Partida Rol por web

La sombra de Saros

0. Prólogo

Cargando editor
17/09/2019, 20:39
Director

2 de Enero de 1924 - 14:45

Para Howard y Meredith, el viaje en el expreso de Bloomfield estaba siendo bastante agradable. Los billetes de primera que habían conseguido ayudaban a ello sin duda. Ambos descansaban en sus asientos mientras los niños dormían después de haber comido en el mismo vagón. Habían podido conseguir uno de los sitios con mesa. Su mayordomo, Bedows Fontana, viajaba en el asiento de atrás leyendo la Gazeta de Bloomfield en silencio y con un ojo puesto en las maletas. Solo llevaba con ellos una semana, pero estaba demostrando ser digno de su reputación.

La temperatura en el interior del vagón era fría. Meredith había cubierto a los pequeños con una manta. Los cristales del vagón se habían empañado, lo que dejaba claro que en el exterior haría todavía más frío. Limpiándolos un poco se podía ver que una fina aguanieve caía, comenzando a cubrir todo de un precioso blanco. Un poco más arriba, el cielo permanecía encapotado, ensombreciendo aquella visión.

Mientras tanto... uno par de vagones más atrás; Michael Thomas observa como Eva duerme apoyada sobre una chaqueta contra el cristal del vagón, dando ligeros cabezazos en las suaves y escasas curvas. Aquel vagón no era como los de primera. No tenía tanta separación entre los asientos y desde luego no había zonas con mesas; pero al menos podían estirar las piernas. 

El revisor pasó una última vez, saludando de forma cortes y educada a todos los pasajeros e informando en voz baja y de forma casi individual.

- Llegaremos a Bloomfield en unos 25 minutos señores - 

A Meredith le habían recomendado desde el propio hospital de la ciudad la Hostería de Maffy como, en palabras del propio director, un bonito y pulcro hotel con unas deliciosas tartas de arándanos. Además parecía estar estupendamente situado en la calle Abbott, en el distrito comercial de Turner Falls. Howard había transmitido esta información a Michael, que además la había confirmado con Norman.

 


 

En ese mismo momento, Norman esperaba en la estación la llegada del expreso. Lo hacía en el interior del edificio, guarecido de la nieve y las bajas temperaturas, junto al resto de familiares y amigos de los demás pasajeros. 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Con vuestro primer mensaje el tren llegará a la estación.

Cargando editor
29/09/2019, 21:26
Meredith Hanson

El rítmico traqueteo del tren unido a la comodidad del vagón de primera clase y al cansancio provocado por la excitación de los últimos días, llenos de preparativos y de nerviosismo por la incertidumbre del cambio no ya solo de domicilio sino también de ciudad, lograron que Edward y Helen se quedaran dormidos apenas la locomotora hubo salido del Gran Central Terminal.

La familia había caído en desgracia después de haberse dado una circunstancia tan desgraciada como accidental. Que Howard hubiera perdido su trabajo era ya un problema, pero cuando un buen día los niños regresaron a casa, quejándose de ataques y burlas por parte de algunos de sus compañeros de escuela, Meredith supo que debían de abandonar Nueva York.

Regresó de sus pensamientos y se levantó un instante para arropar mejor a sus dos hijos y darles un beso lleno de cariño. Afuera hacía frio, como dejaban entrever los empañados cristales, y no iba a dejar que cogieran un resfriado. Eran lo más valioso que tenía y no dudaría en darlo todo por ellos, ni iba a permitir que sufrieran cualquier daño.

Meredith había viajado mucho de pequeña. De hecho, la vida itinerante era para ella lo habitual. Pero, precisamente por ello, sabía que a unos niños les convenía un lugar estable donde crecer y hacer amigos y, aunque tenía claro que no tardarían en superar ese cambio brusco en sus vidas y olvidarse del pasado, ella quería asegurarse de que la transición fuera lo más placentera posible.

– Cariñó –se volvió para hablar con su marido–. ¿Qué referencias tienes de la señorita Remington?

Ya habían hablado antes de la nueva institutriz, pero Meredith quería asegurarse de que aquella mujer fuera perfecta para sus hijos.

En ese momento el revisor pasó para comunicarles que se estaban aproximando a su destino. Bloomfield, su futuro, les esperaba.

Notas de juego

Empezamos de forma familiar. Ya he puesto nombres a los dos chavales. Apúntatelos para el futuro, master. :)

Cargando editor
30/09/2019, 10:02
Norman Blade Burton

Norman apuraba un cigarrillo en el interior de la estación. Permanecía de pié, en un lugar donde pudo apoyar su espalda contra la pared. Evitar que pudieran sorprenderte por la retaguardia era una costumbre adquirida, a pesar de que ahora vivía una época mucho más tranquila.

Si eso era bueno o malo dependía del día. Norman no podía evitar, en ocasiones, sentir nostalgia de la acción y emoción de los combates o de un trabajo que salía impecable. Por lo menos seguía entrenando, eso sí, porque también había que mantenerse en forma en su nueva profesión. Además, le servía para despejar su mente. Esa misma mañana había acudido al gimnasio del que era socio antes de partir hacia la estación para reencontrarse con su buen amigo Michael y sus allegados.

Cargando editor
30/09/2019, 15:19
Howard P. Miles

Howard se encogió de hombros:

—Las mejores cariño. Será una excelente institutriz.

La verdad es que en ese momento, mientras veía el paisaje pasar por la ventana, ni siquiera recordaba si había pedido muchas o pocas referencias de la ¿cómo se llamaba? de la institutriz de los niños. ¡Bastante tenía ya en que pensar! Le habían pintado Bloomfield como un lugar maravilloso y él lo había intentado interiorizar lo mejor que podía para que la familia estuviera tranquila. Un nuevo comienzo, oportunidades nuevas, una vida mejor sin estar en el bullicio de la Gran Manzana... en realidad todo se podía resumir en 'es lo que nos queda', pero sonaba más bonito si le aplicabas el cuento de un nuevo futuro aguardando. La vida de Howard había sido siempre así: disfrazar las huídas hacia adelante de nuevas oportunidades. Tanto que ya se lo creía.

Y en el fondo igual les iba bien y todo. La pujanza económica de la ciudad no era ningún invento y había gente muy adinerada en el barrio de Hillsburg. Con los contactos adecuados —y Howard seguía conservando bastantes— podría incluso llegar a tener su propio bufete.

Cargando editor
30/09/2019, 17:31
Michael Thomas

Bloomfield, al fin. El viaje no había sido especialmente largo pero la posición en el asiento había dejado la espalda de Michael algo afectada. Despertó a Eva cuando el revisor avisó de la llegada próxima a Bloomfield.

Cuando el tren se hubo detenido Michael bajó decidido y con un gesto cortés, ayudó a bajar a Eva. A lo lejos, vio a Norman apoyado contra una pared y se acercó a él rápidamente.

—Buenas tardes —saludó—. ¿Es normal este frío en esta zona?

Firmó la broma con una leve sonrisa y levantó la cabeza en busca de Howard.

—Ah, mire... ahí llega Howard.

Levantó la mano derecha para llamar la atención de Howard Miles.

Cargando editor
30/09/2019, 19:41
Norman Blade Burton

Norman tiró el cigarrillo al suelo y lo apagó con un pisotón cuando vio acercarse a Michael. Le alegraba que finalmente hubiese decidido trasladarse a Bloomfield. Era bueno tener cerca a un viejo amigo en el que confiar. Además, su presencia le aportaba la sensación de no haberlo dejado todo atrás y que al menos conservara algo bueno del pasado.

-En esta época sí. Parece que los inviernos son bastante puñeteros aquí, pero bueno, tú al menos tienes a alguien que mantendrá tu cama caliente en las frías noches, así que no te quejes tanto-. Amagó una risotada y acto seguido miró a Eva tocándose el ala del sombrero a modo de saludo, esperando que no se hubiese ofendido por el comentario-. Señorita.

Esperó al resto de acompañantes de Michael y fue saludando y presentándose a cada uno de ellos.

Cargando editor
30/09/2019, 20:09
Director

A la llegada del tren, y al igual que vosotros; el resto de pasajeros fueron bajando de forma ordenada. Algunos pocos proseguían su camino en solitario; aunque la mayoría se reunía con familiares y amigos que los esperaban. Unos pocos afortunados tenían un vehículo a motor esperando fuera, otros esperaban el transporte público y los menos afortunados iniciaban su camino por las nevadas y frías calles.

Notas de juego

Os dejo un poco a vuestro libre albedrío. Norman, cuando puedas me tendrás que decir en que barrio estás alojado y si estás de alquiler o con casa en propiedad. El resto podéis decidirlo más adelante. Recuerdo que se puede consultar los diferentes barrios y condiciones económicas para ambas opciones en la escena "Acerca de Bloomfield".

Cargando editor
30/09/2019, 21:49
Norman Blade Burton

Notas de juego

Según mi estatus, yo creo que lo más adecuado es que esté alojado de alquiler en algún apartamento de Stoneleigh.

Cargando editor
30/09/2019, 22:07
Howard P. Miles

Notas de juego

Yo imagino que Howard y Meredith tendrán una casa de dos plantas en Fullham. Un sitio grande con jardín, después de todo tienen servicio y les gusta aparentar, pero no tan lujoso como para estar en Hillsburg. Seguramente Howard habrá gastado una buena parte de sus ahorros en la hipoteca de esa nueva casa con vistas a que sea una inversión para atraer a clientes de Hillsburg.

De primeras me imagino que abrirá un pequeño despacho en el distrito administrativo. Imagino que igual que la casa lo habrá arreglado todo desde Nueva York, parece un tipo de los que van un paso por delante. A partir de ahí intentará llevar una doble vida como en Nueva York, beneficiándose de los negocios turbios que vengan por parte de Norman a la vez que mantiene una fachada de respetabilidad para ir trepando hacia Hillsburg.

Cargando editor
30/09/2019, 22:29
Meredith Hanson

Meredith aceptó con gusto la mano que Howard la tendía para ayudarla a bajar los peldaños de la escalerilla del tren que permitían acceder al anden de la estación de Bloomfield. Esperó entonces a que su marido tomara en volandas a sus dos hijos y los depositara en el suelo y pasó ambos brazos por los hombros de los pequeños, como una gallina que pretende proteger a sus polluelos.

Miró a su alrededor, queriendo hacerse una idea de la bonanza de la ciudad en base a la opulencia de la estación central de ferrocarril. Alguien parecía estar haciéndoles señales con las manos y Meredith esforzó algo la vista para reconocer a Michael. El amigo de Howard había estado un par de veces en su casa de Nueva York y la enfermera no tuvo problemas en reconocerlo. Indicó a su marido donde se encontraba el detective y le siguió sin soltar los hombros de sus dos hijos hasta llegar donde se encontraba Michael con su mujer y un completo desconocido.

Aquel extraño tenía un aspecto que no inspiraba confianza en Meredith y decidió dejar que fuera Howard quien llevara la voz cantante en las presentaciones. Ella se limitó a atraer los cuerpos de los dos pequeños aún más al suyo. Quien la viera posiblemente pensara que, con ese gesto, pretendía dar abrigo a los niños frente al frio que se abría camino hasta los huesos, y no se equivocaría con esa apreciación, pero en realidad también buscaba de forma instintiva resguardarlos de un desconocido que la parecía poco recomendable.

Notas de juego

Totalmente de acuerdo con Chemo con respecto al barrio donde tenemos la casa y el aspecto de esta. Al final es él el que paga las facturas.

Cargando editor
01/10/2019, 18:37
Michael Thomas

—¿Qué tal el viaje Howard? —preguntó cortésmente mientras saludaba con el sombrero a Meredith.

Rebuscó algo en el interior de su chaqueta hasta que encontró un papel bien doblado.

—Hemos alquilado una habitación en un hostal en Stoneleigh, cerca de La Gaceta de Bloomfield. Nada como una buena fuente de información cercana para instalar un buen despacho de un detective, ¿no creéis?

Las palabras sonaban optimistas aunque Michael no lo era tanto. Iban a volver a empezar y estaba temeroso de lo que pudiera pasar.

—No se vosotros, pero yo tengo un hambre atroz. Ese tentempié del tren casi me ha abierto más el apetito.

De repente miró a Howard y recordó que él viajaba en primera clase, probablemente su tentempié habría sido menos frugal.

Cargando editor
02/10/2019, 21:50
Director

Una campana sonó lejana. En el exterior de la estación el tren se encontraba el carruaje que salía cada hora de la estación esperando a los pasajeros.

- Salimos en cinco minutos - Dijo un hombre desde la posición de conductor. Dos caballos al frente del mismo relinchaban y de sus bocas salía un vaho que se perdía entre los copos de nieve - Salimos en cinco minutos - Repitió alzando la voz un poco. 

Pudisteis ver como algunas personas se despedían de sus familiares y conocidos apurando el tiempo, mientras que los grupos que habían bajado del tren recogían sus maletas y ponían rumbo al transporte. 

- ¿Donde vamos mama? - Edward miró a su madre. 

- Hay dos vehículos privados en el exterior disponibles señor - Le dijo Bedows a Howard en referencia a los taxis. Los conductores estaban esperando en el interior de la estación, al abrigo de sus paredes y aprovechando para fumar un cigarro mientras hablaban entre ellos.

Cargando editor
02/10/2019, 23:17
Howard P. Miles

—Supongo que lo primero es ver nuestra nueva casa.— le dijo Howard con satisfacción a su hijo y su mujer.

No quería pensar en lo que había costado, como los volvía a poner en una situación de escasez inminente. La palabra correcta para definir aquel movimiento era apuesta, pero Howard se aferraba mejor a la definición de inversión.

—Hablando de comer Thomas: me gustaría invitarte a ti y a Norman a comer mañana. Yo invito, por supuesto. Espero que me podáis recomendar un buen restaurante. Tengo que empezar a tomar las medidas de nuestro nuevo hogar. Y necesitaré tu talento para conseguir nueva clientela.— le dijo al detective —Pero ahora debo ir con mi familia. Los niños están inquietos por la novedad y Meredith tiene que prepararse para conocer su nuevo lugar de trabajo. ¿Te pasarás a recogerme mañana al mediodía por la casa?

Notas de juego

Supongo que el primer día será cuestión de ubicarse y luego ya nos pondremos con los negocios.

Cargando editor
03/10/2019, 09:17
Norman Blade Burton

Norman percibió a Meredith algo inquieta cuando la saludó. No estaba seguro de si era por los nervios de llegar a un lugar nuevo y extraño o si era por él. No le sorprendería si se trataba de esto último; estaba acostumbrado a ese tipo de reacciones, así que no le dio mayor importancia.

Sonrió ante la propuesta de Howard.

-No tengo por costumbre rechazar una invitación, señor Miles. Cuente conmigo para esa comida. Conozco un par de sitios donde se come estupendamente. No son locales de gran postín, pero son decentes y tranquilos.

Seguidamente extrajo un papel de su bolsillo. Era una anotación que había escrito esa misma mañana.

-Antes de que se me olvide, Michael, aquí te he apuntado la dirección del apartamento donde me hospedo, y también el número de teléfono de la portería. Si quieres ir a tomar algo ahora, te acompañaré. Si preferís dejar las maletas y descansar un poco, ya estaremos en contacto.

Cargando editor
03/10/2019, 18:01
Michael Thomas

—El primer día en este lugar y la primera invitación para comer de mi buen amigo Howard Miles. Hay cosas que nunca cambian... y por supuesto mi compañía tampoco lo hará. Allí estaré. Me encargaré de reservar. ¿Su mujer vendrá también?

Michael echó un ojo a su diminuta maleta cuando Norman le propuso dejarla y sonrió.

—Creo que la maleta pueda esperar, Norman. Ahora mismo tengo mucha hambre. El apartamento no se va a mover de donde está.

Cargando editor
03/10/2019, 21:26
Meredith Hanson

Devolvió el saludo a Michael con una inclinación de cabeza y a su mujer con una sonrisa cálida y una pregunta cortes acerca del viaje. También saludó a Norman, pero el gesto fue más distanciado.

Iba a responder a su hijo cuando su marido se la adelanto y ella solo tuvo que confirmar las palabras de Howard.

– Así es, amor mío. Vamos a nuestra nueva casa. Tendréis ganas de ver vuestra habitación, ¿no?

La comía la curiosidad por conocer su nuevo hogar. Howard ya la había contado algunas cosas de la residencia, lo que le había explicado el agente de propiedad con el que había cerrado el trato, y Meredith ya se había hecho una idea, pero estaba deseando tenerla enfrente y saber cómo era de verdad.

Entonces su marido se encargó de invitar a comer a los otros dos hombres para el día siguiente. Ella sabía de la importancia de Michael para los negocios de su marido y supuso que Norman también podría ser de utilidad para lograr clientes, así que no puso pega ninguna a aquel encuentro. Sin embargo, no pudo evitar contestar con una broma.

– ¡Howard! ¿No acabamos de llegar y ya te estas yendo de fiesta con tus amigos? –Las manos en jarras daban la apariencia de estar enojada, pero la amplia sonrisa en su cara hablaba otro idioma–. No. Gracias Michael, seguro que es una de esas comidas aburridas donde habláis de vuestras cosas. Sera mejor que estéis entre vosotros. Pero, no os vais a librar de mi tan fácil. En cuanto nos hayamos instalado en nuestra nueva casa, tendremos que preparar una fiesta de bienvenida y espero poder teneros de invitados.

Cargando editor
04/10/2019, 11:14
Bedows Fontana

- Señor Hanson - dijo el mayordomo llamando la atención de Meredith. - Recuerde que mañana tiene una cita en el hospital con el señor Türme - Michael Türme era una médico especializado en en el tratamiento de males respiratorios y enfermedades como la tuberculosis; y había sido a su equipo en donde había destinado el director del hospital a la enfermera.

Sin más demora, cada uno tomó su camino. el matrimonio con sus hijos y el mayordomo decidieron tomar uno de los vehículos que los llevaría hasta su casa[1]. Michael y Norman fueron a comer algo, y finalmente el primero marchó a un hostal de Stoneleigh y el segundo al apartamento que tenía alquilado. 

Notas de juego

[1] Dejaré que seáis vosotros los que describáis la casa si lo creéis oportuno en el momento que consideréis.

Cargando editor
04/10/2019, 11:23
Director

El día amaneció sin demasiados cambios en la climatología. Desde el interior de las diferentes viviendas se podía apreciar el frío en el exterior. La suave nieve que caía el día anterior había cesado, aunque el cielo permanecía tan encapotado como oscuro.

Howard, Michael y Norman habían quedado en un restaurante que el mismo Norman había recomendado el día anterior[1].

Meredith por su parte se había desplazado hasta el hospital ubicado en Stoneleigh usando el transporte público. Un viaje agradable y sin incidentes. En el hospital se encontró con un lugar relativamente tranquilo. En la recepción tras presentarse una amable señorita le indicó que podía esperar en unos asientos mientras avisaba al señor Türme.

Bedows se había quedado con sus hijos; aprovecharían el día para jugar un poco en la nieve del jardín si el tiempo lo permitía y para ir ordenando sus habitaciones al gusto de los pequeños...

- Tiradas (1)

Notas de juego

[1] Tu dirás zona y tipo :)

En breves avanzaremos dos semanitas en el tiempo, para ver que tal han ido los comienzos de cada uno en sus diferentes trabajos. Hacerme todos dos tiradas de evolución económica (He dejado en la escena reglas de que va esto). Tenéis todos un +1 a las tiradas de las dos semanas, porque presumiblemente no habéis faltado a vuestro trabajo o forma de ganaros la vida.

En cualquier caso si queréis narrar la comida o la reunión con el médico no tengo problema ninguno :)

 

Cargando editor
04/10/2019, 13:03
Norman Blade Burton

Norman degustaba unos spaghetti con albóndigas en el restaurante al que había llevado a Michael y Howard. Era un local de comida italiana que, según sus fuentes, no tenía problemas con la mafia. Perfecto, porque no quería sobresaltos, y menos con sus amigos de por medio.

En el pasado, Norman había degustado bastante la comida italiana, así que sabía distinguir los sitios más recomendables que cocinaran sus recetas tradicionales. Este era uno de ellos.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Sobre el restaurante, creo que estaría bien un local del barrio de Fullham. Algo modesto, pero limpio y tranquilo.

Con respecto a las tiradas, si lo he entendido bien, habría que sumar el +1 más el atributo que corresponda con nuestro trabajo (yo he sumado Músculo). De ahí ese +3 total que he puesto.

 

Cargando editor
04/10/2019, 22:30
Meredith Hanson

Al día siguiente Meredith se levantó pronto para prepararse adecuadamente. La cita con el señor Türme, quien iba a convertirse en su jefe en el hospital, era muy importante para ella. La enfermera sabía de la importancia de la primera impresión y no pensaba fallar.

El vestido la sentaba como un guante, resaltando sus curvas naturales, pero sin ser en absoluto indecoroso. Salvó por unos pendientes, evitó ponerse ninguna joya, pues no quería parecer presuntuosa. Para completar la imagen, recogió el pelo en un moño que la daba una apariencia de seriedad y profesionalidad. Antes de abandonar el hogar para acudir a su cita, se cubrió con un chal y salió al encuentro con Michael Türme.

El hombre era educado y culto y Meredith no tardó en comprender porqué alguien como él se había convertido, a pesar de su edad, en jefe de la sección de enfermedades respiratorias. Sin embargo, algunos de sus comentarios sembraron una duda en la enfermera, duda que los días que siguieron a su entrevista no tardaron en acrecentar. El señor Türme no sentía ningún respeto por las mujeres. Para él el hecho de que estas trabajaran era una moda pasajera y grotesca. Su lugar no estaba en el mercado laboral, sino en otro tipo de mercados, y únicamente en algunos oficios tradicionalmente femeninos era su presencia tolerable. Convencerle del valor de Meredith como enfermera no iba a ser nada fácil y, así, las primeras semanas de la mujer en el hospital no fueron para nada agradables, haciéndola responsable de aquello que no funcionaba correctamente y no valorando en absoluto sus logros.

Meredith llegaba cansada a casa y, en alguna que otra ocasión, cuando no era capaz de contener más la presión que sufría, descargaba toda su exasperación en largos monólogos con su marido, quien la escuchaba pacientemente.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Pues empezamos bien, oye... La primera en la frente.

Despues de esas tiradas me limito a narrar una posible explicación de lo sucedido.