Partida Rol por web

La Sociedad Fénix 2

Conteniendo la marea (Capítulo V)

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06/07/2014, 20:08
Carl Allen

El señor Allen estaba bastante acostumbrado a hablar con militares. Muchas veces le habían hecho el comentario: "explica las cosas como si lo hicieras para un niño", y en realidad era un truco que funcionaba. Los militares no tenían cabeza suficiente para comprender cosas demasiado complejas, así que había que dejárselo todo bien mascado. Sonrió antes de comenzar a hablar.

-Teletransporte. Llevar algo del punto A al punto B de forma instantánea. Obviamente la idea genera muchos problemas. ¿Como teletransportar algo para que se reintegre de forma totalmente segura al otro lado? Éste es el campo de estudio del equipo del Proyecto Filadelfia, y a pesar de que hemos tenido algún que otro retroceso... -carraspeó- El análisis de la documentación científica encontrada en la colonia atlante de Cnossos nos ha permitido rellenar los huecos que nos faltaban, comprender los errores de bulto. En fin, no quiero aburrirles demasiado. En noviembre de este mismo año teletransportamos de forma totalmente inocua para el material y los tripulantes de a bordo un buque de nuestra marina, desde Cayo Hueso hasta Groelandia. Miles de millas a través del océano.

Se ajustó las gafas con un dedo.

-Hemos replicado y ampliado la maquinaria necesaria en nuestra base de Guantánamo, donde les espera nuestra particular flota. Si todo sale según lo previsto, el día 15 de enero los polos de aceleración espacio-temporal... quiero decir, la maquinaria necesaria, se encontrará a punto para llevarles directamente desde las aguas del Caribe hasta la puerta de entrada del reino del terror tecnológico de Thule. Picarán directamente a la puerta del demonio, agitando el avispero.

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06/07/2014, 20:21
Albert Einstein

El viejo y famoso físico apoyó una mano en la espalda del señor Allen y asintió despacio, tomando la palabra con un carraspeo.

-Debo decir que admiro profundamente su labor de divulgación científica. La simplicidad con la que habla de su trabajo, doctor Allen. Creo que nos lo hemos imaginado tan fácil como llenar un cubo de arena en una playa, o algo así.

Sonrió y les miró, consciente de la gravedad e importancia de lo que iba a decir.

-Bueno, damas y caballeros. Esto de que haya damas me resulta excitante, la verdad -hubo risas- En el buen sentido, no me malinterpreten.

Él mismo se rió un momento.

-Tenemos un paquete que entregar, señores. Se trata de uno de nuestros proyectos secretos más acariciados: una bomba de uranio de potencia devastadora. Ni todo el blitz contra Londres puede compararse a su potencial destructivo. Un diseño en el que sabemos que Thule ha estado trabajando también, pero en el que nos hemos adelantado. No quiero aburrirles con los detalles, tampoco me está permitido hacerlo. Solo les diré que ésta bomba, "el paquete", es el objetivo final de la Operación. El gran "boom", no se si me entienden. Esperamos que si todo sale según lo planeado seamos capaces de dejar el paquete en la puerta de Fritz y destruir todo el complejo apretando un solo botón. Eso si, en este momento les sugiero estar muy lejos de allí. Pero eso son detalles de procedimiento, militares, no se me permite hablar de eso. El señor Darius Urquart será el encargado de custodiar la bomba y de asegurarse que el paquete es entregado con puntualidad. 

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06/07/2014, 20:29
William Talbot

El ex-coronel tomó la palabra para tratar de ordenar el puzzle que les habían presentado. ¿Donde entraban ellos en una misión tan aparentemente simple? Era el momento de despejar la X.

-Como ya han visto, el plan es aparentemente sencillo: viajar hasta Cuba, disfrutar de unos cuantos rones hasta el momento de partir, teletransportarnos hasta las inmediaciones de la base y dejar la bomba en su lugar. Ahora bien, conviene explicar cómo y por qué.

Se cruzó de brazos.

-Como ya les han dicho, contamos con una fuerza de carácter multinacional. Las armadas de Chile, Perú y México nos prestan algunos de sus mejores buques. El grueso de la tropa estará compuesto por infantes de marina rusos a las órdenes del teniente Kostin y la capitana Rustámova, aquí presentes. La cobertura aérea correrá al cargo de la fuerza aérea americana y algunos de nuestros mejores pilotos de pruebas en aviones de reacción. El por qué de ésta fuerza es claro: no nos vamos a limitar a llegar y soltar la bomba. En primer lugar, debemos saber donde colocarla. Tenemos referencias de las minas de plechbenda en el interior del hielo, pero desconocemos su ubicación exacta dentro del complejo. Necesitamos colocar la bomba dentro de la mina, para asegurarnos de que el mineral es destruido, y por que necesitamos su efecto amplificador para que todo el complejo, todo el armamento que contiene, se vayan al garete y no queden simplemente sepultados bajo una capa de nieve y hielo.

Tamborileó los dedos sobre su pantorilla.

-Ahí es donde entran ustedes. La flota al mando del señor Byrd ejercerá a cebo, los teletransportaremos en las inmediaciones del puerto de la base de Nueva Suabia. Tenemos conocimiento de que los alemanes poseen fuerzas de intervención rápida, ya que algunos de nuestros aviones espía y submarinos que han operado en aquella zona han sido atacados con mucha presteza por las tropas de Thule. La flota atraerá al mayor número de enemigos posible, provocando que la base se sitúe en alerta y que los soldados estén entretenidos buscando sus aviones y embarcando en sus submarinos.

Señaló un lugar en la parte sur del complejo, una bahía de carga secundaria.

-Como ven éste pequeño "lago" es lo más parecido a una puerta trasera. Tenemos la intención de, una vez iniciado el ataque alemán, el equipo de infantes de marina soviéticos custodiando a nuestros commandos y a la bomba, sean transportados a éste lugar, donde el enemigo no esperará la presencia de una nave tan grande. Su misión será sencilla: atacar el complejo, reunirse con Octopuss y llevar la bomba, que adosaremos en el interior de una versión anfibia de un tanque T-34, directamente hasta el objetivo: las minas. Una vez que la bomba esté situada allí, deberán escapar del complejo de la forma más rápida y efectiva posible. De cualquier modo, tenemos órdenes de detonar el artefacto si sospechamos que puede caer en manos alemanas o corra peligro de ser inutilizado o desactivado. Dios no lo quiera.

Parecía un viaje solo de ida y quizá lo fuera. Una misión tan peligrosa que dejaba el ataque sobre París, cuarenta años antes, en una simple escaramuza. Por eso se sinceró con ellos.

-Todos conocemos nuestro deber, y nuestro deber es claro. Debemos evitar que Thule consiga que Alemania y Japón se repartan el mundo conocido. Debemos evitar que las generaciones futuras vivan bajo la opresión de la bota de Hitler, en un mundo donde no habrá lugar para los vencidos. No podemos fracasar, debemos destruir éste ejército secreto. No voy a obligarles a sacrificarse, de hecho deseo que todos volvamos a Inglaterra para disfrutar de una última pinta antes de seguir con nuestros quehaceres cotidianos. Pero también deseo decirles que, si yo mismo debo sacrificarme para que ésta misión sea un éxito, lo haré sin dudar. No pediré que hagan nada que no pueda hacer yo mismo. Por eso acompañaré al equipo de ataque, junto al señor MacDonald y la teniente-coronel Sowreston. Vamos a echar toda la carne en el asador, vamos a dejarnos la piel en ésto. Hasta ahora solo hemos acariciado la victoria, pero a partir de la Operación Highjump, la saborearemos.

Respiró hondo. Se notaba cierta tristeza en sus palabras.

-Si tienen alguna pregunta creo que es el momento de hacerla. A partir de mañana mismo comienza una carrera contra reloj para prepararlo todo.

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07/07/2014, 04:23
Katerina (Katja) Rustámovna Rustámova

Los ojos de Katja se abrían muy grandes a medida que la información se iba desgranando y luego se entrecerraban cuando se ponía a sacar conclusiones. De modo que esta era la misión más importante, la definitiva; el estómago se le contrajo por los nervios, no solo porque era matar o morir, sino por las implicaciones que podía tener la derrota a nivel humanidad. Pero mejor no pensar en la derrota, la derrota en su caso era igual a la muerte.
Escuchó atentamente las palabras de los científicos y se rió suavemente ante el comentario de Einstein sobre la participación femenina, ideal para cortar la tensión propia de los asuntos tan importantes que estaban tratando. Luego cuando Will la mencionó se entusiasmó con la idea de comandar a los infantes de marina y el subidón la hizo removerse en el asiento un poco, inquieta, como si pudiera salir por la puerta y zambullirse de lleno en la misión sin preámbulos.
Se obligó a paliar su propia ansiedad y terminó dando un suspiro por lo bajo, esperando que nadie la haya escuchado.
¿Que si tenía dudas? Sí, claro que sí, pero dudaba que Will o alguno de los presentes pudiera resolverlas.

-Por mí ya podemos partir a patearle el trasero al Thule de una vez -se limitó a contestar.

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08/07/2014, 19:11
Rémi Phénix Rosseau

La relatividad del tiempo. La relatividad de las decisiones. La propia relatividad de todas y cada una de las vidas. En el futuro, cuando Rémi oyera hablar de aquella noche, estaba seguro de que muchos la calificarían de funesta. Pero no en vano aquel 25 de diciembre era una fecha denominada Navidad. El festejo en los hogares cristianos de un nacimiento. Y de igual modo, frente a aquellos que describirían aquella jornada como un desastre, Phénix la vería, haciendo honor a su nombre, como un renacer, como una nueva oportunidad, como la ocasión para reescribir las páginas del libro en el que se transcribían sus palabras y acciones. Una metáfora de la Navidad.

Camino de la reunión y tras las tensas palabras con propios y ajenos acerca de cual iba a ser su futuro inmediato, algo en la mirada del hijo de Adrienne hablaba de cambios. Cambios que solo Prudence conocía en aquel momento, aunque se harían evidentes a ojos de los demás de forma casi inmediata.

-Sentémonos -fue el escueto comentario hecho a Prue mientras retiraba una silla para que pudiera sentarse-. Cogeré una de las bandejas. Me temo que lo que han de decir será mejor escucharlo con el estómago lleno.

Se alejó en dirección a aquel improvisado buffet en el mismo momento en que William hacía acto de presencia acompañado de una figura inconfundible y que levantó entre los presentes murmullos de sorpresa y admiración. Sonrió ante el gesto hecho a Prue, mientras servía dos tazas de café y tomaba las consabidas rosquillas de anís, alcanzando la posición de su prometida en sincronía con la petición de sentarse por parte de Churchill.

Escuchó las largas alocuciones de unos y las breves y sencillas de otros, agradeciendo especialmente lo último en el caso del científico que parecía haber leído su pensamiento. Sin duda Prue hubiera agradecido una extensa tesina con todo lujo de detalles acerca de la teletransportación, aunque no dudaba de que esta buscaría el momento y lugar adecuados para ver satisfecha su curiosidad. En su caso, le bastaba saber que era un cubo de arena.

Apuró su café y terminó de mordisquear su rosquilla, dejando la bandeja que sujetaba sobre sus piernas en una silla adyacente ahora vacía. Era el momento de las preguntas, del compromiso, de la lucha. Había un antes, habría un después. En la vida de Rémi existía un ahora y una promesa de futuro, algo que hacía 24 horas no existía. Tomó de la mano a aquella que pronto se convertiría en su esposa, una mano que no soltó ni siquiera cuando William lo miró. No había provocación ni afán de herir a aquel magnífico hombre, pero era hora de que la sangre de los Durand hablara a la de los Talbot de igual a igual. Prudence era suya del mismo modo que él era de ella. Y ambos eran soldados que pelearían con y para su nuevo general, William. Se puso en pie y carraspeó suavemente.

-Creo que hablo en nombre de todos cuando extiendo mi felicitación por su ascenso, general Talbot. Si alguien se lo merece, ese alguien es usted -dijo Phénix en un tono cortés que hubiera hecho que por fin su madre sonriera satisfecha-. Respecto a la misión, si yo he alcanzado a comprender todos sus puntos, dudo que nadie tenga dudas. Asimismo no puedo hablar por los demás, señor, pero en lo que respecta a mi persona, cuenta conmigo hasta el final y si ese final es el sacrificio, este Durand no se echará atrás. Hay mucho por lo que pelear. Un presente y un futuro -dijo lanzando una breve mirada en dirección a Prue-. Pero sí es verdad que tengo dos preguntas. El teletransporte, ¿se ha probado alguna vez con una bomba como la que vamos a llevar? Y segundo, ¿está previsto teletransportarnos cuando tengamos éxito en nuestra misión? Intuyo que la bomba puede ser peligrosa incluso para nosotros.

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09/07/2014, 15:30
Prudence Urquart

Durand les dio su bendición mostrandose cariñoso sin dejar de ser el de siempre. Intentaron alargar la despedida pero cuando por fin se separaron lo hicieron con la mirada llena de promesas y limpia de viejas heridas. El primer regalo de bodas ¿Que mejor señal de que iban en dirección correcta? El orden fluía y se restablecía a si mismo.

Al calor de los acontecimientos abandonaron Talbot sin volver la vista atrás. Más relajados tomaron el camino de vuelta como una escapada bucólica (irónico tratandose del regreso) entregados a los arrumacos y el disfrute del paisaje.

Ya en la isla, Irving aprovechó para dedicarles unas palabras de apoyo, que buena falta les harían de regreso al presente. Al salir de la burbuja todo parecía mas frío y gris, conforme se acercaban al castillo. William se había ido, el comando durmió la mona todo el día y la familia... en fin, lo de siempre.

Descansaron en la medida de lo posible, flotaba en el aire la tensión del porvenir, y no se equivocaban. No hacía falta ser muy listo para darse cuenta conforme se aproximaban a Achnacarry.
A Prue se le iban a salir los ojos escudriñando el movimiento de gente y material, había llegado la hora decisiva, estaba jodida... sin el Asha... sin el apoyo de Will... muy jodida.

Iba a sentarse cuando Winchi apareció como de costumbre inundando la habitación, tal era su carisma.

Con Prue ninguna relación era sencilla ni al uso y con Winchi no fue distinto. Relación había sido, sentimental también, pero... a su manera. Fue su amiga en horas bajas, su consuelo y vía de escape, una ventana a un mundo distinto. Sonrió interiormente al recordar cuantas veces lo había llamado “niño pijo”, “estirado” y había finalizado rounds de preguntas en torno a ella con un escueto “información clasificada”. Estaba segura de que lo primero que hizo al entrar en Downing street fue leer todo sobre ese “secreto de estado” en el grueso dossier que debía ser su carpeta dentro de los archivos de la “Sociedad”, podía imaginarlo con el puro caído de la sorpresa.
Que lejanos quedaban aquellos días de Londres, noches de poker y jazz, máxima discreción y un continuo toma y daca de bromas e ingenios con resultados muy sexis. Si tenía que definir en una sola palabra esa época sería “divertido”.

Todo acabó bien, nadie se creería que quien más molestias se tomó en recomponer el matrimonio Churchil fue Prue, sabía que se querían (aunque Winchi estuvo confuso a juzgar por el portafolios lleno de acuarelas de su “mujer de fuego”). Ambas mujeres se sentaron delante de una bandeja de té y pastas y todo volvió a ser como debía ser.
Una de esas historias que harían sentir a Candance orgullosa de la hija que había criado aunque sus métodos fueran poco ortodoxos.

La última travesura entre ambos acabó con Prue enrolada en el ejercito, nadie le daba ni una semana y ahora era uno de los preciados miembros del comando que decantaría el futuro de la guerra y el mundo. Sin él quizás no habría vuelto a Talbot y su vida sería muy distinta.

Le quería muchissimo y respondió a su caricia con una mirada llena de ternura, de no haber público lo habría abrazado un buen rato.
Estaba muy sensible y el ascenso de Will la revolvió aún mas por dentro, que distinto de la noche en que lo ascendieron a coronel (apretó los ojos conteniendo los recuerdos). Tres amantes, tres décadas... demasiado. Bajó la cara y mordisqueó una rosquilla, a la que estuvo dando vueltas hasta más allá del final del briefing.
Stark, Allen y Einstein juntos en la misma sala, porno duro para el cerebro de Prue quien sin embargo escuchó cabizbaja, para lo único que alzó la vista fue para felicitar a Katia por la responsabilidad que depositaban en ella y escuchar la sombría arenga de Will con un nudo en la garganta. No le gustó lo que entendió mas allá de lo obvio.

Apretó la mano de Remí. En ese instante entendió a Adrienne. Sí, todos allí habían cambiado para bien o para mal.

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10/07/2014, 01:50
William Talbot

William leyó la incertidumbre y la pena, mal disimuladas, en el rostro de Prue. No obstante, procuró alejar los malos pensamientos y concentrarse en responder a Rémi.

-Es un dato confidencial, pero si. Durante esta prueba en el mes de noviembre se teletransportó una bomba similar para estudiar posibles efectos adversos, que no se produjeron.

Parpadeó un momento, inseguro.

-En cuanto a la vuelta... Sabemos como ir pero regresar es harina de otro costal. Calculamos que la bomba detonada bajo tierra producirá efectos adversos en un radio de unas quince millas. Es posible que se produzca un terremoto de una escala 6 o 7, acompañado de un pequeño tsunami, olas de unos 2 metros como mucho. En realidad la mayor parte de la fuerza de la explosión será absorvida por la tierra y el hielo. También se especula que el hielo se fundirá como parte de la deflagración, creando un gran agujero en la zona afectada y una lluvia de agua nada recomendable para la salud.

Hizo un inciso tratando de responder a la pregunta concreta.

-Para teletransportar se necesita la cercanía de la maquinaria que estamos montando en Guantánamo, y que hasta hace poco estaba montada en el muelle de pruebas en Fidadelfia. O sea, podemos llevarles instantáneamente, pero no sacarles. De todos modos hemos dispuesto que la flota retroceda hasta una distancia segura una vez atraído el enemigo, simulando pánico ante su respuesta. En el caso del operativo, tenemos varias opciones de extracción. La primera es que el propio comando capture alguna aeronave enemiga de transporte y salga a toda velocidad de allí. En caso de no ser suficiente o no poderse realizar, tenemos varios hidroaviones embarcados en la flota que podrán recogerles si así lo solicitan en un mensaje de radio. Y por último, el señor Stark se las ingeniado para copiar y mejorar el concepto alemán del "helicóptero", aunque está en fase de pruebas. Se trata de una aeronave de despegue y aterrizaje vertical con capacidad para unos diez pasajeros incluyendo el piloto, bastante rápida. No obstante no sabemos muy bien como responderá a las condiciones del invierno ártico, que seguro que serán bastante... difíciles.

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10/07/2014, 02:33
Sergei Kostin

El teniente ruso, que no sabían si entendía la lengua inglesa, y que se había mantenido impertérrito durante la reunión, con su café y su cigarrillo, sonrió por la pregunta y añadió algo cuando Talbot se mostró preocupado por los métodos para sacarlos de allí. Se giró en su silla hasta quedar de lado, apoyando un brazo en el respaldo, miró a Rémi con un toque optimista en sus ojos almendrados.

-No deben preocuparse por esas cosas. Creo que el camarada Stalin había pensado ya en éste detalle al enviarme. He tenido una reunión antes con la señora Rosseau, que me ha hablado de que existen otros como yo. Digamos que lo mismo que el doctor Allen puede hacer a gran escala con sus máquinas, puedo hacerlo yo a pequeña escala con personas. No a tanta distancia, claro, pero si la suficiente para ponernos a salvo una vez que la bomba vaya a detonar. Basta con que demos unas coordenadas a una nave de rescate para que esté lista en aquel lugar y yo les llevaré allí.

Compartió una mirada con Katja. No la conocía, pero si conocía su fama, su hoja de servicios y su leyenda en el ejército soviético. Inclinó el rostro Brevemente, como pidiéndole la venia o el permiso al ser su superior.

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10/07/2014, 20:49
Eric Rusell

Eric escuchó toda aquella palabrería del político, científicos y del mando del ejército, desgranando poco a poco tanta información en su cerebro resacoso. A pesar del dolor de cabeza -que las altas dosis de café no podía eliminar- entendió prácticamente toda la información recibida -que podía resumirse perfectamente en teletransporte, dejar bomba, salir por patas y  un potente ¡pumb! que acabará con la base de Thule-. Un fracaso en aquella misión supondría la conquista de Thule de Estados Unidos y posiblemente del dominio del mundo. 

Bueno, está claro que nos dejan la mejor parte a este grupo- dice finalmente el australiano- yo solo tengo una pregunta: ¿cuanto tiempo vais a dar hasta que la bomba estalle? lo pregunto para no llevarme sorpresas de última hora y no enterarme en el último momento de que tenemos diez segundos para salir pitando de allí...

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10/07/2014, 23:28
Katerina (Katja) Rustámovna Rustámova

Katja se permitió mirar hacia su compatriota solo cuando este habló, no quería pecar de curiosa y la situación no era como para andar investigando, aunque le dio una alegría muy intensa el saberse acompañada por alguien de su querida madre patria.
Cuando él asintió ella también lo hizo, muy reverencialmente: eran aliados y todos compartían la misión más importante de sus vidas, bueno, salvo Prue seguramente, que tenía más años que todos ellos. Le preocupó el estado cabizbajo de su compañera y en cuanto tuvo oportunidad le guiñó un ojo, solo para ver si podía arrancarle una sonrisa.
Por otro lado, le sorprendieron las palabras de Remi y su actitud en general, parecía... cambiado, más seguro de sí mismo. Al ver la mirada que le echó a Prue y cómo se tomaban de la mano la rusa comprendió todo. Y sus pensamientos fueron de nuevo hacia el coron... general Talbot, volvió a sentir mucha empatía hacia aquel hombre y admiró su entereza en una situación tan emocional (en muchos sentidos) como aquella.
Luego habló Rusell y su pregunta, como todas las demás, era de suma importancia. Era increíble que hubiera logrado sobreponerse a todo el alcohol que había tomado la noche anterior, aunque el australiano se había ganado su respeto en la bebida hacia bastante ya.
Su mirada se dirigió a Rickard, se preguntó bromeando para sí misma si diría algo o ya había renunciado para siempre a hablar con los seres humanos.

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12/07/2014, 20:51
Prudence Urquart

Sus posibilidades de supervivencia menguaban conforme aumentaban las de la humanidad.
De todos es sabido que la mente de Prue funciona de otro modo y a otra velocidad, vertiginosa, y la adversidad le era percibida como un estimulante.
El primer silencio (sin duda el estupor ante lo que se les venía encima) fue roto por sus compañeros de comando demostrando por que habían sido elegidos y Prue era Prue y muy pronto su mente empezó a funcionar en su dinámica habitual, mezclando ciencia e ingeniería avanzadas con locuras y excitación.
Mientras que Allen y Stark la hacían retorcerse de placer había un “nosequé” en Einstein que no le gustaba y no le reía las gracias ¿Parecido quizás? Los dos habían destrozado la vida de alguien brillante para casarse con sus respectivos primos, utilizaban el caos para para obtener el orden, estaban muy locos y parecían tener alergia a los peines.

“Oootra vez esa puta expresión” (el gran boom) pensó al oirla en boca de ese hombre. Como atlante era una ferviente creyente en la “harmonia tou kosmou “ y la música de los planetas, de modo que cualquier gran deflagración (no natural) le espeluznaba mas allá de lo descriptible, sobre todo si como sospechaba se trataba de lo que se trataba. Que le cayera mal no quería decir que no siguiera sus investigaciones.
Con la misma certeza de que muchos ya habían dado sus vidas en el camino los experimentos de Allen y Einstein , sabía que en la habitación en la que se encontraban comenzaba una nueva era para la humanidad, y aunque vencieran a Thule no sabía si sería algo mejor. Ya habían perdido la inocencia en la Gran Guerra ¿Que perderían esta vez? ¿Alguien de los allí presentes se lo estaba planteando? Sí, ganar, sobrevivir ¿Y después que? Ahí es donde entraba la fe, máxime ahora que era oficial que habían hecho un pacto con el diablo (Stalin).

Pero esa tormenta de preocupaciones no era lo que necesitaban ahora, ya les habían dado la pildorita de seguridad con datos científicos, también les habían dado la pildorita de realidad para tensarles y ante tanta duda como se planteaba era el momento de la pildorita arengadora.
Finalmente salió del ensimismamiento, se levantó.

-Señores, puedo decirles con conocimiento de causa ,que nunca antes se había reunido un grupo tan extraordinario de personas. No pequemos de soberbia ni exceso de confianza pero podemos estar seguros de que todos vamos a dar lo mejor de nosotros mismos mas allá de nuestros propios límites ¿O no?- se giró en un gesto muy típico de su chulería pre-pelea de bar, espolear el orgullo de la gente era siempre muy útil -Los genios aquí presentes saben que hay energías invisibles que mueven el universo y como dice el refrán “la fe mueve montañas”, si tenemos fe esto no tiene mas remedio que salir bien, seremos invencibles. En la India lo llaman “ley del karma”, piensa en positivo y atraerás lo positivo. Por mi parte puedo daros tiempo, el suficiente para poner la bomba y que todos esteis fuera- y dijo esto mirando fijamente a William - volveré al pasado cuanto haga falta para sacar a quien se quede atrás- alzó entonces en un gesto marcial su vasito de café -así que como dicen los judíos “lehaim”, brindo por la vida, yo también estoy deseando meterle ese supositorio en el culo a los nazis de una patada- (guiñó el ojo a Katia).

Ni de coña se creía que las consecuencias fueran solo unas olas de 2 metros y un terremoto de magnitud 6, pero no iba a decirlo en público obviamente. Se sentó arrimando el hombro cariñosamente hacia Remí para luego volver a hacer gesticular suavemente con el vaso, pensó “Brindo por tí Will, enhorabuena, el mejor de todos nosotros”.

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13/07/2014, 10:59
Rémi Phénix Rosseau

Phénix miró a la nueva adquisición soviética y en su mirada hubo un brillo de apreciación, una mirada que volvió a Prue cuando esta lanzó su discurso.

-Fe, ser positivo. Eso está muy bien, Prue. Ahora confiemos en que la fe y la positividad de nuestro enemigo sea inferior a las nuestras -dijo el francés alzando su taza de café. Pese a lo que decía su prometida y pronto esposa, era muy consciente de que no eran inmunes a las balas, ni tenían un trato con la muerte. Y respecto a viajar en el tiempo y demás, las recientes experiencias le habían demostrado que ciertas cosas no debían ni podían ser alteradas-. Pero brindar sin alcohol es atraer la mala suerte -comentó sacando una petaca de la pechera de su chaqueta y sirviendo un chorrito en cada taza de café alzada-. ¡Salut! -brindó a continuación en su lengiua natal-. Por el éxito de la misión.

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13/07/2014, 19:25
Rickard Van Winsel

El holandés mantenía su rostro indiferente. "Indiferente", entre comillas. En realidad la procesión iba por dentro. La misión era peligrosa, pero podían dar al enemigo una buena patada en el culo. Esperaba que fuera el principio del fin, y poder volver a pasear por Amsterdam con un helado en la mano y una chica con la que hablar del último estreno en cartelera.

Se movió el palillo de lado en la boca y se metió las palmas de las manos en las axilas mientras escuchaba a sus compañeros hacer apuntes. Luego sintió la mirada de Katja y le respondió intentando saber que quería decirle con la mirada fija de ese único ojo. ¿Le estaría tirando los trastos? No podía ser eso, imaginaba.

-¿Se ha probado la bomba en un entorno similar? -preguntó entonces- ¿O no sabremos como va a reaccionar con la nieve y el hielo?

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13/07/2014, 19:33
Albert Einstein

Las últimas dos preguntas eran bastante concretas, relacionadas con la bomba. Compartió una mirada con Talbot y éste asintió, como dándole la venia para que respondiera él. Carraspeó atrayendo su atención y contestó en orden inverso.

-Hemos probado la bomba en nuestra área de desarrollo del proyecto en el desierto de Nuevo México, pero no en condiciones árticas. Necesitamos para ello un permiso especial de los gobiernos de la zona. Y obviamente no lo hemos pedido por que no deseamos arruinar el factor sorpresa de la operación. Lo mismo puede decirse de posibles pruebas en la Antártida: el enemigo se percataría enseguida de nuestra presencia con esa red de alerta. Hemos estudiado y replicado en fenómeno en un laboratorio, a una escala menor: una fusión de un nucleo de uranio encapsulando una roca de plechbenda inserto bajo un bloque de hielo de varias decenas de toneladas de peso. El hielo se fundió y se formó una especie de columna de agua similar a un hongo. Así que esperamos que gran parte de la base subterránea alemana sea destruída o quede al descubierto por la sublimación del hielo. En cuyo caso será mucho más fácil "rematar" el trabajo con un ataque aéreo.

Dió un sorbo de café y luego contestó a Rémi.

-El dispositivo, que vamos a llamar "fat boy", se acciona mediante dos métodos que podrán escoger en función a las necesidades y contingencias de la operación. En primer lugar, un temporizador con un tiempo máximo de tres horas antes de la detonación, regulable hasta una secuencia nunca inferior a minuto y medio. En segundo lugar, hemos incluido un accionador por control remoto mediante radiofrecuencia, para una detonación inmediata. No obstante si van a detonarlo desde fuera será necesario amplificar la señal utilizando el equipamiento de la estación de radio alemana en el complejo, ya que al estar en el búnker y bajo tierra...

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13/07/2014, 21:03
Rémi Phénix Rosseau

-Pienso que saber tanto no es bueno. Al menos no lo es para mí -dijo absolutamente convencido y tras haber apurado el alcohólico café en el brindis de Prue y que solo parecía haber querido secundar él-. Sea como sea, esa forma de accionar la bomba es literalmente penosa. ¿Por qué no menos de minuto y medio? Ese tiempo puede ser mucho para un enemigo cuyas habilidades no conocemos y que podría desactivar o eliminar el peligro en un visto y no visto. Aquí ya se ha dicho que hay muchos boletos para no regresar, así que... ¿Para qué este tipo de regalo? Y ya lo del mando a distancia me cruje lo mire como lo mire -señaló con un deje de fastidio-. Si para accionarlo vamos a tener que amplificar la señal y para eso nos vamos a meter en un fregado del tres... De verdad, ¿quién ha ideado todo esto?

La mirada de Phénix se paseó de unos a otros esperando la respuesta, hasta finalmente detenerse en la de Prue, a la que guiñó un ojo con indecible encanto.

-Ma chérie, déjame decirte que estás radiante -le susurró inclinándose hacia ella.

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14/07/2014, 03:47
Prudence Urquart

 El orgullo que la llenó al verle levantarse y expresarse tan decidido desaparecio dando paso a una expresión indescriptible y la incredulidad en ella dibujada aumentaba con cada palabra de Fénix. La acidez le golpeaba las sienes y la lengua rabiando por salir “Muy bien cariño, acabas de hundir en la mierda mi esfuerzo por animar a la gente...”, pero no era lugar para herir publicamente el ego de un Rosseau, eso nunca salía bien...

Pero lo “mejor” estaba por llegar y solo al digno heredero de Durand Rosseau se le hubiera ocurrido espetar tan alegremente semejante rebuzno a genios científicos y militares de alta graduación “Joder...” resonaba en la cabeza de una Prue atónita. Aquello era genuina vergüenza ajena. Parpadeó entre una fugaz mirada a la plana mayor presente en la sala y concretamente a Will quien sin duda se estaría preguntando como le había cambiado por semejante especimen.

Volvió a parpadear nerviosa y rígida cuando le dirigió aquel piropo sin venir a cuento “Anda, sientate y deja de ponerte en evidencia...”, por fortunano podía leerle la mente. Trató de disimular fingiendo que aquello era una especie de azoramiento amoroso -Y tu eres muy guapo cielo...- susurró entre una sonrisa sardónica. Tomó un pellizco de su guerrera y tiró de él suavemente como para que se sentara, luego carraspeó, había de elegir bien las palabras.

-Ejem... a ver...- volvió a carraspear -que me corrija el señor Einstein si me equivoco... el minuto y medio deduzco que es el tiempo que necesita el uranio para reaccionar, no obstante estos procesos, como los químicos, una vez iniciados son irreversible y la bomba detonará hagan lo que hagan los nazis. El control remoto se me ocurre que es una solución de última instancia en caso de que ninguno de nosotros podamos accionarla in situ, cosa que no va a pasar...- dijo mirando a su alrededor reintentando mantener los ánimos a flote. Sonrió como había hecho tantas veces cada vez que había enseñado algo nuevo al Remí niño, para luego regresar hacia los ponentes.

-Por otro lado a mi me surgen dudas en cuanto a otra clase de efectos relacionados con el uranio. Sabemos que la exposición directa a materiales radiactivos es perniciosa para la salud y además estos impregnan con su radioactividad cuanto tocan durante miles de años... Está claro que gran parte será absorbida por el colapso de las estructuras en el interior de la tierra y el mar, pero...¿Cual será el alcance de estos efectos unidos al hongo de salida? ¿Se verán amplificados? Y en ese caso ¿A que distancia estaríamos seguros? Sería bueno saberlo para hacer cálculos ajustados de tiempo y coordinar las fases de la misión.-
Era consciente de que las preguntas habrían alarmado hasta al más tonto por ello trató de disfrazarlo con un tono ligeramente indiferente al estilo “todo está friamente calculado, lo digo solo por ajustar la agenda”.

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14/07/2014, 13:04
Rémi Phénix Rosseau

-Y tú eres muy guapo, cielo. 

La frase fue recibida con una sonrisa no rubricada por la mirada, inesperadamente vacía. Reconocía la de ella, marcada por la vergüenza y el ridículo. No era la primera vez. Segundos después, en silencio, parecía estar escuchando cuanto Prue decía. Tenían una misión que cumplir. Si ella se avergonzaba de sus comentarios, si se avergonzaba de él, pese a todo lo vivido, pese a conocerle perfectamente, quizá, una vez más, se estaba equivocando. 

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14/07/2014, 13:14
Rémi Phénix Rosseau

La mente de Phénix se disoció en dos. De un lado, un hemisferio parecía centrado en cuanto en aquella sala se estaba diciendo y viviendo. Cualquier extremo referente a la bomba y la destrucción de la base antártica perteneciente a sus enemigos, era recogido y destilado en su cerebro preparado para la acción, para ayudar a crear un nuevo mundo donde sus hijos, los habidos con Prue, tuvieran ese pequeño gran tesoro llamado esperanza. 

De otra parte, su otro hemisferio se agitaba bajo una inusitada descarga eléctrica, sus neuronas, en una sinapsis que provocaba a un tiempo un desequilibrio químico que sumiría a Phénix en un estado de tristeza transitoria, agitadas por un ejercicio memorístico que llevó al joven Rosseau a un momento del pasado, tan lejano que casi parecía pertenecer a otra vida. A los catorce años. 

Phénix con aquella edad idolatraba a Prue. Era el ejemplo de rebeldía, carácter y personalidad aunadas en una belleza salvaje que harían que cualquier adolescente cayera rendido a sus pies. En el caso de Rémi, iba más allá. Quería ser como ella. Durante mucho tiempo la había seguido como un perrito faldero y Prue lo había aceptado a su lado por alguna desconocida razón, como un pequeña mascota, educándolo a un tiempo, permitiéndole asistir a sus conversaciones de bar o de salón con otros adultos. Muchas cosas escapaban a su comprensión, pero no le preocupaba. Llegaría a entenderlas con el tiempo. O eso creía. ¿Acaso en otros planos, como el físico, no había mejorado de acuerdo con las expectativas sembradas por Prue que le decía que lo conseguiría, que era cuestión de tiempo y trabajo? Sin embargo, lo que conseguía con el cuerpo parecía resistirse a su mente. El tiempo y el esfuerzo no daban iguales rendimientos. 

Y llegó un 4 de julio. En la fiesta organizada por Adrienne, Prue se enzarzó con su Durand en una larga diatriba, salpicada por el vino en primer lugar y por le cognac después. Él hubo de retirarse temprano pese a sus protestas y nada hubiera ocurrido si una más que ebria Prue no hubiera entrado a hurtadillas a despertarlo con una botella bajo el brazo y dos copas dispuesto a instruirlo en los placeres etílicos de la vida. El primer sorbo le quemó la garganta y dejó a un lado su copa mientras Prue, sentada en la cama y apoyada contra la pared, lo obligaba a tumbarse sobre su regazo y le acariciaba el pelo, mientras le hablaba de lo divino y lo humano de forma balbuceante. Fue entonces cuando se lo preguntó.

-Primita, ¿cuándo seré tan inteligente como tú?

La vio cómo apoyada contra la pared resbalaba de costado hasta quedar tumbada. Y cuando parecía que no iba a recibir respuesta la oyó murmurar con la sinceridad de los ebrios.

Sacudió la cabeza, despejando su cerebro de aquellos recuerdos que no le conducían a parte alguna y de la respuesta de la Prue de su adolescencia y volvió a centrarse en la misión de forma completa. 

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15/07/2014, 01:49
Albert Einstein

"Pienso que saber tanto no es bueno". Aquella frase ya le provocó una ceja alzada, pero lo que siguió a continuación le hizo plantearse, o más bien preguntarse, en manos de quien (o de qué) estaban dejando el destino del mundo libre. La intervención de la chica del pelo rojo le hizo parpadear. Por un momento consideró a quienes se había reunido. No sabía a ciencia cierta con "especiales" eran cada uno (alguno más que otro), pero muy a su pesar el destino del mundo libre dependería de una mezcla explosiva de egos y personalidades extrañas.

Carraspeó y se atusó el bigote, como si contestara a uno de sus alumnos en una clase de física.

-No se que ideas brillantes tiene usted para aportar, señor... er... ¿Rosseau, verdad? El caso es que la bomba todavía está en fase experimental. No tenemos un método de detonación instantáneo, ya que se necesita que el proyectil de uranio que va a ser lanzado sobre el núcleo se caliente a una temperatura determinada y de manera uniforme para provocar la detonación. Si conocen otro método para hacerlo, pueden acortar tiempo, pero no se lo recomiendo.

Parpadeó intentando responder ordenadamente.

-La zona de seguridad y los efectos adversos, si. En realidad... no estamos del todo seguros. Creemos que en una detonación bajo tierra la inmensa mayoría de la fuerza de la explosión se traducirá en una suerte de terremoto. No creemos que se produzca una columna de agua y polvo de grandes dimensiones, como sucede en detonaciones a ras de suelo. Hay opiniones disputadas sobre los efectos adversos a la salud. Hay quienes creen que el uranio se consume a si mismo en un 90% durante la explosión, pero en nuestros test he detectado que a la explosión le acompaña la diseminación de radiaciones de diverso espectro de forma bastante aleatoria en un radio de unos... mmmm... tres o cuatro kilómetros, en primeria instancia. Luego es posible que el agua ayude a difundir y al mismo tiempo reducir el nivel de radiación mediante mecanismos osmóticos. El mar es muy grande, ayudará a disipar la radiactividad en la zona. Los materiales sólidos o semisólidos como el hielo, el acero y todo eso, resultarán contaminados. No obstante hemos dispuesto que haya equipos de descontaminación en la enfermería de los buques de la flota.

Miró el reloj, no por que tuviera prisa, si no por costumbre.

-Aventurar una zona segura, pues... No sabemos cual será la potencia amplificadora del plechbenda. Es posible que se produzca un gran terremoto acompañado de una rotura de la capa de hielo en la zona, desprendimientos de grandes iceberg al mar antártico. Más que evaporación, que se producirá en, podemos calcular, unos 3-4 kilómetros cuadrados en torno a la zona cero de explosión, es éste movimiento "tecnónico" acompañado por la rotura del hielo lo que debería preocuparles. Imposible saber cual será el alcance de dicha deflagración. Los buques de la flota en la distancia de seguridad no deberían resultar afectados por ésto, quizá se experimente un oleaje súbito, pero poco más. Su punto de evacuación, deberían consultar las cartas de la zona y escoger un lugar a unos... mmmm... como mímino 50 kilómetros de la base, 100 para estar más seguros, preferentemente en una zona que posea lecho rocoso o con cercanía a un macizo. La roca absorbe mucho mejor las hondas sísmicas que el hielo, es mucho menos quebradiza.

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16/07/2014, 13:27
Eric Rusell

Vale, de todo lo que has dicho doc, solo me he enterado de la última parte- interviene el australiano- 50 kilómetros o 100 para asegurarse- repite. Eso también era importante saberlo- por mi parte ya está todo contestado. A no ser que alguno de vosotros tengáis mas dudas o planes alternativos, creo que podemos dar fin a la reunión.