Partida Rol por web

Por favor, por favor, calma gente, calma.  Todos serán atendidos.  Guarden la fila y cuiden a los pequeños, por favor, no hagamos esto peor.  

Pasaremos a tomar nombres y hacer una lista.  Lo que queremos es que estén formados, cómodos, donde no les de el sol y se puedan sentar.  Hay que cuidarnos para pasar esto con bien...

Parece que todos se quedan bastante sorprendidos con tu actitud y la confianza que desprendes. Algunos empiezan a colocarse en la cola de nuevo y otros incluso empiezan a hacerte peticiones.

Por favor ayúdeme, creo que me he contagiado!

Por desgracia algunos de ellos siguen negándose a dejaros pasar y se parapetan en la puerta. Habéis avanzado aproximadamente tres cuartas partes de la cola, tenéis delante vuestra ya solamente a cinco personas.

Señores, dice el gnomo a los que se encuentran delante de él. Mientras mi compañero, sanador, hace su trabajo, ¿por qué no me cuentan como empezó todo? Hace muy poco que he llegado al pueblo, pero sé de hierbas, remedios que nos ofrece la naturaleza, así como leer los ríos, y me he enterado de que la enfermedad tiene algo que ver con los manantiales de donde se toma el agua. El gnomo intenta parecer empático con los de allí, tratando de ganarse su simpatía. Yo no les quitaré sitio en la cola, pues no estoy enfermo, estoy aquí para ayudar, termina diciendo.

Muchas gracias por su atención, realmente es un gran tabernero, servicial y amable, señor... bueno, no se su nombre pero yo me llamo Victoria y mi acompañante se llama Nyx.

Le tiendo la mano al posadero al tiempo que dejo la propina en la mesa.

Venimos de viaje acompañando a mi primo y estaremos por aquí un tiempo, y bueno, por lo que estoy viendo puede que los conocimientos de mis compañeros y los míos puedan intentar buscar algun tipo de solucion para la gente de este pueblo.

Gesticulo con las manos como si estuviera hablando de algo importante.

Algo que me extraña un poco es que escucho que nadie parece querer ayudar... ¿ni la iglesia ni la nobleza esta aportando su granito de arena? Creo que la gente del pueblo es la base de todo y yo estoy dispuesta a ayudar en lo que pueda sin necesidad de nada por parte de nadie.

Las personas que quedan al principio de la cola dudan durante un momento, y finalmente ceden a vuestros argumentos. Todos parecen bastante animados ante la idea de contar con nuevas personas que puedan ayudarles. Parece que lo que en un principio jugó en vuestra contra, vuestra extranjería y vuestras razas ahora juegan a vuestro favor, todos os miran con admiración y os hacen montones de preguntas.

¿Traen remedios de los druidas? ¡¡He oído que tienen ungüentos capaces de curar cualquier cosa!!

Señor, tengo algo de mucosidad, estoy seguro de haber contraído la enfermedad, ¿que debería hacer?

¿Tiene usted agua de algún manantial sagrado? ¿Algunas hierbas curadoras quizás?

¿Pueden mirar por favor a mi niño?

... (Durante un par de minutos apenas os dejan hablar si quiera, y todos os preguntan y piden de todo)

Ahora que llegáis al principio de la cola veis que hay un empleado de la tienda, un joven humano, al otro lado de las puertas, es el encargado de abrir dichas puertas cuando alguien ha terminado sus compras para dejarle salir, y dejar entrar a un nuevo cliente. Tenéis que esperar por tanto a que salga alguien del establecimiento, pero sois los siguientes.

Termino mi cerveza y mordisqueo mi "ración".  Dejo a la Tiefling hablar y presto atención a la conversación sin estorbar, para no ahuyentar al tabernero.

Como mucho, si en algún momento duda de hablar más sobre algo, le intento persuadir diciéndole:
"Bueno, no somos de aquí y hemos hablado con muchas personas, así que sea lo que sea,  nadie sabrá que has sido tú quién nos o ha contado"

Koyaanisqatsi espera pacientemente a que se abra la puerta y que salga el enfermo que esta ahí ahora siendo atendido.  Mientras tanto aprovecha para examinar a los enfermos que están más adelante de la cola, junto a ellos.  Es sólo una revisión superficial, pero para ir adelantando.  Si, sigamos el órden que llevaban.  

Mientras va revisando y averiguando síntomas, les va preguntando:  ¿Usted de que pozo o manantial saca habitualmente su agua?  ¿Tomó recientemente de ese manantial que cerró la guardia?

Os mira alternativamente a ambas, dudoso, pero finalmente arranca a hablar:

No hay mucho más que pueda contaros señoritas, la enfermedad llegó, se cobró la vida de alguna personas y se ha retirado de nuevo tal y como llegó, desconozco como llegó y desconozco porque se fue. Según los rumores ya no hay nuevos contagios desde hace días, aunque por desgracia algunas personas siguen enfermas aún.

La iglesia de Torm no pasa por su mejor momento en el pueblo, apartados como estamos de todo, cuando Heath murió hace un par de años nos mandaron a Cirthana y claramente la chica está muy verde aún.

Respecto a los barones locales perdieron el poco interés que tenían en la enfermedad en cuanto esta dejó de extenderse, supongo que valemos tan poco para ellos que ya no están dispuestos a gastar una moneda de oro en curar a los pocos enfermos que quedan.

Coge la media moneda de plata, la mira, se ríe y se la guarda en un bolsillo.

Examinas superficialmente a la gente que hay en la cola mientras esperas a que llegue vuestro turno. Encuentras tres tipos de personas:

• Gente que no parece tener absolutamente ninguna dolencia. (Aproximadamente la mitad de la gente)
• Gente con alguna enfermedad común. (Aproximadamente la mitad de la gente)
• Dos personas con una fuerte tos, dolor de pecho y barriga y esputo algo negruzco. Nunca habías visto dicha enfermedad.

Trato de transmitir una pena fingida y digo.. pobrecillos, realmente la gente esta aquí desamparada de la mano de Dios y de cualquiera que tenga dinero para querer ayudar.

Observo a los humanos que estaban bebiendo.

Ahora entiendo por que están tan irascibles.

Observo al elfo...

¿La enfermedad solo ataco humanos?

Y mientras contesta cojo paso mi naricilla por uno de los platos de comida mientras hace los bocadillos y añado mMmMmMmm...

Tras coger la moneda comienza a girarse para volver a la barra, a ver que sigues hablando se para y te escucha. Pero solo te responde - No, por lo que he oído ha atacado también a otras gentes, elfos, halflings...

Tras eso continúa andando hacia la barra.

Bien, pues haremos tres grupos de acuerdo a sus dolencias.  Haremos tres filas respetando el orden en que venían.  Ustedes dos, porfavor -le dijo a los del esputo negruzco- pasen por aquí.  Hay que darles una revisión más profunda, quizá no sea nada, pero sus signos me preocupan.

La segunda fila sería la de las enfermedades normales.   Bien, -les dijo- seguro Laurel tendrá un buen remedio ya para ustedes.  No veo nada grave, pero si hay que estar sanos.  Ahorita veremos con ella.

En el tercer grupo puso a los que no tenían nada.  Señores, ya con una primera revisión sólo veo que les hace falta un poco de refuerzo a sus humores.  Algo de buen comer, sopa de pollo, zanahoria, limones, muchos líquidos y pronto se sentirán mejor.  Un poco de descanso también.  Veremos si Laurel tiene algunos tés o infusiones que refuercen sus defensas contra malaires, pero en general, sus cuerpos van aguantando bien...

Sería respetuoso del trato de Laurel hacia la gente de Hondonada, así que le informaría de lo que veía, pero dejaría la decisión final del tratamiento a ella.

Cojo debidamente todos los bocadillos menos uno... el de Nyx, y me acerco a "el elfo" y le digo... discúlpeme señor, me he percatado de su presencia aquí, solo, tomándose un trago... no se si me ha escuchado cuando hemos estado hablando con el amable tabernero.

Observo de forma algo mas descarada sus manos y vuelvo a comentar... Perdone mi intromisión, pero creía que la piel de los elfos era famosa por rozar la perfección, ¿Esta usted bien?

¿ Podémos irnos ya ? , ¡ me abuuurroooo ! - digo recuperando mi actuación infantil

Tras la interrupción de Nyx, esbozo una sonrisa y digo... vaya, creo que tendremos que hablar en otro momento!

Dirijo mi mirada hacia Nyx y un Vaaale, ya nos vamos cariño- muevo mi figura hacia la salida.

Adios a todos chicos! mientras levanto la mano despidiendome.

Creo que sin mas a menos que me interrumpa el elfo.., nos vamos a ver a Laurel directamente...