Partida Rol por web

Las Brumas

Las Brumas: Velen

Cargando editor
28/01/2017, 17:10
Sarah Kerrigan

Sarah pareció sorprenderse, aunque tampoco demasiado. Mirando a los ojos a Riley sonrió, hablando en la mente a ambos.

Cero.

Entonces, con un parpadeo eléctrico, despareció de la vista. Riley aún podía sentirla, casi olerla, y Angela podía sentir su agarre y su lengua en su interior. 'Tan solo' se había hecho invisible a plena vista.

Aún me quedan trucos en la manga, Riley y Sophie. Volveremos a vernos.

Con un movimiento rápido y brusco sacó el tentáculo del cuerpo de Angela, y la empujó con violencia contra Riley mientras aún tosía y trataba de recuperar el aire. El polvo empezó a moverse alrededor del espacio que ocupaban antes ambas.

Cargando editor
28/01/2017, 17:16
Sarah Kerrigan

Angela pudo oír la mente de Kerrigan por radio brevemente, justo antes de que se hiciese invisible.

El trato sigue en pie, no me falles. Estaremos en contacto.

Cargando editor
28/01/2017, 17:18
Sophie

Poco después de que se hiciera invisible, Riley pudo oír el chirrido psiónico de antes, brevemente.

Sophie aún seguía consternada.

¿¡Cómo ha hecho eso!? Maldición, Riley! Ahora sí que nos tiene!!! No tenemos espacio de maniobra, y tiene mayor alcance cuerpo a cuerpo, estamos en un espacio cerrado y nuestras probabilidades de acertarle son mucho menores, eso sin contar con lo que puede haberle hecho a Angela, acuérdate de aquellas cosas de la plaza! 

Expuso los datos, y aunque probablemente había sacado su conclusión, no quiso osar decirle a Riley lo que había que hacer.

Cargando editor
28/01/2017, 19:19
Mólor Lóion

Por suerte, el conjuro fue suficiente como para acabar con las dos criaturas, lo que precipitó el final del combate… al menos por nuestra parte. A saber cómo iban las cosas por el lado de Ángela y Riley, aunque claro, no es que estuviésemos en condiciones de ir a ayudarles.

Ha estado cerca…- murmuré para mismo, apoyando las manos en las rodillas para recuperar el aliento -¡¿Osellë, estás bien?!- le pregunté cuando acabó con el último de los seres que había subido al tejado, aunque antes de que pudiese contestar, un ruido seco a mi espalda hizo que me volviese en esa dirección para ver como el bárbaro tempuriano yacía en el suelo inconsciente. No era la primera vez que veía algo así, guerreros que lo daban todo en batalla a los que las fuerzas les abandonaban nada más acabar esta, y a juzgar por las heridas que presentaba, no debía quedarle demasiado.

No creo que lleguen a tiempo- pensé cuando escuché a Varken -Serán más útiles en otra parte- me dije.

¡SU LIDER ESTÁ HERIDA, INTENTÓ ESCAPAR EN AQUELLA DIRECCIÓN!- les grité a los soldados -¡NUESTROS COMPAÑEROS LA ESTÁN ENFRENTANDO, NECESITARÁN VIESTRA AYUDA!- añadí, para luego girarme hacia Varken -Ven, ayúdame- le dije, o más bien ordené aunque de manera inconsciente -Intentemos que aguante hasta que lo llevemos a un médico- dije, arrancándome parte de mi ropa, concretamente la que estaba ya desgarrada por el ataque de la criatura, con intención de usarla para intentar taponar las heridas más graves y evitar que se desangrase -Nos vendría bien la ayuda de Yaril·la… pero nos tendremos que apañar- murmuré, observando por un instante a la sacerdotisa inconsciente antes de volver a centrar mi atención en el moribundo bárbaro.

- Tiradas (1)
Cargando editor
29/01/2017, 18:03
Riley

La voz mental de Sophie mientras contaba hacia atrás aún retumbaba en mi cabeza, llenándola de datos científicos y correcciones a mis palabras, que la chica usaba para tranquilizarse.

En realidad el núcleo de las balas del rifle está hecho de acero, no de plomo. Eso le da una mayor capacidad de penetración. Además, a esta distancia, una bala a Mach 2.45 tardaría aproximadamente 4.8 milisegundos en impactar... Bueno, eso suponiendo que la velocidad del sonido en esta atmósfera sea similar, porque la temperatura es menor que en Kansas y seguramente la composición del aire no sea la misma. De entrada hay mucha más humedad...

En los últimos días había aprendido a aislar los pensamientos de la chica y no permitir que se mezclasen con los míos, por lo que ignoré todos esos datos mientras seguía apuntando a Kerrigan. Súbitamente, la mujer alada desapareció en un chisporroteo eléctrico. Durante un instante estuve tentado a apretar el gatillo y, de no haber sido porque la electricidad que generó en su posición me deslumbró durante un momento, probablemente lo habría hecho. Pero la cabeza de Ángela estaba peligrosamente cerca del punto al que estaba apuntando.

La chica de la armadura futurista es empujada hacia mí con fuerza, pero no me cuesta mucho echarme a un lado y empujarla hacia la pared mientras recurro a mis poderes psiónicos. - ¿Crees que vas a engañarme con un truco tan burdo? - le pregunto a Kerrigan mientras despierto mis sentidos sinestéticos. Aunque la vista no sea suficiente para detectar a alguien invisible, si puedo seguir oliéndola significa que no puede ocultar todo su rastro, lo que implica que aún puedo detectarla. Al mismo tiempo, empleo mi concentración para volver a cargar con ácido mis armas; si se le ocurre acercarse, invisible o no, la reina va a pagar un precio elevado por atacarnos.

¡Cállate Sophie! - pienso intentando tranquilizar a mi compañera. - Dime cuánto va a tardar Ángela en recuperar el aliento y deja que yo me haga mi trabajo.

"Volveremos a vernos", había dicho Kerrigan. Con suerte la reina aprovecha para irse volando por el hueco del tejado para "buscar más información sobre este mundo", tal y como había sugerido en la plaza. Si es así, no tendrá sentido perseguirla, sobre todo cuando es posible que aún pueda hacer algo por Ángela.

Notas de juego

 Lo siento, pero tenía que "pejotizar" a Sophie en este momento.

Entonces, con un parpadeo eléctrico, despareció de la vista. Riley aún podía sentirla, casi olerla, y Angela podía sentir su agarre y su lengua en su interior. 'Tan solo' se había hecho invisible a plena vista.

Aceptamos barco, pero debería tener tiempo para disparar al sitio donde apuntaba, visible o invisible...

Vale, uso Synesthete, que suple la negación de uno de mis sentidos, así que podría "ver" a Kerrigan aunque fuese invisible y da un +4 a percepción. Además, gasto el psionic focus para usar el feat de Linked Power y al turno siguiente se lanza solo el Dissolving Weapon, que me cuesta un huevo y medio de puntos de poder (5 en total, 1+2*2, el máximo que puedo gastar, de hecho), pero es lo que hay.

Dime si Kerrigan está aún por aquí, para saber si continúa el combate o si me puedo centrar en Ángela. Por cierto, ¿sigue activo el vínculo psíquico con la zerg?

Cargando editor
30/01/2017, 17:45
Riley

La imagen de Kerrigan aparece frente a mí claramente, en el mismo lugar en el que se encontraba antes de empujar a Ángela. La mujer se había esforzado en ocultar tanto su presencia como sus pensamientos, pero no había contado con mis propios poderes psiónicos.

Aún mantengo el rifle prácticamente en la misma posición, así que sólamente tengo que recolocarme ligeramente antes de apretar el gatillo. Justo antes de hacerlo, noto cómo el arma se carga de ácido a consecuencia del poder que desaté hace un momento - Te advertí que te fueras, zorra - digo mentalmente mientras siento el golpe en el hombro por el retroceso del rifle.

Pero, pese al disparo, sé que la mujer no se ha quedado aquí por nada. En la plaza hizo gala de unos poderes psíquicos impresionantes invocando una tormenta eléctrica, y algo así en un espacio tan reducido como esta casa podría ser tremendamente peligroso.

Invocando una vez más mi velocidad psiónica, empiezo a caminar hacia la puerta. - Ángela, vámonos de aquí. ¡AHORA! - le digo a la chica, esperando que haya recuperado el aliento lo suficiente como para poder andar. Aprovecho el movimiento adicional para tirar de ella hasta el umbral de la puerta y rápidamente me echo a un lado, apartándome de la línea de visión de la mujer.

Sé que el disparo, cargado de ácido, ha tenido que dolerle, con suerte lo suficiente como para interrumpir el poder que estuviera invocando, pero prefiero no arriesgarme. Lamentando ligeramente el gasto de munición, apunto hacia la puerta por si la mujer alada decide seguirnos, aunque no descuido la parte superior del edificio, que sigue suponiendo una clara vía de escape para la reina zerg.

- Tiradas (4)

Notas de juego

Pues otros 60 puntos de daño, nada menos... ¡Joder! No la mataré porque es Kerrigan, pero ¿tan ceporra es como para no largarse de una vez?

me ha tocado mirar las reglas, por cierto. El dissolving weapon se manifiesta como free action, así que puedo gastar otros 2 puntitos para el Hustle (swift action) y salgo poniendo pies en polvorosa al otro lado de la calle. Con el movimiento adicional, intento ayudar a Ángela para sacarla.

Cargando editor
31/01/2017, 09:42
Sarah Kerrigan

El disparo resuena dentro de la casa de piedra con un estruendo ensordecedor, mientras Angela tose y trata de coger aire con todas sus fuerzas luchando contra el asco y las arcadas.

Al instante se oye el golpe contra hueso y carne, y un desgarrado grito de dolor suena en el aire allá donde la bala ácida desapareció.

¡HIJO DE PUTA! Grita sin pudor y rabiosa. El polvo a su alrededor sale disparado en todas direcciones con un gruñido de dolor.

Notas de juego

En realidad estaba huyendo XDDD

Cargando editor
31/01/2017, 09:58
Sophie

Riley puede sentir cómo su presencia psiónica sale disparada a toda velocidad hacia el cielo.

Se... ¿Se va? ¿Se ha ido? Si... El espacio sin pensamientos equivaldría a un suspiro Angela... se pondrá bien, si no hay nada... 'de la reina' dentro suyo. Pero tienes razón, debemos salir y buscar alguna otra cobertura mejor por si regresa a dejar caer su tormenta, y quizá debamos ir en ayuda de los demás...

Cargando editor
31/01/2017, 15:05
Osellë

-¡Sul! - expreso en un tono preocupado mientras asiento con la cabeza a modo de respuesta a lo que Mol me pregunta. En este momento mi interés se centraba en mi adorado lobo que había recibido un ataque, no ha sido grave pero ya con eso bastaba para que saliera tras él con tal de revisar su herida. 

Una vez que está fuera de peligro mi querido amigo lobezno, mis pasos se dirigen hacia donde se encuentra Thosk. No podía morir, de alguna manera él había caído en este lugar y no tenía porqué morir. Odiaba a todos ellos que nos forzaron a seguir un camino que lo llevó a la muerte, igual que en Aman, por intereses personales. 

- Hay que curarlo, no me importa ella ni el resto... Él no tiene que morir, estamos en este lugar porque algo salió mal. No se merece esa suerte. -  expreso en un tono compungido al revisar las heridas, buscando la forma de curarlo de alguna manera. 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Mierda!!! Casi un crítico!!!! 

Cargando editor
31/01/2017, 16:15
'Dungeon Master'

Nada puede hacerse por Thosk, está siendo literalmente consumido por la masa zerg que cubre el suelo, las partes orgánicas, al menos. El semigigante siguió a sus compañeros al combate y por ellos dio su vida. Nunca sabrán mucho más de su enorme camarada, y cualquier secreto que trajese se fue con él.

Cargando editor
01/02/2017, 14:47
Riley

No puedo evita media sonrisa al escuchar la rabia en el insulto de la reina zerg. "Y eso que no conociste a mi abuela... ella sí que era zorra cuando quería", pienso. En mi mundo la prostitución es bastante común y, de hecho, un método de supervivencia tanto de la persona como de la propia especie, pues con poblaciones tan pequeñas y aisladas como las nuestras, la endogamia se convertirá en un problema en pocas generaciones.

Levanto la cabeza por costumbre mientras trato de localizar a Kerrigan. Aunque sepa que la vista no me servirá de nada y aún tenga activa la sinestesia, los hábitos son difíciles de controlar. En cuanto me aseguro de que no está en los alrededores, asiento para darle la razón a Sophie y me vuelvo hacia Ángela, aún con el rifle en la mano.

- Vamos al otro lado de la calle. En esos portales podremos ponernos a cubierto - le digo dudando un momento si tenderle la mano para ayudarla a levantarse. Finalmente no lo hago.

- ¿Qué te ha hecho Kerrigan? ¿Estás bien? - Pregunto mirándola con desconfianza cuando por fin estamos en un lugar protegido. Si la ha infectado de alguna forma, no sé cuánto tiempo tendremos para reaccionar y poder evitar que acabe como toda esa gente. Mentalmente le pido a Sophie que haga esos cálculos, porque seguro que ella puede deducir mucho más cosas que yo con la escasa información que tenemos disponible.

- Tal vez sea buena idea abrirte el estómago para limpiar cualquier cosa que haya podido dejarte ahí dentro... - Sugiero sin estar muy seguro de cómo Ángela puede tomarse mis palabras. - Ese bastón tuyo, ¿podría curarte una herida así? - Alguno de los miembros de mi clan podían sanar a la gente con su psiónica, pero yo no he desarrollado esos poderes.

"De todas formas, ahora nos vendría muy bien un par de botellas del destilado de Alana", me digo. "Tanto para desinfectar los cortes como para disolver cualquier cosa que haya podido tragarse... y, sobre todo, para pegarle un buen lingotazo", pienso empezando a acusar la tensión del combate anterior.

Notas de juego

En realidad estaba huyendo XDDD

Pues que lo hubiera hecho directamente sin empujar a Ángela, más tonta ha sido ella. ¡Hala! Que regenere eso, ácido incluido.

Por cierto, me había apuntado mal el coste del hustle, así que en vez de 6 puntos de poder, me queda sólo uno (más los del cristal). Creo que todos vamos a necesitar un buen descanso después de esto...

Cargando editor
02/02/2017, 00:59
Mólor Lóion
Sólo para el director
- Tiradas (1)
Cargando editor
02/02/2017, 09:12
'Dungeon Master'

Yaril·la convulsiona, contrayéndose y parpadeando más un ojo que otro. Parece más inconsciente que consciente, pese a que tiene los ojos muy abiertos (Cuando no parpadea, claro) y farfulla palabras incoherentes e incomprensibles.

Cargando editor
02/02/2017, 11:08
Mólor Lóion

Bien fuese porque sue heridas no eran tan graves como había pensado en un principio, porque el dios al que el guerrero adoraba había quedado complacido por su actuación y había evitado que muriese, o simplemente porque habiamos tenido suerte, la cuestión es que logré estabilizar al bárbaro lo suficiente para que su vida ya no corriese peligro inmediato... claro que de ahí a lograr que recuperase la consciencia había un buen trecho. Una vez acabé con él, me giré hacia Osellë.

Ya es demasiado tarde para él- le dije al ver como intentaba curar a Thosk! -No hay nada que podamos hacer- añadí con cierto tono fatalista producto de haber visto escenas como aquella en demasiadas ocasiones.

Al parecer, sin importar el mundo en el que esté, hay cosas que nunca cambian- pensé con una expresión sombría en el rostro. Puede que estuviese de acuerdo con Osellë y también pensase que Thosk! no merecía morir... pero mi mundo me había enseñado que eso no importaba a la hora de la verdad, los que merecían vivir morían tan fácilmente como los que no.

Guarda tu ira para cuando encuentres al culpable... y entonces, házselo pagar- dije, con un tono que dejaba claro que se lo decía tanto a ella como a mí mismo -Hasta entonces, encarguémonos de los que aun respira- añadí mientras me acercaba a Yaril·la para examinarla.

Estaba viva... pero más allá de eso, poco logré averiguar. No paraba de convulsionar y contraerse, inconsciente a pesar de tener los ojos abiertos, demasiado abiertos incluso como para ser bueno, eso sin contar con que farfullaba palabras sin sentido alguno. Desde luego, aquello no podía ser bueno, pero no tenía ni idea de lo que aquella mujer-monstruo le había hecho. Lo único que se me ocurría era intentar calmarla con magia... no es que confiase demasiado en que fuese a funcionar, pero tenía que intentarlo.

Notas de juego

Intento usar Hechizar Persona en Yaril·la

Cargando editor
02/02/2017, 12:40
Varken

Los soldados siguen persiguiendo a las criaturas que no entablaron batalla, mientras otros soldados llegan, con intención de empezar a romper los huevos que aún quedan.

El hechizo de Mól no tiene ningún efecto, por lo que o bien ha resistido de algún modo su magia, o el 'problema', las convulsiones y los balbuceos no son algo voluntario si no involuntario. No se trata de que esté aterrada por algo que la haya hecho ver o sentir, si no alguna otra cosa.

Varken se acerca a Thosk y Oselle, y jadeando, da unas palmadas suaves en el hombro de la elfa. 

Gracias... por enviar a Sûl. El combate iba realmente mal, le debo una. Apenas se mantenía en pie, pero también miró a Thosk con cierta lástima. Menudo luchador estaba hecho. Tempus lo tenga en su gloria, y le conceda toda la comida y bebida que pueda tomar, en el Descanso del Guerrero.

Se trató de incorporar, y entonces desde donde estaba, se preocupó por los que aún estaban vivos, sus dos amigos, que estaban siendo atendidos por el mago.

Señorita... deberíamos salir todos y sacar a los heridos de aquí cuanto antes. No sea que encontremos más sorpresas, o vuelva esa demonio.

Cargando editor
05/02/2017, 11:44
Angela

 ¿Cómo habían llegado a estar en aquella situación? Mercy tuvo que reflexionar unos instantes antes de cerciorarse de como había llegado a esa calle, de porqué ahora le acompañaba Riley y tuvo la necesidad de evaluar la situación para asegurarse de que no corría más peligro. Estaba desorientada, pero su mirada seguía clavándose en aquellos que miraba como una incómoda lanza de justicia y determinación. No importaba lo mal que lo pasara si conseguía llevar a cabo una buena obra.

 Consciente de que era Riley y no otra persona o monstruo en mi mente no pudo reflejarse otro pensamiento más que aquel: ¿es que es americano? toda una oda a la experiencia que tenía de su propio mundo y seguramente no aplicable al mundo de aquel mutante. Fruncí el ceño, aparentemente, por las propuestas de aquel hombre, pero en verdad, sólo era un gesto que expresaba su disconformidad al ver que alguien pretendía hacer su propio trabajo, que se inmiscuía con remedios sin sentido en el campo de la medicina.

 ¡Un ejercicio tan invasivo traería más problemas que las propias toxinas! 

 Tal vez no fuera cierto, pero ella se pensaría mucho actuar de una forma tan violenta. Para encontrar a un asaltante en el bosque no era necesario quemar el bosque.

 - El bastón no es el que cura. - le expliqué con cierta sequedad, aún con un gesto apacible a pesar del dolor y la falta de aliento. No era un bastón milagroso. Angela era la que curaba, y para ella, aquella referencia sería como asumir una afirmación análoga "¿ese escalpelo puede curarte?" Fuera de la corrección, podía entender a que se refería, y no iba a ser tan dificil de trato como para no contestarle. - No queda rastro de la infección, pero me aseguraré más tarde. - aseguré con determinación, cada ultima palabra me costaba, pues terminaba sin aire.

 - No será necesario una intervención quirúrgica a cuchillo. - ironicé tomándome la propuesta de Riley más como una broma que como algo que debiesen considerar en serio.

 Negué sujetandome la sien.

 Bajé la mirada, recordando lo sucedido mientras me ahogaba. No era tan fácil. Cuando caí en la cuenta de que había atacado a Kerrigan, volví a mirar al mutante, no con reproche, más con curiosidad y cierto matiz maternal.

 - Me ha hablado. - confesé - lo suficiente como para tratar de justificar los horrores que ha cometido. - en ese punto era dificil saber si Angela se había puesto de su parte o le parecía un ser deleznable que merecía algo peor que la muerte.

 - Sólo quería sacarme información con una amenaza real. - acepté con frialdad - luego dijo que soy inofensiva, supongo que sentía lástima por mi. 

 Creo...creo que me iba a dejar a mi suerte cuando has llegado.

 Hasta entonces no había mentido. No parpadeaba mirando a los ojos de Riley. Todas aquellas personas, aquellos monstruos, eran como de otros mundos, y sin embargo, captaban cierta esencia del que le es propio. En otro momento, tal vez se hubiese asustado mientras recuperaba el aliento, pero en esa situación, Angela tenía clara sus prioridades.

 - ¿Estás herido? - le dije anteponiendo su seguridad a la suya - ¿Y los demás?

 Me llevé la diestra a los labios, en ese momento en el que te percatas de un detalle que tu mente había dejado pasar hasta el momento para protegerse.

 pobre Tosk!...

 

Cargando editor
06/02/2017, 15:12
Osellë

Una mirada impregnada por la impotencia le dedico a Mol mientras niego con la cabeza, demasiada veces vi la sangre correr y estaba un poco cansada. No quería recordar lo que en verdad marcó un antes y un después a los elfos Noldor, por esa razón cuando Varken tocó mi hombro giré rápidamente con tal de mirarlo a los ojos mientras algunas lágrimas surcaban mis mejillas. 

- No hay qué, simplemente hice lo que era necesario para sobrevivir. - respondí esbozando una media sonrisa y sin dejar de escuchar lo que tenía para decirme, me incorporo y cuelgo el arco sobre la espalda. - Un guerrero que luchó en un lugar que no le pertenece, una pena. - comento desviando la mirada hacia Thosk, su tamaño era enorme y cavar un pozo sería una epopeya para mi. - Debemos darle una muerte digna, ya sea a cavando una tumba o quemando su cuerpo. - era importante al menos si había dado la vida para salvarnos, permitir que descanse en paz. 

- Estoy de acuerdo con ello, aunque primero veré la forma hacer algo con el cuerpo del grandote. - comento tras sonreír complacida por el detalle de ser atento conmigo, no parecía una mala persona y si que lo estaba pasando mal en el campo de batalla. - Tendremos que revisar tus heridas después. - propongo al dedicarle otra mirada. 

Cargando editor
06/02/2017, 22:21
Mólor Lóion

La mirada de impotencia de Osellë en respuesta a lo que le dijo me era demasiado familiar, puesto que en mi mundo, era una mirada demasiado común.

Hay cosas que nunca cambian- me repetí mientras me concentraba en el conjuro que estaba lanzando sobre Yaril·la.

Por desgracia, mi magia no tuvo ningún efecto en el estado de la sacerdotisa, lo que significaba que me había quedado sin ideas sobre lo que hacer, por lo que me dejé caer al suelo para intentar recobrar fuerzas.

Si no empeora, lo mejor será dejar que la vea un médico- pené, pues estaba claro que lo que le pasaba superaba por mucho mis escasos conocimientos de medicina.

Pues será mejor que vengan algunos a ayudarnos…- les dije tras escucharlos, mirando a los soldados que se estaban encargando de destruir los huevos -No creo que podamos cargar a Yaril·la y a Hoglerruk hasta el medico…- dije -Y mucho menos a Thosk!, como has dicho, al menos debemos darle un final digno- añadí, mostrándome de acuerdo con Osellë -Y tampoco debemos olvidar al resto- dije levantándome con cierto gesto de dolor -Espero que hayan podido sobrevivir contra la mujer-monstruo- dije mirando en la dirección en la que habían ido, dudando si ir o no, pues incluso si lo hacía, con todos los conjuros que había gastado no iba a ser de mucha ayuda... claro que por otra parte, cualquier ayuda por pequeña que fuese, podía ser fundamental.

Cargando editor
07/02/2017, 15:28
Riley

Ya había empezado a sacar la navaja y el mechero de la mochila para descontaminar el filo con la llama a falta del destilado de Alana. Tanto me da que sea el bastón el que cura o que sea la propia Ángela quien canaliza a través del objeto algo parecido a nuestros poderes psiónicos, pues la pregunta sigue aplicando independientemente de la fuente de curación.

Pero cuando dice que no hay restos de la infección y que no es necesaria ninguna intervención vuelvo a agarrar el rifle y miro a la mujer sin ocultar mi desconfianza, y más aún tras la visión que tuve de camino a la casa, cuando aún compartía un vínculo mental con Kerrigan.

- ¿Cómo puedes estar segura de que no te ha infectado de ninguna forma? - pregunto antes de quedarme callado un momento, pensativo. - Mejor dicho, ¿cómo puedo estarlo yo? - añado directamente. En mi mundo hay poco tiempo para sutilezas, así que no suelo perder el tiempo con demasiados formalismos, sobre todo cuando es posible que no dispongamos de demasiado de ese tiempo para revertir cualqueir cosa que Kerrigan le haya podido hacer a Ángela. - Yo mismo he notado la capacidad de manipulación mental de Kerrigan, así que será mejor que pienses una forma de demostrar que esas palabras son tuyas y no han sido inducidas por esa reina zerg o por cualquier huevo que haya podido depositar en tu interior.

Incluso sin apuntarla directamente con el rifle, mi tono es suficientemente serio como para instar a Ángela a pensar con cuidado su próxima respuesta. Mientras lo hace, contesto a todo lo demás que ha dicho.

- No, su intención no era ni mucho menos dejarte a tu suerte... Y me temo que hay poca justificación para lo que ha hecho en esa plaza - concluyo. Esa biomateria está creada a partir de los seres vivos de esta ciudad. Incluso con la crueldad de la vida en mi mundo, a nadie se le ocurriría masacrar indiscriminadamente a otra tribu sin darles ningún tipo de alternativa, ni siquiera para la supervivencia de un clan. Ni siquiera los Thorstein, con quienes pasamos en guerra más tiempo que en paz, llegarían nunca a ese extremo.

No contesto nada sobre los demás. Dudo que Thosk sobreviviese después de haber cargado estúpidamente contra Kerrigan incluso cuando el mago hizo todo lo posible por alejarle del combate directo. Mol y la otra elfa estaban bien cuando me alejé, pero Oselle me dijo que mandaría al lobo detrás de mí y no he visto al animal por ningún lado, así que es posible que se complicasen las cosas. Sin embargo, ahora mismo mi mayor precupación no son ellos, ni siquiera Yaril·la, sino la respuesta que Ángela debería estar a punto de darme.

Cargando editor
07/02/2017, 18:32
Angela

 - Tu comportamiento sólo se justifica abrazando la más decrepita ignorancia. - informó, dado que no hablaba con cualquiera, no podía hablarle de ese modo porque eso situaba al propio Riley en el centro del universo, que él sólo pudiese pensar en sí mismo y en que las únicas verdades del mundo nacían de lo único que no puede negarse en la duda cartesiana, eran una muestra suficientemente clara de que aquel tipo era más astuto que inteligente, más perspicaz que sabio, y más temerario que valiente. La mayor de las virtudes, la prudencia, no había hecho tanta mella como hubiese parecido en un principio en aquel hombre, si es que él controlaba sus propios pensamientos y acciones, y no era otra entidad, si no era la propia Kerrigan.

 Pero Angela no se rebajaba a las amenazas, más propias de un asesino o un ratero.

 - Lo puedo saber igual que ... - se tomó un instante, como si recopilase la información. Lo miraba fijamente a los ojos, no le intimidaba, y si quería jugar al spaguetti western estaba preparada para desenfundar su arma y dejarlo allí quietecito. Tal vez a quien hubiese que abrir en canal fuera a él. En algunas partes del mundo de Angela no se lo pensarían antes de estudiarlo detenidamente, conservándolo consciente mientras un científico urga en las cisuras de su cerebro. - se que tienes problemas en la espalda con cierta recurrencia, llagas por los roces, y un mal estado de la piel. Sobretodo en tus pies. Te suele picar el cuero cabelludo, puede llegar a ser un problema, pero es el menor de todos.

 Infecciones mal curadas, no de hoy. Ni de hace una semana. Falta de vitaminas, por descontado. - parecía estar revisandolo en ese momento sólo con mirarle.

 - Hace demasiado que no tomas una pieza de fruta. Y...¿sabes que existe el pescado?

 Pero si algo se lleva toda mi atención, como médico, es tu deshidratación.

La doctora ha llegado.

 - De modo que te invito a que utilices esa parte de tu cerebro capaz de tratar la información de una forma más rápida y eficiente que el resto a pensar un instante en que si no tienes idea de lo que estás haciendo es mejor que consultes a tu médico más cercano y apartes tus sucias y toscas manos de mi. Y menos con ese cuchillo lleno de gérmenes que si podrían matarme o hacerme delirar.

 Apretó los párpados sin cerrar los ojos, poniendo en ligera tensión sus mejillas, no le quitaba los ojos de encima. Si se atrevía a atacarla, Angela no volvería a confiar jamás en él, y por descontado, le privaría de cualquier beneficio de su compañía. En asuntos clínicos como aquel ella era la autoridad, y si no se respetaba esa autoridad, no estaba dispuesta a conceder ningún privilegio, incluida su palabra, a alguien tan sumamente idiota e ignorante. No sólo se trataba de la ignorancia, lo que podía llegar a crisparla es la falta de reconocimiento de la misma.

 Podría haberle dicho que era un egoísta bipolar sin un ápice de empatía, más considerando que Angela aún se estaba recuperando de aquella invasión a su intimidad y a su cuerpo,  tan similar a una violación que era aterrador, como para que justo después llegase otro individuo con la misma prepotencia y sed de ego que buscase repetir el proceso.

 ¡No!

 La mirada de Angela reflejaba asco. Asco por lo que Kerrigan le había hecho, pero también por ver como uno de aquellos que podría haber considerado un aliado actuaba igual que aquella criatura. Era asqueroso, simplemente repugnante.

 - Sus actos son injustificables en mi mundo. - añadió a sus conclusiones sobre Kerrigan, aceptando que en esa ocasión su ego como conocedor de la JUSTICIA única y necesaria era, contra todo pronóstico, correcta también en la subjetividad de la doctora. - Es lógico pensar que lo que ha dicho revela parte de sus planes.

 Soy inofensiva. Pero eso no quiere decir que no pueda utilizarme.

 Sabe lo que puedo hacer. Y podrá verlo como un seguro para su futuro, si necesita sanación. Matarme o contaminarme me haría menos efectiva en mi principal función.

 Ahora cree que puede utilizarme si me amenaza con convertirme. Y tiene a su favor que tu estás amenazándome con un cuchillo y ella estaba retirando su bomba dentro de mi para dejarme libre.

 Ese es el problema de ser tan sumamente inhumano como para considerar a otros un medio y no un fin.