iba y no se dijo más, no se necesitaba ninguna otra opinión sobre tal asunto, si alguien preguntaba dirían que era su profesora de Kyujutsu, lo cual tenía gracia viendo como se le daba el arco a Ayaki "El alumno más desastroso necesita al mejor de los maestros" había dicho una vez Ai con tono de solemnidad cuando le preguntaron por que una tsuruchi enseñaba tiro con arco a alguien tan negado como él.

Así pues prepararon el viaje como otras tantas veces y se fueron por el camino, sin dejar nada y a nadie tras de si, ligeros como el viento. El viento que jugaba con su cabello y que arrastraba sus risas mas lejos.

Notas de juego

no veo el objeto de esta escena¿ estamos juntos? empezamos separados.¿ donde es la reunion?

Master : Si apareces marcado junto con alguien es porque estás con esa persona ; no os toca viajar mucho , solo hasta el kyuden del embajador de los clanes menores , el cual sabeis perfectamente donde está dado que hay 1 por cada clan , el que representa a los clanes menores y el de la gobernadora . Vivís en el distrito de los clanes menores por lo cual es una de las 2 edificaciones más altas de la zona . La reunión en principio es ahí , y el embajador es el máximo representante de todos los clanes menores por lo cual a falta de un daimyo en la zona , es él el que manda a todos los clanes menores . 

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01/07/2013, 21:09
Daidoji Kenzo

Kenzo apareció el primero en la puerta del Kyden. Portaba su kimono azul finamente bordado por tejedoras Doji con el mon Grulla al pecho. Abanicándose se presentó en la puerta, no dejando entreveer su rostro facilmente, esperando a que fuera atendido por alguien fuera del lugar de la reunión.

- Una reunión organizada por clanes menores, espero que no sea una mofa...

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01/07/2013, 23:43
Mirumoto Rin

Al llegar al Kyuden de los clanes menores Rin pudo observar que justo antes que él había llegado un representante del clan grulla engalanado, como solía ser costumbre entre los grulla, con finas ropas. En comparación sus vestimentas eran mucho más humildes y utilitarias, aún así siempre lucía orgulloso el mon de su clan.

Rin decidió que los más adecuado sería presentarse al desconocido. - Muy buenos días tenga, samurai-sama. Mi nombre es Mirumoto Rin. ¿Ha sido usted también invitado a la reunión de hoy? - En realidad él ya suponía que así era, pero se le antojo oportuno empezar una conversación ligera mientras esperaban a ser atendidos por algún sirviente del Kyuden.

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02/07/2013, 09:33
Hida Akano

Llego meditabundo al Kyuden de los Clanes Menores sin saber muy bien que hago en ese lugar.

- Veamos para que requieren de los servicios del Clan Cangrejo y porqué me han dicho a mi que venga.

Al aproximarme a la puerta del Kyuden observo como un Grulla y un Dragón han llegado antes que yo.

- Espero no ser el último en llegar ni hacerlo tarde.

El Dragón parece bastante parlanchín. Espero que sólo sea la primera impresión.

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02/07/2013, 11:44
Otomo Kazutaka
Sólo para el director

La Segunda Ciudad, el logro más brillante de las más de dos décadas de colonización por parte del Imperio de las tierras salvajes en las que se habían convertido los Reinos de Marfil. Kazutaka pudo apreciar de que se trataba de una ciudad todavía en construcción. Tan sólo recientemente los samurai de Rokugan habían conseguido empezar a domesticar aquellas selvas de un intenso color esmeralda. Sin embargo, el Otomo no se sentía en absoluto impresionado por lo que veía. Había nacido y crecido en Toshi Ranbo, la Capital del Imperio, y era capaz de recordar los días de esplendor de Otosan Uchi, cuando los Hantei gobernaban Rokugan; también había paseado por los jardines de Kyuden Doji y nunca podría olvidar las espectaculares vistas que regalaba a sus huéspedes el Castillo de la Mañana Gloriosa; incluso había acudido hacía ya unos cuantos siglos a un Corte de Invierno en el palacio de la Avispa. Al lado de todos aquellos palacios y ciudades, la Segunda Ciudad, aunque tan o más extensa que la mayoría, parecía pobre y vacilante, con sus edificios alzándose torpemente sobre el paisaje como potros recién nacidos que trataran de ponerse en pie. La Segunda Ciudad podía llegar a ser espléndida, ciertamente, pero de momento era más una gran promesa que una realidad. El problema era que dicha promesa se corrompiera por el camino y precisamente porque existía semejante posibilidad Kazutaka había sido enviado a las Colonias.

Kazutaka era perfectamente consciente de que ya no estaba en Rokugan. A su alrededor podía ver los mismos mon de siempre, las mismas actitudes en los samurai con los que se cruzaba, la misma inclinación en los tejados; sin embargo, en cuanto su mirada profundizaba un poco las diferencias aparecían innumerables, como chispas de herrería que saltaran a sus ojos. Los mismos, mon, sí, pero sobre kimonos de estampados exóticos y cortes más atrevidos; los edificios se adornaban con filigranas y esculturas que nunca antes había visto en el Imperio. Las gentes que se refugiaban bajo los aleros eran de tez más oscura y su forma de hablar era más libre, más alegre si cabe, que la de los habitantes del Imperio. Por doquier percibía olores desconocidos y no podía saber si se trataba de perfumes o del aroma de alguno de los extraños productos que se ofrecían en las tiendas junto a las que pasaba.

El Imperio aún mantenía una fuerte influencia sobre la Segunda Ciudad, pero Kazutaka se preguntó si dicho control podría llegar a desaparecer algún día. Las Colonias pertenecían tan sólo de forma tangencial al Imperio y ya existían las primeras generaciones de samurai nacidos y criados en las ellas; no parecía tan descabellado pensar que algún día la Segunda Ciudad reclamara un puesto como Capital de su propio imperio. Y las relaciones con los gaijin no hacían más añadir todavía más perturbaciones al devenir de la ciudad, más elementos que contribuían a alejar la Segunda Ciudad del control de la Emperatriz. La Colonias habían sido un regalo de los dioses para el Imperio en un tiempo de gran necesidad, pero podían llegar a convertirse en un enorme problema si ciertas tendencias no eran encauzadas correctamente de forma inmediata. Kazutaka estaba convencido de que sus superiores habían extraído las mismas conclusiones que él ante aquella situación y por eso le habían enviado. No creía que realmente el resto de los Otomo pensasen que una posible independencia de la Colonias supusiera realmente un peligro para Rokugan, si las cosas se hacían de la manera adecuada, pero existía esa posibilidad y había que atajarla cuanto antes. Lo ideal, lo correcto se podría decir, es que las Colonias, con la Segunda Ciudad al frente, permaneciesen para siempre dentro del Imperio, pero Kazutaka era consciente de que a veces la historia debe avanzar de una manera concreta y ni los talentos y el poder de los mejores hombres de una época pueden impedirlo, al fin y al cabo él no había podido evitar el Golpe Escorpión, ni el Gozoku. ¿Había sido acaso incompetente? Por supuesto que no, simplemente ni siquiera todo su talento había podido hacer frente a las necesidades de la historia.

Lo más curioso de su "misión" era el hecho de que fuera secreta incluso para los otros Otomo presentes en la ciudad. ¿Acaso Taneji no se fiaba de Suikihime y su corte? Kazutaka no había llegado a conocer nunca a aquella mujer, pero sus credenciales parecían excelentes, habiendo sido discípula de M'Rika. Tal vez el señor de los Otomo la conociera realmente y pensase que sus ambiciones personales pudieran estar acordes con el devenir que Kazutaka preveía. Si se hiciera inevitable un conflicto entre las Colonias y el Imperio que al menos no tuviera a un Otomo como protagonista.

Una vez asentado en su nueva residencia, Kazutaka empezó a trazar sus planes de acción. Tenía que entrevistarse con la Gobernadora, eso era evidente, por mucho que fuera un simple Otomo de viaje resultaría extraño que no buscase relacionarse con los de su misma familia.

Mientras meditaba sobre estas cuestiones le llegó el rumor sobre la misteriosa convocatoria de Kasuga Setsuna. Se sentía intrigado. ¿Qué pretendía el embajador de los clanes menores? No sería un mal comienzo de su estancia en la ciudad intentar averiguarlo. Por otra parte, si conseguía la amistad del Kasuga podría obtener una interesante visión de lo que sucedía en la ciudad y en las Colonias en general. De normal hubiera buscado primero una visión algo más... elevada, probablemente a través de algún cortesano de su propia familia o de la Grulla, siempre tan receptivos a un representante imperial, pero toda situación cortesana es como una gema tallada que uno no puede apreciar sin admirar todas sus facetas.

Aunque le desagradara, Kazutaka tenía que actuar con cierta presteza. Acudió a la mejor licorería de la ciudad y compró una botella de su sake más exquisito. Hizo que la prepararan con cuidado para ser ofrecida como regalo. Su siguiente paso fue escribir una carta que acompañaría al obsequio:

De Otomo Kazutaka a Su Excelencia el Embajador Kasuga Setsuna.

A pesar de ser un recién llegado a la ciudad y, por tanto, alguien totalmente desconocido sin mayor posición ni méritos, cometo el atrevimiento de solicitar una entrevista personal con vos en las circunstancias que Su Excelencia designe. Desde que he llegado a estar maravillosa ciudad no puedo sino dar gracias a Tengoku por la sabiduría que le concedieron a Su Majestad para que ordenara a los Clanes colonizar estas tierras. Pero mi asombro no está exento de cierta perplejidad ante tantos detalles que me resultan completamente desconocidos. Por ello, conociendo la extraordinaria fama de Su Excelencia, me he atrevido a solicitaros un encuentro.

Mis mayores deseos de que la gracia de los cielos esté siempre sobre vos.

Otomo Kazutaka


Una vez escrita, Kazutaka ordenó a un sirviente que entregara la carta junto con la botella de sake en la Embajada de los Clanes Menores, si fuera posible, directamente al embajador.

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02/07/2013, 17:55
Kasuga Natsumi

La noticia había sido una grata sorpresa, al fin se me tomaba en cuenta por las múltiples habilidades que manejaba, o al menos eso esperaba oír ahora que el embajador de los clanes menores, muy en mi beneficio de mi propio clan, me había requerido en su presencia. 

Sin tardar más que el tiempo de recoger mi bolsa con lo imprescindible, me dirigí hacia el hogar del embajador, una construcción fácil de encontrar entre todos los demás edificios bajos de las demás clases. Al llegar a la puerta, fui detenida para saber mis motivos, y enseñé la invitación al guardia la puerta. Kasuga Setsuna-sama ha requerido mi presencia, samurai-san, podéis dirigirme por favor? Dejé que la última de las palabras flotara con seductora ligereza hacia el guardia con un ligero batir de pestañas.

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03/07/2013, 16:30
Daigotsu Ikasuchi

me dirigía hacia la sede de los clanes menores en la ciudad portando con dignidad mi daisho reluciente en sus sayas, ondeando la chaqueta* bajo mi cuerpo bronceado y trabajado hasta límites insospechados. Al compás de mis pasos mi mente se preocupaa por el signo de mi presencia allí. ¿que deseaban que se hiciera para que mi clan pensara que era el hombre indicado para hacerlo? Aunque por toda respuesta me decía que debía ser algo tremendamente sangriento, o que la araña se sentía insultada y usaba las técnicas de disgusto del imperio.

Al acercarme al kyuden dónde se refugiaban los vástagos pequeños del imperio pude observar que otros samurais de los clanes considerados grande; pese a que, a excepción hecha de cangrejos y unicornios, resultaba la más de las veces una falacia. Todos quieren pes car en éste río supongo- me decía- Y con ello me acerqué hacia el grupo poniendo las manos en el obi, ése tan siniestro que aparentaban ser dos brazos esqueléticos repujados de garras largas y afiladas; entrecruzadas, "sosteniendo" entre ellas el abanico que siempre me acompañaba.

¿saben si es éste el kyuden de los clanes menores?, estoy buscando ese lugar.

 

Notas de juego

Ahora mismo no recuerdo el nombre de la típica chaqueta como de shogun o magistrado, cosas del calor.

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03/07/2013, 21:06
Daidoji Kenzo

Mi nombre es Daidoji Kenzo, un placer- dijo inclinando la cabeza, a modo de saludo y respeto. Ya se habían juntado dos samuráis allí y parecía que un tercero llegaba, el cuál, preguntó.-

- Sí, parece que es aquí. Pero díganme señores, no conozco sus nombre.- Mirando al Hida y Daigotsu.

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03/07/2013, 23:57
Daigotsu Ikasuchi

Presentaciones eran algo inolvidable. ¿porque los mon no llevaban el nombre de uno bordado también?. Sería más sencillo.

me incliné tanto como había realizado el grulla y respondí llevando mi mano al corazón con un golpe seco. Soy Daigotsu Ikasuchi, del clan de la araña. Soy un defensor de los deseos de mi señor y de la emperatriz en el trono de jade*

Notas de juego

ya no se si el trono actual es de esmeralda, jade o acero o de qué.

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04/07/2013, 00:55
Guardias

Un par de guardias que había en la zona escucharon la escasa conversación que habíais tenido , no conociais muy bien el mon que portaban , pero estabais seguro de que eran gi-samurais de los clanes menores . 

Uno de ellos se adelantó y os habló tras hacer una reverencia . 

Lamento interrumpir samas , pero si habéis venido a la reunión aún que da un poco , si hacen el favor de seguirme los conduciré a la sala de espera para que puedan estar más cómodos mientras . 

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04/07/2013, 00:59
Guardias

1º a la Katsuga y luego al toku os dirigen hasta una sala de espera donde se hayan 4 samurais de gran clan . 

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04/07/2013, 01:01
Katsuga Setsuna

En el mismo día recibes de manos de un sirviente una carta de respuesta . 

De Katsuga Setsuna a Otomo Kazutaka Sama . 

Estimado Otomo Sama , no esperaba que alguien de las familias imperiales estuviera interesado , por supuesto podrá venir sin problema alguno y escuchan la petición como tantos otros interesados , pero si aceta , debido a que su ilustrísima es de familia imperial no puedo ofrecerle nada superior a un humilde regalo hacia su persona y no hacia su superior como con los miembros de los grandes clanes . 

Atentamente , su servidor Katsuga Setsuna . 

La carta está firmada con el sello de Kasuga Setsuna , y en ella viene el día y la hora de la reunión la cual será hoy mismo , todavía puedes tomartelo con tranquilidad pues tiene tiempo para llegar . 

 

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04/07/2013, 01:26
Mirumoto Rin

Por más que hizo memoria no consiguió identificar el mon que portaban los guardias. Al oír que la reunión sería un poco más tarde Rin pensó que quizá podría conocer algo mejor a sus compañeros mientras esperaban en la sala. Hasta ahora el único que había parecido mínimamente sociable era el grulla... el cangrejo ni siquiera había dicho nada y el del clan araña parecía más un hombre de acción que de palabra... Rin podía respetar esa actitud, él siempre había creído que las acciones hablaban más alto que las palabras, sin embargo tampoco era prudente caer en el extremo de la antisociabilidad...

- Ya que parece que nos van a hacer esperar - dijo al resto de samurais - mejor será esperar comodamente. - Tras lo cuál siguió al guardia que les había hablado y le pidió - Mientras esperamos sería de agradecer algo para calmar la sed, el clima de estos lares es bastante más caluroso que las montañas en las que me crié...

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04/07/2013, 13:42
Hida Akano

- Una Araña. - pienso con desaprobación. ¿Qué hace aquí uno de esa calaña? ¿Para que será necesario semejante infamia?

- Guíanos. - digo secamente al Guardia ignorando a conciencia la pregunta del Grulla acerca de mi nombre. Al fin y al cabo por el momento no es de su incumbencia ni mi nombre ni el motivo de que me encuentre aquí.

Luego simplemente me limito a seguir al Guardia.